Print Page Options
Previous Prev Day Next DayNext

Read the New Testament in 24 Weeks

A reading plan that walks through the entire New Testament in 24 weeks of daily readings.
Duration: 168 days
Reina Valera Actualizada (RVA-2015)
Version
2 Corintios 1-2

Pablo, apóstol de Cristo Jesús por la voluntad de Dios, y el hermano Timoteo; a la iglesia de Dios que está en Corinto, juntamente con todos los santos que están en toda Acaya: Gracia a ustedes y paz de parte de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.

Acción de gracias en la tribulación

Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación, quien nos consuela en todas nuestras tribulaciones. De esta manera, con la consolación con que nosotros mismos somos consolados por Dios, también nosotros podemos consolar a los que están en cualquier tribulación. Porque de la manera que abundan a favor nuestro las aflicciones de Cristo, así abunda también nuestra consolación por el mismo Cristo. Pero si somos atribulados, lo es para el consuelo y la salvación de ustedes; o si somos consolados, es para la consolación de ustedes, la cual resulta en que perseveren bajo las mismas aflicciones que también nosotros padecemos. Y nuestra esperanza con respecto a ustedes es firme, porque sabemos que, así como son compañeros en las aflicciones, lo son también en la consolación.

Porque no queremos que ignoren, hermanos, en cuanto a la tribulación que nos sobrevino en Asia; pues fuimos abrumados sobremanera, más allá de nuestras fuerzas, hasta perder aun la esperanza de vivir. Pero ya teníamos en nosotros mismos la sentencia de muerte, para que no confiáramos en nosotros mismos sino en Dios que levanta a los muertos, 10 quien nos libró y nos libra de tan terrible muerte. Y en él hemos puesto nuestra esperanza de que aun nos librará, 11 porque ustedes también están cooperando a nuestro favor con ruegos, a fin de que el don que se nos concedió sea para que muchas personas den gracias a nuestro favor.

La sinceridad de Pablo

12 Porque nuestro motivo de gloria es este: el testimonio de nuestra conciencia de que nos hemos conducido en el mundo (y especialmente ante ustedes), con sencillez[a] y la sinceridad que proviene de Dios, y no en sabiduría humana sino en la gracia de Dios. 13 Porque no les escribimos otras cosas que las que leen y también comprenden; y espero que hasta el fin las comprenderán, 14 como también en parte nos han comprendido, que somos su motivo de gloria, así como también ustedes lo serán para nosotros en el día de nuestro Señor Jesús.

Pablo anuncia su visita a Corinto

15 Con esta confianza quise ir antes a ustedes para que tuvieran una segunda gracia, 16 y pasar de ustedes a Macedonia; y volver otra vez de Macedonia a ustedes para ser encaminado por ustedes a Judea. 17 Siendo ese mi deseo, ¿acaso usé de ligereza? ¿O será que lo que quiero hacer lo quiero según la carne; de manera que en mí haya un “sí, sí” y un “no, no”?

18 Pero Dios es fiel: Nuestra palabra para ustedes no es “sí y no”. 19 Porque Jesucristo, el Hijo de Dios, que ha sido predicado entre ustedes por nosotros (por mí, por Silas[b] y por Timoteo), no fue “sí y no”; más bien, fue “sí” en él. 20 Porque todas las promesas de Dios son en él “sí” y, por tanto, también por medio de él decimos “amén” a Dios, para su gloria por medio nuestro. 21 Y Dios es el que nos confirma con ustedes en Cristo y el que nos ungió; 22 es también quien nos ha sellado y ha puesto como garantía al Espíritu en nuestros corazones.

23 Pero yo invoco a Dios por testigo sobre mi alma, que es por consideración a ustedes que no he pasado todavía a Corinto. 24 Porque no nos estamos enseñoreando de la fe de ustedes. Más bien, somos colaboradores para su gozo, porque por la fe están firmes.

Así que decidí en mí mismo no ir otra vez a ustedes con tristeza. Porque si yo les causo tristeza, ¿quién será luego el que me alegre sino aquel a quien yo causé tristeza? Y a pesar de que estoy confiado en todos ustedes de que mi gozo es el mismo de todos ustedes, les escribo esto mismo para que cuando llegue no tenga tristeza por causa de aquellos por quienes me debiera gozar. Porque les escribí en mucha tribulación y angustia de corazón, y con muchas lágrimas; no para entristecerlos sino para que sepan cuán grande es el amor que tengo por ustedes.

Pablo perdona al ofensor

Si alguno ha causado tristeza, no me ha entristecido solo a mí sino, en cierta medida (para no exagerar), a todos ustedes. Basta ya para dicha persona la reprensión de la mayoría. Así que, más bien, debieran perdonarla y animarla, para que no sea consumida por demasiada tristeza.

Por lo tanto, les exhorto a que reafirmen su amor para con ella. Porque también les escribí con este motivo, para tener la prueba de que ustedes son obedientes en todo. 10 Al que ustedes habían perdonado algo, yo también. Porque lo que he perdonado, si algo he perdonado, por causa de ustedes lo he hecho en presencia de Cristo; 11 para que no seamos engañados por Satanás, pues no ignoramos sus propósitos.

Triunfantes en Cristo

12 Cuando llegué a Troas para predicar el evangelio de Cristo, aunque se me había abierto puerta en el Señor, 13 no tuve reposo en mi espíritu por no haber hallado a mi hermano Tito. Así que me despedí de ellos y partí para Macedonia.

14 Pero gracias a Dios que hace que siempre triunfemos en Cristo y que manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento por medio de nosotros. 15 Porque para Dios somos olor fragante de Cristo en los que se salvan y en los que se pierden. 16 A los unos, olor de muerte para muerte; mientras que a los otros, olor de vida para vida. Y para estas cosas, ¿quién es suficiente? 17 Porque no somos, como muchos, traficantes de la palabra de Dios; más bien, con sinceridad y como de parte de Dios hablamos delante de Dios en Cristo.

Reina Valera Actualizada (RVA-2015)

Version Reina Valera Actualizada, Copyright © 2015 by Editorial Mundo Hispano