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Revised Common Lectionary (Semicontinuous)

Daily Bible readings that follow the church liturgical year, with sequential stories told across multiple weeks.
Duration: 1245 days
Traducción en lenguaje actual (TLA)
Version
Jeremías 31:27-34

Responsabilidad personal

27 El Dios de Israel dice:

«Viene el día en que haré que Israel y Judá vuelvan a poblarse de gente y de animales. 28 Así como antes me dediqué a derribarlos, arrancarlos y destruirlos, ahora me dedicaré a plantarlos, reconstruirlos y ayudarlos a crecer. 29 Cuando llegue ese día, nadie volverá a decir: “Los padres la hacen, y los hijos la pagan”, 30 porque cada quien será responsable de sus propios actos. En otras palabras, cada uno de ustedes morirá por su propio pecado».

El nuevo pacto

31 El Dios de Israel dice:

«Viene el día en que haré un nuevo pacto con el pueblo de Israel y con el pueblo de Judá. 32-33 En el pasado, tomé de la mano a sus antepasados y los saqué de Egipto, y luego hice un pacto con ellos. Pero no lo cumplieron, a pesar de que yo era su Dios. Por eso, mi nuevo pacto con el pueblo de Israel será éste:

»Haré que mis enseñanzas
las aprendan de memoria,
y que sean la guía de su vida.
Yo seré su Dios,
y ellos serán mi pueblo.
Les juro que así será.

34 »Ya no hará falta que unos sean maestros de otros, y que les enseñen a conocerme, porque todos me conocerán, desde el más joven hasta el más viejo. Yo les perdonaré todas sus maldades, y nunca más me acordaré de sus pecados. Les juro que así será».

Salmos 119:97-104

97 ¡Tanto amo tus enseñanzas
que a todas horas medito en ellas!
98-99 Siempre están conmigo,
y me hacen aún más sabio
que mis enemigos y mis maestros.
100 Hasta entiendo mejor que los ancianos,
porque las pongo en práctica.
101 Me he apartado de todo mal camino
porque quiero obedecer tu palabra.
102 No me he apartado de tu enseñanza
porque tú eres mi maestro.
103-104 Me das tanta sabiduría
que no soporto la mentira.
¡Tu palabra es para mí
más dulce que la miel!

2 Timoteo 3:14-4:5

14 Tú debes seguir creyendo en lo que aprendiste, y que sabes que es la verdad. Después de todo, conoces muy bien a quienes te lo han enseñado. 15 Recuerda que desde niño has leído la Biblia, y que sus enseñanzas pueden hacerte sabio, para que aprendas a confiar más en Jesucristo y así seas salvo. 16 Todo lo que está escrito en la Biblia es el mensaje de Dios, y es útil para enseñar a la gente, para ayudarla y corregirla, y para mostrarle cómo debe vivir. 17 De ese modo, los servidores de Dios estarán completamente entrenados y preparados para hacer el bien.

Cuando Jesucristo venga como Rey, juzgará a todos, tanto a los que estén vivos como a los que estén muertos. Por eso pongo a Dios y a Jesucristo por testigos de lo que te ordeno. Tú anuncia el mensaje de Dios en todo momento. Anúncialo, aunque ese momento no parezca ser el mejor. Muéstrale a la gente sus errores, corrígela y anímala; instrúyela con mucha paciencia. Porque llegará el día en que la gente no querrá escuchar la buena enseñanza. Al contrario, querrá oír enseñanzas diferentes. Por eso buscará maestros que le digan lo que quiere oír. La gente no escuchará la verdadera enseñanza, sino que prestará atención a toda clase de cuentos. Pero tú, Timoteo, mantén la calma en todo momento, soporta los sufrimientos y anuncia siempre la buena noticia. Haz bien tu trabajo.

Lucas 18:1-8

La viuda y el juez

18 Jesús les contó una historia a sus discípulos, para enseñarles que debían orar siempre y sin desanimarse. Les dijo:

«En una ciudad había un juez que no tenía miedo ni de Dios ni de la gente. Allí también vivía una viuda, que siempre lo buscaba y le decía: “Por favor, haga usted todo lo posible para que se me haga justicia en la corte.” 4-5 Al principio, el juez no quería atender a la viuda. Pero luego pensó: “Esta viuda molesta mucho. Aunque no le tengo miedo a Dios, ni me importa la gente, la voy a ayudar. Si no lo hago, nunca dejará de molestarme.”»

Jesús agregó:

«Fíjense en lo que dijo ese mal juez. ¿Creen ustedes que Dios no defenderá a las personas que él eligió, y que día y noche le piden ayuda? ¿Creen que tardará él en responderles? ¡Claro que no, sino que les responderá de inmediato! Pero cuando yo, el Hijo del hombre, regrese a este mundo, ¿acaso encontraré gente que confíe en Dios?»