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M’Cheyne Bible Reading Plan

The classic M'Cheyne plan--read the Old Testament, New Testament, and Psalms or Gospels every day.
Duration: 365 days
La Palabra (España) (BLP)
Version
1 Crónicas 1-2

I.— GENEALOGÍAS (1—9)

De Adán a Israel (1,1-54)

Descendientes de Adán y Noé (Gn 10,1-18a.22a.22-29)

Adán, Set, Enós, Quenán, Mahalalel, Járed, Enoc, Matusalén, Lámec, Noé, Sem, Cam y Jafet.

Descendientes de Jafet: Gómer, Magag, Maday, Javán, Tubal, Mésec y Tirás. Descendientes de Gómer: Ascanaz, Rifat y Togarmá. Descendientes de Javán: Elisá, Tarsis, los queteos y los rodonses.

Descendientes de Cam: Cus, Egipto, Put y Canaán. Descendientes de Cus: Sebá, Javilá, Sabtá, Ramá, Sabtecá y los hijos de Ramá, Sebá y Dedán. 10 Cus fue el padre de Nimrod, el primer guerrero de la tierra. 11 Egipto fue el padre de los lidios, anamitas, lehabitas, naftujitas, 12 patrusitas, caslujitas y cretenses, de los que proceden los filisteos. 13 Canaán fue el padre de Sidón, su primogénito, de Jet 14 y de los jebuseos, amorreos, guirgaseos, 15 jivitas, arquitas, sinitas, 16 arvaditas, semaritas y jamatitas.

17 Descendientes de Sem: Elam, Asur, Arfacsad, Lud, Aram, Us, Jul, Guéter y Mésec. 18 Arfacsad fue el padre de Salaj, y este, de Éber. 19 Éber tuvo dos hijos: uno se llamaba Péleg, porque en su tiempo se dividió la tierra, y su hermano, Joctán. 20 Joctán fue el padre de Almodad, Sélef, Jasarmávet y Jéraj, 21 Hadorán, Uzal, Diclá, 22 Ébal, Abimael, Sebá, 23 Ofir, Javilá, Jobab, todos ellos descendientes de Joctán. 24 Sem, Arfacsad, Sélaj, 25 Éber, Péleg, Reú, 26 Serug, Najor, Téraj 27 y Abrán o Abrahán.

Descendientes de Abrahán

28 Hijos de Abrahán: Isaac e Ismael. 29 Y sus descendientes son estos: Nebayot, primogénito de Ismael, Quedar, Adbeel, Mibsán, 30 Mismá, Dumá, Masá, Jedad, Temá, 31 Jetur, Nafís y Quedmá. Estos son los descendientes de Ismael. 32 Descendientes de Quetura, concubina de Abrahán, que engendró a Zimrán, Jocsán, Medán, Madián, Jisbac y Súaj. Descendientes de Jocsán: Sebá y Dedán. 33 Descendientes de Madián: Efá, Éfer, Enoc, Abidá y Eldaá; todos ellos, descendientes de Quetura.

34 Abrahán fue el padre de Isaac. Descendientes de Isaac: Esaú e Israel. 35 Descendientes de Esaú: Elifaz, Reuel, Jeús, Jaalán y Córaj. 36 Descendientes de Elifaz: Temán, Omar, Sefó, Gatán, Quenaz, Timná y Amalec. 37 Descendientes de Reuel: Nájat, Zéraj, Samá y Mizá. 38 Descendientes de Seir: Lotán, Sobal, Sibeón, Aná, Disón, Éser y Disán. 39 Descendientes de Lotán: Jorí y Homán. Timná era hermana de Lotán. 40 Descendientes de Sobal: Alván, Manájat, Ébal, Sefó y Onán. Descendientes de Sibeón: Ayá y Aná. 41 Descendientes de Aná: Disón. Descendientes de Disón: Jamrán, Esbán, Jitrán y Querán. 42 Descendientes de Éser: Bilán, Zaaván y Jaacán. Descendientes de Disón: Us y Arán.

