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Chronological

Read the Bible in the chronological order in which its stories and events occurred.
Duration: 365 days
Reina Valera Actualizada (RVA-2015)
Version
Isaías 1-4

Dureza de Judá a pesar del castigo

Visión de Isaías hijo de Amoz, que vio acerca de Judá y de Jerusalén en los días de Uzíasa, Jotamb, Acazc y Ezequíasd, reyes de Judá: Oigan, cielos; y escucha, tierra, porque habla el SEÑOR: “Crié hijos y los engrandecí, pero ellos se rebelaron contra mí. El buey conoce a su dueño y el asno el pesebre de su amo; pero Israel no conoce; mi pueblo no entiende”.

¡Ay, nación pecadora, pueblo cargado de iniquidad, descendencia de malhechores, hijos depravados! Han abandonado al SEÑOR, han despreciado al Santo de Israel y se han vuelto atrás.

¿Para qué han de ser golpeados aún? Pues todavía persistirán en rebelarse. Toda cabeza está dolorida y todo corazón está enfermo. Desde la planta del pie hasta la cabeza no hay en ella parte sana, sino heridas, golpes y llagas recientes. No han sido curadas ni vendadas ni suavizadas con aceite. Su tierra es desolada, sus ciudades son incendiadas; su suelo es devorado por extraños ante su misma presencia, y es desolado como cuando es destruido por extraños. La hija de Sion ha quedado como una cabaña en una viña, como una choza en un huerto de pepinos, como una ciudad sitiada.

Si el SEÑOR de los Ejércitos no nos hubiera dejado unos pocos sobrevivientes, seríamos ya como Sodoma y nos pareceríamos a Gomorra[a].

Las demandas de un Dios santo

10 Escuchen la palabra del SEÑOR, oh gobernantes de Sodoma. Escucha la ley de nuestro Dios, oh pueblo de Gomorra. 11 Dice el SEÑOR: “¿De qué me sirve la multitud de sus sacrificios? Hastiado estoy de holocaustos de carneros y del sebo de animales engordados. No deseo la sangre de toros, de corderos y de machos cabríos. 12 Cuando vienen a ver mi rostro[b], ¿quién pide esto de sus manos, para que pisoteen mis atrios? 13 No traigan más ofrendas vanas. El incienso me es una abominación; también las lunas nuevas, los sábados y el convocar asambleas. ¡No puedo soportar iniquidad con asamblea festiva! 14 Mi alma aborrece sus lunas nuevas y sus festividades. Me son una carga; estoy cansado de soportarlas[c]. 15 Cuando extiendan sus manos, yo esconderé de ustedes mis ojos. Aunque multipliquen las oraciones, yo no escucharé. ¡Sus manos están llenas de sangre!

16 “ Lávense, límpiense, quiten la maldad de sus acciones de delante de mis ojos. Dejen de hacer el mal. 17 Aprendan a hacer el bien, busquen el derecho, reprendan al opresor, defiendan al huérfano, amparen a la viuda.

18 “Vengan, pues, dice el SEÑOR; y razonemos juntos: Aunque sus pecados sean como la grana, como la nieve serán emblanquecidos. Aunque sean rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana. 19 Si quieren y obedecen, comerán de lo mejor de la tierra. 20 Pero si rehúsan y se rebelan, serán consumidos por la espada; porque la boca del SEÑOR ha hablado”.

Castigo y redención de Sion

21 ¡Cómo se ha convertido en prostituta la ciudad fiel! Llena estaba de derecho, y en ella habitaba la justicia; pero ahora la habitan homicidas. 22 Tu plata se ha convertido en escoria; tu vino está adulterado con agua. 23 Tus magistrados son rebeldes y compañeros de ladrones; cada uno ama el soborno y va tras las recompensas. No defienden al huérfano ni llega a ellos la causa de la viuda.

24 Por tanto, dice Dios, el SEÑOR[d] de los Ejércitos, el Fuerte de Israel: “¡Ah! Tomaré satisfacción de mis adversarios y me vengaré de mis enemigos. 25 Volveré mi mano contra ti; te limpiaré de tus escorias como con lejía y quitaré toda tu impureza.

