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Chronological

Read the Bible in the chronological order in which its stories and events occurred.
Duration: 365 days
Biblia del Jubileo (JBS)
Version
2 Samuel 22-23

22 ¶ Y habló David al SEÑOR las palabras de este cántico, el día que el SEÑOR le había librado de la mano de todos sus enemigos, y de la mano de Saúl.

¶ Y dijo: El SEÑOR es mi peña, y mi fortaleza, y mi libertador.

Dios es mi Fuerte, en él confiaré; mi escudo, y el cuerno de mi salud; mi defensa, y mi refugio; mi salvador, que me librarás de violencia.

Invocaré al SEÑOR, digno de ser loado. Y seré salvo de mis enemigos.

Cuando me cercaron ondas de muerte, y deluvio de Belial me asombró,

cuando las cuerdas del Seol me ciñieron, y los lazos de muerte me tomaron descuidado,

cuando tuve angustia, invoqué al SEÑOR, y clamé a mi Dios; y desde su templo él oyó mi voz; cuando mi clamor llegó a sus oídos.

La tierra se removió, y tembló; los fundamentos de los cielos fueron movidos, y se quebrantaron, porque él se airó.

Subió humo de sus narices, y de su boca fuego consumidor, por el cual se encendieron carbones.

10 Y bajó los cielos, y descendió; una oscuridad debajo de sus pies.

11 Subió sobre el querubín, y voló; se apareció sobre las alas del viento.

12 Puso tinieblas alrededor de sí a modo de tabernáculos; aguas negras y espesas nubes.

13 Del resplandor de su presencia se encendieron ascuas ardientes.

14 El SEÑOR tronó desde los cielos, y el Altísimo dio su voz;

15 arrojó saetas, y los desbarató; relampagueó, y los consumió.

16 Entonces aparecieron los manantiales del mar, y los fundamentos del mundo fueron descubiertos, a la reprensión del SEÑOR, al resoplido del aliento de su nariz.

17 Extendió su mano de lo alto, y me arrebató, y me sacó de las aguas impetuosas.

18 Me libró de fuertes enemigos, de aquellos que me aborrecían, los cuales eran más fuertes que yo.

19 Los cuales me tomaron descuidado en el día de mi calamidad; mas el SEÑOR fue mi bordón.

20 Me sacó a anchura; me libró, porque había puesto su voluntad en mí.

21 Me pagó el SEÑOR conforme a mi justicia; y conforme a la limpieza de mis manos, me dio la paga.

22 Porque yo guardé los caminos del SEÑOR; y no me aparté impíamente de mi Dios.

23 Porque delante de mí tengo todas sus ordenanzas; y atento a sus fueros, no me retiraré de ellos.

24 Y fui perfecto para con él, y me guardé de mi iniquidad.

25 Y me pagó el SEÑOR conforme a mi justicia, y conforme a mi limpieza delante de sus ojos.

26 Con el misericordioso eres misericordioso, y con el valeroso y perfecto eres recto;

27 con el limpio eres limpio, mas con el perverso eres adversario.

28 Y tú salvas a los pobres de espíritu; mas tus ojos están sobre los altivos, para abatirlos.

29 Porque tú eres mi lámpara, oh SEÑOR; el SEÑOR da luz a mis tinieblas.

30 Porque en ti rompí escuadrones, y con mi Dios pasé las murallas.

31 Dios, perfecto su camino; la palabra del SEÑOR purificada, escudo es de todos los que en él confían.

32 Porque ¿qué Dios hay sino el SEÑOR? ¿O quién es fuerte sino nuestro Dios?

33 Dios es el que con virtud me corrobora, y el que despeja mi camino;

34 el que hace mis pies como de ciervas, y el que me asienta en mis alturas;

35 el que enseña mis manos para la pelea, y da que con mis brazos quiebre el arco de bronce.

36  me diste asimismo el escudo de tu salud, y tu mansedumbre me ha multiplicado.

37  ensanchaste mis pasos debajo de mí, para que no titubearan mis rodillas.