Reyes y jeques de Edom

43 Esta es la lista de los reyes que reinaron en el país de Edom, antes de que los israelitas tuvieran rey: Bela, el hijo de Beor, en la ciudad de Dinhabá. 44 Cuando murió Bela, le sucedió Jobab, el hijo de Zéraj, de Bosrá. 45 Cuando murió Jobab, le sucedió Jusán, del país de Temán. 46 Cuando murió Jusán, le sucedió Hadad, el hijo de Bedad, que derrotó a Madián en los campos de Moab. Su ciudad era Avit. 47 Cuando murió Hadad, le sucedió Samlá, de Masrecá. 48 Cuando murió Salmá, le sucedió Saúl, de Rejobot del Río. 49 Cuando murió Saúl, le sucedió Baaljanán, el hijo de Acbor. 50 Cuando murió Baaljanán, le sucedió Hadad, de la ciudad de Paú. Su esposa se llamaba Mehetabel, hija de Matred y nieta de Mezaab. 51 Cuando murió Hadad, fueron jeques de Edom el jeque Timná, el jeque Alvá, el jeque Jétet, 52 el jeque Oholibamá, el jeque Elá, el jeque Pinón, 53 el jeque Quenaz, el jeque Temán, el jeque Mibsar, 54 el jeque Magdiel y el jeque Irán. Estos fueron los jefes de Edom.

Judá y David (2,1—4,23)

Descendientes de Israel y Judá

Estos son los hijos de Israel: Rubén, Simeón, Leví y Judá; Isacar y Zabulón; Dan, José y Benjamín; Neftalí, Gad y Aser.

Descendientes de Judá: Er, Onán y Selá, los tres nacidos de la hija de Súa, la cananea. Er, primogénito de Judá, ofendió al Señor con su conducta y él lo hizo morir. Tamar, la nuera de Judá, le dio a Fares y Zéraj. En total, Judá tuvo cinco hijos.

Descendientes de Fares: Jesrón y Jamul. Descendientes de Zéraj: Zimrí, Etán, Hemán, Calcol y Dará, cinco en total. Descendiente de Carmí: Acán, que perjudicó a Israel por haber transgredido la ley del exterminio. Descendiente de Etán: Azarías. Descendientes que tuvo Jesrón: Jerajmeel, Ram y Quelubay.

10 Ram fue padre de Aminadab, y Aminadab fue padre de Najsón, el príncipe de los descendientes de Judá. 11 Najsón fue padre de Salmá, Salmá fue padre de Boaz; 12 Boaz fue padre de Obed y Obed fue padre de Jesé. 13 Jesé fue el padre de Eliab, su primogénito; de Abinadab, el segundo; de Simá, el tercero; 14 de Netanel, el cuarto; de Raday, el quinto; 15 de Osen, el sexto; y de David, el séptimo. 16 Sus hermanas fueron Seruyá y Abigail. Seruyá tuvo tres hijos: Abisay, Joab y Asael. 17 Abigail fue madre de Amasá, cuyo padre fue Jéter, el ismaelita.

Clanes judaítas

18 Caleb, el hijo de Jesrón, tuvo hijos con su esposa Azubá y con Jeriot. Los hijos de Azubá fueron Jéser, Sobab y Ardón. 19 Cuando Azubá murió, Caleb se casó con Efrata, que le dio a Jur. 20 Jur fue padre de Urí, y Urí fue padre de Besalel.

21 Cuando Jesrón tenía sesenta años se casó con la hija de Maquir, el padre de Galaad, y ella le dio a Segub. 22 Segub fue padre de Jaír, que tuvo veintitrés ciudades en el territorio de Galaad. 23 Además arrebató a Guesur y a Aram las aldeas de Jaír junto con Quenat y sus anejos, sesenta aldeas en total. Todos estos fueron descendientes de Maquir, el padre de Galaad. 24 Después de la muerte de Jesrón, Caleb se unió a Efrata, la esposa de su padre Jesrón, que le dio a Asjur, el padre de Tecoa.

25 Descendientes de Jerajmeel, primogénito de Jesrón: Ram, el primogénito, Buná, Oren y su hermano Osen. 26 Jerajmeel tuvo otra mujer llamada Atará, que fue la madre de Onán.

27 Descendientes de Ram, primogénito de Jerajmeel: Maás, Jamín y Équer. 28 Descendientes de Onán: Samay y Jadá. Descendientes de Samay: Nadab y Abisur. 29 La mujer de Abisur se llamaba Abihail, que le dio a Ajbán y Molid. 30 Descendientes de Nadab: Séled y Apáin. Séled murió sin hijos. 31 El descendiente de Apáin fue Jisí; el descendiente de Jisí, Sesán; y el descendiente de Sesán, Ajlay. 32 Descendientes de Jadá, el hermano de Samay: Jéter y Jonatán. Jéter murió sin hijos. 33 Descendientes de Jonatán: Pélet y Zazá. Estos fueron los descendientes de Jerajmeel.

