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M’Cheyne Bible Reading Plan

The classic M'Cheyne plan--read the Old Testament, New Testament, and Psalms or Gospels every day.
Duration: 365 days
Palabra de Dios para Todos (PDT)
Version
2 Reyes 7

Eliseo respondió:

—¡Escuchen el mensaje del SEÑOR! El SEÑOR dice: “Mañana a estas horas, a la entrada de la ciudad, se podrán comprar 3 kilos[a] de harina fina por tan solo una moneda de plata[b], y 6 kilos de cebada por el mismo precio”.

Entonces el oficial ayudante del rey le contestó al hombre de Dios:

—Eso no ocurriría ni aunque el SEÑOR abriera las ventanas del cielo.

Eliseo le dijo:

—Lo verás con tus propios ojos, pero no podrás comer nada.

Cuatro leprosos que estaban en la puerta de la ciudad se dijeron unos a otros:

—¿De qué nos sirve estar aquí sentados esperando la muerte? No hay comida en Samaria y si entramos a la ciudad, allí moriremos. Si nos quedamos aquí también nos moriremos. Mejor vayamos al campamento sirio. Si nos dejan vivir, bien. Si nos matan, pues que nos maten.

Así que esa tarde los cuatro leprosos fueron al campamento de los sirios. Cuando llegaron al borde del campamento, no había nadie. El Señor había hecho que los sirios escucharan el sonido de carros, caballos y un gran ejército. Por eso los sirios se dijeron: «El rey de Israel contrató a los hititas y a los egipcios para atacarnos» y salieron huyendo esa tarde dejando todo atrás. Abandonaron sus carpas, caballos y asnos, y escaparon.

Los leprosos se acercaron al borde del campamento y entraron a una carpa. Después de haber comido y bebido, se llevaron de ahí plata, oro y ropa. Entonces fueron y escondieron algunas cosas. Luego entraron a otra carpa y se llevaron cosas de ahí y las escondieron. Entonces se dijeron unos a otros: «No estamos actuando bien. Hoy es un día de buenas noticias y nosotros guardamos silencio. Si esperamos hasta el amanecer, se descubrirá que somos culpables. Entremos ahora al palacio y demos aviso».

10 Así que los hombres se acercaron a los porteros de la ciudad y les dijeron: «Nosotros fuimos al campamento de los sirios y, mira, no hay nadie. No se escucha nada, sólo el ruido de los caballos y de los asnos que están atados. Las carpas las dejaron tal como estaban».

11 Los porteros, gritando la noticia, avisaron al palacio. 12 Como era de noche, el rey se levantó y dijo a sus siervos:

—Déjenme decirles lo que los soldados sirios intentan hacer. Saben que estamos pasando hambre, así que han salido del campamento y se han escondido en el campo, pensando: “Cuando los israelitas salgan de la ciudad, los atraparemos y entraremos en la ciudad”.

13 Uno de los oficiales del rey dijo:

—Que envíen hombres en cinco de los caballos que queden. Después de todo, van a morir como toda la gente de Israel. Mandémoslos para que podamos averiguar.

14 Así que los hombres tomaron dos carros con caballos. El rey mandó a los hombres tras el ejército de los sirios, diciéndoles:

—Vayan a ver qué fue lo que pasó.

15 Los hombres buscaron el ejército sirio hasta el río Jordán. Por todo el camino había ropa y armas abandonadas. Los sirios habían tirado todo mientras se apuraban por el camino. Los mensajeros regresaron a Samaria y le informaron al rey.

16 Entonces la gente salió al campamento de los sirios. El resultado fue que 3 kilos de harina fina se vendían por una sola moneda de plata y 6 kilos de cebada se vendían por una sola moneda de plata también, tal como el SEÑOR había dicho.

17 El rey mandó a uno de sus oficiales ayudantes a la puerta de la ciudad, pero la gente lo pisoteó y murió. Todo ocurrió tal como el hombre de Dios había dicho cuando el rey había ido a la casa de Eliseo. 18 Eliseo había dicho: «Se podrán comprar 3 kilos de harina fina por tan solo una moneda de plata y 6 kilos de cebada se podrán comprar también por el mismo precio en el mercado que está en la puerta de Samaria». 19 Pero ese oficial le había dicho al hombre de Dios: «Eso no ocurriría ni aunque el SEÑOR abriera las ventanas del cielo». Y Eliseo le dijo al oficial: «Lo verás con tus propios ojos, pero no podrás comer nada». 20 Y eso le sucedió, pues murió cuando el pueblo lo pisoteó en la puerta de la ciudad.

