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Revised Common Lectionary (Complementary)

Daily Bible readings that follow the church liturgical year, with thematically matched Old and New Testament readings.
Duration: 1245 days
Reina Valera Actualizada (RVA-2015)
Version
Isaías 65:1-9

Dios responde a la oración del profeta

65 “Yo me dejé buscar por los que no preguntaban por mí; me dejé hallar por los que no me buscaban. A una nación que no invocaba mi nombre dije: ‘¡Aquí estoy; aquí estoy!’. Todo el día extendí mis manos a un pueblo rebelde que anda por un camino que no es bueno, tras sus propios pensamientos. Este es un pueblo que en mi propia cara me provoca a ira continuamente, ofreciendo sacrificios en los jardines y quemando incienso sobre ladrillos. Moran en los sepulcros y pasan la noche en lugares secretos. Comen carne de cerdo, y en sus ollas hay caldoa de cosas contaminadas. Ellos dicen: ‘Quédate en tu lugar. No te acerques a mí, porque soy más santo que tú’. Estos son como humo en mi nariz, fuego que arde todo el día.

“He aquí que está escrito delante de mí. No callaré, sino que daré la retribución; sí, les daré su retribución en su propio seno. Por sus iniquidades y por las iniquidades de sus padres juntamente, dice el SEÑOR, quienes quemaron incienso sobre los montes y me afrentaron sobre las colinas, yo les repartiré en su mismo seno la retribución por sus obras del pasado”.

Así ha dicho el SEÑOR: “Como cuando alguien halla jugo en un racimo de uvas y dice: ‘No lo destruyas, porque en él hay bendición’, así procederé yo por causa de mis siervos para no destruirlo del todo. Sacaré de Jacob descendencia; y de Judá, al heredero de mis montes. Entonces mis escogidos poseerán la tierra como heredad, y mis siervos habitarán allí.

Salmos 22:19-28

19 Pero tú, oh SEÑOR, no te alejes. Fortaleza mía, apresúrate para ayudarme.
20 Libra mi alma de la espada;
libra mi única vida de las garras
de los perros.
21 Sálvame de la boca del león
y de los cuernos de los toros salvajes.
¡Me has respondido!
22 Anunciaré tu nombre a mis hermanos;
en medio de la congregación te alabaré.
23 Los que temen al SEÑOR, alábenle; glorifíquenle todos los descendientes de Jacob.
Teman ustedes, todos los descendientes de Israel.
24 Porque no despreció ni desdeñó la aflicción del afligido
ni de él escondió el rostro.
Más bien, le oyó cuando clamó a él.
25 Tuya es mi alabanza en la gran congregación.
Mis votos pagaré delante de los que le temen.
26 Los pobres comerán y serán saciados. Alabarán al SEÑOR los que le buscan. ¡Que viva su corazón para siempre!
27 Ellos se acordarán y volverán al SEÑOR de todos los confines de la tierra. Delante de ti se postrarán
todas las familias de las naciones.
28 Porque del SEÑOR es el reino,
y él se enseñoreará de las naciones.

Gálatas 3:23-29

23 Pero antes que viniera la fe estábamos custodiados bajo la ley, reservados para la fe que había de ser revelada.

24 De manera que la ley ha sido nuestro tutor para llevarnos a Cristo, para que seamos justificados por la fe. 25 Pero, como ha venido la fe, ya no estamos bajo tutor.

26 Así que, todos son hijos de Dios por medio de la fe en Cristo Jesús 27 porque todos los que fueron bautizados en Cristo se han revestido de Cristo. 28 Ya no hay judío ni griego, no hay esclavo ni libre, no hay varón ni mujer; porque todos ustedes son uno en Cristo Jesús. 29 Y ya que son de Cristo, ciertamente son descendencia de Abraham, herederos conforme a la promesa.

Lucas 8:26-39

Jesús sana a un endemoniado

26 Navegaron a la tierra de los gadarenos[a], que está frente a Galilea. 27 Al bajarse él a tierra, le salió al encuentro un hombre de la ciudad el cual tenía demonios. Desde hacía mucho tiempo no había llevado ropa[b], ni vivía en una casa sino entre los sepulcros. 28 Pero cuando vio a Jesús, exclamó, se postró delante de él y dijo a gran voz:

—¿Qué tienes conmigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? ¡Te ruego que no me atormentes!

29 Porque Jesús había mandado al espíritu inmundo que saliera del hombre, pues se había apoderado de él desde hacía mucho tiempo. Para guardarlo, lo ataban con cadenas y con grillos pero, rompiendo las ataduras, era impelido por el demonio a los desiertos. 30 Jesús le preguntó, diciendo:

—¿Cómo te llamas?

Y él dijo:

—Legión.

Porque muchos demonios habían entrado en él; 31 y le rogaban que no los mandara al abismo. 32 Había allí un hato de muchos cerdos que pacía en la montaña; y le rogaron que les dejara entrar en aquellos, y él les dio permiso. 33 Cuando los demonios salieron del hombre, entraron en los cerdos; y el hato se precipitó por un despeñadero al lago y se ahogó.

34 Los que apacentaban los cerdos, al ver lo que había acontecido, huyeron y dieron aviso en la ciudad y por los campos. 35 Y salieron a ver lo que había pasado. Fueron a Jesús y hallaron al hombre de quien habían salido los demonios, sentado a los pies de Jesús, vestido y en su juicio cabal; y tuvieron miedo. 36 Los que lo habían visto les contaron cómo había sido salvado aquel endemoniado. 37 Entonces toda la multitud de la región de los gadarenos[c] le rogó que se apartara de ellos porque tenían mucho temor. Jesús subió a la barca y regresó. 38 El hombre de quien habían salido los demonios le rogaba que lo dejara estar con él. Pero Jesús le respondió diciendo:

39 —Vuelve a tu casa y cuenta cuán grandes cosas ha hecho Dios por ti.

Y él se fue proclamando por toda la ciudad cuán grandes cosas Jesús había hecho por él.

Reina Valera Actualizada (RVA-2015)

Version Reina Valera Actualizada, Copyright © 2015 by Editorial Mundo Hispano