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Traducción en lenguaje actual (TLA)
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1 Crónicas 4-6

Los descendientes de Judá

Hijos y nietos de Judá

Judá tuvo cinco hijos:

Fares,

Hesrón,

Carmí,

Hur,

Sobal.

Los descendientes de Sobal fueron:

Reaías,

Jáhat.

Jáhat tuvo dos hijos:

Ahumai,

Láhad.

De los hijos de Jáhat vienen las tribus soratitas.

Hijos y nietos de Hur

3-4 Hur, el hijo mayor de Efrata, antepasado de Belén, tuvo tres hijos:

Etam,

Penuel,

Éser.

Etam tuvo una hija y tres hijos:

Haslelponi,

Jezreel,

Ismá,

Idbás.

Penuel tuvo un hijo, Guedor.

Éser tuvo un hijo, Husá.

Hijos de Ashur

Ashur, el padre de Tecoa, tuvo dos esposas, Helá y Naará. Con Naará tuvo cuatro hijos:

Ahuzam,

Héfer,

Temení,

Ahastarí.

Con Helá tuvo tres hijos:

Séret,

Jesohar,

Etnán.

Hijos de Cos

Cos tuvo dos hijos:

Anub,

Sobebá.

Cos fue el antepasado de las tribus de Aharhel, el hijo de Harum.

Jabés

9-10 Cuando Jabés nació, su madre le puso ese nombre porque le causó mucho dolor[a] durante el nacimiento. En cierta ocasión, Jabés le rogó a Dios: «Bendíceme y dame un territorio muy grande; ayúdame y líbrame de todo mal y sufrimiento». Dios le concedió su petición, y Jabés llegó a ser más importante que sus hermanos.

Hijos y nietos de Quelub

11-12 Quelub, hermano de Suhá, vivió en Recá, y tuvo un hijo, Mehír.

Mehír tuvo un hijo, Estón.

Estón tuvo tres hijos:

Bet-rafá,

Paséah,

Tehiná.

Tehiná fundó la ciudad de Nahas.

Hijos y nietos de Quenaz

13-14 Quenaz tuvo dos hijos:

Otoniel,

Seraías.

Otoniel tuvo dos hijos:

Hatat,

Meonotai.

Meonotai tuvo un hijo, Ofrá.

Seraías tuvo un hijo, Joab.

Joab fue el antepasado de los artesanos que habitaron el valle de Harasim.

Hijos y nietos de Caleb

15 Caleb hijo de Jefuné, tuvo tres hijos:

Ir,

Elá,

Náam.

Elá tuvo un hijo, Quenaz.

Hijos de Jahaleel

16 Jahaleel tuvo cuatro hijos:

Zif,

Zifá,

Tirías,

Asarel.

Hijos y nietos de Esdras

17-18 Esdras tuvo cuatro hijos:

Jéter,

Méred,

Éfer,

Jalón.

Méred tuvo tres hijos con su esposa Bitiá, la hija del rey de Egipto:

Isbah,

Samai,

María.

Isbah tuvo un hijo, Estemoa.

Méred tenía otra esposa de la tribu de Judá; con ella tuvo tres hijos:

Jéred,

Héber,

Jecutiel.

Jéred tuvo un hijo, Guedor.

Héber tuvo un hijo, Socó.

Jecutiel tuvo un hijo, Zanóah.

Hijos de Odías

19 Odías se casó con la hermana de Náham, y con ella tuvo dos hijos:

Queilá,

Estemoa.

Queilá perteneció a la tribu garmita, y Estemoa, a la de los maacateos.

Hijos de Simón

20 Simón tuvo cuatro hijos:

Amnón,

Riná,

Ben-hanán,

Tilón.

Hijos de Isí

Isí tuvo dos hijos:

Zohet,

Ben-zohet.

Hijos y nietos de Selá

21-23 En documentos muy antiguos se encuentra esta lista de los descendientes de Selá hijo de Judá:

Er,

Ladá,

Joacín,

Joás,

Saraf.

Er tuvo un hijo, Lecá.

Ladá tuvo un hijo, Maresá.

Joás y Saraf se casaron con mujeres moabitas, pero regresaron a vivir a Netaim y Guederá, cerca de Belén. Eran alfareros al servicio del rey.