38 Perseguí a mis enemigos, y los quebranté; y no me volví hasta que los acabé.

39 Los consumí, y los herí, y no se levantaron; y cayeron debajo de mis pies.

40 Me ceñiste de fortaleza para la batalla, y postraste debajo de mí los que contra mí se levantaron.

41  me diste la cerviz de mis enemigos, de mis aborrecedores, y que yo los talara.

42 Miraron, y no hubo quien los librara; aun al SEÑOR, mas no les respondió.

43 Yo los quebranté como a polvo de la tierra; como a lodo de las plazas los desmenucé, y los disipé.

44  me libraste de contiendas de pueblos; tú me guardaste para que fuera cabeza de gentiles; pueblos que no conocía, me sirvieron.

45 Los extraños temblaban ante mi mandamiento; apenas oían algo de mí me obedecían.

46 Los extraños desfallecían, y temblaban en sus encerramientos.

47 Viva el SEÑOR, y sea bendita mi peña; sea ensalzado el Dios, que es la roca de mi salvación.

48 El Dios que me ha dado venganzas, y sujeta los pueblos debajo de mí.

49 Que me saca de entre mis enemigos; tú me sacaste en alto de entre los que se levantaron contra mí; me libraste del varón de violencia.

50 Por tanto yo te confesaré entre los gentiles, oh SEÑOR, y cantaré a tu nombre.

51 El que engrandece la salud de su rey, y hace misericordia a su ungido David, y a su simiente, para siempre.

23 ¶ Estas son las postreras palabras de David. Dijo David hijo de Jessé, dijo aquel varón que fue levantado alto, el ungido del Dios de Jacob, el dulce cantor de Israel:

(El Espíritu del SEÑOR ha hablado por mí, y su palabra ha sido en mi lengua.

El Dios de Israel me ha dictado, el Fuerte de Israel habló): Señoreador de los hombres, justo señoreador en el temor de Dios.

Y como la luz de la mañana cuando sale el sol, de la mañana resplandeciente sin nubes; como resplandor por llovizna sobre la yerba de la tierra:

¿No será así mi casa para con Dios? bien que a toda mi salud, y a toda mi voluntad no se hará producir todavía. Mas él ha hecho conmigo pacto perpetuo ordenado en todas las cosas, y será guardado;

mas los de Belial serán todos ellos como espinas arrancadas, las cuales nadie toma con la mano;

sino que el que quiere tocar en ellas, se arma de hierro y de asta de lanza, y son quemadas del todo en su lugar.

¶ Estos son los nombres de los valientes que tuvo David: El que se sentaba en cátedra de sabiduría, principal de los tres: Adino el eznita, que en una ocasión se halló haber matado ochocientos enemigos.

Después de éste fue Eleazar, hijo de Dodo de Ahohi, uno de los tres valientes que estaban con David, cuando desafiaron a los filisteos que se habían juntado allí a la batalla, y subieron los de Israel.

10 Este, levantándose, hirió a los filisteos, hasta que su mano se cansó, y quedó pegada su mano a la espada. Aquel día el SEÑOR hizo gran salvación; y se volvió el pueblo en pos de él solamente a tomar el despojo.

11 Después de éste fue Sama, hijo de Age, el araita; que habiéndose juntado los filisteos en una aldea, había allí una heredad de tierra llena de lentejas, y el pueblo había huido delante de los filisteos.

12 El entonces se paró en medio de la heredad de tierra, y la defendió, e hirió a los filisteos; y el SEÑOR hizo una gran salvación.

13 Estos tres que eran de los treinta principales descendieron y vinieron en tiempo de la siega a David a la cueva de Adulam; y el campamento de los filisteos estaba puesto en el valle de Refaim.

