Jesús perdona a una pecadora

36 Uno de los fariseos le pedía que comiera con él; y entrando en la casa del fariseo, se sentó[a] a la mesa. 37 Y he aquí, había en la ciudad una mujer que era pecadora, y cuando se enteró de que Jesús estaba sentado[b] a la mesa en casa del fariseo, trajo un frasco de alabastro con perfume(A); 38 y poniéndose detrás de Él a sus pies, llorando, comenzó a regar sus pies con lágrimas y los secaba con los cabellos de su cabeza, besaba sus pies y los ungía con el perfume. 39 Pero al ver esto el fariseo que le había invitado, dijo para sí[c]: Si este fuera un profeta[d](B), sabría quién y qué clase de mujer es la que le está tocando, que es una pecadora. 40 Y respondiendo Jesús, le dijo: Simón, tengo algo que decirte: Y él dijo*: Di, Maestro. 41 Cierto prestamista tenía dos deudores; uno le debía quinientos denarios[e](C) y el otro cincuenta; 42 y no teniendo ellos con qué pagar(D), perdonó generosamente a los dos. ¿Cuál de ellos, entonces, le amará más? 43 Simón respondió, y dijo: Supongo que aquel a quien le perdonó más. Y Jesús le dijo: Has juzgado correctamente. 44 Y volviéndose hacia la mujer, le dijo a Simón: ¿Ves esta mujer? Yo entré a tu casa y no me diste agua para los pies(E), pero ella ha regado mis pies con sus lágrimas y los ha secado con sus cabellos. 45 No me diste beso(F), pero ella, desde que entré, no ha cesado[f] de besar mis pies. 46 No ungiste mi cabeza con aceite(G), pero ella ungió mis pies con perfume. 47 Por lo cual te digo que sus pecados, que son muchos, han sido perdonados, porque amó mucho; pero a quien poco se le perdona, poco ama. 48 Y a ella le dijo: Tus pecados han sido perdonados(H). 49 Los que estaban sentados[g] a la mesa con Él comenzaron a decir entre sí: ¿Quién es este que hasta perdona pecados(I)? 50 Pero Jesús dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado(J), vete en paz(K).

Mujeres que servían a Jesús

Y poco [h] después, Él comenzó a recorrer las ciudades y aldeas, proclamando y anunciando las buenas nuevas del reino de Dios(L); con Él iban los doce, y también algunas mujeres(M) que habían sido sanadas de espíritus malos y de enfermedades: María, llamada Magdalena(N), de la que habían salido siete demonios, y Juana, mujer de Chuza, mayordomo(O) de Herodes(P), y Susana, y muchas otras que de sus bienes personales contribuían al sostenimiento de ellos.

Parábola del sembrador

(Q)Habiéndose congregado una gran multitud, y los que de varias ciudades acudían a Él, les habló por parábola: El sembrador salió a sembrar su semilla; y al sembrarla, una parte cayó junto al camino, y fue pisoteada y las aves del cielo se la comieron. Otra parte cayó sobre la roca, y tan pronto como creció, se secó, porque no tenía humedad. Otra parte cayó en medio de los espinos; y los espinos, al crecer con ella, la ahogaron. Y otra parte cayó en tierra buena, y creció y produjo una cosecha a ciento por uno. Y al hablar estas cosas, Jesús exclamaba: El que tiene oídos para oír, que oiga(R).

Explicación de la parábola

(S)Sus discípulos le preguntaban qué quería decir esta parábola, 10 y Él dijo: A vosotros se os ha concedido conocer los misterios del reino de Dios(T), pero a los demás les hablo en parábolas, para que viendo, no vean; y oyendo, no entiendan(U). 11 La parábola es esta: la semilla es la palabra de Dios(V). 12 Y aquellos a lo largo del camino son los que han oído, pero después viene el diablo y arrebata la palabra de sus corazones, para que no crean y se salven. 13 Y aquellos sobre la roca son los que, cuando oyen, reciben la palabra con gozo; pero[i] estos no tienen raíz profunda; creen[j] por algún tiempo, y en el momento de la tentación sucumben. 14 Y la semilla que cayó entre los espinos, estos son los que han oído, y al continuar su camino son ahogados por las preocupaciones, las riquezas y los placeres de la vida, y su fruto no madura. 15 Pero la semilla en la tierra buena, estos son los que han oído la palabra con corazón recto y bueno, y la retienen, y dan fruto con su perseverancia.

16 Nadie enciende una lámpara y la cubre con una vasija, o la pone debajo de una cama, sino que la pone sobre un candelero para que los que entren vean la luz(W). 17 Pues no hay nada oculto que no haya de ser manifiesto, ni secreto que no haya de ser conocido y salga a la luz(X). 18 Por tanto, tened cuidado de cómo oís; porque al que tiene, más le será dado; y al que no tiene, aun lo que cree que tiene[k] se le quitará(Y).

La madre y los hermanos de Jesús

19 (Z)Entonces su madre y sus hermanos llegaron a donde Él estaba, pero no podían acercarse a Él debido al gentío. 20 Y le avisaron: Tu madre y tus hermanos están afuera y quieren verte. 21 Pero respondiendo Él, les dijo: Mi madre y mis hermanos son estos que oyen la palabra de Dios y la hacen(AA).

Jesús calma la tempestad

22 (AB)Y[l] uno de aquellos días, entró en una barca con sus discípulos, y les dijo: Pasemos al otro lado del lago(AC). Y se hicieron a la mar. 23 Pero mientras ellos navegaban, Él se durmió; y una violenta tempestad[m] descendió sobre el lago(AD), y comenzaron a anegarse y corrían peligro. 24 Y llegándose a Él, le despertaron, diciendo: ¡Maestro, Maestro(AE), que perecemos! Y Él, levantándose, reprendió(AF) al viento y a las olas embravecidas, y cesaron y sobrevino la calma. 25 Y Él les dijo: ¿Dónde está vuestra fe? Pero ellos estaban atemorizados y asombrados, diciéndose unos a otros: ¿Quién, pues, es este que aun a los vientos y al agua manda y le obedecen?

El endemoniado gadareno

26 (AG)Navegaron hacia la tierra de los gadarenos[n] que está al lado opuesto de Galilea; 27 y cuando Él bajó a tierra, le salió al encuentro un hombre de la ciudad poseído por demonios, y que por mucho tiempo no se había puesto ropa alguna, ni vivía en una casa, sino en los sepulcros. 28 Al ver a Jesús, gritó y cayó delante de Él, y dijo en alta voz: ¿Qué tengo yo que ver contigo[o], Jesús, Hijo del Dios(AH) Altísimo? Te ruego que no me atormentes(AI). 29 Porque Él mandaba al espíritu inmundo que saliera del hombre, pues muchas veces[p] se había apoderado de él, y[q] estaba atado con cadenas y grillos y bajo guardia; a pesar de todo rompía las ataduras y era impelido por el demonio a los desiertos. 30 Entonces Jesús le preguntó: ¿Cómo te llamas? Y él dijo: Legión(AJ); porque muchos demonios habían entrado en él. 31 Y le rogaban que no les ordenara irse al abismo(AK). 32 Y había una piara de muchos cerdos paciendo allí en el monte; y los demonios le rogaron que les permitiera entrar en los cerdos[r]. Y Él les dio permiso. 33 Los demonios salieron del hombre y entraron en los cerdos; y la piara se precipitó por el despeñadero al lago(AL), y se ahogaron. 34 Y cuando los que los cuidaban vieron lo que había sucedido, huyeron y lo contaron en la ciudad y por los campos. 35 Salió entonces la gente a ver qué había sucedido; y vinieron a Jesús, y encontraron al hombre de quien habían salido los demonios, sentado a los pies de Jesús(AM), vestido y en su cabal juicio, y se llenaron de temor. 36 Y los que lo habían visto, les contaron cómo el que estaba endemoniado(AN) había sido sanado[s]. 37 Entonces toda la gente[t] de la región alrededor de los gadarenos le pidió a Jesús que se alejara de ellos, porque estaban poseídos de un gran temor. Y Él entrando a una barca, regresó. 38 (AO)Pero el hombre de quien habían salido los demonios le rogaba que le permitiera acompañarle[u]; mas Él lo despidió, diciendo: 39 Vuelve a tu casa, y cuenta cuán grandes cosas[v] Dios ha hecho por ti. Y él se fue, proclamando por toda la ciudad cuán grandes cosas[w] Jesús había hecho por él.

Jairo ruega por su hija

40 Cuando Jesús volvió, la multitud le recibió con gozo(AP), porque todos le habían estado esperando. 41 (AQ)Y he aquí, llegó un hombre llamado Jairo, que era un oficial[x] de la sinagoga(AR); y cayendo a los pies de Jesús le rogaba que entrara a su casa; 42 porque tenía una hija única[y], como de doce años, que estaba al borde de la muerte. Pero mientras Él iba, la muchedumbre le apretaba.

Jesús sana a una mujer

43 Y una mujer que había tenido un flujo de sangre por doce años y que había gastado en médicos todo cuanto tenía[z] y no podía ser curada por nadie, 44 se acercó a Jesús por detrás y tocó el borde de su manto, y al instante cesó el flujo de su sangre. 45 Y Jesús dijo: ¿Quién es el que me ha tocado? Mientras todos lo negaban, Pedro dijo, y los que con él estaban[aa]: Maestro(AS), las multitudes te aprietan y te oprimen. 46 Pero Jesús dijo: Alguien me tocó, porque me di cuenta que de mí había salido poder(AT). 47 Al ver la mujer que ella no había pasado inadvertida, se acercó temblando, y cayendo delante de Él, declaró en presencia de todo el pueblo la razón por la cual le había tocado, y cómo al instante había sido sanada. 48 Y Él le dijo: Hija, tu fe te ha sanado[ab](AU); vete en paz(AV).

Jesús resucita a la hija de Jairo

49 Mientras estaba todavía hablando, vino* alguien de la casa del oficial de la sinagoga(AW), diciendo: Tu hija ha muerto; no molestes más al Maestro. 50 Pero cuando Jesús lo oyó, le respondió: No temas(AX); cree solamente, y ella será sanada[ac]. 51 Y cuando Él llegó a la casa, no permitió que nadie entrara con Él sino solo Pedro, Juan y Jacobo[ad], y el padre y la madre de la muchacha. 52 Todos la lloraban y se lamentaban(AY); pero Él dijo: No lloréis, porque no ha muerto, sino que duerme(AZ). 53 Y se burlaban de Él, sabiendo que ella había muerto. 54 Pero Él, tomándola de la mano, clamó, diciendo: ¡Niña, levántate! 55 Entonces le volvió su espíritu, y se levantó al instante, y Él mandó que le dieran de comer. 56 Y sus padres estaban asombrados; pero Él les encargó que no dijeran a nadie(BA) lo que había sucedido.

Misión de los doce

Reuniendo a los doce, les dio poder y autoridad sobre todos los demonios(BB) y para sanar enfermedades. Y los envió a proclamar el reino de Dios(BC) y a sanar a los enfermos. Y les dijo: (BD)No toméis nada para el camino, ni bordón, ni alforja[ae], ni pan, ni dinero; ni tengáis dos túnicas cada uno(BE). En cualquier casa donde entréis, quedaos allí, y sea de allí vuestra salida. Y en cuanto a los que no os reciban, al salir de esa ciudad, sacudid el polvo de vuestros pies en testimonio contra ellos(BF). Entonces salieron, e iban por las aldeas anunciando(BG) el evangelio y sanando por todas partes.

Herodes oye hablar de Jesús

(BH)Herodes el tetrarca(BI) se enteró de todo lo que estaba pasando, y estaba muy perplejo, porque algunos decían que Juan(BJ) había resucitado de entre los muertos, otros, que Elías había aparecido, y otros, que algún profeta(BK) de los antiguos había resucitado. Entonces Herodes dijo: A Juan yo lo hice decapitar; ¿quién es, entonces, este de quien oigo tales cosas? Y procuraba verle(BL).

Alimentación de los cinco mil

10 Y cuando los apóstoles regresaron, dieron cuenta a Jesús[af] de todo lo que habían hecho(BM). Y Él, (BN)tomándolos consigo, se retiró aparte a una ciudad llamada Betsaida(BO). 11 Pero cuando la gente[ag] se dio cuenta de esto, le siguió; y Jesús, recibiéndolos, les hablaba del reino de Dios, y sanaba a los que tenían necesidad de ser curados. 12 El día comenzaba a declinar, y acercándose los doce, le dijeron: Despide a la multitud, para que vayan a las aldeas y campos de los alrededores, y hallen alojamiento y consigan alimentos[ah]; porque aquí estamos en un lugar desierto. 13 Pero Él les dijo: Dadles vosotros de comer. Y ellos dijeron: No tenemos más que cinco panes y dos peces, a no ser que vayamos y compremos alimentos para toda esta gente. 14 (Porque había como cinco mil hombres.) Y Jesús dijo a sus discípulos: Haced que se recuesten en grupos(BP) como de cincuenta cada uno. 15 Así lo hicieron, haciendo recostar a todos. 16 Y tomando los cinco panes y los dos peces, levantando los ojos al cielo, los bendijo, y los partió, y los iba dando a los discípulos para que los sirvieran a[ai] la gente. 17 Todos comieron y se saciaron; y se recogieron de lo que les sobró de los pedazos: doce cestas llenas(BQ).

La confesión de Pedro

18 (BR)Y[aj] mientras Jesús[ak] oraba a solas(BS), estaban con Él los discípulos, y les preguntó, diciendo: ¿Quién dicen las multitudes que soy yo? 19 Entonces ellos respondieron, y dijeron: Unos, Juan el Bautista, otros, Elías, y otros, que algún profeta de los antiguos ha resucitado. 20 Y Él les dijo: Y vosotros ¿quién decís que soy yo? Y Pedro respondiendo, dijo: El Cristo[al] de Dios(BT). 21 Pero Él, advirtiéndoles severamente, les mandó que no dijeran esto a nadie(BU), 22 diciendo: (BV)El Hijo del Hombre debe padecer mucho, y ser rechazado por los ancianos(BW), los principales sacerdotes y los escribas, y ser muerto, y resucitar al tercer día. 23 Y decía a todos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día y sígame(BX). 24 Porque el que quiera salvar su vida[am], la perderá, pero el que pierda su vida[an] por causa de mí, ese la salvará(BY). 25 Pues, ¿de qué le sirve a un hombre haber ganado el mundo entero, si[ao] él mismo se destruye o se pierde(BZ)? 26 Porque el que se avergüence de mí y de mis palabras, de este se avergonzará el Hijo del Hombre cuando venga en su gloria, y la del Padre, y la de los santos ángeles(CA). 27 Pero en verdad os digo que hay algunos de los que están aquí, que no probarán la muerte hasta que vean(CB) el reino de Dios.

