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Chronological

Read the Bible in the chronological order in which its stories and events occurred.
Duration: 365 days
Reina Valera Actualizada (RVA-2015)
Version
Salmos 32

Experiencia de la dicha del perdón

32 Salmo de David. Masquil[a].

Bienaventurado aquel
cuya transgresión ha sido perdonada
y ha sido cubierto su pecado.
Bienaventurado el hombre a quien
el SEÑOR no atribuye iniquidad,
y en cuyo espíritu no hay engaño.
Mientras callé se envejecieron mis huesos en mi gemir todo el día.
Porque de día y de noche se agravó sobre mí tu mano;
mi vigor se convirtió en sequedades de verano. Selah[b]
Mi pecado te declaré
y no encubrí mi iniquidad.
Dije: “Confesaré mis rebeliones
al SEÑOR”.
Y tú perdonaste la maldad
de mi pecado. Selah[c]
Por eso orará a ti todo fiel
en el tiempo en que puedas ser hallado. Ciertamente en la inundación las caudalosas aguas no llegarán a él.
Tú eres mi refugio;
me guardarás de la angustia
y con cánticos de liberación
me rodearás. Selah[d]
“Te haré entender y te enseñaré
el camino en que debes andar. Sobre ti fijaré mis ojos.
No sean sin entendimiento
como el caballo o como el mulo, cuya boca ha de ser frenada con rienda y freno;
de otro modo, no se acercan a ti”.
10 Muchos dolores tendrá el impío; pero la misericordia cercará al que
espera en el SEÑOR.
11 Oh justos, alégrense en el SEÑOR
y gócense;
canten con júbilo todos los rectos
de corazón.

Salmos 51

Oración de arrepentimiento

51 Al músico principal. Salmo de David, cuando el profeta Natán fue a él después de que David tuvo relaciones con Betsabé.

Ten piedad de mí, oh Dios,
conforme a tu misericordia.
Por tu abundante compasión borra mis rebeliones.
Lávame más y más de mi maldad,
y límpiame de mi pecado.
Porque yo reconozco mis rebeliones,
y mi pecado está siempre delante
de mí.
Contra ti, contra ti solo he pecado
y he hecho lo malo ante tus ojos. Seas tú reconocido justo en tu palabra
y tenido por puro en tu juicio.
He aquí, en maldad he nacido,
y en pecado me concibió mi madre.
He aquí, tú quieres la verdad en
lo íntimo,
y en lo secreto me has hecho comprender sabiduría.
Quita mi pecado con hisopo,
y seré limpio;
lávame, y seré más blanco
que la nieve.
Hazme oír[a] gozo y alegría,
y se regocijarán estos huesos que has quebrantado.
Esconde tu rostro de mis pecados
y borra todas mis maldades.
10 Crea en mí, oh Dios, un corazón puro y renueva un espíritu firme
dentro de mí.
11 No me eches de tu presencia
ni quites de mí tu Santo Espíritu.
12 Devuélveme el gozo de tu salvación,
y un espíritu generoso me sustente.
13 Entonces enseñaré a los transgresores tus caminos,
y los pecadores se convertirán a ti.
14 Líbrame de homicidios, oh Dios, Dios de mi salvación,
y con regocijo cantará mi lengua
tu justicia.
15 Señor, abre mis labios,
y proclamará mi boca tu alabanza.
16 Porque no quieres sacrificio;
y si doy holocausto, no lo aceptas.
17 Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado.
Al corazón contrito y humillado
no desprecias tú, oh Dios.
18 Haz bien a Sion con tu benevolencia; edifica los muros de Jerusalén.
19 Entonces te agradarán los sacrificios de justicia,
el holocausto o la ofrenda del todo quemada.
Entonces se ofrecerán becerros sobre tu altar.

Salmos 86

Oración por la misericordia divina

86 Oración de David.

Inclina, oh SEÑOR, tu oído
y escúchame
porque soy pobre y necesitado.
Guarda mi alma porque soy piadoso; salva tú, oh Dios mío,
a tu siervo que en ti confía.
Ten misericordia de mí, oh SEÑOR, porque a ti clamo todo el día.
Alegra el alma de tu siervo, porque a ti, oh Señor, levanto mi alma
porque tú, oh Señor, eres bueno
y perdonador,
grande en misericordia para con los que te invocan.
Escucha, oh SEÑOR, mi oración; atiende a la voz de mis súplicas.
En el día de mi angustia te llamaré porque tú me respondes.
Oh Señor, ninguno hay como tú entre los dioses,
ni hay nada que iguale tus obras.
Vendrán todas las naciones que hiciste y adorarán, oh Señor, delante de ti. Glorificarán tu nombre
10 porque tú eres grande y hacedor
de maravillas.
¡Solo tú eres Dios!
11 Enséñame, oh SEÑOR, tu camino,
y yo caminaré en tu verdad.
Concentra mi corazón para que tema tu nombre.
12 Te alabaré, oh SEÑOR, Dios mío, con todo mi corazón;
glorificaré tu nombre para siempre.
13 Porque tu misericordia es grande para conmigo;
tú has librado mi alma de las profundidades del Seol.
14 Oh Dios, los arrogantes se han
levantado contra mí,
y una congregación de violentos busca mi vida
y a ti no te toman en cuenta.
15 Pero tú, oh Señor, Dios compasivo
y clemente,
lento para la ira y grande en
misericordia y verdad,
16 mírame y ten misericordia de mí. Da tú fuerzas a tu siervo;
guarda al hijo de tu sierva.
17 Haz conmigo señal para bien; véanla los que me aborrecen y sean avergonzados
porque tú, oh SEÑOR, me ayudaste y me consolaste.

Salmos 122

Oración por la paz de Jerusalén

122 Canto de ascenso graduala. De David. Yo me alegré con los que me decían:

“¡Vayamos a la casa del SEÑOR!”.
Ya se posan nuestros pies
ante tus puertas, oh Jerusalén.
¡Oh Jerusalén, que ha sido edificada como una ciudad toda compacta!
Allá suben las tribus,
las tribus del SEÑOR[a],
las congregaciones[b] de Israel,
para alabar el nombre del SEÑOR.
Porque allá están los tronos para el juicio, los tronos de la casa de David.
Pidan por la paz de Jerusalén: “Vivan tranquilos los que te aman.
Haya paz dentro de tus murallas
y tranquilidad en tus palacios”.
Por causa de mis hermanos y de mis amigos,
diré yo: “Haya paz en ti”.
Por causa de la casa del SEÑOR nuestro Dios,
imploraré por tu bien.

Reina Valera Actualizada (RVA-2015)

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