34 Sesán no tuvo hijos, sino sólo hijas. Pero tenía un esclavo egipcio llamado Jarjá. 35 Sesán dio a Jarjá a una de sus hijas por esposa, y de esta nació Atay. 36 Atay fue padre de Natán; Natán fue padre de Zabad, 37 Zabad fue padre de Eflal, Eflal fue padre de Obed, 38 Obed fue padre de Jehú, Jehú fue padre de Azarías, 39 Azarías fue padre de Jeles, Jeles fue padre de Elasá, 40 Elasá fue padre de Sismay, Sismay fue padre de Salún, 41 Salún fue padre de Jecamías, y Jecamías fue padre de Elisamá.

42 Descendientes de Caleb, el hermano de Jerajmeel: Mesá, el primogénito que fue padre de Zif, y el segundo Maresá, padre de Hebrón. 43 Descendientes de Hebrón: Córaj, Tapuaj, Requen y Sema. 44 Sema fue padre de Rajan, el padre de Jorqueán; y Requen fue el padre de Samay. 45 Descendiente de Samay fue Maón, el padre de Betsur. 46 Efá, la concubina de Caleb, fue madre de Jarán, Mosá y Gazez. Jarán fue el padre de Gazez. 47 Descendientes de Johday: Reguen, Jotán, Guesán, Pélet, Efá y Sáaf. 48 Maacá, la concubina de Caleb, fue madre de Séber y Tirjaná. 49 También fue madre de Sáaf, el padre de Madmaná, y de Sevá, el padre de Macmená y de Guibeá. Acsá era hija de Caleb. 50 Estos fueron los descendientes de Caleb.

Descendientes de Jur, primogénito de Efrata: Sobal, padre de Quiriat Jearín; 51 Salmá, padre de Belén; y Jaref, padre de Bet-Guéder. 52 Descendientes de Sobal, padre de Quiriat Jearín, fueron Haroé, la mitad de los manajetitas 53 y las familias de Quiriat Jearín; los jeteritas, los futeos, los sumateos y los misraítas, de los que proceden los soraítas y los estaolitas. 54 Descendientes de Solmá: Belén y los netofatitas, Atrot Bet Joab, la otra mitad de los manajetitas, los soraítas, 55 las familias de los soferitas que vivían en Jabés, los tiratitas, los simateos y los sucateos. Estos son quenitas descendientes de Jamat, antepasado de los recabitas.

Hebreos 8

Jesucristo, mediador de una nueva y más valiosa alianza

Este es el punto central de cuanto venimos diciendo: que tenemos, junto al trono celestial de Dios, un sumo sacerdote que desempeña sus funciones en el santuario, en la verdadera Tienda de la presencia, construida no por seres humanos sino por el Señor.

Y como todo sumo sacerdote ha sido instituido para ofrecer dones y sacrificios, es preciso que también Cristo tenga algo que ofrecer. Ciertamente aquí en la tierra su sacerdocio no tendría razón de ser, al existir ya otros sacerdotes que presentan las ofrendas prescritas por la ley de Moisés. Pero estos sacerdotes celebran un culto que es únicamente sombra y figura de las realidades celestiales. Así se lo dio a entender Dios a Moisés cuando este se disponía a construir la Tienda de la presencia: Mira —le dijo— hazlo todo según el modelo que te ha sido mostrado en el monte. En realidad, ahora Cristo ha recibido un ministerio tanto más excelso cuanto mayor es la alianza de la que es mediador y cuanto de más valor son las promesas en que está cimentada. No habría habido, en efecto, lugar para una segunda alianza, de haber sido perfecta la primera. De hecho, Dios recrimina así a los destinatarios de la primera:

He aquí que llega el tiempo —dice el Señor—
en que yo sellaré una alianza nueva
con el pueblo de Israel y el de Judá.
No será como la alianza
que sellé con sus antepasados,
cuando los tomé de la mano
y los saqué de Egipto.
Como ellos quebrantaron mi alianza,
también yo los abandoné —dice el Señor—.
10 Así que esta será —dice el Señor—
la alianza que sellaré con Israel
cuando llegue aquel día:
inculcaré mis leyes en su mente
y las escribiré en su corazón;
yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo.
11 Ya nadie tendrá que enseñar a su vecino
ni tendrá que instruir a su hermano diciendo:
“reconoce al Señor”,
porque todos me conocerán,
desde el más pequeño hasta el mayor.
12 Y yo perdonaré sus iniquidades
y no me acordaré más de sus pecados.