Las tribus de tejedores que vivían en Bet-asbea, y los habitantes de Cozebá, también eran descendientes de Selá.

Los descendientes de Simeón

24-27 Simeón tuvo cinco hijos:

Nemuel,

Jamín,

Jarib,

Zérah,

Saúl.

Saúl tuvo un hijo, Salum.

Salum tuvo un hijo, Mibsam.

Mibsam tuvo un hijo, Mismá.

Mismá tuvo un hijo, Hamuel.

Hamuel tuvo un hijo, Zacur.

Zacur tuvo un hijo, Simí.

Simí tuvo dieciséis hijos y seis hijas. A pesar de eso no tuvo tantos descendientes como Judá, porque sus hermanos no tuvieron muchos hijos.

28-33 Según cierto documento, antes de que David fuera rey, los descendientes de Simeón vivían en los siguientes lugares:

Beerseba,

Moladá,

Hasar-sual,

Bilhá,

Ésem,

Tolad,

Betuel,

Hormá,

Siclag,

Bet-marcabot,

Hasar-susim,

Bet-birai,

Saaraim,

Etam,

Ain,

Rimón,

Toquen,

Asán.

Además, habitaron las aldeas que estaban alrededor de estas ciudades, y las que estaban en el camino que lleva a la región de Baal.

34-38 Ésta es la lista de los jefes cuyos grupos familiares eran los más numerosos:

Mesobab,

Jamlec,

Josías hijo de Amasías;

Joel,

Jehú,

Elioenai,

Jaacoba,

Jesohaías,

Asaías,

Adiel,

Jesimiel,

Benaías,

Ziza,

Jedaías.

Jehú fue hijo de Josibías, nieto de Seraías y bisnieto de Asiel; Ziza fue hijo de Sifi, nieto de Alón, y bisnieto de Jedaías; y Jedaías fue hijo de Simrí y nieto de Semaías.

39-41 En los días de Ezequías, rey de Judá, todos los que están en la lista anterior se fueron a vivir al este del valle, a la entrada de Guerar. Allí el terreno era muy amplio, seguro y tranquilo; además, había buenos y abundantes pastos para sus rebaños. Cuando llegaron a ese lugar, mataron a los descendientes de Cam que vivían allí, y destruyeron para siempre sus campamentos y viviendas.

42-43 Algo parecido hicieron quinientos hombres de los descendientes de Simeón. Bajo las órdenes de Pelatías, Nearías, Refaías y Uziel, hijos de Isí, se fueron a vivir al monte de Seír. Cuando llegaron a ese lugar, mataron a los amalecitas que aún quedaban allí.

Los descendientes de Rubén

1-3 Aunque Rubén fue el hijo mayor de Jacob, no es el primero que se menciona en estas listas, pues perdió sus derechos como primer hijo por haber tenido relaciones sexuales con una de las esposas de su padre.

Los derechos de Rubén le fueron dados a su hermano José, y los descendientes de José mantuvieron esos derechos, aun cuando la tribu de su hermano Judá llegó a ser la más poderosa de todas, y de ella surgió un gran gobernante.

Rubén tuvo cuatro hijos:

Hanoc,

Falú,

Serón,

Carmí.

Hijos de Joel

Éstos fueron los descendientes de Joel:

Semaías,

Gog,

Simí,

Micaías,

Reaías,

Baal,

Beerá.

Beerá fue jefe de los descendientes de Rubén, pero Tiglat-piléser, rey de Asiria, se lo llevó prisionero. En la lista de los descendientes de Beerá están registrados los siguientes grupos familiares:

Grupo de Jeiel,

Grupo de Zacarías,

8-9 Grupo de Bela.

El grupo de Jeiel fue el principal, y Bela fue hijo de Azaz, nieto de Sema y bisnieto de Joel. Bela vivía en Aroer, pero como sus ganados se multiplicaban mucho y ya no cabían en la tierra de Galaad, extendió su territorio hasta Nebo y Baal-megón. También se estableció hacia el oriente, desde el río Éufrates hasta donde empieza el desierto.