26 Luego restauraré tus jueces como al principio, y tus consejeros como al comienzo. Y después serás llamada Ciudad de Justicia, Urbe Fiel”.

27 Sion será redimida con el derecho, y sus arrepentidos con la justicia. 28 Pero los rebeldes y los pecadores serán quebrantados a una; los que abandonan al SEÑOR serán consumidos. 29 Entonces se avergonzarán[e] de los robles que han amado, y tendrán afrenta a causa de los jardines que han escogido. 30 Porque serán como la encina de hojas secas y como el jardín al que le faltan las aguas. 31 El fuerte se convertirá en estopa, y su trabajo en chispa. Ambos arderán juntos, y no habrá quien los apague.

Exaltación de Sion y paz universal

La palabra que Isaías hijo de Amoz recibió en visión con respecto a Judá y a Jerusalén: Acontecerá en los últimos días que el monte de la casa del SEÑOR será establecido como cabeza de los montes, y será elevado más que las colinas; y correrán a él todas las naciones. Muchos pueblos vendrán y dirán: “Vengan, subamos al monte del SEÑOR, a la casa del Dios de Jacob, para que él nos enseñe sus caminos, y nosotros caminemos por sus sendas”. Porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra del SEÑOR.

Él juzgará entre las naciones y arbitrará entre muchos pueblos. Y convertirán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en podaderas. No alzará espada nación contra nación ni se adiestrarán más para la guerra.

¡Oh casa de Jacob, vengan y caminemos a la luz del SEÑOR!

El temible día del SEÑOR

Ciertamente tú has rechazado a tu pueblo, la casa de Jacob, porque ellos están llenos de costumbres orientales y de adivinos, como los filisteos; y hacen tratos con los hijos de extranjeros. Su tierra se ha llenado de plata y de oro, y sus tesoros no tienen fin. También su tierra se ha llenado de caballos, y sus carros son innumerables. Además, su tierra se ha llenado de ídolos. Adoran la obra de sus manos, lo que sus dedos han hecho. El hombre se ha postrado; el ser humano se ha rebajado. Por tanto, no los perdones.

10 Métete en la roca; escóndete en el polvo ante la temible presencia del SEÑOR y ante el esplendor de su majestad. 11 Los ojos altivos del hombre serán humillados, y la soberbia del ser humano será postrada. Solo el SEÑOR será enaltecido en aquel día. 12 Porque el día del SEÑOR de los Ejércitos vendrá contra todo arrogante y altivo, y contra todo el que se ha enaltecido, el cual será humillado. 13 Vendrá contra todos los cedros del Líbano, altos y erguidos, y contra todas las encinas de Basán. 14 Vendrá contra todas las altas montañas y contra todas las colinas elevadas. 15 Vendrá contra toda torre alta y contra todo muro fortificado, 16 contra todas las naves de Tarsis y contra todos los barcos lujosos. 17 La altivez del hombre será postrada; la soberbia del ser humano será humillada. Solo el SEÑOR será enaltecido en aquel día, 18 y los ídolos desaparecerán por completo.

19 Los hombres se meterán en las cavernas de las peñas y en las aberturas de la tierra, a causa de la temible presencia del SEÑOR y del esplendor de su majestad, cuando se levante para hacer temblar la tierra. 20 En aquel día los hombres arrojarán a los topos[f] y a los murciélagos sus ídolos de plata y sus ídolos de oro que habían hecho para adorarlos, 21 a fin de meterse en las grietas de las rocas y en las hendiduras de las peñas, a causa de la temible presencia del SEÑOR y del esplendor de su majestad, cuando el SEÑOR se levante para hacer temblar la tierra.

22 Dejen de confiar en el hombre, cuyo hálito está en su nariz; pues, ¿de qué estima es digno?

Juicio divino contra los dirigentes

Porque he aquí que Dios, el SEÑORc de los Ejércitos, quitará de Jerusalén y de Judá la provisión y el sustento: toda provisión de pan y toda provisión de agua. Quitará al valiente y al hombre de guerra, al juez y al profeta, al adivino y al anciano, al jefe de cincuenta y al hombre respetable, al consejero y al excelente artesano, y al experto encantador. Les pondré muchachos por magistrados, y los caprichosos se enseñorearán de ellos. En medio del pueblo el hombre oprimirá al hombre, y cada cual a su prójimo. El joven será insolente con el anciano, y el ruin con el noble.

