Un dia a la Vez

Huye del negativismo

Panal de miel son las palabras amables: endulzan la vida y dan salud al cuerpo.
Proverbios 16:24

¡Cuántas veces nos toca en la vida diaria convivir con personas negativas, personas que desde que abren su boca es para criticar a otros, para maldecir la vida que están viviendo! Se desaniman a cada momento y, como dicen por ahí, ¡no los calienta ni el sol!

Me refiero a las personas que van a una iglesia constantemente, que leen la Palabra y que se dicen llamar «cristianos». A estos más bien les digo «cristinos». ¿Sabes la repercusión que tiene para nuestra vida comportarnos de esa manera?

Sé que muchos de los que hoy leen este libro, o lo escuchan por la radio, se han sentido muy incómodos al tener a su alrededor personas así. Que en vez de atraerte a la iglesia para tener una vida espiritual, más bien te alejan y se convierten en piedra de tropiezo. Una piedra tan poderosa que alejan a los que le rodean y le impiden tener una vida con Jesús.

Recuerda que las palabras tienen poder y con ellas puedes bendecir o maldecir a una persona. Permitamos, pues, en este nuevo día, que lo que hablemos coincida con las cosas que hacemos. ¡Pidámosle a Dios ser reflejo de su luz y brillar sin contaminarnos con el negativismo!