La transfiguración

28 (CC)Y[ap] como ocho días después de estas palabras, Jesús tomó consigo a Pedro, a Juan y a Jacobo[aq](CD), y subió al monte(CE) a orar(CF). 29 Mientras oraba(CG), la apariencia de su rostro se hizo otra(CH), y su ropa se hizo blanca y resplandeciente[ar]. 30 Y he aquí, dos hombres hablaban con Él, los cuales eran Moisés y Elías, 31 quienes apareciendo en gloria[as], hablaban de la partida de Jesús[at](CI), que Él estaba a punto de cumplir en Jerusalén. 32 Pedro y sus compañeros habían sido vencidos por el sueño(CJ), pero cuando estuvieron bien despiertos, vieron la gloria de Jesús[au] y a los dos varones que estaban con Él. 33 Y sucedió que al retirarse ellos de Él, Pedro dijo a Jesús: Maestro(CK), bueno es que estemos aquí; hagamos tres enramadas[av], una para ti, otra para Moisés y otra para Elías(CL); no sabiendo lo que decía(CM). 34 Entonces, mientras él decía esto, se formó una nube que los cubrió; y tuvieron temor al entrar en la nube. 35 Y una voz salió de la nube, que decía: Este es mi Hijo, mi Escogido[aw](CN); a Él oíd. 36 Después que la voz se oyó[ax], Jesús fue hallado solo. Ellos se lo callaron, y por aquellos días no contaron a nadie nada de lo que habían visto(CO).

Jesús sana a un muchacho endemoniado

37 (CP)Y aconteció que al día siguiente, cuando bajaron del monte, una gran multitud le salió al encuentro. 38 Y he aquí, un hombre de la multitud gritó, diciendo: Maestro, te suplico que veas a mi hijo, pues es el único que tengo[ay], 39 y sucede que un espíritu se apodera de él, y de repente da gritos, y el espíritu le hace caer con convulsiones, echando[az] espumarajos; y magullándole, a duras penas se aparta de él. 40 Entonces rogué a tus discípulos que lo echaran fuera, y no pudieron. 41 Respondiendo Jesús, dijo: ¡Oh generación incrédula y perversa! ¿Hasta cuándo he de estar con vosotros y os he de soportar? Trae acá a tu hijo. 42 Cuando este se acercaba, el demonio lo derribó y lo hizo caer con convulsiones. Pero Jesús reprendió al espíritu inmundo, y sanó al muchacho y se lo devolvió a su padre. 43 Y todos estaban admirados de la grandeza[ba] de Dios(CQ).

Jesús anuncia otra vez su muerte

(CR)Mientras todos se maravillaban de todas las cosas que hacía, Jesús dijo a sus discípulos: 44 Haced[bb] que estas palabras penetren en vuestros oídos, porque el Hijo del Hombre va a ser entregado en manos de los hombres(CS). 45 Pero ellos no entendían(CT) estas palabras[bc], y les estaban veladas para que no las comprendieran; y temían preguntarle acerca de ellas[bd].

El mayor en el reino de los cielos

46 (CU)Y se suscitó[be] una discusión entre ellos, sobre quién de ellos sería el mayor. 47 Entonces Jesús, sabiendo lo que pensaban(CV) en[bf] sus corazones, tomó a un niño y lo puso a su lado, 48 y les dijo: El que reciba a este niño en mi nombre, a mí me recibe; y el que me recibe a mí, recibe a aquel que me envió(CW); porque el que es más pequeño[bg] entre todos vosotros, ese es grande(CX).

49 (CY)Y respondiendo Juan, dijo: Maestro(CZ), vimos a uno echando fuera demonios en tu nombre, y tratamos de impedírselo porque no anda con nosotros. 50 Pero Jesús le dijo: No se lo impidáis; porque el que no está contra vosotros, está con vosotros(DA).

Jesús reprende a Jacobo y a Juan

51 Y sucedió que cuando se cumplían los días de su ascensión[bh](DB), Él, con determinación, afirmó su rostro para ir a Jerusalén(DC). 52 Y envió mensajeros delante de Él; y ellos fueron y entraron en una aldea de los samaritanos(DD) para hacerle preparativos. 53 Pero no le recibieron, porque sabían que había determinado ir a[bi] Jerusalén(DE). 54 Al ver esto, sus discípulos Jacobo[bj] y Juan(DF), dijeron: Señor, ¿quieres que mandemos que descienda fuego del cielo y los consuma[bk](DG)? 55 Pero Él, volviéndose, los reprendió, [bl]y dijo: Vosotros no sabéis de qué espíritu sois, 56 porque el Hijo del Hombre no ha venido para destruir las almas de los hombres, sino para salvarlas. Y se fueron a otra aldea.

Lo que demanda el discipulado

57 Y mientras ellos iban por el camino(DH), (DI)uno le dijo: Te seguiré adondequiera que vayas. 58 Y Jesús le dijo: Las zorras tienen madrigueras y las aves del cielo nidos, pero el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza(DJ). 59 A otro dijo: Sígueme(DK). Pero él dijo: Señor[bm], permíteme que vaya primero a enterrar a mi padre. 60 Mas Él le dijo: Deja que los muertos entierren a sus muertos; pero tú, ve y anuncia por todas partes el reino de Dios(DL). 61 También otro dijo: Te seguiré, Señor; pero primero permíteme despedirme de los de mi casa(DM). 62 Pero Jesús le dijo: Nadie, que después de poner la mano en el arado mira atrás(DN), es apto para el reino de Dios.

Jesús envía a los setenta

10 Después de esto, el Señor(DO) designó a otros setenta[bn], y los envió de dos en dos(DP) delante de Él(DQ), a toda ciudad y lugar adonde Él había de ir. Y les decía: La mies es mucha, pero los obreros pocos; rogad, por tanto, al Señor de la mies que envíe obreros a su mies(DR). Id; mirad que os envío como corderos en medio de lobos(DS). (DT)No llevéis bolsa, ni alforja[bo], ni sandalias; y a nadie saludéis por el camino. En cualquier casa que entréis, decid primero: «Paz a esta casa». Y si hay allí un hijo de paz, vuestra paz reposará sobre él; pero si no, se volverá a vosotros. Permaneced entonces en esa casa[bp], comiendo y bebiendo lo que os den[bq]; porque el obrero es digno de su salario(DU). No os paséis de casa en casa. En cualquier ciudad donde entréis y os reciban, comed lo que os sirvan(DV); sanad a los enfermos que haya en ella, y decidles: «Se ha acercado a vosotros el reino de Dios(DW)». 10 Pero en cualquier ciudad donde entréis, y no os reciban, salid a sus calles, y decid: 11 «Hasta el polvo de vuestra ciudad que se pega a nuestros pies, nos lo sacudimos en protesta contra vosotros(DX); empero sabed esto: que el reino de Dios se ha acercado(DY)». 12 Os digo que en aquel día será más tolerable el castigo para Sodoma que para aquella ciudad(DZ). 13 ¡(EA)Ay de ti Corazín! ¡Ay de ti Betsaida! Porque si los milagros[br] que se hicieron en vosotras hubieran sido hechos en Tiro y Sidón, hace tiempo que se hubieran arrepentido sentados en cilicio y ceniza(EB). 14 Por eso, en el juicio será más tolerable el castigo para Tiro y Sidón(EC) que para vosotras. 15 Y tú, Capernaúm(ED), ¿acaso serás elevada hasta los cielos? ¡Hasta el Hades[bs] serás hundida(EE)! 16 El que a vosotros escucha, a mí me escucha(EF), y el que a vosotros rechaza, a mí me rechaza; y el que a mí me rechaza, rechaza al que me envió(EG).

Regreso de los setenta

17 Los setenta[bt] regresaron con gozo, diciendo: Señor, hasta los demonios se nos sujetan en tu nombre(EH). 18 Y Él les dijo: Yo veía a Satanás(EI) caer del cielo como un rayo. 19 Mirad, os he dado autoridad para hollar sobre serpientes(EJ) y escorpiones, y sobre todo el poder del enemigo, y nada os hará daño. 20 Sin embargo, no os regocijéis en esto, de que los espíritus se os sometan, sino regocijaos de que vuestros nombres están escritos en los cielos(EK).

Jesús se regocija

21 (EL)En aquella misma hora Él se regocijó mucho en el Espíritu Santo, y dijo: Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque ocultaste estas cosas a sabios y a inteligentes, y las revelaste a niños. Sí, Padre, porque así fue de tu agrado. 22 Todas las cosas me han sido entregadas(EM) por mi Padre, y nadie sabe quién es el Hijo sino el Padre, ni quién es el Padre sino el Hijo(EN), y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar. 23 (EO)Y volviéndose hacia los discípulos, les dijo aparte: Dichosos los ojos que ven lo que vosotros veis; 24 porque os digo que muchos profetas y reyes desearon ver lo que vosotros veis, y no lo vieron, y oír lo que vosotros oís, y no lo oyeron.

Pregunta sobre la vida eterna

25 (EP)Y he aquí, cierto intérprete de la ley[bu] se levantó, y para ponerle[bv] a prueba(EQ) dijo: Maestro, ¿qué haré para heredar la vida eterna? 26 Y Él le dijo: ¿Qué está escrito en la ley? ¿Qué[bw] lees en ella? 27 Respondiendo él, dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu fuerza, y con toda tu mente; y a tu prójimo como a ti mismo(ER). 28 Entonces Jesús le dijo: Has respondido correctamente; haz esto y vivirás(ES). 29 Pero queriendo él justificarse a sí mismo(ET), dijo a Jesús: ¿Y quién es mi prójimo?

Parábola del buen samaritano

30 Respondiendo Jesús, dijo: Cierto hombre bajaba de Jerusalén(EU) a Jericó, y cayó en manos de salteadores, los cuales después de despojarlo y de darle golpes, se fueron, dejándolo medio muerto. 31 Por casualidad cierto sacerdote bajaba por aquel camino, y cuando lo vio, pasó por el otro lado del camino. 32 Del mismo modo, también un levita, cuando llegó al lugar y lo vio, pasó por el otro lado del camino. 33 Pero cierto samaritano(EV), que iba de viaje, llegó adonde él estaba; y cuando lo vio, tuvo compasión, 34 y acercándose, le vendó sus heridas, derramando aceite y vino sobre ellas; y poniéndolo sobre su propia cabalgadura, lo llevó a un mesón y lo cuidó. 35 Al día siguiente, sacando dos denarios[bx], se los dio al mesonero, y dijo: «Cuídalo, y todo lo demás que gastes, cuando yo regrese te lo pagaré». 36 ¿Cuál de estos tres piensas tú que demostró ser prójimo del que cayó en manos de los salteadores? 37 Y él dijo: El que tuvo misericordia de él. Y Jesús le dijo: Ve y haz tú lo mismo.

Jesús visita a Marta y a María

38 Mientras iban ellos de camino, Él entró en cierta aldea; y una mujer llamada Marta(EW) le recibió en su casa. 39 Y ella tenía una hermana que se llamaba María(EX), que[by] sentada a los pies del Señor, escuchaba su palabra(EY). 40 Pero Marta(EZ) se preocupaba con todos los preparativos[bz]; y acercándose a Él, le dijo: Señor, ¿no te importa que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude. 41 Respondiendo el Señor, le dijo: Marta, Marta(FA), tú estás preocupada y molesta por tantas cosas(FB); 42 pero una sola cosa es necesaria[ca](FC), y[cb] María(FD) ha escogido la parte buena, la cual no le será quitada.

Jesús enseña sobre la oración

11 Y aconteció que estando Jesús[cc] orando en cierto lugar, cuando terminó, le dijo uno de sus discípulos: Señor, enséñanos a orar, así como Juan enseñó también a sus discípulos. (FE)Y Él les dijo: Cuando oréis, decid:

«[cd]Padre, santificado sea tu nombre.
Venga tu reino.
Danos hoy[ce] el pan nuestro de cada día[cf](FF).
Y perdónanos nuestros pecados,
porque también nosotros perdonamos a todos los que nos deben(FG).
Y no nos metas en tentación».

También les dijo: Supongamos que uno de vosotros[cg] tiene un amigo, y va a él a medianoche y le dice: «Amigo, préstame tres panes, porque un amigo mío ha llegado de viaje a mi casa, y no tengo nada que ofrecerle[ch]»; y aquel, respondiendo desde adentro, le dice: «No me molestes; la puerta ya está cerrada, y mis hijos y yo estamos acostados[ci]; no puedo levantarme para darte nada». Os digo que aunque no se levante a darle algo por ser su amigo, no obstante, por su importunidad[cj](FH) se levantará y le dará cuanto necesite. Y yo os digo: (FI)Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. 10 Porque todo el que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá. 11 O suponed que a uno de vosotros que es padre, su hijo le pide[ck] pan; ¿acaso le dará una piedra? O si le pide un[cl] pescado; ¿acaso le dará una serpiente en lugar del pescado? 12 O si le[cm] pide un huevo; ¿acaso le dará un escorpión? 13 Pues si vosotros siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial[cn] dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan(FJ)?

Jesús y Beelzebú

14 (FK)Estaba Jesús echando fuera un demonio, que era mudo, y sucedió que cuando el demonio salió, el mudo habló; y las multitudes se maravillaron. 15 Pero algunos de ellos dijeron: Él echa fuera los demonios por Beelzebú(FL), príncipe de los demonios(FM). 16 Y otros, para ponerle[co] a prueba, demandaban de Él una señal[cp](FN) del cielo. 17 (FO)Pero conociendo Él sus pensamientos, les dijo: Todo reino dividido contra sí mismo es asolado; y una casa dividida contra sí misma[cq], se derrumba. 18 Y si también Satanás(FP) está dividido contra sí mismo, ¿cómo permanecerá en pie su reino? Porque vosotros decís que yo echo fuera demonios por Beelzebú(FQ). 19 Y si yo echo fuera demonios por Beelzebú(FR), ¿por quién los echan fuera vuestros hijos? Por consiguiente, ellos serán vuestros jueces. 20 Pero si yo por el dedo de Dios(FS) echo fuera los demonios, entonces el reino de Dios ha llegado(FT) a vosotros. 21 Cuando un[cr] hombre fuerte, bien armado, custodia su palacio, sus bienes están seguros[cs]. 22 Pero cuando uno más fuerte que él lo ataca y lo vence, le quita todas sus armas en las cuales había confiado y distribuye su botín. 23 El que no está conmigo, contra mí está; y el que conmigo no recoge, desparrama(FU). 24 (FV)Cuando el espíritu inmundo sale del hombre, pasa por lugares áridos buscando descanso; y al no hallarlo, dice: «Volveré a mi casa de donde salí». 25 Y cuando llega, la encuentra barrida y arreglada. 26 Entonces va y toma consigo otros siete espíritus peores que él, y entrando, moran allí; y el estado final de aquel hombre resulta peor que el primero.