10 Cuando Saúl era rey, los descendientes de Rubén lucharon contra los agarenos y los derrotaron. Luego se quedaron a vivir en las casas que los agarenos tenían en toda la parte oriental de la región de Galaad.

Los descendientes de Gad

11-17 En los días en que Jotam era rey de Judá y Jeroboam era rey de Israel, se hizo la siguiente lista de los descendientes de Gad, de acuerdo a su orden de importancia:

Joel,

Safán,

Jaanai,

Safat.

Sus parientes más cercanos fueron las familias de los siete hijos de Abihail hijo de Hurí:

Micael,

Mesulam,

Sebá,

Jorai,

Jacán,

Zía,

Éber.

Ésta es la lista de los antepasados de esas familias:

Abihail,

Hurí,

Jaróah,

Galaad,

Micael,

Jesisai,

Jahdó,

Buz,

Aguí,

Abdiel,

Guní.

Aguí fue el jefe de todos estos, quienes vivieron en los siguientes lugares, frente al territorio de los descendientes de Rubén: la región de Galaad y los pueblos de Basán, hasta Salcá y hasta donde terminan los campos de pastoreo de Sarón.

18 Las tribus de Rubén y Gad, y la media tribu de Manasés, tenían un total de cuarenta y cuatro mil setecientos sesenta hombres capaces de ir a la guerra. Eran valientes y estaban bien entrenados para usar el escudo, la espada y el arco. 19-22 También eran hombres que confiaban en la ayuda de Dios. Por ejemplo, cuando pelearon contra los agarenos y contra Jetur, Nafís y Nodab, le pidieron ayuda a Dios, y él les dio la victoria. Así fue como mataron a muchos de los agarenos y de sus aliados; se llevaron a cien mil prisioneros; se apropiaron de cincuenta mil camellos, doscientas cincuenta mil ovejas y dos mil burros; además, se quedaron a vivir en la tierra de sus enemigos hasta que ellos mismos fueron llevados prisioneros a otras tierras.

La media tribu de Manasés

23-24 Los descendientes de la media tribu de Manasés fueron:

Éfer,

Isí,

Eliel,

Azriel,

Jeremías,

Hodavías,

Jahdiel.

Todos estos fueron jefes de sus grupos familiares; eran soldados valientes y muy famosos. Sus familias eran tan numerosas que vivían en la región que se extiende desde Basán hasta Baal-hermón, Senir y el monte Hermón. 25 Sin embargo, abandonaron al Dios de Israel por adorar a los dioses de los pueblos que Dios había destruido. 26 Por eso el Dios de Israel envió a Tiglat-piléser, rey de Asiria, para que se llevara prisioneros a los de la tribu de Rubén y Gad, y a la media tribu de Manasés. Ésa es la razón por la que ellos continuaron viviendo en Halah, Habor, Hará y el río Gozán, hasta el momento en que esto se escribió.

Los sacerdotes hijos de Leví

1-30 Leví tuvo tres hijos:

Guersón,

Quehat,

Merarí.

Guersón tuvo dos hijos:

Libní,

Simí.

Los descendientes de Guersón fueron:

Libní,

Jáhat,

Zimá,

Joah,

Idó,

Zérah,

Jeatrai.

Quehat tuvo cuatro hijos:

Amram,

Ishar,

Hebrón,

Uziel.

Los descendientes de Quehat fueron:

Aminadab,

Coré,

Asir,

Elcaná,

Ebiasaf,

Asir,

Táhat,

Uriel,

Ozías,

Saúl.

Elcaná tuvo dos hijos:

Amasai,

Ahimot.

Los descendientes de Ahimot fueron:

Elcaná,

Sofai,

Náhat,

Eliab,

Jeroham,

Elcaná.

Merarí tuvo dos hijos:

Mahli,

Musí.

Los descendientes de Merarí fueron:

Mahli,

Libní,

Simí,

Uzá,

Simá,

Haguías,

Asaías.

Samuel tuvo dos hijos:

Vasní,

Abías.

Hijos y nietos de Amram

Amram hijo de Quehat, nieto de Leví, tuvo tres hijos:

Aarón,

Moisés,

María.

Aarón tuvo cuatro hijos:

Nadab,

Abihú,

Eleazar,

Itamar.

