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Old/New Testament

Each day includes a passage from both the Old Testament and New Testament.
Duration: 365 days
Reina Valera Actualizada (RVA-2015)
Version
Salmos 119:1-88

Elogio de la Palabra de Dios[a]

א Álef

119 Bienaventurados los íntegros

de camino,
los que andan según la ley
del SEÑOR.
Bienaventurados los que guardan sus testimonios
y con todo el corazón le buscan.
Pues no hacen iniquidad
los que andan en sus caminos.
Tú mandaste que tus ordenanzas
fuesen muy guardadas.
¡Ojalá fuesen estables mis caminos
para guardar tus leyes!
Entonces yo no sería avergonzado
al observar todos tus mandamientos.
Te alabaré con rectitud de corazón cuando aprenda tus justos juicios.
Tus leyes guardaré;
no me abandones por completo.

ב Bet

¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra[b]
10 Con todo mi corazón te he buscado;
no dejes que me desvíe de
tus mandamientos.
11 En mi corazón he guardado tus dichos para no pecar contra ti.
12 ¡Bendito seas tú, oh SEÑOR!
Enséñame tus leyes.
13 Con mis labios he contado
todos los juicios de tu boca.
14 Me he gozado en el camino
de tus testimonios
más que sobre toda riqueza.
15 En tus ordenanzas meditaré;
consideraré tus caminos.
16 Me deleitaré en tus estatutos;
no me olvidaré de tus palabras.

ג Guímel

17 Haz bien a tu siervo
para que viva y guarde tu palabra.
18 Abre mis ojos,
y miraré las maravillas de tu ley.
19 Peregrino soy yo en la tierra;
no encubras de mí tus mandamientos.
20 Se consume mi alma por anhelar
tus preceptos en todo tiempo.
21 Increpaste a los arrogantes;
malditos los que se desvían
de tus mandamientos.
22 Aparta de mí el oprobio y el desprecio porque he guardado tus testimonios.
23 Aunque los gobernantes se sienten
y hablen contra mí,
tu siervo meditará en tus leyes.
24 Tus testimonios son mi delicia
y también mis consejeros.

ד Dálet

25 Mi alma está pegada al polvo;
vivifícame según tu palabra.
26 Mis caminos te declaré,
y me respondiste;
enséñame tus leyes.
27 Hazme entender el camino
de tus ordenanzas,
y meditaré en tus maravillas.
28 Mi alma llora de ansiedad;
sostenme conforme a tu palabra.
29 Aparta de mí el camino de engaño,
y enséñame[c] tu ley.
30 He escogido el camino de la verdad; he puesto tus juicios delante de mí.
31 Me he apegado a tus testimonios;
oh SEÑOR, no me avergüences.
32 Por el camino de tus mandamientos correré
porque das amplitud a mi corazón.

ה Hei

33 Enséñame, oh SEÑOR, el camino
de tus leyes,
y lo guardaré hasta el fin.
34 Dame entendimiento, y guardaré
tu ley;
la observaré con todo el corazón.
35 Guíame por la senda de tus
mandamientos
porque en ella me deleito.
36 Inclina mi corazón a tus testimonios
y no a las ganancias deshonestas.
37 Aparta mis ojos para que no vean
la vanidad;
vivifícame en tu camino.
38 Cumple tu promesa
a tu siervo que te teme.
39 Aparta de mí el oprobio que me aterra porque buenos son tus juicios.
40 Mira cómo anhelo tus ordenanzas;
vivifícame en tu justicia.

ו Vav

41 Venga a mí tu misericordia, oh SEÑOR; y tu salvación, conforme a tu promesa.
42 Entonces daré respuesta al que me afrenta,
porque en tu palabra he confiado.
43 En ningún momento quites de mi boca la palabra de verdad,
porque en tu juicio tengo puesta
mi esperanza.
44 Tu ley guardaré siempre,
para siempre jamás.
45 Andaré en libertad,
porque he buscado tus mandamientos.
46 Hablaré de tus testimonios delante
de los reyes
y no quedaré avergonzado.
47 Me deleitaré en tus mandamientos, los cuales he amado.
48 Alzaré mis manos a tus mandamientos, los cuales he amado,
y meditaré en tus leyes.

ז Zayin

49 Acuérdate de la promesa dada a tu siervo
en la cual me has hecho esperar.
50 Esto es mi consuelo en mi aflicción: que tu palabra me ha vivificado.
51 Mucho se han burlado de mí los arrogantes
pero yo no me he apartado de tu ley.
52 Oh SEÑOR, me he acordado de tus juicios realizados desde tiempos antiguos
y he hallado consuelo.
53 La indignación se apoderó de mí,
a causa de los impíos que abandonan tu ley.
54 Tus leyes han sido cánticos para mí
en el ámbito de mis peregrinaciones.
55 Oh SEÑOR, en la noche me he acordado de tu nombre
y he guardado tu ley.
56 Esto me ha acontecido
porque guardé tus mandamientos.

ח Jet

57 Tú eres mi porción, oh SEÑOR;
me he propuesto guardar tus palabras.
58 He implorado tu favor de todo corazón; ten misericordia de mí según tu palabra.
59 Consideré mis caminos
y volví mis pies a tus testimonios.
60 Me apresuré, y no me retardé,
a guardar tus mandamientos.
61 Las cuerdas de los impíos me rodearon pero no me olvidé de tu ley.
62 A medianoche me levanto para darte gracias
por tus justos juicios.
63 Compañero soy yo de todos
los que te temen
y guardan tus ordenanzas.
64 De tu misericordia está llena la tierra. Oh SEÑOR, enséñame tus leyes.