La verdadera dicha

27 Y sucedió que mientras decía estas cosas, una de las mujeres en la multitud alzó su voz y le dijo: ¡Dichosa la matriz[ct] que te concibió[cu] y los senos que te criaron(FW)! 28 Pero Él dijo: Al contrario, dichosos los que oyen la palabra de Dios y la guardan(FX).

La gente demanda señal

29 Como la multitud se aglomeraba, comenzó a decir: (FY)Esta generación es una generación perversa; busca señal[cv](FZ), y ninguna señal[cw] se le dará, sino la señal[cx] de Jonás. 30 Porque de la misma manera que Jonás vino a ser una señal[cy](GA) para los ninivitas, así también lo será el Hijo del Hombre para esta generación. 31 La Reina del Sur se levantará en el juicio con los hombres de esta generación y los condenará, porque ella vino desde los confines de la tierra para oír la sabiduría de Salomón(GB); y mirad, algo más grande que Salomón está aquí. 32 Los hombres de Nínive se levantarán en el juicio con esta generación y la condenarán, porque ellos se arrepintieron con la predicación de Jonás(GC); y mirad, algo más grande que Jonás está aquí.

La lámpara del cuerpo

33 Nadie, cuando enciende una lámpara, la pone en un sótano ni debajo de un almud, sino sobre el candelero, para que los que entren vean la luz(GD). 34 (GE)La lámpara de tu cuerpo es tu ojo; cuando tu ojo está sano[cz], también todo tu cuerpo está lleno de luz; pero cuando está malo, también tu cuerpo está lleno de oscuridad. 35 Mira, pues, que la luz que en ti hay no sea oscuridad. 36 Así que, si todo tu cuerpo está lleno de luz, sin tener parte alguna en tinieblas, estará totalmente iluminado como cuando la lámpara te alumbra con sus rayos.

Jesús denuncia a los fariseos y a los intérpretes de la ley

37 Cuando terminó de hablar, un fariseo le rogó* que comiera con él; y Jesús entró y se sentó[da] a la mesa. 38 Cuando el fariseo vio esto, se sorprendió de que Jesús no se hubiera lavado[db] primero antes de comer, según el ritual judío(GF). 39 Pero el Señor(GG) le dijo: Ahora bien, vosotros los fariseos limpiáis lo de afuera del vaso y del plato; pero por dentro estáis llenos[dc] de robo y de maldad(GH). 40 Necios(GI), el que hizo lo de afuera, ¿no hizo también lo de adentro? 41 Dad más bien lo que está dentro[dd] como obra de caridad(GJ), y entonces[de] todo os será limpio(GK).

42 Mas ¡ay de vosotros, fariseos!, porque pagáis el diezmo de(GL) la menta y la ruda y toda clase de hortaliza, y sin embargo pasáis por alto la justicia y el amor de Dios; pero esto es lo que debíais haber practicado sin descuidar lo otro(GM). 43 ¡Ay de vosotros, fariseos!, porque amáis los primeros asientos en las sinagogas y los saludos respetuosos en las plazas(GN). 44 ¡Ay de vosotros!, porque sois como sepulcros(GO) que no se ven, sobre los que andan los hombres sin saberlo.

45 Respondiendo uno de los intérpretes de la ley[df](GP), le dijo*: Maestro, cuando dices esto, también a nosotros nos insultas. 46 Y Él dijo: ¡Ay también de vosotros, intérpretes de la ley[dg](GQ)!, porque cargáis a los hombres con cargas difíciles de llevar, y vosotros ni siquiera tocáis las cargas con uno de vuestros dedos(GR). 47 ¡Ay de vosotros!, porque edificáis los sepulcros de[dh] los profetas(GS), y fueron vuestros padres quienes los mataron. 48 De modo que sois testigos, y aprobáis las acciones de vuestros padres; porque ellos los mataron y vosotros edificáis sus sepulcros. 49 (GT)Por eso la sabiduría de Dios también dijo: «Les enviaré profetas y apóstoles(GU), y de ellos, matarán a algunos y perseguirán[di] a otros, 50 para que la sangre de todos los profetas, derramada desde la fundación del mundo(GV), se le cargue[dj] a esta generación, 51 desde la sangre de Abel(GW) hasta la sangre de Zacarías(GX), que pereció entre el altar y la casa de Dios; sí, os digo que le será cargada[dk] a esta generación». 52 ¡Ay de vosotros, intérpretes de la ley[dl](GY)!, porque habéis quitado la llave del conocimiento; vosotros mismos no entrasteis, y a los que estaban entrando se lo impedisteis(GZ).

53 Cuando salió de allí, los escribas y los fariseos comenzaron a acosarle en gran manera, y a interrogarle minuciosamente sobre muchas cosas, 54 tramando contra Él(HA) para atraparle en algo que dijera[dm](HB).

Advertencia contra la hipocresía

12 En estas circunstancias, cuando una multitud de miles y miles[dn] se había reunido, tanto que se atropellaban[do] unos a otros, Jesús comenzó a decir primeramente a sus discípulos: Guardaos de la levadura de los fariseos(HC), que es la hipocresía. (HD)Y nada hay encubierto que no haya de ser revelado, ni oculto que no haya de saberse. Por lo cual, todo lo que habéis dicho en la oscuridad se oirá a la luz, y lo que habéis susurrado[dp] en las habitaciones interiores, será proclamado desde las azoteas(HE). Y yo os digo, amigos míos(HF): no temáis a los que matan el cuerpo, y después de esto no tienen nada más que puedan hacer. Pero yo os mostraré a quién debéis temer: temed(HG) al que, después de matar, tiene poder para arrojar al infierno[dq](HH); sí, os digo: a este, ¡temed! ¿No se venden cinco pajarillos[dr] por dos cuartos[ds](HI)? Y sin embargo, ni uno de ellos está olvidado ante Dios. Es más, aun los cabellos de vuestra cabeza están todos contados(HJ). No temáis; vosotros valéis más que muchos pajarillos. Y os digo, que a todo el que me[dt] confiese delante de los hombres, el Hijo del Hombre le[du] confesará también ante los ángeles de Dios(HK); pero el que me niegue delante[dv] de los hombres, será negado(HL) delante[dw] de los ángeles de Dios(HM). 10 Y a todo el que diga una palabra contra el Hijo del Hombre, se le perdonará; pero al que blasfeme contra el Espíritu Santo, no se le perdonará(HN). 11 Y cuando os lleven a las sinagogas(HO) y ante los gobernantes y las autoridades, no os preocupéis(HP) de cómo o de qué hablaréis en defensa propia, o qué vais a decir; 12 porque el Espíritu Santo en esa misma hora os enseñará lo que debéis decir(HQ).

Advertencia contra la avaricia

13 Uno de la multitud le dijo: Maestro, dile a mi hermano que divida la herencia conmigo. 14 Pero Él le dijo: ¡Hombre(HR)! ¿Quién me ha puesto por juez o árbitro sobre vosotros? 15 Y les dijo: Estad atentos y guardaos de toda forma de avaricia; porque aun cuando alguien tenga abundancia, su vida no consiste en sus bienes(HS). 16 También les refirió una parábola, diciendo: La tierra de cierto hombre rico había producido mucho. 17 Y pensaba dentro de sí, diciendo: «¿Qué haré, ya que no tengo dónde almacenar mis cosechas?». 18 Entonces dijo: «Esto haré: derribaré mis graneros y edificaré otros más grandes, y allí almacenaré todo mi grano y mis bienes. 19 Y diré a mi alma: Alma, tienes muchos bienes depositados para muchos años; descansa, come, bebe, diviértete(HT)». 20 Pero Dios le dijo: «¡Necio(HU)! Esta misma noche te reclaman el alma(HV); y ahora, ¿para quién será lo que has provisto(HW)?». 21 Así es el que acumula tesoro para sí, y no es rico para con Dios(HX).

Advertencia contra la ansiedad

22 Y dijo a sus discípulos: (HY)Por eso os digo: No os preocupéis por vuestra vida[dx], qué comeréis; ni por vuestro cuerpo, qué vestiréis. 23 Porque la vida es más que el alimento, y el cuerpo más que la ropa. 24 Considerad los cuervos, que ni siembran ni siegan; no tienen bodega ni granero(HZ), y sin embargo, Dios los alimenta(IA); ¡cuánto más valéis vosotros que las aves! 25 ¿Y quién de vosotros, por ansioso que esté, puede añadir una hora[dy] al curso de su vida[dz](IB)? 26 Si vosotros, pues, no podéis hacer algo tan pequeño, ¿por qué os preocupáis por lo demás? 27 Considerad los lirios, cómo crecen[ea]; no trabajan ni hilan; pero os digo que ni Salomón en toda su gloria(IC) se vistió como uno de estos. 28 Y si Dios viste así la hierba del campo, que hoy es y mañana es echada al horno, ¡cuánto más hará por vosotros, hombres de poca fe(ID)! 29 Vosotros, pues, no busquéis qué habéis de comer, ni qué habéis de beber, y no estéis preocupados(IE). 30 Porque los pueblos del mundo buscan ansiosamente todas estas cosas; pero vuestro Padre sabe que necesitáis estas cosas. 31 Mas buscad su reino, y estas cosas os serán añadidas(IF). 32 No temas(IG), rebaño pequeño(IH), porque vuestro Padre ha decidido[eb](II) daros el reino. 33 Vended vuestras posesiones y dad limosnas; haceos bolsas que no se deterioran, un tesoro en los cielos(IJ) que no se agota, donde no se acerca ningún ladrón ni la polilla destruye(IK). 34 Porque donde esté vuestro tesoro, allí también estará vuestro corazón(IL).

Parábola de los siervos vigilantes

35 Estad siempre preparados[ec](IM) y mantened las lámparas encendidas(IN), 36 y sed semejantes a hombres que esperan a su señor que regresa de las bodas, para abrirle tan pronto como llegue y llame. 37 Dichosos aquellos siervos a quienes el señor, al venir, halle velando(IO); en verdad os digo que se ceñirá para servir(IP), y los sentará[ed] a la mesa, y acercándose, les servirá. 38 Y ya sea que venga en la segunda vigilia[ee], o aun en la tercera[ef](IQ), y los halla así, dichosos son aquellos siervos. 39 (IR)Podéis estar seguros de[eg] que si el dueño de la casa hubiera sabido a qué hora iba a venir el ladrón, no hubiera permitido que entrara en[eh] su casa(IS). 40 Vosotros también estad preparados, porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no esperéis[ei](IT).

Parábola del siervo fiel y del infiel

41 Entonces Pedro dijo: Señor, ¿nos dices esta parábola a nosotros, o también a todos los demás(IU)? 42 Y el Señor(IV) dijo: ¿(IW)Quién es, pues, el mayordomo fiel y prudente a quien su señor pondrá sobre sus siervos[ej](IX) para que a su tiempo les dé sus raciones? 43 Dichoso aquel siervo(IY) a quien, cuando su señor venga, lo encuentre haciendo así. 44 De verdad os digo que lo pondrá sobre todos sus bienes. 45 Pero si aquel siervo dice en su corazón: «Mi señor tardará[ek] en venir»; y empieza a golpear a los criados y a las criadas, y a comer, a beber y a embriagarse; 46 el señor de aquel siervo llegará un día, cuando él no lo espera y a una hora que no sabe, y lo azotará severamente[el], y le asignará un lugar[em] con los incrédulos. 47 Y aquel siervo que sabía la voluntad de su señor, y que no se preparó ni obró conforme a su voluntad, recibirá muchos azotes(IZ); 48 pero el que no la sabía(JA), e hizo cosas que merecían castigo[en], será azotado poco. A todo el que se le haya dado mucho, mucho se demandará de él; y al que mucho le han confiado, más le exigirán(JB).

Jesús, causa de división

49 Yo he venido[eo] para echar fuego sobre la tierra; y ¡cómo quisiera que ya estuviera[ep] encendido! 50 Pero de un bautismo(JC) tengo que ser bautizado, y ¡cómo me angustio hasta que se cumpla! 51 ¿(JD)Pensáis que vine a dar paz en la tierra? No, os digo, sino más bien división. 52 Porque desde ahora en adelante, cinco en una casa estarán divididos; tres contra dos y dos contra tres. 53 Estarán divididos el padre contra el hijo y el hijo contra el padre; la madre contra la hija y la hija contra la madre; la suegra contra su nuera y la nuera contra su suegra(JE).

Cómo discernir el tiempo

54 Decía también a las multitudes: Cuando veis una nube que se levanta en el poniente, al instante decís: «Viene un aguacero», y así sucede(JF). 55 Y cuando sopla el viento del sur, decís: «Va a hacer calor(JG)», y así pasa. 56 ¡Hipócritas! Sabéis examinar el aspecto de la tierra y del cielo; entonces, ¿por qué[eq] no examináis este tiempo presente(JH)? 57 ¿Y por qué no juzgáis por vosotros mismos(JI) lo que es justo? 58 (JJ)Porque mientras vas con tu adversario para comparecer ante el magistrado, procura en el camino arreglarte con él[er], no sea que te arrastre ante el juez, y el juez te entregue al alguacil, y el alguacil te eche en la cárcel. 59 Te digo que no saldrás de allí hasta que hayas pagado aun el último centavo[es](JK).

Arrepentíos o pereceréis

13 En esa misma ocasión había allí algunos que le contaron acerca de los galileos cuya sangre Pilato(JL) había mezclado[et] con la de sus sacrificios. Respondiendo Jesús, les dijo: ¿Pensáis que estos galileos eran más pecadores(JM) que todos los demás galileos, porque sufrieron esto? Os digo que no; al contrario, si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. ¿O pensáis que aquellos dieciocho, sobre los que cayó la torre en Siloé(JN) y los mató, eran más deudores[eu](JO) que todos los hombres que habitan en Jerusalén? Os digo que no; al contrario, si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente.