Cuando alguno eche mano de su hermano en la casa de su padre y le diga: “Tú que tienes ropa, sé nuestro jefe y toma en tus manos esta ruina”, él alzará la voz en aquel día diciendo: “Yo no seré sanador[g], pues en mi casa no hay comida ni vestido. No me pongan por jefe del pueblo”. Porque Jerusalén ha tropezado, y Judá ha caído; pues la lengua de ellos y sus obras son contrarias al SEÑOR y desafían la presencia de su majestad. Su parcialidad los acusa. Como Sodoma, expresan su pecado y no lo disimulan. ¡Ay de ellos, porque para sí mismos han producido el mal!

Juicio contra los explotadores

10 Digan a los justos que les irá bien, que comerán del fruto de sus hechos. 11 ¡Ay de los impíos! Les irá mal, porque les será hecho conforme a las obras de sus manos.

12 ¡Oh pueblo mío! Sus opresores son muchachos, y mujeres se enseñorean de él. Pueblo mío, los que te guían te hacen errar y confunden el rumbo de tus caminos.

13 El SEÑOR está de pie para litigar; está a punto de juzgar a su pueblo[h]. 14 El SEÑOR entrará en juicio contra los ancianos y contra los magistrados de su pueblo. “Porque ustedes han consumido la viña, y el despojo del pobre está en sus casas. 15 ¿Qué motivos tienen para aplastar a mi pueblo y moler las caras de los pobres?”, dice Dios, el SEÑOR[i] de los Ejércitos.

Contra las mujeres altivas

16 Asimismo dijo el SEÑOR: “Por cuanto las hijas de Sion son altivas, andan con el cuello erguido, lanzan miradas seductoras, caminan zapateando y hacen resonar los adornos de sus pies, 17 el Señor pelará con tiña la cabeza de las hijas de Sion; el SEÑOR desnudará sus frentes”.

18 En aquel día el Señor quitará los adornos de los tobillos, las diademas, las lunetas, 19 los aretes, los brazaletes, los velos, 20 los adornos de la cabeza, los adornos de los pies, las cintas, los frasquitos de perfume, los amuletos, 21 los anillos, los joyeles de la nariz, 22 las ropas festivas, los mantos, los pañuelos, los bolsos, 23 los espejos, la ropa íntima, los turbantes y las mantillas. 24 Y sucederá que habrá hediondez en lugar de los perfumes, soga en lugar de cinturón, rapadura en lugar de los arreglos del cabello. En lugar de ropa fina habrá ceñidor de cilicio; porque en lugar de belleza habrá vergüenza[j].

25 Tus hombres caerán a espada, y tu poderío caerá en la batalla. 26 Sus puertas lamentarán y se enlutarán; y abandonada, ella se sentará en tierra.

En aquel tiempo siete mujeres echarán mano de un hombre y le dirán: “Nosotras comeremos nuestro propio pan y vestiremos nuestras propias ropas; solamente permite que seamos llamadas por tu nombre. Quita nuestra afrenta”.

Purificación y gloria de Sion

En aquel día el retoño del SEÑOR será hermoso y glorioso, y el fruto de la tierra será el orgullo y el esplendor de los sobrevivientes de Israel. Acontecerá que el que se quede en Sion, como el que sea dejado en Jerusalén, será llamado santo; todos los que estén inscritos para la vida en Jerusalén. Así será cuando el Señor lave la inmundicia de las hijas de Sion, y elimine la sangre de en medio de Jerusalén, con espíritu de juicio y con espíritu consumidor. Entonces sobre todo lugar del monte Sion y sobre sus asambleas, el SEÑOR creará nube[k] y humo de día, y resplandor de fuego llameante de noche. Porque sobre todos habrá una cubierta de gloria, y habrá de día un cobertizo para dar sombra ante el calor abrasador, y para refugio y protección de la tormenta y del aguacero.

Reina Valera Actualizada (RVA-2015)

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