1 Timoteo 4

Advertencia sobre los falsos maestros

El Espíritu Santo dice claramente que en los últimos tiempos algunos se apartarán de la fe, les harán caso a espíritus que mienten y seguirán enseñanzas de demonios. Esas enseñanzas llegan a través de mentirosos quienes con sus palabras falsas engañan a la gente. Ellos no saben la diferencia entre el bien y el mal. Es como si su entendimiento hubiera sido quemado con hierro candente. Dicen que es prohibido casarse y que algunos alimentos no se deben comer, pero Dios creó esos alimentos. Los que son creyentes y conocen la verdad saben que pueden comerlos dando gracias a Dios. Todo lo que Dios creó es bueno y nada debe ser rechazado, sino recibido con agradecimiento. Todo lo que Dios hizo es purificado por lo que él dijo y por la oración.

Un buen siervo de Jesucristo

Enséñales todo esto a los hermanos, y así serás un buen siervo de Jesucristo, nutrido por las palabras de la fe y la excelente enseñanza que has seguido. Pero rechaza los cuentos irreverentes y tontos, y más bien entrénate para una vida dedicada a Dios. El ejercicio físico te sirve de algo, pero una vida dedicada a Dios te trae bendiciones tanto para la vida presente como para la del mundo venidero.[a] Todos pueden estar seguros de que esto es cierto: 10 que por esto mismo trabajamos y luchamos porque hemos puesto nuestra esperanza en el Dios viviente. Él es Salvador de todos los seres humanos, pero en particular de aquellos que creen en él.

11 Enseña a todos lo que te digo y diles que lo pongan en práctica. 12 No dejes que nadie te considere menos por ser joven. Sé ejemplo para los creyentes en tu hablar, en tu conducta, en amor, en fe y en pureza. 13 Mientras yo llego, ocúpate de leerles a los creyentes las Escrituras, animándolos y enseñándoles. 14 No se te olvide el don que recibiste por medio de profecía cuando los ancianos líderes te impusieron las manos.

15 Presta atención a estas cosas y dedica tu vida a hacerlas para que todos vean el avance de tu trabajo. 16 Ten cuidado con tu forma de vivir y con lo que enseñas. Si eres constante, asegurarás tanto tu salvación como la de los que escuchen tus enseñanzas.

Daniel 11

11 »Durante el primer año[a] del reinado de Darío de Media, yo ayudé y acompañé a Miguel en su lucha contra el príncipe de Persia. Ahora te voy a contar el mensaje verdadero. Habrá tres reyes en Persia. Luego aparecerá el cuarto rey que tendrá muchas más riquezas que todos los reyes anteriores. Ese rey va a utilizar sus riquezas para conseguir mucho poder, y con su poder hará que todos los demás estén en contra del reino de Grecia. Luego gobernará un rey muy poderoso. Ese rey construirá un gran imperio y hará todo lo que quiera. Pero en el momento en que el rey tenga más poder, su reino será dividido en cuatro partes: norte, sur, oriente y occidente. No lo heredarán sus descendientes y no será tan poderoso de manera que pasará a manos extrañas.

»El rey del sur será fuerte, pero uno de sus generales será más fuerte que él y tendrá un imperio enorme. Después de algún tiempo, el rey del sur y el rey del norte harán un pacto. Con el fin de asegurar el acuerdo, el rey del sur dará a su hija en matrimonio al rey del norte, pero fracasará porque tanto ella como su hijo, su protector y sus criados, serán asesinados. Sin embargo, un descendiente de la hija del rey llegará al poder, atacará la fortaleza del rey del norte y se apropiará de ella. Se llevarán a Egipto varios objetos de oro y plata y las estatuas de los dioses. Luego los dejará tranquilos durante varios años. Y el rey del norte atacará al rey del sur, pero tendrá que regresar a su tierra.

10 »Entonces los hijos del rey del norte se prepararán para la guerra y formarán un gran ejército. Con su ejército lograrán avanzar tan rápido como una inundación y llegarán hasta la fortaleza del rey del sur. 11 El rey del sur se sentirá tan enojado que saldrá a combatir y vencerá en la batalla contra el gran ejército del rey del norte. 12 El rey del sur derrotará al gran ejército y matará a miles de personas. Se sentirá orgulloso por eso, pero su poder no durará mucho tiempo. 13 Algunos años más tarde, el rey del norte regresará a combatir. Esta vez tendrá un ejército mucho más grande y con muchas más armas.