Parábola de la higuera estéril

Y les dijo esta parábola: Cierto hombre tenía una higuera plantada en su viña; y fue a buscar fruto de ella, y no lo halló(JP). Y dijo al viñador: «Mira, hace tres años que vengo a buscar fruto en esta higuera, y no lo hallo. Córtala(JQ). ¿Por qué ha de cansar la tierra?». El entonces, respondiendo, le dijo: «Señor, déjala por este año todavía, hasta que yo cave alrededor de ella, y le eche abono, y si da fruto el año que viene, bien; y si no, córtala».

Jesús hace un milagro en día de reposo

10 Jesús estaba enseñando en una de las sinagogas un día de reposo(JR), 11 y[ev] había allí una mujer que durante dieciocho años había tenido una enfermedad causada por un espíritu(JS); estaba encorvada, y de ninguna manera se podía enderezar. 12 Cuando Jesús la vio, la llamó y le dijo: Mujer, has quedado libre de tu enfermedad. 13 Y puso las manos sobre ella(JT), y al instante se enderezó y glorificaba a Dios(JU). 14 Pero el oficial de la sinagoga(JV), indignado porque Jesús había sanado en día de reposo(JW), reaccionó diciendo[ew] a la multitud: Hay seis días en los cuales se debe trabajar(JX); venid, pues, en esos días y sed sanados, y no en día de reposo. 15 Entonces el Señor(JY) le respondió, y dijo: Hipócritas, ¿no desata cada uno de vosotros su buey o su asno del pesebre en día de reposo(JZ) y lo lleva a beber? 16 Y esta, que es hija de Abraham(KA), a la que Satanás ha tenido atada durante dieciocho largos años(KB), ¿no debía ser libertada de esta ligadura en día de reposo? 17 Y al decir Él esto, todos sus adversarios se avergonzaban, pero toda la multitud se regocijaba(KC) por todas las cosas gloriosas hechas por Él.

Parábola del grano de mostaza

18 Entonces (KD)decía: ¿A qué es semejante el reino de Dios y con qué lo compararé(KE)? 19 Es semejante a un grano de mostaza que un hombre tomó y echó en su huerto; y creció y se hizo árbol, y las aves del cielo anidaron en sus ramas.

Parábola de la levadura

20 Y volvió a decir: ¿A qué compararé el reino de Dios(KF)? 21 (KG)Es semejante a la levadura que una mujer tomó y escondió en tres medidas[ex] de harina hasta que todo quedó fermentado.

La puerta estrecha

22 Pasaba Jesús por ciudades y aldeas, enseñando, mientras proseguía camino a Jerusalén(KH). 23 Y alguien le dijo: Señor, ¿son pocos los que se salvan? Y Él les dijo: 24 Esforzaos por entrar por la puerta estrecha(KI), porque os digo que muchos tratarán de entrar y no podrán. 25 Después que el dueño de la casa se levante y cierre la puerta(KJ), y vosotros, estando fuera, comencéis a llamar a la puerta, diciendo: «Señor, ábrenos(KK)», Él[ey] respondiendo, os dirá: «No sé de dónde sois(KL)». 26 Entonces comenzaréis a decir(KM): «Comimos y bebimos en tu presencia, y enseñaste en nuestras calles»; 27 y Él dirá: «Os digo que no sé de dónde sois(KN); apartaos de mí, todos los que hacéis iniquidad(KO)». 28 Allí será el llanto y el crujir de dientes(KP) cuando veáis a Abraham, a Isaac, a Jacob y a todos los profetas en el reino de Dios, pero vosotros echados fuera. 29 Y vendrán del oriente y del occidente, del norte y del sur, y se sentarán[ez] a la mesa en el reino de Dios(KQ). 30 Y he aquí, hay últimos que serán primeros, y hay primeros que serán últimos(KR).

Lamento sobre Jerusalén

31 En ese momento llegaron unos fariseos diciéndole: Sal y vete de aquí, porque Herodes(KS) te quiere matar. 32 Y Él les dijo: Id y decidle a ese zorro: «Yo[fa] expulso demonios, y hago curaciones hoy y mañana, y al tercer día cumplo mi propósito[fb](KT)». 33 Sin embargo, debo seguir mi camino, hoy, mañana y pasado mañana(KU); porque no puede ser que un profeta(KV) muera fuera de Jerusalén. 34 ¡(KW)Jerusalén, Jerusalén, la que mata a los profetas y apedrea a los que le son enviados! ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina a sus pollitos debajo de sus alas(KX), y no quisiste! 35 He aquí, vuestra casa se os deja desierta[fc]; y os digo que no me veréis más, hasta que llegue el tiempo en que digáis: «Bendito el que viene en nombre del Señor(KY)».

Jesús sana otra vez en día de reposo

14 Y aconteció que cuando Jesús[fd] entró en casa de uno de los principales de los fariseos[fe] un día de reposo para comer pan, ellos le estaban observando cuidadosamente(KZ). Y allí[ff], frente a Él, estaba un hombre hidrópico. Y dirigiéndose[fg] Jesús, a los intérpretes de la ley[fh](LA) y a los fariseos, les habló diciendo: ¿Es lícito sanar en el día de reposo, o no(LB)? Pero ellos guardaron silencio. Y Él, tomándolo de la mano, lo sanó y lo despidió. Y a ellos les dijo: ¿A quién de vosotros se le cae un hijo[fi] o un buey en un hoyo en día de reposo, y no lo saca inmediatamente(LC)? Y no pudieron responderle a esto(LD).

Lección sobre la humildad

Y comenzó a referir una parábola a los invitados, cuando advirtió cómo escogían los lugares de honor a la mesa(LE), diciéndoles: Cuando seas invitado por alguno a un banquete de bodas, no tomes[fj] el lugar de honor(LF), no sea que él haya invitado a otro más distinguido que tú, y viniendo el que te invitó a ti y a él, te diga: «Dale el lugar a este»; y entonces, avergonzado(LG), tengas que irte al[fk] último lugar. 10 Sino que cuando seas invitado, ve y siéntate[fl] en el último lugar, para que cuando llegue el que te invitó, te diga: «Amigo, ven más adelante[fm](LH)»; entonces serás honrado delante de todos los que se sientan[fn] a la mesa contigo. 11 Porque todo el que se ensalce, será humillado; y el que se humille será ensalzado(LI).

12 Y dijo también al que le había convidado: Cuando ofrezcas una comida o una cena, no llames a tus amigos, ni a tus hermanos, ni a tus parientes, ni a tus vecinos ricos, no sea que ellos a su vez también te conviden y tengas ya tu[fo] recompensa. 13 Antes bien, cuando ofrezcas un banquete, llama a pobres, mancos[fp], cojos, ciegos, 14 y serás bienaventurado[fq], ya que ellos no tienen para recompensarte; pues tú serás recompensado en la resurrección de los justos(LJ).

Parábola de la gran cena

15 Cuando uno de los que estaban sentados[fr] con Él a la mesa oyó esto, le dijo: ¡Bienaventurado[fs] todo el que coma pan en el reino de Dios(LK)! 16 (LL)Pero Él le dijo: Cierto hombre dio una gran cena, e invitó a muchos; 17 y a la hora de la cena envió a su siervo a decir a los que habían sido invitados: «Venid, porque ya todo está preparado». 18 Y todos a una comenzaron a excusarse. El primero le dijo: «He comprado un terreno[ft] y necesito ir a verlo; te ruego que me excuses». 19 Y otro dijo: «He comprado cinco yuntas de bueyes y voy a probarlos; te ruego que me excuses». 20 También otro dijo: «Me he casado, y por eso no puedo ir(LM)». 21 Cuando el siervo regresó, informó de todo esto a su señor. Entonces, enojado el dueño de la casa, dijo a su siervo: «Sal enseguida por las calles y callejones de la ciudad, y trae acá a los pobres, los mancos[fu], los ciegos y los cojos». 22 Y el siervo dijo: «Señor, se ha hecho lo que ordenaste, y todavía hay lugar». 23 Entonces el señor dijo al siervo: «Sal a los caminos y por los cercados, y oblígalos a entrar para que se llene mi casa. 24 Porque os digo que ninguno de aquellos hombres que fueron invitados probará mi cena».

El costo del discipulado

25 Grandes multitudes le acompañaban; y Él, volviéndose, les dijo: 26 Si alguno viene a mí, y no aborrece[fv] a su padre y madre, a su mujer e hijos, a sus hermanos y hermanas, y aun hasta su propia vida, no puede ser mi discípulo(LN). 27 El que no carga su cruz y viene en pos de mí, no puede ser mi discípulo(LO). 28 Porque, ¿quién de vosotros, deseando edificar una torre, no se sienta primero y calcula el costo, para ver si tiene lo suficiente para terminarla? 29 No sea que cuando haya echado los cimientos y no pueda terminar, todos los que lo vean comiencen a burlarse de él, 30 diciendo: «Este hombre comenzó a edificar y no pudo terminar». 31 ¿O qué rey, cuando sale al encuentro de otro rey para la batalla, no se sienta primero y delibera si con diez mil hombres es bastante fuerte como para enfrentarse al que viene contra él con veinte mil(LP)? 32 Y si no, cuando el otro todavía está lejos, le envía una delegación[fw] y pide condiciones de paz. 33 Así pues, cualquiera de vosotros que no renuncie a todas sus posesiones, no puede ser mi discípulo(LQ). 34 Por tanto, buena es la sal, pero si también la sal ha perdido su sabor, ¿con qué será sazonada(LR)? 35 No es útil ni para la tierra ni para el muladar; la arrojan fuera. El que tenga oídos para oír, que oiga(LS).

Parábola de la oveja perdida

15 Todos los recaudadores de impuestos[fx](LT) y los pecadores se acercaban a Jesús[fy] para oírle; y los fariseos y los escribas murmuraban, diciendo: Este recibe a los pecadores y come con ellos(LU).

Entonces Él les refirió esta parábola, diciendo: ¿(LV)Qué hombre de vosotros, si tiene cien ovejas y una de ellas se pierde, no deja las noventa y nueve en el campo[fz] y va tras la que está perdida hasta que la halla? Al encontrarla, la pone sobre sus hombros, gozoso; y cuando llega a su casa, reúne a los amigos y a los vecinos, diciéndoles: «Alegraos conmigo, porque he hallado mi oveja que se había perdido». Os digo que de la misma manera, habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente que por noventa y nueve justos que no necesitan arrepentimiento.

Parábola de la moneda perdida

¿O qué mujer, si tiene diez monedas de plata[ga] y pierde una moneda, no enciende una lámpara y barre la casa y busca con cuidado hasta hallarla? Cuando la encuentra, reúne a las amigas y vecinas, diciendo: «Alegraos conmigo porque he hallado la moneda que había perdido». 10 De la misma manera, os digo, hay gozo en la presencia de los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente(LW).

Parábola del hijo pródigo

11 Y Jesús dijo: Cierto hombre tenía dos hijos; 12 y el menor de ellos le dijo al padre: «Padre, dame la parte de la hacienda que me corresponde(LX)». Y él les repartió sus bienes[gb](LY). 13 No muchos días después, el hijo menor, juntándolo todo, partió a un país lejano, y allí malgastó su hacienda viviendo perdidamente. 14 Cuando lo había gastado todo, vino una gran hambre en aquel país, y comenzó a pasar necesidad. 15 Entonces fue y se acercó[gc] a uno de los ciudadanos de aquel país, y él lo mandó a sus campos a apacentar cerdos. 16 Y deseaba llenarse el estómago[gd] de[ge] las algarrobas que comían los cerdos, pero nadie le daba nada. 17 Entonces, volviendo en sí, dijo: «¡Cuántos de los trabajadores de mi padre tienen pan de sobra, pero yo aquí perezco de hambre! 18 Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: “Padre, he pecado contra el cielo y ante ti; 19 ya no soy digno de ser llamado hijo tuyo; hazme como uno de tus trabajadores”». 20 Y levantándose, fue a su padre. Y cuando todavía estaba lejos, su padre lo vio y sintió compasión por él, y corrió, se echó sobre su cuello y lo besó[gf](LZ). 21 Y el hijo le dijo: «Padre, he pecado contra el cielo y ante ti; ya no soy digno de ser llamado hijo tuyo[gg]». 22 Pero el padre dijo a sus siervos: «Pronto; traed la mejor ropa y vestidlo(MA), y poned un anillo en su mano(MB) y sandalias en los pies; 23 y traed el becerro engordado, matadlo, y comamos y regocijémonos; 24 porque este hijo mío estaba muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado(MC)». Y comenzaron a regocijarse. 25 Y su hijo mayor estaba en el campo, y cuando vino y se acercó a la casa, oyó música y danzas. 26 Y llamando a uno de los criados, le preguntó qué era todo aquello. 27 Y él le dijo: «Tu hermano ha venido, y tu padre ha matado el becerro engordado porque lo ha recibido sano y salvo». 28 Entonces él se enojó y no quería entrar. Salió su padre y le rogaba que entrara. 29 Pero respondiendo él, le dijo al padre: «Mira, por tantos años te he servido y nunca he desobedecido ninguna orden tuya, y sin embargo, nunca me has dado un cabrito para regocijarme con mis amigos; 30 pero cuando vino este hijo tuyo, que ha consumido tus bienes[gh] con rameras(MD), mataste para él el becerro engordado». 31 Y él le dijo: «Hijo mío, tú siempre has estado[gi] conmigo, y todo lo mío es tuyo. 32 Pero era necesario hacer fiesta y regocijarnos, porque este, tu hermano, estaba muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado(ME)».

El mayordomo infiel

16 Decía también Jesús a los discípulos: Había cierto hombre rico que tenía un mayordomo; y este fue acusado ante él de derrochar sus bienes(MF). Entonces lo llamó y le dijo: «¿Qué es esto que oigo acerca de ti? Rinde cuentas de tu administración, porque no puedes ser más mayordomo». Y el mayordomo se dijo a sí mismo: «¿Qué haré? Pues mi señor me quita la administración. No tengo fuerzas para cavar, y me da vergüenza mendigar. Ya sé[gj] lo que haré, para que cuando se me destituya de la administración me reciban en sus casas». Y llamando a cada uno de los deudores de su señor, dijo al primero: «¿Cuánto le debes a mi señor?». Y él dijo: «Cien barriles[gk] de aceite». Y le dijo: «Toma tu factura, siéntate pronto y escribe cincuenta». Después dijo a otro: «Y tú, ¿cuánto debes?». Y él respondió: «Cien medidas[gl] de trigo». Él le dijo*: «Toma tu factura y escribe ochenta». El señor elogió al mayordomo injusto porque había procedido con sagacidad, pues los hijos de este siglo(MG) son más sagaces en las relaciones con sus semejantes[gm] que los hijos de la luz(MH). Y yo os digo: Haceos amigos por medio de las riquezas[gn](MI) injustas(MJ), para que cuando falten, os reciban en las moradas eternas(MK). 10 El que es fiel en lo muy poco, es fiel también en lo mucho(ML); y el que es injusto en lo muy poco, también es injusto en lo mucho. 11 Por tanto, si no habéis sido fieles en el uso de las riquezas[go] injustas(MM), ¿quién os confiará las riquezas verdaderas? 12 Y si no habéis sido fieles en el uso de lo ajeno, ¿quién os dará lo que es vuestro[gp]? 13 Ningún siervo[gq] puede servir a dos señores, porque o aborrecerá a uno y amará al otro, o se apegará a uno y despreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas[gr](MN).