13 Al llamar nueva a esta alianza, Dios está declarando vieja a la primera; y todo lo que se queda viejo y anticuado está a punto de desaparecer.

Amós 2

Contra Moab

Esto es lo que dice el Señor:
Son tantos los delitos de Moab
que no los dejaré sin castigo.
Por haber quemado y calcinado
los huesos del rey de Edom,
mandaré contra Moab un fuego
que devorará los palacios de Queriyot.
Y perecerá Moab entre estruendos,
gritos de guerra y toques de trompeta.
Extirparé de en medio al que gobierna
y aniquilaré a todos sus magistrados,
—dice el Señor—.

Contra Judá

Esto es lo que dice el Señor:
Son tantos los delitos de Judá
que no los dejaré sin castigo.
Por haber rechazado la ley del Señor
y no haber cumplido sus mandamientos,
por haberse dejado extraviar por ídolos
a quienes ya sus antepasados adoraron,
enviaré contra Judá un fuego
que devorará los palacios de Jerusalén.

Contra Israel

Esto es lo que dice el Señor:
Son tantos los delitos de Israel
que no los dejaré sin castigo.
Venden al inocente por dinero,
al pobre por un par de sandalias;
aplastan contra el polvo al desvalido
y no imparten justicia al indefenso;
padre e hijo acuden a la misma joven,
profanando así mi santo nombre.
Se tienden junto a cualquier altar
sobre ropas tomadas en prenda,
y beben en el templo de su dios
vino comprado con multas injustas.
Yo exterminé ante ellos al amorreo,
alto como los cedros y fuerte como las encinas;
extirpé sus raíces y malogré sus frutos.
10 A vosotros, en cambio, os saqué de Egipto
y os conduje cuarenta años por el desierto
hasta conquistar el país de los amorreos.
11 Suscité profetas entre vuestros hijos
y nazareos entre vuestros jóvenes.
¿No es así, israelitas? —oráculo del Señor—.
12 Pero obligasteis a beber vino a los nazareos
y no dejasteis profetizar a los profetas.
13 Pues bien, yo haré que el suelo se os hunda
como se hunde bajo un carro cargado de mies.
14 Ni el más ligero podrá huir,
ni al más fuerte le valdrán sus fuerzas,
ni el más valiente salvará su vida;
15 el arquero no conseguirá resistir,
el ágil de piernas no escapará;
el que monta a caballo no se salvará;
16 y hasta el valiente más intrépido
tendrá que huir desnudo aquel día,
—oráculo del Señor—.

Salmos 145

Salmo 145 (144)

El Señor es bueno con todos

145 Salmo de David.
Dios mío, mi rey, yo te alabaré,
bendeciré tu nombre por siempre jamás.
Cada día te bendeciré,
alabaré tu nombre por siempre jamás.
El Señor es grande, digno de alabanza,
es insondable su grandeza.
Por generaciones se ensalzarán tus obras,
se contarán tus proezas.
Proclamaré tus maravillas
y el esplendor de tu gloria.
Se hablará del poder de tus prodigios,
yo narraré tus grandezas.
Se evocará tu inmensa bondad,
se cantará tu justicia.
El Señor es clemente y compasivo,
paciente y grande en amor.
El Señor es bueno con todos,
su amor llega a todas sus obras.
10 Señor, que todas tus obras te alaben,
que te bendigan tus fieles;
11 que pregonen la gloria de tu reino,
que hablen de tus proezas;
12 que proclamen a todos tus hazañas,
el glorioso esplendor de tu reino.
13 Es tu reino un reino eterno,
tu poder dura por generaciones.
14 El Señor sostiene a cuantos flaquean,
levanta a los abatidos.
15 Todos te miran con esperanza
y tú les das la comida a su tiempo.
16 Abres generosamente tu mano
y sacias a todo ser viviente.
17 El Señor es justo en todos sus actos,
actúa con amor en todas sus obras.
18 El Señor está cerca de cuantos lo invocan,
de cuantos lo invocan sinceramente.
19 Él cumple el deseo de su fieles,
escucha su grito y los salva.
20 El Señor protege a cuantos lo aman,
pero a todos los malvados aniquila.
21 ¡Que mi boca alabe al Señor!
¡Que todos bendigan su santo nombre,
por siempre jamás!

La Palabra (España) (BLP)

La Palabra, (versión española) © 2010 Texto y Edición, Sociedad Bíblica de España