14 David entonces estaba en la fortaleza, y la guarnición de los filisteos estaba en Belén.

15 Y David tuvo deseo, y dijo: ¡Quién me diera a beber del agua del pozo de Belén, que está a la puerta!

16 Entonces estos tres valientes rompieron por el campamento de los filisteos, y sacaron agua del pozo de Belén, que estaba a la puerta; y tomaron, y la trajeron a David; mas él no la quiso beber, sino la derramó al SEÑOR, diciendo:

17 Lejos sea de mí, oh SEÑOR, que yo haga esto. ¿He de beber yo la sangre de los varones que fueron con peligro de su vida? Y no quiso beberla. Estos tres valientes hicieron esto.

18 Y Abisai hermano de Joab, hijo de Sarvia, fue el principal de tres; el cual alzó su lanza contra trescientos, los cuales mató; y tuvo nombre entre los tres.

19 El era el más noble de los tres, y el capitán de ellos; mas no llegó a los tres primeros.

20 Después, Benaía hijo de Joiada, hijo de un varón esforzado, grande en hechos, de Cabseel. Este hirió dos leones de Moab: y él mismo descendió, e hirió un león en medio de un foso en el tiempo de la nieve.

21 También hirió él a un egipcio, hombre de grande estatura; y tenía el egipcio una lanza en su mano; mas descendió a él con un palo, y arrebató al egipcio la lanza de la mano, y lo mató con su propia lanza.

22 Esto hizo Benaía hijo de Joiada, y tuvo nombre entre los tres valientes.

23 De los treinta fue el más noble; pero no llegó a los tres primeros. Y lo puso David en su consejo.

24 Asael hermano de Joab fue de los treinta; Elhanán hijo de Dodo de Belén;

25 Sama de Harodi, Elica de Harodi;

26 Heles de Palti, Ira, hijo de Iques, de Tecoa;

27 Abiezer de Anatot, Mebunai de Husa;

28 Salmón de Hahoh, Maharai de Netofat;

29 Heleb hijo de Baana de Netofat, Itai hijo de Ribai de Gabaa de los hijos de Benjamín;

30 Benaía, el piratonita, Hidai del arroyo de Gaas;

31 Abi-albón de Arbat, Azmavet de Barhum;

32 Eliaba de Saalbón, Jonatán de los hijos de Jasén;

33 Sama de Arar, Ahíam hijo de Sarar de Arar.

34 Elifelet hijo de Ahasbai hijo de Maaca; Eliam hijo de Ahitofel de Gelón;

35 Hesrai del Carmelo, Paarai de Arbi;

36 Igal hijo de Natán de Soba, Bani de Gadi;

37 Selec de Amón, Naharai de Beerot, escudero de Joab hijo de Sarvia;

38 Ira de Itri, Gareb de Itri;

39 Urías, el heteo. Entre todos treinta y siete.

Salmos 57

Al Vencedor: sobre No destruyas: Mictam de David, cuando huyó de delante de Saúl a la cueva.

Ten misericordia de mí, oh Dios, ten misericordia de mí; porque en ti ha confiado mi alma, y en la sombra de tus alas me ampararé, hasta que pasen los quebrantos.

Clamaré al Dios Altísimo, al Dios que me galardona.

El enviará desde los cielos, y me salvará de la infamia del que me devora; (Selah) Dios enviará su misericordia y su verdad.

Mi vida está entre leones; estoy echado entre hijos de hombres que echan llamas; sus dientes son lanzas y saetas, y su lengua espada aguda.

Ensálzate sobre los cielos, oh Dios; sobre toda la tierra se ensalze tu gloria.

Red han armado a mis pasos; mi alma se ha abatido; hoyo han cavado delante de mí; cayeron en medio de él. (Selah.)

¶ Pronto está mi corazón, oh Dios, mi corazón está dispuesto; cantaré, y diré salmos.

Despierta, oh gloria mía; despierta, salterio y arpa; me levantaré de mañana.

Te alabaré en los pueblos, oh Señor; cantaré de ti en las naciones.

10 Porque grande es hasta los cielos tu misericordia, y hasta las nubes tu verdad.

11 Ensálzate sobre los cielos, oh Dios; sobre toda la tierra se ensalze tu gloria.

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