14 »En ese momento, habrá mucha gente en contra del rey del sur. Incluso algunos hombres de tu pueblo a quienes les gusta la guerra se alzarán contra el rey del sur para cumplir una visión, pero no ganarán. 15 El rey del norte seguirá avanzando con su ejército, construirá una rampa alrededor de una ciudad amurallada y la conquistará. El ejército del sur no podrá luchar contra el del norte. Ni siquiera los soldados más valientes podrán detenerlos. 16 El ejército del norte hará todo lo que quiera porque nadie podrá enfrentársele. El rey del norte ganará mucho poder y controlará nuestra hermosa tierra. Su poder será suficiente incluso para destruirla. 17 El rey del norte querrá controlar todo el territorio y por eso firmará un pacto con el rey del sur. El rey del norte dará una de sus hijas en matrimonio al rey del sur para destruirlo, pero no tendrá éxito en sus planes. 18 Después el rey del norte dirigirá su atención a los países de la costa y conquistará muchas ciudades, pero un oficial acabará con sus insultos. Ese oficial hará que el rey del norte se sienta avergonzado. 19 Entonces el rey del norte tendrá que regresar a su propia tierra. Estará débil y derrotado y no se volverá a saber nada más de él.

20 »Luego llegará otro rey que enviará a un cobrador de impuestos a recoger dinero para enriquecer a su reino, pero después de unos días ese rey será destruido, aunque no será en batalla. 21 Enseguida habrá otro rey malvado y cruel. Ese hombre no pertenecerá a ninguna familia de reyes. Así que se tomará el poder con intrigas y atacará a la ciudad cuando esté en calma. 22 Ese rey destruirá a ejércitos grandes y poderosos, incluso derrotará al príncipe del pacto. 23 Ese hombre malvado y cruel hará pactos con mucha gente, pero a todos los engañará. Él tendrá mucho poder pero sólo unos pocos lo apoyarán. 24 Cuando las ciudades estén en paz y tranquilidad, ese hombre malvado y cruel las atacará por sorpresa. Hará lo que ni sus padres ni sus abuelos hicieron, repartirá riquezas y botín, atacará con engaños las fortalezas. Tendrá éxito, pero sólo por un tiempo.

25 »Luego ese hombre malvado reunirá a su ejército para pelear contra el rey del sur. El rey del sur tendrá un ejército grande y poderoso para combatir, pero habrá gente que lo traicionará y será derrotado. 26 Muchas personas que decían ser amigas del rey del sur tratarán de destruirlo. El ejército del sur será derrotado y muchos soldados morirán en la batalla. 27 Esos dos reyes harán todo lo posible por destruirse. Se sentarán juntos a la mesa y hablarán sólo mentiras, pero nada de eso les funcionará porque Dios ya tiene programado el fin de cada uno. 28 El rey del norte regresará a su tierra con muchas riquezas. Luego se dedicará a hacer maldades contra el pacto sagrado[b]. Hará todo lo que tenía planeado y luego regresará a su tierra.

29 »En el momento indicado, el rey del norte atacará de nuevo a las tierras del sur. Pero esta vez no tendrá el éxito de la primera vez. 30 Los barcos que vienen desde Chipre atacarán al rey del norte y lo obligarán a retirarse. El rey del norte se sentirá furioso y descargará todo su odio contra el pacto sagrado. Luego regresará a su tierra y ayudará a los que no aceptaron el pacto sagrado. 31 El rey del norte enviará a su ejército a cometer toda clase de atrocidades en el templo de Jerusalén. Harán cosas terribles y no permitirán que el pueblo haga las ofrendas diarias. Llevarán allí el ídolo abominable.

32 »El rey del norte utilizará sus halagos y mentiras para aprovecharse de los que violan el pacto sagrado. En cambio, los que sí conocen a Dios seguirán firmes en cumplir con el pacto. 33 Los hombres sabios ayudarán a que mucha gente entienda lo que sucede. A algunos los matarán con espadas y a otros los quemarán. A muchos los llevarán presos y a otros les robarán todo lo que tienen. 34 Cuando sufran tantos castigos, los sabios conseguirán alguna ayuda, pero muchos de los que se unan a ellos lo harán con malas intenciones. 35 Algunos de los sabios vacilarán, pero con la persecución quedarán purificados, perfeccionados y sin pecado hasta el momento final que ya está determinado.

