Revised Common Lectionary (Semicontinuous)
25 ¶De Ti viene mi alabanza en la gran congregación(A);
Mis votos cumpliré delante de los que le temen(B).
26 Los pobres comerán y se saciarán(C);
Los que buscan al Señor, lo alabarán(D).
¡Viva para siempre el corazón de ustedes(E)!
27 Todos los términos de la tierra(F) se acordarán y se volverán al Señor,
Y todas las familias de las naciones adorarán delante de Ti(G).
28 Porque del Señor es el reino(H),
Y Él gobierna las naciones(I).
29 Todos los grandes de la tierra comerán y adorarán(J);
Se postrarán ante Él todos los que descienden al polvo(K),
Aun aquel que no puede conservar viva su alma(L).
30 La posteridad le servirá(M);
Esto se dirá del Señor hasta la generación(N) venidera.
31 Vendrán y anunciarán Su justicia(O);
A un pueblo por nacer(P), anunciarán que Él ha hecho esto.
11 ¶»Vienen días», declara el Señor Dios,
«En que enviaré hambre sobre la tierra,
No hambre de pan, ni sed de agua,
Sino de oír las palabras del Señor(A).
12 -»La gente vagará de mar a mar,
Y del norte hasta el oriente;
Andarán de aquí para allá en busca de la palabra del Señor,
Pero no la encontrarán(B).
13 -»En aquel día las vírgenes hermosas
Y los jóvenes(C) desfallecerán de sed(D).
Simón el mago
9 Hacía tiempo que cierto hombre llamado Simón, estaba ejerciendo la magia(A) en la ciudad y asombrando a la gente de Samaria, pretendiendo ser un gran personaje(B); 10 y todos, desde el menor hasta el mayor, le prestaban atención, y decían: «Este es el que se llama el Gran Poder de Dios(C)».
11 Le prestaban atención porque por mucho tiempo los había asombrado con sus artes mágicas(D). 12 Pero cuando creyeron a Felipe, que anunciaba las buenas nuevas[a] del reino de Dios(E) y el nombre de Cristo Jesús, se bautizaban(F), tanto hombres como mujeres. 13 Y aun Simón mismo creyó; y después de bautizarse, continuó con Felipe, y estaba atónito al ver las señales(G) y los grandes milagros(H) que se hacían.
Pedro y Juan en Samaria
14 Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén(I) oyeron que Samaria había recibido la palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan(J), 15 quienes descendieron y oraron por ellos para que recibieran el Espíritu Santo(K). 16 Porque todavía no había descendido el Espíritu Santo sobre ninguno de ellos(L); solo habían sido bautizados en el nombre del Señor Jesús(M). 17 Entonces Pedro y Juan les imponían(N) las manos, y recibían el Espíritu Santo(O).
18 Cuando Simón vio que el Espíritu se daba por la imposición de las manos de los apóstoles, les ofreció dinero, 19 y les dijo: «Denme también a mí esta autoridad, de manera que todo aquel sobre quien ponga mis manos reciba el Espíritu Santo».
20 Entonces Pedro le contestó: «Que tu plata perezca[b] contigo, porque pensaste que podías obtener el don de Dios con dinero(P). 21 No tienes parte ni suerte(Q) en este asunto[c], porque tu corazón no es recto delante de Dios(R). 22 Por tanto, arrepiéntete de esta tu maldad, y ruega al Señor que si es posible se te perdone el intento de tu corazón(S). 23 Porque veo que estás en hiel de amargura y en cadena[d] de iniquidad(T)».
24 Pero Simón respondió: «Rueguen ustedes al Señor por mí, para que no me sobrevenga nada de lo que han dicho».
25 Y ellos, después de haber testificado solemnemente(U) y hablado la palabra del Señor(V), iniciaron el regreso a Jerusalén anunciando el evangelio(W) en muchas aldeas de los samaritanos(X).
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