Los fariseos y la ley

14 Los fariseos, que eran amantes del dinero(MO), oían todas estas cosas y se burlaban de Él(MP). 15 Y Él les dijo: Vosotros sois los que os justificáis a vosotros mismos(MQ) ante los hombres, pero Dios conoce vuestros corazones(MR), porque lo que entre los hombres es de alta estima, abominable es delante de Dios. 16 La ley y los profetas se proclamaron hasta Juan(MS); desde entonces se anuncian las buenas nuevas del reino de Dios(MT), y todos se esfuerzan por entrar en él. 17 Pero más fácil es que el cielo y la tierra pasen, que un ápice[gs] de la ley deje de cumplirse[gt](MU). 18 Todo el que se divorcia de[gu] su mujer y se casa con otra, comete adulterio; y el que se casa con la que está divorciada del[gv] marido, comete adulterio(MV).

El rico y Lázaro

19 Había cierto hombre rico que se vestía de púrpura y lino fino, celebrando cada día fiestas con esplendidez. 20 Y un pobre llamado Lázaro yacía a su puerta(MW) cubierto de llagas, 21 ansiando saciarse de las migajas que caían de la mesa del rico; además, hasta los perros venían y le lamían las llagas. 22 Y sucedió que murió el pobre y fue llevado por los ángeles al seno(MX) de Abraham; y murió también el rico y fue sepultado. 23 En el Hades[gw](MY) alzó[gx] sus ojos, estando en tormentos, y vio* a Abraham a lo lejos, y a Lázaro en su seno. 24 Y gritando, dijo: «Padre Abraham(MZ), ten misericordia de mí, y envía a Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua y refresque mi lengua, pues estoy en agonía en esta llama(NA)». 25 Pero Abraham le dijo: «Hijo, recuerda que durante tu vida recibiste tus bienes(NB), y Lázaro, igualmente, males; pero ahora él es consolado aquí, y tú estás en agonía. 26 Y además de[gy] todo esto, hay un gran abismo puesto entre nosotros y vosotros, de modo que los que quieran pasar de aquí a vosotros no puedan, y tampoco nadie pueda[gz] cruzar de allá a nosotros». 27 Entonces él dijo: «Te ruego, pues, padre, que lo envíes a la casa de mi padre, 28 pues tengo cinco hermanos, de modo que él los prevenga[ha](NC), para que ellos no vengan también a este lugar de tormento». 29 Pero Abraham dijo*: «Ellos tienen a Moisés y a los profetas(ND); que los oigan». 30 Y él dijo: «No, padre Abraham(NE), sino que si alguno va a ellos de entre los muertos, se arrepentirán». 31 Mas Abraham le contestó: «Si no escuchan a Moisés y a los profetas, tampoco se persuadirán si alguno se levanta de entre los muertos».

Advertencias a los discípulos

17 Y Jesús dijo a sus discípulos: Es inevitable que vengan tropiezos[hb], pero ¡ay de aquel por quien vienen(NF)! Mejor le sería si se le colgara una piedra de molino al cuello y fuera arrojado al mar, que hacer tropezar[hc] a uno de estos pequeños(NG). ¡Tened cuidado[hd]! Si tu hermano peca, repréndelo(NH); y si se arrepiente, perdónalo. Y si peca contra ti siete veces al día, y vuelve a ti siete veces, diciendo: «Me arrepiento», perdónalo[he](NI).

La fe y el servicio

Y los apóstoles(NJ) dijeron al Señor(NK): ¡Auméntanos la fe! Entonces el Señor(NL) dijo: Si tuvierais fe como un grano de mostaza(NM), diríais a este sicómoro(NN): «Desarráigate y plántate en el mar». Y os obedecería[hf]. ¿Quién de vosotros tiene un siervo arando o pastoreando ovejas, y cuando regresa del campo, le dice: «Ven enseguida y siéntate[hg] a comer»? ¿No le dirá más bien: «Prepárame algo para cenar, y vístete[hh] adecuadamente, y sírveme(NO) hasta que haya comido y bebido; y después[hi] comerás y beberás tú»? ¿Acaso le da las gracias al siervo porque hizo lo que se le ordenó? 10 Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que se os ha ordenado, decid: «Siervos inútiles somos; hemos hecho solo lo que debíamos haber hecho».

Los diez leprosos

11 Y aconteció que mientras iba camino a Jerusalén(NP), pasaba entre[hj] Samaria(NQ) y Galilea, 12 y al entrar en cierta aldea, le salieron al encuentro diez hombres leprosos, que se pararon a distancia(NR), 13 y alzaron la voz, diciendo: ¡Jesús, Maestro(NS)! ¡Ten misericordia de nosotros! 14 Cuando Él los vio, les dijo: Id y mostraos a los sacerdotes(NT). Y sucedió que mientras iban, quedaron limpios. 15 Entonces uno de ellos, al ver que había sido sanado, se volvió glorificando a Dios(NU) en alta voz. 16 Y cayó sobre su rostro a los pies de Jesús[hk], dándole gracias; y este era samaritano(NV). 17 Respondiendo Jesús, dijo: ¿No fueron diez los que quedaron limpios? Y los otros nueve, ¿dónde están? 18 ¿No hubo ninguno que regresara[hl] a dar gloria a Dios(NW), excepto este extranjero? 19 Y le dijo: Levántate y vete; tu fe te ha sanado[hm](NX).

Llegada del reino de Dios

20 Habiéndole preguntado los fariseos cuándo vendría el reino de Dios(NY), Jesús les respondió, y dijo: El reino de Dios no viene con señales(NZ) visibles[hn], 21 ni dirán: «¡Mirad, aquí está!» o: «¡Allí(OA) está!» Porque he aquí, el reino de Dios entre[ho] vosotros está.

22 Y dijo a los discípulos: Vendrán días(OB) cuando ansiaréis ver uno de los días del Hijo del Hombre, y no lo veréis. 23 Y os dirán: «¡Mirad allí! ¡Mirad aquí!». No vayáis, ni corráis tras ellos(OC). 24 Porque como el relámpago al fulgurar resplandece desde un extremo[hp] del cielo hasta el otro extremo[hq] del cielo, así será el Hijo del Hombre en su día(OD). 25 Pero primero es necesario que Él padezca mucho y sea rechazado por esta generación(OE). 26 (OF)Tal como ocurrió en los días de Noé(OG), así será también en los días del Hijo del Hombre. 27 Comían, bebían, se casaban y se daban en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca, y vino el diluvio y los destruyó a todos. 28 Fue lo mismo que[hr] ocurrió en los días de Lot(OH): comían, bebían, compraban, vendían, plantaban, construían; 29 pero el día en que Lot salió de Sodoma, llovió fuego y azufre del cielo y los destruyó a todos. 30 Lo mismo[hs] acontecerá el día en que el Hijo del Hombre sea revelado(OI). 31 En ese día, el que esté en la azotea y tenga sus bienes en casa, no descienda a llevárselos; y de igual modo, el que esté en el campo no vuelva atrás(OJ). 32 Acordaos de la mujer de Lot(OK). 33 Todo el que procure preservar su vida[ht], la perderá; y todo el que la pierda, la conservará(OL). 34 Os digo que en aquella noche estarán dos en una cama; uno será tomado y el otro será dejado. 35 Estarán dos mujeres moliendo en el mismo lugar; una será tomada y la otra será dejada(OM). 36 [hu]Dos estarán en el campo; uno será tomado y el otro será dejado(ON). 37 Respondiendo ellos, le dijeron*: ¿Dónde, Señor? Y Él les dijo: Donde esté el cuerpo, allí también se juntarán los buitres[hv](OO).

Parábola de la viuda y el juez injusto

18 Y les refería Jesús una parábola para enseñarles que ellos debían orar(OP) en todo tiempo, y no desfallecer(OQ), diciendo: Había en cierta ciudad un juez que ni temía a Dios ni respetaba a hombre alguno(OR). Y había en aquella ciudad una viuda, la cual venía a él constantemente, diciendo: «Hazme justicia de mi adversario». Por algún tiempo él no quiso, pero después dijo para sí: «Aunque ni temo a Dios, ni respeto a hombre alguno(OS), sin embargo, porque esta viuda me molesta(OT), le haré justicia; no sea que por venir continuamente me agote la paciencia[hw](OU)». Y el Señor(OV) dijo: Escuchad lo que dijo* el juez injusto. ¿Y no hará Dios justicia(OW) a sus escogidos(OX), que claman a Él día y noche? ¿Se tardará mucho en responderles[hx](OY)? Os digo que pronto les hará justicia. No obstante, cuando el Hijo del Hombre venga, ¿hallará fe[hy](OZ) en la tierra?

Parábola del fariseo y el publicano

Refirió también esta parábola a unos que confiaban en sí mismos(PA) como justos, y despreciaban a los demás(PB): 10 Dos hombres subieron al templo a orar(PC); uno era fariseo y el otro recaudador de impuestos[hz]. 11 El fariseo puesto en pie, oraba(PD) para sí de esta manera: «Dios, te doy gracias porque no soy como los demás hombres: estafadores, injustos, adúlteros; ni aun como este recaudador de impuestos. 12 Yo ayuno(PE) dos veces por semana; doy el diezmo de todo lo que gano(PF)». 13 Pero el recaudador de impuestos, de pie(PG) y a cierta distancia, no quería ni siquiera alzar los ojos al cielo(PH), sino que se golpeaba el pecho(PI), diciendo: «Dios, ten piedad de[ia] mí, pecador». 14 Os digo que este descendió a su casa justificado pero aquel no; porque todo el que se ensalza será humillado, pero el que se humilla será ensalzado(PJ).

Jesús y los niños

15 (PK)Y le traían aun a los niños muy pequeños para que los tocara, pero al ver esto los discípulos, los reprendían. 16 Mas Jesús, llamándolos a su lado, dijo: Dejad que los niños vengan a mí, y no se lo impidáis, porque de los que son como estos[ib] es el reino de Dios. 17 En verdad os digo: el que no recibe el reino de Dios como un niño, no entrará en él(PL).

El joven rico

18 (PM)Y cierto hombre prominente[ic] le preguntó, diciendo: Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna? 19 Jesús le respondió: ¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno, sino solo uno, Dios. 20 Tú sabes los mandamientos: «No cometas adulterio, No mates, No hurtes, No des falso testimonio, Honra a tu padre y a tu madre(PN)». 21 Y él dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. 22 Cuando Jesús oyó esto, le dijo: Te falta todavía una cosa; vende todo lo que tienes y reparte entre los pobres, y tendrás tesoro en los cielos(PO); y ven, sígueme(PP). 23 Pero al oír esto, se puso muy triste, pues era sumamente rico. 24 Mirándolo Jesús, dijo: ¡Qué difícil es que entren en el reino de Dios los que tienen riquezas(PQ)! 25 Porque es más fácil que un camello pase[id] por el ojo de una aguja, que el que un rico entre en el reino de Dios(PR). 26 Los que oyeron esto, dijeron: ¿Y quién podrá salvarse? 27 Y Él respondió: Lo imposible para los hombres, es posible para Dios(PS). 28 Y Pedro dijo: He aquí, nosotros lo hemos dejado todo[ie] y te hemos seguido(PT). 29 Entonces Él les dijo: En verdad os digo: no hay nadie que haya dejado casa, o mujer, o hermanos, o padres o hijos por la causa del reino de Dios(PU), 30 que no reciba muchas veces más en este tiempo, y en el siglo venidero(PV), la vida eterna.

Jesús anuncia su muerte por tercera vez

31 (PW)Tomando aparte a los doce, Jesús les dijo: Mirad, subimos a Jerusalén(PX), y se cumplirán todas las cosas que están escritas por medio de los profetas acerca del Hijo del Hombre(PY). 32 Pues será entregado a los gentiles, y será objeto de burla, afrentado y escupido(PZ); 33 y después de azotarle, le matarán, y al tercer día resucitará. 34 Pero ellos no comprendieron nada de esto; este dicho les estaba encubierto(QA), y no entendían lo que se les decía.

Curación de un ciego

35 (QB)Y aconteció que al acercarse a Jericó, un ciego estaba sentado junto al camino mendigando(QC). 36 Al oír que pasaba una multitud, preguntaba qué era aquello. 37 Y le informaron que pasaba Jesús de Nazaret. 38 Entonces gritó, diciendo: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí(QD)! 39 Y los que iban delante lo reprendían para que se callara; pero él gritaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí(QE)! 40 Jesús se detuvo y[if] ordenó que se lo trajeran; y cuando estuvo cerca, le preguntó: 41 ¿Qué deseas que haga por ti? Y él dijo: Señor, que recobre la vista. 42 Jesús entonces le dijo: Recibe[ig] la vista, tu fe te ha sanado[ih](QF). 43 Y al instante recobró la vista, y le seguía glorificando a Dios(QG); cuando toda la gente vio aquello, dieron gloria a Dios(QH).

Zaqueo

19 Habiendo entrado Jesús en Jericó, pasaba por la ciudad(QI). Y[ii] un hombre llamado[ij] Zaqueo, que era jefe de los recaudadores de impuestos[ik] y era rico, trataba de ver quién era Jesús; pero no podía a causa de la multitud, ya que él era de pequeña estatura. Y corriendo delante, se subió a un sicómoro para verle(QJ), porque Jesús estaba a punto de pasar por allí. Cuando Jesús llegó al lugar, miró hacia arriba y le dijo: Zaqueo, date prisa y desciende, porque hoy debo quedarme en tu casa. Entonces él se apresuró a descender y le recibió con gozo[il]. Y al ver esto, todos murmuraban, diciendo: Ha ido a hospedarse con[im] un hombre pecador. Y Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor(QK): He aquí, Señor, la mitad de mis bienes daré a los pobres, y si en algo he defraudado(QL) a alguno, se lo restituiré cuadruplicado(QM). Y Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa, ya que él también es hijo de Abraham(QN); 10 porque el Hijo del Hombre ha venido a buscar y a salvar lo que se había perdido(QO).

