Revised Common Lectionary (Semicontinuous)
Exhortación a la gratitud
100 Salmo de acción de gracias. ¡Canten alegres al SEÑOR, habitantes de[a] toda la tierra!
2 Sirvan al SEÑOR con alegría; vengan ante su presencia con regocijo.
3 Reconozcan que el SEÑOR es Dios;
él nos hizo, y no nosotros
a nosotros mismos.
Pueblo suyo somos y ovejas
de su prado.
4 Entren por sus puertas con acción
de gracias,
por sus atrios con alabanza. Denle gracias; bendigan su nombre
5 porque el SEÑOR es bueno.
Para siempre es su misericordia,
y su fidelidad por todas
las generaciones.
Las buenas nuevas de la redención
40 “¡Consuelen, consuelen a mi pueblo!”, dice su Dios. 2 “Hablen al corazón de Jerusalén y proclámenle que su condena ha terminado y su iniquidad ha sido perdonada, que de la mano del SEÑOR ya ha recibido el doble por todos sus pecados”.
3 Una voz proclama: “¡En el desierto preparen el camino del SEÑOR; enderecen calzada en la soledad para nuestro Dios! 4 ¡Todo valle será rellenado, y todo monte y colina rebajados! ¡Lo torcido será convertido en llanura, y lo escabroso en amplio valle! 5 Entonces se manifestará la gloria del SEÑOR, y todo mortal juntamente la verá; porque la boca del SEÑOR ha hablado”.
6 Una voz decía:
—¡Proclámalo!
Y yo respondí[a]:
—¿Qué he de proclamar?
—Que todo mortal es hierba, y toda su gloria[b] es como la flor del campo. 7 La hierba se seca, y la flor se marchita; porque el viento del SEÑOR sopla sobre ella. Ciertamente el pueblo es hierba. 8 La hierba se seca y la flor se marchita; pero la palabra de nuestro Dios permanece para siempre.
9 »Sube sobre un monte alto, oh Sion, tú que anuncias buenas nuevas. Levanta con fuerza la voz, oh Jerusalén, tú que anuncias buenas nuevas. Levántala; no temas. Di a las ciudades de Judá: “¡He aquí su Dios!”. 10 He aquí que el SEÑOR Dios[c] vendrá con poder, y su brazo gobernará por él. He aquí que su retribución viene con él, y su obra delante de él. 11 Como un pastor, apacentará su rebaño; con su brazo lo reunirá. A los corderitos llevará en su seno, y conducirá con cuidado a las que todavía están criando.
El río y el árbol de vida
22 Después me mostró un río de agua de vida, resplandeciente como cristal, que fluye del trono de Dios y del Cordero. 2 En medio de la avenida de la ciudad, y a uno y otro lado del río, está el árbol de la vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto. Las hojas del árbol son para la sanidad de las naciones.
3 Ya no habrá más maldición. Y el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le rendirán culto. 4 Verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes. 5 No habrá más noche, ni tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol; porque el Señor Dios alumbrará sobre ellos, y reinarán por los siglos de los siglos.
Cristo viene pronto
6 Me dijo además: “Estas palabras son fieles y verdaderas. Y el Señor, el Dios de los espíritus de los profetas[a], ha enviado su ángel para mostrar a sus siervos las cosas que tienen que suceder pronto. 7 ¡He aquí vengo pronto! Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro”.
8 Yo, Juan, soy el que he oído y visto estas cosas. Cuando las oí y las vi, me postré para adorar ante los pies del ángel que me las mostraba. 9 Y él me dijo: “¡Mira, no lo hagas! Pues yo soy consiervo tuyo y de tus hermanos los profetas y de los que guardan las palabras de este libro. ¡Adora a Dios!”.
Version Reina Valera Actualizada, Copyright © 2015 by Editorial Mundo Hispano