Los descendientes de Eleazar fueron:

Finees,

Abisúa,

Buquí,

Uzí,

Zeraías,

Meraiot,

Amarías,

Ahitub,

Sadoc,

Ahimaas,

Azarías,

Johanán,

Azarías,

Amarías,

Ahitub,

Sadoc,

Salum,

Hilquías,

Azarías,

Seraías,

Josadac.

Azarías hijo de Johanán fue sacerdote en el templo que Salomón construyó en Jerusalén. Josadac hijo de Seraías fue llevado prisionero cuando Dios hizo que el rey Nabucodonosor de Babilonia se llevara prisioneros a los habitantes de Judá y de Jerusalén.

David nombra cantores para el templo

31-33 Después de que David llevó el cofre del pacto a Jerusalén, nombró a un grupo de hombres de la tribu de Leví para que se encargaran de la música y el canto en el santuario. Una vez que Salomón construyó el templo, ellos continuaron a cargo de la música, siguiendo las instrucciones de David.

Ésta es la lista de estos cantores:

Hemán, que era descendiente de Quehat, y sus antepasados:

Joel,

Samuel,

34 Elcaná,

Jeroham,

Eliel,

Tóah,

35 Suf,

Elcaná,

Máhat,

Amasai,

36 Elcaná,

Joel,

Azarías,

Sofonías,

37 Táhat,

Asir,

Ebiasaf,

Coré,

38 Ishar,

Quehat,

Leví,

Israel.

39 Cuando éstos cantaban en el templo, Asaf se colocaba a la derecha de su pariente Hemán. Los antepasados de Asaf fueron:

Berequías,

Simá,

40 Micael,

Baaseías,

Malquías,

41 Etní,

Zérah,

Adaías,

42 Etán,

Zimá,

Simí,

43 Jáhat,

Guersón,

Leví.

44 A la izquierda de Hemán se colocaba Etán, descendiente de Merarí. Éstos fueron los antepasados de Etán:

Quisí,

Abdí,

Maluc,

45 Hasabías,

Amasías,

Hilquías,

46 Amsí,

Baní,

Sémer,

47 Mahli,

Musí,

Merarí,

Leví.

48-49 Las ofrendas que se presentaban a Dios y las ceremonias que se realizaban en el Lugar Santísimo estaban bajo la responsabilidad de Aarón y sus descendientes. A ellos también les correspondía presentar las ofrendas por el perdón de los pecados del pueblo de Israel. Así lo había ordenado Moisés, fiel servidor de Dios. Otros descendientes de la tribu de Leví estaban encargados de las tareas en el templo de Dios.

Los descendientes de Aarón

50-53 Los descendientes de Aarón fueron:

Eleazar,

Finees,

Abisúa,

Buquí,

Uzí,

Zeraías,

Meraiot,

Amarías,

Ahitub,

Sadoc,

Ahimaas.

Lugares asignados a los descendientes de Aarón

54-61 Éstos fueron los lugares que, por medio de un sorteo, se les asignaron a los descendientes de Aarón:

A los grupos familiares de Quehat les asignaron Hebrón, en la región de Judá, con sus campos de pastoreo. Por medio de un sorteo, les correspondieron diez ciudades en los territorios de la media tribu de Manasés.

A Caleb hijo de Jefuné le asignaron las tierras que estaban alrededor de la ciudad y sus aldeas.

A los grupos familiares de Aarón les asignaron las siguientes ciudades de refugio, cada una con sus campos de pastoreo:

Hebrón,

Libná,

Jatir,

Estemoa,

Hilén,

Debir,

Asán,

Bet-semes.

Además, de los territorios de Benjamín se les asignaron las siguientes ciudades, cada una con sus campos de pastoreo:

Gueba,

Alémet,

Anatot.

Así pues, a los grupos familiares de Aarón se les asignaron trece ciudades.

62 A los grupos familiares de Guersón se les asignaron trece ciudades en los territorios de las tribus de Isacar, Aser y Neftalí, y de la tribu de Manasés, que se había establecido en Basán.

63 A los grupos familiares de Merarí se les asignaron, por medio de un sorteo, doce ciudades en los territorios de las tribus de Rubén, Gad y Zabulón.