Parábola de las minas

11 Estando ellos oyendo estas cosas, continuando Jesús, dijo una parábola, porque Él estaba cerca de Jerusalén(QP) y ellos pensaban que el reino de Dios iba a aparecer(QQ) de un momento a otro. 12 Por eso dijo: (QR)Cierto hombre de familia noble fue a un país lejano a recibir un reino para sí y después volver. 13 Y llamando a diez de sus siervos, les dio diez minas[in] y les dijo: «Negociad con esto hasta que yo regrese[io]». 14 Pero sus ciudadanos lo odiaban, y enviaron una delegación tras él, diciendo: «No queremos que este reine sobre nosotros». 15 Y sucedió que al regresar él, después de haber recibido el reino, mandó llamar a su presencia a aquellos siervos a los cuales había dado el dinero, para saber lo que habían ganado negociando[ip]. 16 Y se presentó el primero, diciendo: «Señor, tu mina ha producido diez minas más». 17 Y él le dijo: «Bien hecho, buen siervo, puesto que has sido fiel en lo muy poco(QS), ten autoridad sobre diez ciudades». 18 Entonces vino el segundo, diciendo: «Tu mina, señor, ha producido cinco minas». 19 Y dijo también a este: «Y tú vas a estar[iq] sobre cinco ciudades». 20 Y vino otro, diciendo: «Señor, aquí está tu mina, que he tenido guardada en un pañuelo; 21 pues te tenía miedo, porque eres un hombre exigente, que recoges lo que no depositaste y siegas lo que no sembraste». 22 Él le contestó*: «Siervo inútil[ir], por tus propias palabras[is] te voy a juzgar. ¿Sabías que yo soy un hombre exigente, que recojo lo que no deposité y siego lo que no sembré? 23 Entonces, ¿por qué no pusiste mi dinero en el banco, y al volver yo, lo hubiera recibido con los intereses?». 24 Y dijo a los que estaban presentes: «Quitadle la mina y dádsela al que tiene las diez minas». 25 Y ellos le dijeron: «Señor, él ya tiene diez minas». 26 Os digo, que a cualquiera que tiene, más le será dado, pero al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará(QT). 27 Pero a estos mis enemigos, que no querían que reinara sobre ellos(QU), traedlos acá y matadlos delante de mí(QV).

La entrada triunfal

28 Habiendo dicho esto, iba delante, subiendo hacia Jerusalén(QW).

29 Y aconteció que (QX)cuando se acercó a Betfagé y a Betania(QY), cerca del monte que se llama de los Olivos[it](QZ), envió a dos de los discípulos, 30 diciendo: Id a la aldea que está enfrente, en la cual, al entrar, encontraréis un pollino atado sobre el cual nunca se ha montado nadie[iu]; desatadlo y traedlo. 31 Y si alguien os pregunta: «¿Por qué lo desatáis?», de esta manera hablaréis: «Porque el Señor lo necesita». 32 Entonces los enviados fueron y lo encontraron como Él les había dicho. 33 Mientras desataban el pollino, sus dueños[iv] les dijeron: ¿Por qué desatáis el pollino? 34 Y ellos respondieron: Porque el Señor lo necesita. 35 Y lo trajeron a Jesús, (RA)y echando sus mantos sobre el pollino, pusieron a Jesús sobre él. 36 Y mientras Él iba avanzando, tendían sus mantos por el camino. 37 Cuando ya se acercaba, junto a la bajada del monte de los Olivos(RB), toda la multitud de los discípulos, regocijándose, comenzó a alabar a Dios(RC) a gran voz por todas las maravillas[iw] que habían visto, 38 diciendo:

¡Bendito(RD) el Rey que viene en el nombre del Señor(RE)!
¡Paz en el cielo y gloria en las alturas(RF)!

39 Entonces algunos de los fariseos de entre la multitud le dijeron(RG): Maestro, reprende a tus discípulos. 40 Respondiendo Él, dijo: Os digo que si estos callan, las piedras clamarán(RH).

Jesús llora sobre Jerusalén

41 Cuando se acercó, al ver la ciudad, lloró sobre ella(RI), 42 diciendo: ¡Si tú también hubieras sabido en este día lo que conduce a la paz! Pero ahora está oculto a tus ojos. 43 Porque sobre ti vendrán días, cuando[ix] tus enemigos echarán terraplén delante de ti(RJ), te sitiarán y te acosarán por todas partes(RK). 44 Y te derribarán a tierra, y a tus hijos dentro de ti, y no dejarán en ti piedra sobre piedra(RL), porque no conociste el tiempo de tu visitación(RM).

Jesús echa a los mercaderes del templo

45 (RN)Y entrando en el templo, comenzó a echar fuera a los que vendían, 46 diciéndoles: Escrito está: «Y mi casa será casa de oración(RO)», pero vosotros la habéis hecho cueva de ladrones(RP).

Jesús enseña en el templo

47 Y enseñaba diariamente en el templo(RQ), pero los principales sacerdotes, los escribas y los más prominentes del pueblo procuraban matarle(RR); 48 y no encontraban la manera de hacerlo[iy], porque todo el pueblo estaba pendiente de Él, escuchándole.

La autoridad de Jesús puesta en duda

20 (RS)Y aconteció que en uno de los días cuando Él enseñaba a la gente en el templo(RT) y anunciaba el evangelio(RU), se le enfrentaron los principales sacerdotes y los escribas con los ancianos(RV), y le hablaron, diciéndole: Dinos, ¿con qué autoridad haces estas cosas, o quién te dio esta autoridad? Respondiendo Él, les dijo: Yo también os haré una pregunta[iz]; decidme: El bautismo de Juan, ¿era del cielo o de los hombres? Y ellos discurrían entre sí, diciendo: Si decimos: «Del cielo», Él dirá: «¿Por qué no le creísteis?». Pero si decimos: «De los hombres», todo el pueblo nos matará a pedradas, pues están convencidos de que Juan era un profeta(RW). Y respondieron que no sabían de dónde era. Jesús entonces les dijo: Tampoco yo os diré[ja] con qué autoridad hago estas cosas.

Parábola de los labradores malvados

(RX)Y comenzó a referir al pueblo esta parábola: Un hombre plantó una viña, y la arrendó a labradores, y se fue de viaje por mucho tiempo. 10 Y al tiempo de la vendimia envió un siervo a los labradores para que le dieran parte del fruto de la viña; pero los labradores, después de golpearlo, lo enviaron con las manos vacías. 11 Volvió a enviar otro siervo; y ellos también a este, después de golpearlo y ultrajarlo, lo enviaron con las manos vacías. 12 Volvió a enviar un tercero; y a este también lo hirieron y echaron fuera. 13 Entonces el dueño[jb] de la viña dijo: «¿Qué haré? Enviaré a mi hijo amado; quizá a él lo respetarán(RY)». 14 Pero cuando los labradores lo vieron, razonaron entre sí, diciendo: «Este es el heredero; matémoslo para que la heredad sea nuestra». 15 Y arrojándolo fuera de la viña, lo mataron. Por tanto, ¿qué les hará el dueño[jc] de la viña? 16 Vendrá y destruirá a estos labradores, y dará la viña a otros(RZ). Y cuando ellos oyeron esto, dijeron: ¡Nunca suceda tal cosa(SA)! 17 Pero Él, mirándolos fijamente, dijo: Entonces, ¿qué quiere decir[jd] esto que está escrito:

«La piedra que desecharon los constructores(SB),
esa, en piedra angular[je] se ha convertido(SC)»?

18 Todo el que caiga sobre esa piedra será hecho pedazos; y aquel sobre quien ella caiga, lo esparcirá como polvo(SD).

El pago del impuesto al César

19 Los escribas y los principales sacerdotes procuraron echarle mano(SE) en aquella misma hora, pero temieron al pueblo; porque comprendieron que contra ellos había dicho esta parábola. 20 (SF)Y acechándole, enviaron espías que fingieran ser justos, para sorprenderle en alguna declaración[jf](SG) a fin de entregarle al poder y autoridad del gobernador(SH). 21 Y le preguntaron, diciendo: Maestro, sabemos que hablas y enseñas rectamente, y no te guías por las apariencias[jg], sino que enseñas con verdad el camino de Dios. 22 ¿Nos es lícito pagar[jh] impuesto al César(SI), o no? 23 Pero Él, percibiendo su astucia, les dijo: 24 Mostradme un denario[ji]. ¿De quién es la imagen y la inscripción que lleva? Y ellos le dijeron: Del César. 25 Entonces Él les dijo: Pues dad al César lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios(SJ). 26 Y no podían sorprenderle en palabra alguna[jj](SK) delante del pueblo; y maravillados de su respuesta, callaron.

Pregunta sobre la resurrección

27 (SL)Y acercándose a Él algunos de los saduceos (los que dicen que no hay resurrección), le preguntaron, 28 diciendo: Maestro, Moisés nos escribió: «Si el hermano de alguno muere, teniendo mujer, y no deja hijos, que su hermano tome la mujer y levante descendencia a su hermano(SM)». 29 Eran, pues, siete hermanos; y el primero tomó esposa, y murió sin dejar hijos; 30 y el segundo[jk] 31 y el tercero la tomaron; y de la misma manera también los siete, y murieron sin dejar hijos. 32 Por último, murió también la mujer. 33 Por tanto, en la resurrección, ¿de cuál de ellos será mujer? Porque los siete la tuvieron por mujer. 34 Y Jesús les dijo: Los hijos de este siglo(SN) se casan y son dados en matrimonio, 35 pero los que son tenidos por dignos de alcanzar aquel siglo(SO) y la resurrección de entre los muertos, ni se casan ni son dados en matrimonio; 36 porque tampoco pueden ya morir, pues son como ángeles, y son hijos de Dios(SP), siendo hijos de la resurrección. 37 Pero que los muertos resucitan, aun Moisés lo enseñó, en aquel pasaje sobre la zarza ardiendo, donde llama al Señor, el Dios de Abraham, y Dios de Isaac, y Dios de Jacob(SQ). 38 Él no es Dios de muertos, sino de vivos(SR); porque todos viven para Él(SS). 39 Y algunos de los escribas respondieron, y dijeron: Maestro, bien has hablado. 40 Porque ya no se atrevían a preguntarle nada(ST).

Jesús, Hijo y Señor de David

41 (SU)Entonces Él les dijo: ¿Cómo es que dicen que el Cristo[jl] es el hijo de David(SV)? 42 Pues David mismo dice en el libro de los Salmos:

El Señor dijo a mi Señor:
«Siéntate a mi diestra(SW),
43 hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies(SX)».

44 David, por tanto, le llama «Señor». ¿Cómo, pues, es Él su hijo?

Advertencia contra los escribas

45 (SY)Mientras todo el pueblo escuchaba, dijo a los discípulos: 46 Cuidaos de los escribas, a quienes les gusta andar con vestiduras largas, y son amantes de los saludos respetuosos en las plazas, y de ocupar los primeros asientos en las sinagogas y los lugares de honor en los banquetes(SZ); 47 que devoran las casas de las viudas, y por las apariencias hacen largas oraciones; ellos recibirán mayor condenación.

La ofrenda de la viuda

21 (TA)Levantando Jesús la vista, vio a los ricos que echaban sus ofrendas[jm] en el arca del tesoro. Y vio también a una viuda pobre que echaba allí dos pequeñas monedas de cobre[jn](TB); y dijo: En verdad os digo, que esta viuda tan pobre echó más que todos ellos; porque todos ellos echaron en la ofrenda[jo] de lo que les sobraba[jp], pero ella, de su pobreza, echó todo lo que tenía para vivir[jq](TC).

Profecía sobre la destrucción del templo

(TD)Y mientras algunos estaban hablando del templo, de cómo[jr] estaba adornado con hermosas piedras y ofrendas votivas, Jesús dijo: En cuanto a estas cosas que estáis mirando, vendrán días en que no quedará piedra sobre piedra(TE) que no sea derribada. Y le preguntaron, diciendo: Maestro, ¿cuándo sucederá[js] esto, y qué señal[jt] habrá cuando estas cosas vayan a suceder? Y Él dijo: Mirad que no seáis engañados; porque muchos vendrán en mi nombre, diciendo: «Yo soy(TF) el Cristo[ju]», y: «El tiempo está cerca». No los sigáis(TG). Y cuando oigáis de guerras y disturbios, no os aterroricéis; porque estas cosas tienen que suceder primero, pero el fin no sucederá inmediatamente.

Señales y persecuciones

10 Entonces les dijo: Se levantará nación contra nación y reino contra reino; 11 habrá grandes terremotos, y plagas y hambres en diversos lugares; y habrá terrores y grandes señales[jv] del cielo. 12 Pero antes de todas estas cosas (TH)os echarán mano, y os perseguirán, entregándoos a las sinagogas y cárceles, llevándoos ante reyes y gobernadores por causa de mi nombre. 13 Esto os dará oportunidad de testificar[jw](TI). 14 Por tanto, proponed en vuestros corazones no preparar de antemano vuestra defensa(TJ); 15 porque yo os daré palabras[jx](TK) y sabiduría que ninguno de vuestros adversarios podrá resistir ni refutar. 16 Pero seréis entregados aun por padres, hermanos, parientes y amigos; y matarán a algunos de vosotros, 17 y seréis odiados de todos por causa de mi nombre. 18 Sin embargo, ni un cabello de vuestra cabeza(TL) perecerá. 19 Con vuestra perseverancia ganaréis vuestras almas[jy](TM).

20 Pero cuando veáis a Jerusalén rodeada de ejércitos(TN), sabed entonces que su desolación está cerca. 21 Entonces los que estén en Judea, huyan a los montes, y los que estén en medio de la ciudad[jz], aléjense; y los que estén en los campos, no entren en ella(TO); 22 porque estos son días de venganza(TP), para que se cumplan todas las cosas que están escritas. 23 ¡Ay de las que estén encinta y de las que estén criando en aquellos días! Porque habrá una gran calamidad sobre la tierra, e ira para este pueblo(TQ); 24 y caerán a filo de espada(TR), y serán llevados cautivos a todas las naciones; y Jerusalén será hollada por los gentiles(TS), hasta que los tiempos de los gentiles se cumplan(TT).