ט Tet

65 Has hecho bien a tu siervo,
oh SEÑOR, conforme a tu palabra.
66 Enséñame buen sentido y sabiduría porque tus mandamientos he creído.
67 Antes que fuera humillado, yo erraba; pero ahora guardo tu palabra.
68 Tú eres bueno y bienhechor; enséñame tus leyes.
69 Los soberbios forjaron engaño contra mí
pero yo guardaré de todo corazón tus mandamientos.
70 El corazón de ellos se ha vuelto
insensible como sebo;
pero yo me he deleitado en tu ley.
71 Bueno me es haber sido afligido
para que aprenda tus leyes.
72 Mejor me es la ley que procede
de tu boca
que miles de piezas de oro y plata.

י Yod

73 Tus manos me hicieron y me formaron; hazme entender para que yo aprenda tus mandamientos.
74 Los que te temen me verán y se alegrarán,
porque en tu palabra he puesto
mi esperanza.
75 Conozco, oh SEÑOR, que tus juicios son justos
y que conforme a tu fidelidad me has afligido.
76 Que tu bondad me consuele
conforme a lo que has prometido
a tu siervo.
77 Llegue a mí tu misericordia
para que yo viva,
porque tu ley es mi delicia.
78 Sean avergonzados los arrogantes
porque con engaño me han agraviado. Pero yo meditaré en tus preceptos.
79 Vuélvanse a mí los que te temen
y conocen tus testimonios.
80 Sea mi corazón íntegro en tus leyes para que no sea yo avergonzado.

כ Kaf

81 Desfallece mi alma en espera de tu salvación;
en tu palabra he puesto mi esperanza.
82 Desfallecen mis ojos en espera
de tu palabra
diciendo: “¿Cuándo me consolarás?”.
83 Aunque he sido como un odre en medio del humo,
no me he olvidado de tus leyes.
84 ¿Cuántos son los días de tu siervo?
¿Cuándo harás juicio contra los que me persiguen?
85 Los arrogantes me han cavado fosas,
lo que no está de acuerdo con tu ley.
86 Todos tus mandamientos son fieles. Con engaño me persiguen; ayúdame.
87 Casi me han eliminado de la tierra
pero yo no he abandonado tus ordenanzas.
88 Vivifícame conforme a tu misericordia y guardaré los testimonios de tu boca.

1 Corintios 7:20-40

20 Cada uno permanezca en la condición en que fue llamado. 21 ¿Fuiste llamado siendo esclavo? No te preocupes; pero si puedes hacerte libre, por supuesto procúralo. 22 Porque el que en el Señor es llamado siendo esclavo, es hombre libre del Señor. De igual manera, también el que es llamado siendo libre, es esclavo del Señor. 23 Por precio fueron comprados; no se hagan esclavos de los hombres. 24 Hermanos, que cada uno se quede para con Dios en la condición en que fue llamado.

Consejos para los no casados

25 Pero con respecto a los que son solteros, no tengo mandamiento del Señor, aunque les doy mi parecer como quien ha alcanzado misericordia del Señor para ser fiel. 26 Pues, a causa de la presente dificultad, bien me parece que al hombre le sea bueno quedarse como está. 27 ¿Estás ligado a esposa? No procures desligarte. ¿Estás libre de esposa? No busques esposa. 28 Pero también, si te casas, no pecas; y si la soltera se casa, no peca; aunque aquellos que se casan tendrán aflicción en la carne, y yo quisiera evitársela.

29 Pero les digo esto, hermanos, que el tiempo se ha acortado. En cuanto al tiempo que queda, los que tienen esposas sean como si no las tuvieran; 30 los que lloran, como si no lloraran; los que se alegran, como si no se alegraran; los que compran, como si no poseyeran; 31 y los que disfrutan de este mundo, como si no disfrutaran de él. Porque el orden presente de este mundo está pasando.

32 Quisiera, pues, que estuviesen libres de ansiedad. El no casado se preocupa de las cosas del Señor, de cómo agradar al Señor; 33 pero el casado se preocupa de las cosas de la vida, de cómo ha de agradar a su esposa, 34 y su atención está dividida[a]. La mujer no casada, o soltera, se preocupa de las cosas del Señor, a fin de ser consagrada tanto en cuerpo como en espíritu. En cambio, la casada tiene cuidado de las cosas de la vida, de cómo ha de agradar a su esposo. 35 Esto digo para su provecho; no para ponerles restricción, sino para que vivan honestamente, atendiendo al Señor sin impedimento.

36 Si alguien considera que su comportamiento es inadecuado hacia su virgen y si está en la flor de la edad y por eso siente obligación de casarse, puede hacer lo que quiere; no comete pecado. Cásense. 37 Pero el que está firme en su corazón, no teniendo necesidad, sino que tiene dominio sobre su propia voluntad y así ha determinado en su corazón conservársela virgen, hará bien. 38 De modo que el que se casa con su virgen hace bien; y de igual manera, el que no se casa hace mejor.

El matrimonio de las viudas

39 La esposa está ligada mientras viva su esposo. Pero si su esposo muere, está libre para casarse con quien quiera, con tal que sea en el Señor. 40 Pero según mi opinión, más feliz será si permanece así. Y pienso que yo también tengo el Espíritu de Dios.

Reina Valera Actualizada (RVA-2015)

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