Print Page Options
Previous Prev Day Next DayNext

Revised Common Lectionary (Complementary)

Daily Bible readings that follow the church liturgical year, with thematically matched Old and New Testament readings.
Duration: 1245 days
La Biblia de las Américas (LBLA)
Version
Salmos 98

Alabad al Señor por su justicia

Salmo.

98 Cantad al Señor un cántico nuevo(A),
porque ha hecho maravillas(B),
su diestra(C) y su santo brazo(D) le han dado la victoria[a].
El Señor ha dado a conocer su salvación;
a la vista de las naciones ha revelado su justicia[b](E).
Se ha acordado de su misericordia y de su fidelidad(F) para con la casa de Israel;
todos los términos de la tierra(G) han visto la salvación de nuestro Dios.

Aclamad con júbilo al Señor, toda la tierra(H);
prorrumpid y cantad con gozo, cantad alabanzas(I).
Cantad alabanzas al Señor con la lira(J),
con la lira y al son de la melodía[c](K).
Con trompetas y sonido de cuerno(L),
dad voces(M) ante el Rey, el Señor(N).

Ruja el mar(O) y cuanto contiene,
el mundo y los que en él habitan(P).
Batan palmas los ríos(Q);
a una canten jubilosos los montes(R)
delante del Señor, pues viene a juzgar la tierra(S);
Él juzgará al mundo con justicia,
y a los pueblos con equidad[d](T).

Daniel 3:19-30

Librados del horno de fuego

19 Entonces Nabucodonosor se llenó de furor, y demudó su semblante contra Sadrac, Mesac y Abed-nego(A). Respondió ordenando que se calentara el horno siete veces más de lo que se acostumbraba calentar. 20 Y mandó que algunos valientes guerreros de su ejército ataran a Sadrac, Mesac y Abed-nego, y los echaran en el horno de fuego ardiente. 21 Entonces estos hombres fueron atados y arrojados con sus mantos[a], sus túnicas[b], sus gorros y sus otras ropas en el horno de fuego ardiente(B). 22 Como la orden[c] del rey era apremiante[d](C) y el horno había sido calentado excesivamente, la llama del fuego mató a los que habían alzado a Sadrac, Mesac y Abed-nego. 23 Pero estos tres hombres, Sadrac, Mesac y Abed-nego cayeron, atados, en medio del horno de fuego ardiente(D).

24 Entonces el rey Nabucodonosor se espantó, y levantándose apresuradamente preguntó[e] a sus altos oficiales: ¿No eran tres los hombres que echamos atados en medio del fuego? Ellos respondieron y dijeron al rey: Ciertamente, oh rey. 25 El rey respondió y dijo: ¡Mirad! Veo a cuatro hombres sueltos que se pasean en medio del fuego sin sufrir daño alguno[f](E), y el aspecto del cuarto es semejante al de un hijo de los dioses. 26 Entonces Nabucodonosor se acercó a la puerta del horno de fuego ardiente y[g] dijo: Sadrac, Mesac y Abed-nego, siervos del Dios Altísimo(F), salid y venid acá. Entonces Sadrac, Mesac y Abed-nego salieron de en medio del fuego(G). 27 Y los sátrapas, los prefectos, los gobernadores y los altos oficiales del rey se reunieron(H) para ver a estos hombres, cómo el fuego no había tenido efecto[h] alguno sobre sus cuerpos, ni el cabello de sus cabezas se había chamuscado, ni sus mantos[i](I) habían sufrido daño alguno[j], ni aun olor del fuego había quedado en ellos(J).

28 Habló Nabucodonosor y dijo: Bendito sea el Dios de Sadrac, Mesac y Abed-nego(K) que ha enviado a su ángel(L) y ha librado a sus siervos que, confiando en Él(M), desobedecieron la orden[k] del rey y entregaron sus cuerpos antes de servir y adorar a ningún otro dios excepto a su Dios(N). 29 Por tanto, proclamo un decreto de que todo pueblo, nación o lengua que diga blasfemia contra el Dios(O) de Sadrac, Mesac y Abed-nego(P) sea descuartizado y sus casas reducidas a escombros[l](Q), ya que no hay otro dios que pueda librar de esta manera(R). 30 Entonces el rey hizo prosperar a Sadrac, Mesac y Abed-nego en la provincia de Babilonia(S).

Apocalipsis 18:21-24

21 Entonces un ángel poderoso[a](A) tomó una piedra, como una gran piedra de molino(B), y la arrojó al mar, diciendo: Así será derribada con violencia Babilonia, la gran ciudad(C), y nunca más será hallada(D). 22 Y el sonido de arpistas, de músicos, de flautistas y de trompeteros(E) no se oirá más en ti; ni artífice de oficio alguno se hallará más en ti; ni ruido de molino(F) se oirá más en ti; 23 luz de lámpara no alumbrará más en ti; tampoco la voz del novio[b] y de la novia[c](G) se oirá más en ti; porque tus mercaderes(H) eran los grandes de la tierra, pues todas las naciones fueron engañadas por tus hechicerías(I). 24 Y en ella fue hallada la sangre de los profetas, de los santos(J) y de todos los que habían sido muertos sobre la tierra(K).

La Biblia de las Américas (LBLA)

Copyright © 1986, 1995, 1997 by The Lockman Foundation