La venida del Hijo del Hombre

25 Y habrá señales[ka] en el sol, en la luna y en las estrellas, y sobre la tierra, angustia entre las naciones, perplejas a causa del rugido del mar y de las olas, 26 desfalleciendo los hombres por el temor y la expectación de las cosas que vendrán sobre el mundo[kb]; porque las potencias de los cielos serán sacudidas. 27 Y entonces verán al Hijo del Hombre que viene en una nube(TU) con poder y gran gloria(TV). 28 Cuando estas cosas empiecen a suceder, erguíos[kc] y levantad la cabeza, porque se acerca vuestra redención(TW).

Parábola de la higuera

29 Y les refirió una parábola: Mirad la higuera y todos los árboles. 30 Cuando ya brotan las hojas, al verlo, sabéis por vosotros mismos(TX) que el verano ya está cerca. 31 Así también vosotros, cuando veáis que suceden estas cosas, sabed que el reino de Dios está cerca(TY). 32 En verdad os digo que no pasará esta generación hasta que todo esto suceda. 33 El cielo y la tierra pasarán, mas mis palabras no pasarán(TZ).

Exhortación a velar

34 Estad alerta(UA), no sea que vuestro corazón se cargue con disipación y embriaguez y con las preocupaciones de la vida, y aquel día venga súbitamente sobre vosotros como un lazo; 35 porque vendrá sobre todos los que habitan sobre la faz de toda la tierra. 36 Mas velad en todo tiempo(UB), orando para que tengáis fuerza para escapar de todas estas cosas que están por suceder, y podáis estar en pie delante del Hijo del Hombre(UC).

37 Durante el día[kd] enseñaba en el templo(UD), pero al oscurecer[ke] salía(UE) y pasaba la noche en el monte llamado de los Olivos(UF). 38 Y todo el pueblo madrugaba para ir al templo[kf] a escucharle(UG).

Traición de Judas

22 (UH)Se acercaba la fiesta de los panes sin levadura[kg], llamada la Pascua(UI). Y los principales sacerdotes y los escribas buscaban cómo dar muerte a Jesús[kh](UJ), pues temían al pueblo.

(UK)Entonces Satanás entró en Judas, llamado Iscariote(UL), que pertenecía al[ki] número de los doce; y él fue y discutió con los principales sacerdotes y con los oficiales(UM) sobre cómo se lo entregaría. Ellos se alegraron y convinieron en darle dinero. Él aceptó, y buscaba una oportunidad para entregarle, sin hacer un escándalo[kj].

Preparación de la Pascua

(UN)Llegó el día de la fiesta de los panes sin levadura[kk] en que debía sacrificarse el cordero de la Pascua(UO). Entonces Jesús envió a Pedro y a Juan(UP), diciendo: Id y preparad la Pascua para nosotros, para que la comamos. Ellos le dijeron: ¿Dónde deseas que la preparemos? 10 Y Él les respondió: He aquí, al entrar en la ciudad, os saldrá al encuentro un hombre que lleva un cántaro de agua; seguidle a la casa donde entre. 11 Y diréis al dueño de la casa: «El Maestro te dice: “¿Dónde está la habitación, en la cual pueda comer la Pascua con mis discípulos?”». 12 Entonces él os mostrará un gran aposento alto, dispuesto; preparadla allí. 13 Entonces ellos fueron y encontraron todo tal como Él les había dicho; y prepararon la Pascua.

Institución de la Cena del Señor

14 Cuando llegó la hora, se sentó[kl] a la mesa, y con Él los apóstoles(UQ), 15 y les dijo: Intensamente he deseado comer esta Pascua con vosotros antes de padecer; 16 porque os digo que nunca más volveré a comerla hasta que se cumpla en el reino de Dios(UR). 17 (US)Y habiendo tomado una copa, después de haber dado gracias, dijo: Tomad esto y repartidlo entre vosotros(UT); 18 porque os digo que de ahora en adelante no beberé del fruto de la vid, hasta que venga el reino de Dios(UU). 19 Y habiendo tomado pan, después de haber dado gracias, lo partió(UV), y les dio, diciendo: Esto es mi cuerpo que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí. 20 De la misma manera tomó la copa después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto(UW) en mi sangre(UX), que es derramada por vosotros. 21 (UY)Mas he aquí, la mano del que me entrega está conmigo en la mesa. 22 Porque en verdad, el Hijo del Hombre va según se ha determinado(UZ), pero ¡ay de aquel hombre por quien Él es entregado! 23 Entonces ellos comenzaron a discutir entre sí quién de ellos sería el que iba a hacer esto.

Los discípulos discuten sobre quién es el mayor

24 Se suscitó también entre ellos un altercado, sobre cuál de ellos debería ser considerado como el mayor(VA). 25 (VB)Y Jesús les dijo: Los reyes de los gentiles se enseñorean de ellos; y los que tienen autoridad sobre ellos son llamados bienhechores. 26 Pero no es así con vosotros; antes, el mayor entre vosotros hágase como el menor[km](VC), y el que dirige como el que sirve(VD). 27 Porque, ¿cuál es mayor, el que se sienta[kn] a la mesa, o el que sirve(VE)? ¿No lo es el que se sienta[ko] a la mesa? Sin embargo, entre vosotros yo soy como el que sirve(VF). 28 Vosotros sois los que habéis permanecido conmigo en mis pruebas(VG); 29 y así como mi Padre me ha otorgado un reino(VH), yo os otorgo 30 que comáis(VI) y bebáis a mi mesa en mi reino(VJ); y os sentaréis en tronos juzgando a las doce tribus de Israel(VK).

Jesús predice la negación de Pedro

31 Simón, Simón, mira que Satanás os ha reclamado(VL) para zarandearos(VM) como a trigo; 32 pero yo he rogado por ti(VN) para que tu fe no falle; y tú, una vez que hayas regresado, fortalece a tus hermanos(VO). 33 (VP)Y Pedro le dijo: Señor, estoy dispuesto a ir contigo tanto a la cárcel como a la muerte. 34 Pero Jesús le dijo: Te digo, Pedro, que el gallo no cantará hoy hasta que tú hayas negado tres veces que me conoces.

Bolsa, alforja y espada

35 Y les dijo: Cuando os envié sin bolsa, ni alforja, ni sandalias(VQ), ¿acaso os faltó algo? Y ellos contestaron: No, nada. 36 Entonces les dijo: Pero ahora, el que tenga una bolsa, que la lleve consigo, de la misma manera también una alforja, y el que no tenga espada, venda su manto y compre una. 37 Porque os digo que es necesario que en mí se cumpla esto que está escrito: «Y con los transgresores fue contado(VR)»; pues ciertamente, lo que se refiere(VS) a mí, tiene su cumplimiento. 38 Y ellos dijeron: Señor, mira, aquí hay dos espadas(VT). Y Él les dijo: Es suficiente.

Jesús en Getsemaní

39 Y saliendo, se encaminó, como de costumbre(VU), hacia el monte de los Olivos(VV); y los discípulos también le siguieron. 40 (VW)Cuando llegó al lugar, les dijo: Orad para que no entréis en tentación(VX). 41 Y se apartó de ellos como a un tiro de piedra, y poniéndose de rodillas(VY), oraba, 42 diciendo: Padre, si es tu voluntad, aparta de mí esta copa(VZ); pero no se haga mi voluntad, sino la tuya(WA). 43 [kp]Entonces se le apareció un ángel del cielo, fortaleciéndole(WB). 44 Y estando en agonía, oraba con mucho fervor(WC); y su sudor se volvió como gruesas gotas de sangre, que caían sobre la tierra. 45 Cuando se levantó de orar, fue a los discípulos y los halló dormidos a causa de la tristeza, 46 y les dijo: ¿Por qué dormís? Levantaos y orad para que no entréis en tentación(WD).

Arresto de Jesús

47 (WE)Mientras todavía estaba Él hablando, he aquí, llegó una multitud, y el que se llamaba Judas, uno de los doce, iba delante de ellos, y se acercó a Jesús para besarle. 48 Pero Jesús le dijo: Judas, ¿con un beso entregas al Hijo del Hombre? 49 Y cuando los que rodeaban a Jesús[kq] vieron lo que iba a suceder, dijeron: Señor, ¿heriremos a espada(WF)? 50 Y uno de ellos hirió al siervo del sumo sacerdote y le cortó[kr] la oreja derecha. 51 Respondiendo Jesús, dijo: ¡Deteneos! Basta de esto. Y[ks] tocando la oreja al siervo, lo sanó. 52 Entonces Jesús dijo a los principales sacerdotes, a los oficiales del templo(WG) y a los ancianos que habían venido contra Él: ¿Habéis salido con espadas y garrotes como contra un ladrón(WH)? 53 Cuando estaba con vosotros cada día en el templo, no me echasteis mano; pero esta hora y el poder de las tinieblas son vuestros[kt].

La negación de Pedro

54 Habiéndole arrestado, se lo llevaron y le condujeron a la casa del sumo sacerdote(WI); mas Pedro le seguía de lejos(WJ). 55 (WK)Después de encender ellos una hoguera en medio del patio, y de sentarse juntos, Pedro se sentó entre ellos(WL). 56 Y una sirvienta, al verlo sentado junto a la lumbre, fijándose en él detenidamente, dijo: También este estaba con Él. 57 Pero él lo negó, diciendo: Mujer, yo no le conozco. 58 Un poco después, otro al verlo, dijo: ¡Tú también eres uno de ellos(WM)! Pero Pedro dijo: ¡Hombre, no es cierto[ku]! 59 Pasada como una hora, otro insistía, diciendo: Ciertamente este también estaba con Él, pues él también es galileo(WN). 60 Pero Pedro dijo: Hombre, yo no sé de qué hablas. Y al instante, estando él todavía hablando, cantó un gallo. 61 Entonces el Señor(WO) se volvió y miró a Pedro. Y recordó Pedro la palabra del Señor, cómo le había dicho: Antes que el gallo cante hoy, me negarás tres veces(WP). 62 Y saliendo fuera, lloró amargamente.

Jesús escarnecido

63 Los hombres que tenían a Jesús[kv] bajo custodia, se burlaban de Él y le golpeaban(WQ); 64 y vendándole los ojos, le preguntaban, diciendo: Adivina[kw], ¿quién es el que te ha golpeado(WR)? 65 También decían muchas otras cosas contra Él, blasfemando(WS).

Jesús ante el concilio

66 Cuando se hizo de día, se reunió el concilio de los ancianos[kx](WT) del pueblo, tanto los principales sacerdotes como los escribas, y llevaron a Jesús[ky](WU) ante su concilio[kz](WV), diciendo: 67 Si tú eres el Cristo[la](WW), dínoslo. Pero Él les dijo: Si os lo digo, no creeréis; 68 y si os pregunto, no responderéis. 69 Pero de ahora en adelante, el Hijo del Hombre estará sentado a la diestra del poder de Dios(WX). 70 Dijeron todos: Entonces, ¿tú eres el Hijo de Dios(WY)? Y Él les respondió: Vosotros decís que yo soy(WZ). 71 Y ellos dijeron: ¿Qué necesidad tenemos ya de testimonio? Pues nosotros mismos lo hemos oído de su propia boca.

Jesús ante Pilato

23 Entonces toda la asamblea de ellos se levantó, y llevaron a Jesús[lb] ante Pilato(XA). (XB)Y comenzaron a acusarle, diciendo: Hemos hallado que este pervierte a nuestra nación(XC), prohibiendo pagar[lc] impuesto al César(XD), y diciendo que Él mismo es Cristo[ld], un Rey. Pilato entonces le preguntó, diciendo: ¿Eres tú el Rey de los judíos? Y Jesús respondiéndole, dijo: lo dices(XE). Y Pilato dijo a los principales sacerdotes y a la multitud: No encuentro delito en este hombre(XF). Pero ellos insistían, diciendo: Él alborota al pueblo, enseñando por toda Judea, comenzando desde Galilea(XG) hasta aquí. Cuando Pilato oyó esto, preguntó si el hombre era galileo. Y al saber que Jesús pertenecía a la jurisdicción de Herodes, le remitió a Herodes(XH), que también estaba en Jerusalén en aquellos[le] días.

Jesús ante Herodes

Herodes, al ver a Jesús se alegró en gran manera, pues hacía mucho tiempo que quería verle(XI) por lo que había oído hablar de Él, y esperaba ver alguna señal[lf] que Él hiciera. Y le interrogó extensamente[lg], pero Jesús[lh] nada le respondió(XJ). 10 Los principales sacerdotes y los escribas también estaban allí, acusándole con vehemencia. 11 Entonces Herodes, con sus soldados, después de tratarle con desprecio y burlarse de Él, le vistió con un espléndido manto(XK) y le envió de nuevo a Pilato. 12 Aquel mismo día Herodes y Pilato(XL) se hicieron amigos, pues antes habían estado enemistados el uno con el otro.

Pilato condena a Jesús

13 Entonces Pilato convocó a los principales sacerdotes, a los gobernantes(XM) y al pueblo, 14 y les dijo: Me habéis presentado a este hombre como uno que incita al pueblo a la rebelión(XN), pero[li] habiéndole interrogado yo delante de vosotros, no he hallado ningún delito en este hombre(XO) de las acusaciones que hacéis contra Él. 15 Ni tampoco Herodes(XP), pues nos lo ha remitido de nuevo; y he aquí que nada ha hecho[lj] que merezca la muerte. 16 Por consiguiente, después de castigarle, le soltaré(XQ). 17 [lk]Y tenía obligación de soltarles un preso en cada fiesta. 18 Pero todos ellos gritaron a una, diciendo: ¡(XR)Fuera con este, y suéltanos a Barrabás! 19 (Este[ll] había sido echado en la cárcel por un levantamiento ocurrido en la ciudad, y por homicidio.) 20 Pilato, queriendo soltar a Jesús, les volvió a hablar, 21 pero ellos continuaban gritando, diciendo: ¡Crucifícale! ¡Crucifícale! 22 Y él les dijo por tercera vez: ¿Por qué? ¿Qué mal ha hecho este? No he hallado en Él ningún delito digno de muerte; por tanto, le castigaré y le soltaré(XS). 23 Pero ellos insistían, pidiendo a grandes voces que fuera crucificado. Y sus voces comenzaron a predominar. 24 Entonces Pilato decidió[lm] que se les concediera su demanda. 25 Y soltó al que ellos pedían, al que había sido echado en la cárcel por sedición y homicidio, pero a Jesús lo entregó a la voluntad de ellos.

Jesús se dirige al Calvario

26 (XT)Cuando le llevaban, tomaron a un cierto Simón de Cirene que venía del campo y le pusieron la cruz encima para que la llevara detrás de Jesús(XU).

