Revised Common Lectionary (Semicontinuous)
Salmo 133
Excelencia del amor fraternal
Cántico de ascenso gradual; de David.
133 Miren cuán bueno y cuán agradable es
Que los hermanos habiten juntos en armonía(A).
2 Es como el óleo precioso sobre la cabeza(B),
El cual desciende sobre la barba,
La barba de Aarón,
Que desciende hasta el borde de sus vestiduras(C).
3 Es como el rocío(D) de Hermón(E),
Que desciende sobre los montes de Sión(F);
Porque allí mandó el Señor la bendición(G), la vida para siempre(H).
4 David le preguntó[a]: «¿Qué aconteció(A)? Te ruego que me lo digas». Y él respondió[b]: «El pueblo ha huido de la batalla, y también muchos del pueblo han caído y han muerto; también Saúl y su hijo Jonatán han muerto». 5 Así que David le preguntó al joven que se lo había contado: «¿Cómo sabes que Saúl y su hijo Jonatán han muerto?».
6 El joven que se lo había contado, dijo: «Yo estaba por casualidad en el monte Gilboa, y vi que Saúl estaba apoyado sobre su lanza(B). Y que los carros y los jinetes lo perseguían de cerca. 7 Al mirar él hacia atrás, me vio y me llamó. Y dije: “Aquí estoy”. 8 Y él me dijo: “¿Quién eres?”. Y le respondí: “Soy un amalecita(C)”. 9 Entonces él me dijo: “Te ruego que te pongas junto a mí y me mates, pues la agonía se ha apoderado de mí, porque todavía estoy con vida[c]”. 10 Me puse, pues, junto a él y lo maté(D), porque yo sabía que él no podía vivir después de haber caído. Tomé la corona(E) que estaba en su cabeza y la pulsera que estaba en su brazo, y los he traído aquí a mi señor».
11 Entonces David agarró sus ropas y las rasgó(F), y así hicieron también todos los hombres que estaban con él. 12 Se lamentaron y lloraron y ayunaron hasta el atardecer(G) por Saúl y por su hijo Jonatán, por el pueblo del Señor y por la casa de Israel, porque habían caído a espada. 13 David le preguntó al joven que se lo había contado: «¿De dónde eres?». «Soy hijo de un extranjero, un amalecita(H)», le respondió. 14 Y David le dijo: «¿Cómo es que no tuviste temor de extender tu mano para destruir al ungido del Señor(I)?». 15 Llamando David a uno de los jóvenes, le dijo: «Ve, mátalo[d]». Y él lo hirió, y murió(J). 16 Y David le dijo: «Tu sangre sea sobre tu cabeza(K), porque tu boca ha testificado contra ti, al decir: “Yo he matado al ungido del Señor(L)”».
Elegía de David por Saúl y Jonatán
17 Entonces David entonó esta elegía por Saúl y por su hijo Jonatán(M), 18 y ordenó[e] que enseñaran a los hijos de Judá el cántico del arco; el cual está escrito en el libro de Jaser(N):
19 «Tu[f] hermosura, oh Israel, ha perecido sobre tus montes[g].
¡Cómo han caído los valientes(O)!
20 -»No lo anuncien en Gat,
No lo proclamen en las calles de Ascalón;
Para que no se regocijen las hijas de los filisteos(P),
Para que no se alegren las hijas de los incircuncisos(Q).
21 -»Oh montes de Gilboa(R),
No haya sobre ustedes rocío ni lluvia, ni campos de ofrendas(S);
Porque allí fue deshonrado el escudo de los valientes,
El escudo de Saúl, no ungido con aceite(T).
22 -»De la sangre de los muertos, de la grasa de los poderosos,
El arco de Jonatán no volvía atrás,
Y la espada(U) de Saúl no volvía vacía.
23 -»Saúl y Jonatán, amados y amables en su vida,
Y en su muerte no fueron separados;
Más ligeros eran que águilas(V),
Más fuertes que leones(W).
24 -»Hijas de Israel, lloren por Saúl,
Que las vestía lujosamente de escarlata,
Que ponía adornos de oro en sus vestidos.
25 -»¡Cómo han caído los valientes en medio de la batalla(X)!
Jonatán, muerto en tus alturas.
26 -»Estoy afligido por ti, Jonatán, hermano mío;
Tú me has sido muy estimado.
Tu amor fue para mí más maravilloso
Que el amor de las mujeres(Y).
27 -»¡Cómo han caído los valientes(Z),
Y perecido las armas de guerra(AA)!».
27 Por aquellos[a] días unos profetas(A) descendieron de Jerusalén a Antioquía(B). 28 Y levantándose uno de ellos, llamado Agabo(C), daba a entender por el Espíritu Santo, que ciertamente habría una gran hambre en toda la tierra[b](D). Y esto ocurrió durante el reinado del emperador Claudio(E).
29 Los discípulos(F), conforme a lo que cada uno tenía, determinaron enviar una ayuda a los hermanos que habitaban en Judea(G). 30 Y así lo hicieron, mandándola a los ancianos(H) por mano de Bernabé(I) y de Saulo(J).
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