Las ciudades asignadas en cada tribu

64-81 Por medio de un sorteo, los israelitas les asignaron a los descendientes de Leví las siguientes ciudades, cada una con sus respectivos campos de pastoreo:

De los territorios de las tribus de Judá, Simeón y Benjamín, las ciudades que ya se mencionaron.

Del territorio de la tribu de Efraín, a algunos de los grupos familiares de Quehat les asignaron las siguientes ciudades de refugio:

Siquem,

Guézer,

Jocmeam,

Bet-horón,

Aialón,

Gat-rimón.

Del territorio de la media tribu de Manasés, a otros grupos familiares de Quehat les asignaron las ciudades de Aner y Bileam.

A los grupos de Guersón les asignaron la ciudad de Golán en Basán, y la ciudad de Astarot; del territorio de la tribu de Isacar les asignaron las ciudades de Quedes, Daberat, Ramot y Anem; del territorio de la tribu de Aser, las ciudades de Masal, Abdón, Hucoc y Rehob; del territorio de la tribu de Neftalí, las ciudades de Hamón, Quiriataim y Quedes de Galilea.

A los demás descendientes de Merarí les asignaron las ciudades de Rimón y Tabor, en el territorio de la tribu de Zabulón; Béser, que está en el desierto, Jahas, Cademot y Mefáat, en el territorio de la tribu de Rubén, al este del Jordán y frente a Jericó; las ciudades de Ramot de Galaad, Mahanaim, Hesbón y Jazer, en el territorio de la tribu de Gad.

Juan 6:1-21

Jesús alimenta a más de cinco mil

Después de esto, Jesús fue al otro lado del Lago de Galilea, también conocido como lago de Tiberias. Mucha gente lo seguía, pues había visto los milagros que él hacía al sanar a los enfermos.

3-4 Se acercaba la fiesta de los judíos llamada Pascua, y Jesús fue a un cerro con sus discípulos, y allí se sentó.[a] Cuando Jesús vio que mucha gente venía hacia él, le preguntó a Felipe:

—¿Dónde podemos comprar comida para tanta gente?

Jesús ya sabía lo que iba a hacer, pero preguntó esto para ver qué decía su discípulo. Y Felipe respondió:

—Ni trabajando doscientos días ganaría uno suficiente dinero para dar un poco de pan a tanta gente.

Andrés, que era hermano de Simón Pedro, y que también era discípulo, le dijo a Jesús:

—Aquí hay un niño que tiene cinco panes de cebada[b] y dos pescados. Pero eso no alcanzará para repartirlo entre todos.

10 Jesús les dijo a sus discípulos que sentaran a la gente. Había allí unos cinco mil hombres, y todos se sentaron sobre la hierba. 11 Jesús, entonces, tomó los panes en sus manos y oró para dar gracias a Dios. Después, los repartió entre toda la gente, e hizo lo mismo con los pescados. Todos comieron cuanto quisieron.

12 Una vez que todos comieron y quedaron satisfechos, Jesús les dijo a sus discípulos: «Recojan lo que sobró, para que no se desperdicie nada.»

13 Ellos obedecieron, y con lo que sobró llenaron doce canastos. 14 Cuando todos vieron este milagro, dijeron: «De veras éste es el profeta que tenía que venir al mundo.»

15 Jesús se dio cuenta de que la gente quería llevárselo a la fuerza para hacerlo su rey. Por eso se fue a lo alto del cerro, para estar solo.

Jesús camina sobre el agua

16-17 Al anochecer los discípulos de Jesús subieron a una barca, y comenzaron a cruzar el lago para ir al pueblo de Cafarnaúm. Ya había oscurecido totalmente, y Jesús todavía no había regresado. 18 De pronto empezó a soplar un fuerte viento, y las olas se hicieron cada vez más grandes. 19 Los discípulos ya habían navegado cinco o seis kilómetros, cuando vieron a Jesús caminar sobre el agua. Como Jesús se acercaba cada vez más a la barca, tuvieron miedo. 20 Pero él les dijo: «¡Soy yo! ¡No tengan miedo!»

21 Los discípulos querían que Jesús subiera a la barca, pero muy pronto la barca llegó al lugar adonde iban.