El rey arrogante

36 »El rey del norte hará todo lo que quiera. Se sentirá tan orgulloso y poderoso que creerá que es más importante que un dios. Hablará cosas espantosas del Dios de dioses y creerá que su maldad va a tener éxito hasta el final. Pero Dios ya ha señalado lo que sucederá. 37 Al rey del norte no le importarán los dioses que adoraban sus padres. No le importarán el dios adorado por las mujeres. Es decir, no le importará ningún dios. Se considerará por encima de todo. 38 El rey del norte no adorará a ningún dios, pero sí al poder y a la fuerza. A sus padres no les importaba el poder y la fuerza tanto como a él. Pero para el rey del norte el poder y la fuerza serán su dios y lo adorará con oro, plata, joyas y regalos costosos. 39 El rey del norte atacará grandes fortalezas y las derribará con la ayuda de su supuesto dios. El rey dará importancia y honor a quienes adoren a su dios. A ellos les dará control sobre el pueblo y les entregará parte de su territorio. Cada uno de ellos gobernará el territorio que reciba y pagará una cuota de gobierno.

40 »En el momento final, el rey del sur y el rey del norte tendrán un enfrentamiento. El rey del norte atacará al sur con carros de combate, tropas de caballos y barcos. El rey del norte aparecerá como una inundación acabando con todo a su paso. 41 El rey del norte también invadirá a nuestra hermosa tierra y habrá muchos muertos, pero se salvarán los habitantes de Edom y Moab y los líderes de Amón. 42 El rey del norte seguirá atacando muchos países y llegará hasta Egipto. 43 Se apoderará del oro, la plata y las riquezas de Egipto. Más tarde llegará a Libia y Etiopía, 44 pero recibirá noticias del oriente y del norte que lo enfurecerán y lo asustarán. Entonces saldrá furioso a destrozar por completo a muchas naciones. 45 Él levantará sus campamentos entre el mar y el hermoso monte santo.[c] Allí el rey malvado del norte morirá y no tendrá a nadie que lo ayude cuando llegue su fin.

Salmos 119:25-48

Dálet

25 Estoy postrado en el polvo,
    reanímame tal como lo prometiste.
26 Te hablé sobre mi vida y tú me respondiste;
    ahora, enséñame tus mandatos.
27 Ayúdame a entender tus instrucciones,
    para apreciar todas las maravillas que has hecho.
28 Estoy cansado y lloro de tristeza;
    fortaléceme tal como lo prometiste.
29 Aléjame del camino de la mentira
    y guíame con tus enseñanzas.
30 He decidido seguir el camino de la fidelidad;
    prestaré atención a tus órdenes.
31 Me he apegado a tus mandatos, SEÑOR,
    te ruego que no me avergüences.
32 Corro por el camino de tus mandamientos,
    porque tú me haces más sabio.

He

33 SEÑOR, enséñame el camino de tus mandatos,
    y yo lo seguiré hasta el fin.
34 Dame entendimiento para obedecer tus enseñanzas,
    y de todo corazón yo la cumpliré.
35 Guíame por el camino de tus mandamientos,
    porque en él me encuentro a gusto.
36 Pon en mí el deseo de cumplir con tus mandatos
    y no el de satisfacer mis deseos egoístas.
37 Aleja de mi mente los pensamientos inútiles,
    dame vida para vivir en tus caminos.
38 Cumple la promesa que le hiciste a tu siervo,
    la que haces a los que te respetan.
39 Aleja de mí la vergüenza a la que temo,
    porque tus órdenes son sabias y justas.
40 Yo deseo tus instrucciones,
    dame vida de acuerdo a tu justicia.

Vav

41 SEÑOR, que tu fiel amor llegue a mí,
    sálvame como lo prometiste.
42 Así podré responder a quien me ofende,
    porque confío en tu palabra.
43 Ayúdame a hablar siempre de tu verdad;
    confío totalmente en tus órdenes.
44 Cada día y para siempre,
    seguiré tus enseñanzas.
45 Viviré tranquilo,
    porque me esfuerzo por seguir tus instrucciones.
46 Hablaré de tus mandamientos
    y no me avergonzaré de tu palabra delante de los reyes.
47 Me siento muy bien siguiendo tus mandamientos
    porque los amo.
48 Prometo ser fiel a tus mandamientos;
    los amo y me dedicaré a seguir tus mandatos.

Palabra de Dios para Todos (PDT)

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