27 Y le seguía una gran multitud del pueblo y de mujeres que lloraban[ln] y se lamentaban(XV) por Él. 28 Pero Jesús, volviéndose a ellas, dijo: Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí; llorad más bien por vosotras mismas y por vuestros hijos. 29 Porque he aquí, vienen días en que dirán: «Dichosas[lo] las estériles, y los vientres que nunca concibieron, y los senos que nunca criaron(XW)». 30 Entonces comenzarán a decir a los montes: «Caed sobre nosotros»; y a los collados: «Cubridnos(XX)». 31 Porque si en el árbol verde hacen esto, ¿qué sucederá en el seco?

32 Y llevaban también a otros dos, que eran malhechores, para ser muertos con Él(XY).

La crucifixión

33 (XZ)Cuando llegaron al lugar llamado «La Calavera[lp]», crucificaron allí a Jesús[lq] y a los malhechores, uno a la derecha y otro a la izquierda. 34 Y Jesús decía: Padre(YA), perdónalos, porque no saben lo que hacen[lr]. Y echaron suertes, repartiéndose entre sí sus vestidos(YB). 35 Y el pueblo estaba allí mirando; y aun los gobernantes(YC) se mofaban de Él, diciendo: A otros salvó; que se salve a sí mismo(YD) si este es el Cristo[ls] de Dios, su Escogido. 36 Los soldados también se burlaban de Él, acercándose y ofreciéndole vinagre(YE), 37 y diciendo: Si tú eres el Rey de los judíos, sálvate a ti mismo(YF). 38 Había también una inscripción sobre Él[lt], que decía: ESTE ES EL REY DE LOS JUDÍOS(YG).

Los dos malhechores

39 Y uno de los malhechores que estaban colgados allí le lanzaba insultos[lu](YH), diciendo: ¿No eres tú el Cristo[lv]? ¡Sálvate a ti mismo(YI) y a nosotros! 40 Pero el otro le contestó, y reprendiéndole, dijo: ¿Ni siquiera temes tú a Dios a pesar de que estás bajo la misma condena? 41 Y nosotros a la verdad, justamente, porque recibimos lo que merecemos por nuestros hechos[lw]; pero este nada malo ha hecho. 42 Y decía: Jesús, acuérdate de mí cuando vengas en[lx] tu reino. 43 Entonces Él le dijo: En verdad te digo: hoy estarás conmigo en el paraíso(YJ).

Muerte de Jesús

44 (YK)Era ya como la hora sexta[ly], cuando descendieron[lz] tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora novena[ma](YL) 45 al eclipsarse el sol. El velo del templo se rasgó en dos[mb](YM). 46 Y Jesús, clamando a gran voz, dijo: Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu(YN). Y habiendo dicho esto, expiró(YO). 47 Cuando el centurión vio lo que había sucedido(YP), glorificaba a Dios(YQ), diciendo: Ciertamente, este hombre era inocente[mc]. 48 Y cuando todas las multitudes que se habían reunido para presenciar este espectáculo, al observar lo que había acontecido, se volvieron golpeándose el pecho(YR). 49 Pero todos sus conocidos y las mujeres que le habían acompañado desde Galilea, estaban a cierta distancia viendo estas cosas(YS).

Sepultura de Jesús

50 (YT)Y había[md] un hombre llamado José, miembro del concilio(YU), varón bueno y justo 51 (el cual no había asentido al plan y al proceder de los demás[me]) que era de Arimatea, ciudad de los judíos, y que esperaba el reino de Dios(YV). 52 Este fue a Pilato y le pidió el cuerpo de Jesús, 53 y bajándole, le envolvió en un lienzo de lino, y le puso en un sepulcro excavado en la roca donde nadie había sido puesto todavía. 54 Era el día de la preparación(YW), y estaba para comenzar[mf] el día de reposo. 55 Y las mujeres que habían venido con Él desde Galilea(YX) siguieron detrás, y vieron el sepulcro y cómo fue colocado el[mg] cuerpo. 56 Y cuando regresaron, prepararon especias aromáticas y perfumes(YY).

Y en el día de reposo descansaron según el mandamiento(YZ).

La resurrección

24 (ZA)Pero el primer día de la semana, al rayar el alba, las mujeres vinieron al sepulcro trayendo las especias aromáticas que habían preparado. Y encontraron que la piedra había sido removida del sepulcro, y cuando entraron, no hallaron el cuerpo del Señor Jesús(ZB). Y aconteció que estando ellas perplejas por esto, de pronto[mh] se pusieron junto a ellas dos varones(ZC) en vestiduras resplandecientes(ZD); y estando ellas aterrorizadas e inclinados sus rostros a tierra, ellos les dijeron: ¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive? No está aquí, sino que ha resucitado(ZE). Acordaos cómo os habló cuando estaba aún en Galilea(ZF), diciendo que el Hijo del Hombre debía ser entregado en manos de hombres pecadores, y ser crucificado, y al tercer día resucitar(ZG). Entonces ellas se acordaron de sus palabras(ZH), y regresando del sepulcro, anunciaron todas estas cosas a los once y a todos los demás. 10 Eran María Magdalena y Juana(ZI) y María, la madre de Jacobo[mi](ZJ); también las demás mujeres con ellas referían estas cosas a los apóstoles(ZK). 11 Y a[mj] ellos estas palabras les parecieron como disparates, y no las creyeron(ZL). 12 Pero Pedro se levantó y corrió al sepulcro; e inclinándose para mirar adentro, vio* solo[mk] las envolturas de lino(ZM); y se fue a su casa(ZN), maravillado de lo que había acontecido.

Jesús se manifiesta a dos discípulos

13 Y he aquí que aquel mismo día dos de ellos iban a una aldea(ZO) llamada Emaús, que estaba como a once kilómetros[ml] de Jerusalén. 14 Y conversaban entre sí acerca de todas estas cosas que habían acontecido. 15 Y sucedió que mientras conversaban y discutían, Jesús mismo se acercó y caminaba con ellos. 16 Pero sus ojos estaban velados[mm] para que no le reconocieran(ZP). 17 Y Él les dijo: ¿Qué discusiones[mn] son estas que tenéis entre vosotros mientras vais andando? Y ellos se detuvieron, con semblante triste. 18 Respondiendo uno de ellos, llamado Cleofas, le dijo: ¿Eres tú el único visitante en Jerusalén que no sabe[mo] las cosas que en ella han acontecido en estos días? 19 Entonces Él les dijo: ¿Qué cosas? Y ellos le dijeron: Las referentes a Jesús el Nazareno(ZQ), que fue un profeta[mp](ZR) poderoso en obra y en palabra delante de Dios y de todo el pueblo; 20 y cómo los principales sacerdotes y nuestros gobernantes(ZS) le entregaron a sentencia de muerte y le crucificaron. 21 Pero nosotros esperábamos que Él era el que iba a redimir a Israel(ZT). Pero además de todo esto, este es el tercer día desde que estas cosas acontecieron. 22 Y[mq] también algunas mujeres de entre nosotros nos asombraron; pues cuando fueron de madrugada al sepulcro(ZU), 23 y al no hallar su cuerpo, vinieron diciendo que también habían visto una aparición de ángeles que decían que Él vivía. 24 Algunos de los que estaban con nosotros fueron al sepulcro, y lo hallaron tal como también las mujeres habían dicho; pero a Él no le vieron. 25 Entonces Jesús[mr] les dijo: ¡Oh insensatos y tardos de corazón para creer todo lo que los profetas han dicho(ZV)! 26 ¿No era necesario que el Cristo[ms] padeciera todas estas cosas y entrara en su gloria(ZW)? 27 Y comenzando por[mt] Moisés(ZX) y continuando con[mu] todos los profetas(ZY), les explicó lo referente a Él en todas las Escrituras. 28 Se acercaron a la aldea adonde iban, y Él hizo como que iba más lejos(ZZ). 29 Y ellos le instaron, diciendo: Quédate con nosotros, porque está atardeciendo, y el día ya ha declinado. Y entró a quedarse con ellos. 30 Y sucedió que al sentarse[mv] a la mesa con ellos, tomó pan, y lo bendijo; y partiéndolo, les dio(AAA). 31 Entonces les fueron abiertos los ojos y le reconocieron(AAB); pero Él desapareció de la presencia de ellos. 32 Y se dijeron el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón dentro de nosotros mientras nos hablaba en el camino, cuando nos abría[mw] las Escrituras(AAC)? 33 Y levantándose en esa misma hora, regresaron a Jerusalén, y hallaron reunidos a los once(AAD) y a los que estaban con ellos(AAE), 34 que decían: Es verdad que el Señor ha resucitado(AAF) y se ha aparecido a Simón(AAG). 35 Y ellos contaban sus experiencias[mx] en el camino, y cómo le habían reconocido en el partir del pan(AAH).

Jesús se aparece a los discípulos

36 Mientras ellos relataban estas cosas, Jesús[my] se puso en medio de ellos(AAI), y les dijo: Paz a vosotros. 37 Pero ellos, aterrorizados y asustados, pensaron que veían un espíritu(AAJ). 38 Y Él les dijo: ¿Por qué estáis turbados, y por qué surgen dudas en vuestro corazón? 39 Mirad mis manos y mis pies(AAK), que soy yo mismo; palpadme y ved(AAL), porque un espíritu no tiene carne ni huesos como veis que yo tengo. 40 Y cuando dijo esto, les mostró las manos y los pies. 41 Como ellos todavía no lo creían a causa de la alegría(AAM) y que estaban asombrados, les dijo: ¿Tenéis aquí algo de comer(AAN)? 42 Entonces ellos le presentaron parte de un pescado asado[mz]. 43 Y Él lo tomó y comió delante de ellos(AAO).

La gran comisión

44 Y les dijo: Esto es lo que yo os decía[na](AAP) cuando todavía estaba con vosotros: que era necesario que se cumpliera todo lo que sobre mí está escrito en la ley de Moisés(AAQ), en los profetas(AAR) y en los salmos(AAS). 45 Entonces les abrió la mente para que comprendieran las Escrituras(AAT), 46 y les dijo: Así está escrito, que el Cristo[nb] padeciera(AAU) y resucitara de entre los muertos al tercer día(AAV); 47 y que en su nombre se predicara el arrepentimiento para el perdón[nc] de los pecados(AAW) a todas las naciones(AAX), comenzando desde Jerusalén. 48 Vosotros sois testigos de estas cosas(AAY). 49 Y he aquí, yo enviaré sobre vosotros la promesa de mi Padre(AAZ); pero vosotros, permaneced en la ciudad hasta que seáis investidos con poder de lo alto(ABA).

Jesús se despide de sus discípulos

50 Entonces los condujo fuera de la ciudad, hasta cerca de Betania(ABB), y alzando sus manos, los bendijo. 51 Y aconteció que mientras los bendecía, se separó de ellos y fue llevado arriba al cielo. 52 Ellos, después de adorarle, regresaron a Jerusalén con gran gozo, 53 y estaban siempre en el templo alabando[nd] a Dios.

Footnotes

  1. Lucas 7:36 Lit., se recostó
  2. Lucas 7:37 Lit., recostado
  3. Lucas 7:39 Lit., para sí diciendo
  4. Lucas 7:39 Algunos mss. dicen: el profeta
  5. Lucas 7:41 Un denario valía aprox. 4 gramos de plata, o el equivalente al salario de un día
  6. Lucas 7:45 Lit., no cesaba
  7. Lucas 7:49 Lit., reclinados
  8. Lucas 8:1 Lit., Y sucedió
  9. Lucas 8:13 Lit., y
  10. Lucas 8:13 Lit., quienes creen
  11. Lucas 8:18 O, parece tener
  12. Lucas 8:22 Lit., Y sucedió que
  13. Lucas 8:23 Lit., tempestad de viento
  14. Lucas 8:26 Otros mss. dicen: guerasenos, o, guerguesenos, y así en el vers. 37
  15. Lucas 8:28 Lit., ¿Qué a mí y a ti
  16. Lucas 8:29 Algunas versiones traducen: que hacía mucho tiempo
  17. Lucas 8:29 O, le había atacado con fuerza, y
  18. Lucas 8:32 Lit., a ellos
  19. Lucas 8:36 Lit., salvado
  20. Lucas 8:37 Lit., multitud
  21. Lucas 8:38 Lit., estar con Él
  22. Lucas 8:39 O, todo lo que
  23. Lucas 8:39 O, todo lo que
  24. Lucas 8:41 O, principal
  25. Lucas 8:42 O, solo una hija
  26. Lucas 8:43 Algunos mss. antiguos no incluyen: y que había...cuanto tenía
  27. Lucas 8:45 Algunos mss. antiguos no incluyen: y los...estaban
  28. Lucas 8:48 Lit., salvado
  29. Lucas 8:50 Lit., salvada
  30. Lucas 8:51 O, Santiago
  31. Lucas 9:3 O, mochila, o, bolsa
  32. Lucas 9:10 Lit., El
  33. Lucas 9:11 Lit., las multitudes
  34. Lucas 9:12 Lit., provisiones
  35. Lucas 9:16 Lit., pusieran delante de
  36. Lucas 9:18 Lit., Y sucedió que
  37. Lucas 9:18 Lit., El
  38. Lucas 9:20 I.e., Mesías
  39. Lucas 9:24 O, alma
  40. Lucas 9:24 O, alma
  41. Lucas 9:25 Lit., y
  42. Lucas 9:28 Lit., Y sucedió que
  43. Lucas 9:28 O, Santiago
  44. Lucas 9:29 Lit., centelleando como el rayo
  45. Lucas 9:31 O, relampagueante
  46. Lucas 9:31 Lit., El
  47. Lucas 9:32 Lit., El
  48. Lucas 9:33 O, tiendas sagradas
  49. Lucas 9:35 Algunos mss. dicen: Amado
  50. Lucas 9:36 Lit., ocurrió
  51. Lucas 9:38 O, es mi unigénito
  52. Lucas 9:39 Lit., con
  53. Lucas 9:43 O, majestad
  54. Lucas 9:44 Lit., Poned
  55. Lucas 9:45 Lit., esta palabra
  56. Lucas 9:45 Lit., esta palabra
  57. Lucas 9:46 Lit., se introdujo
  58. Lucas 9:47 Lit., el razonamiento de
  59. Lucas 9:48 O, humilde
  60. Lucas 9:51 Lit., su recepción arriba
  61. Lucas 9:53 Lit., porque su rostro iba hacia
  62. Lucas 9:54 O, Santiago
  63. Lucas 9:54 Algunos mss. agregan: como lo hizo también Elías
  64. Lucas 9:55 Muchos mss. antiguos no incluyen las palabras: y dijo: Vosotros...sino para salvarlas, de los vers. 55 y 56
  65. Lucas 9:59 Algunos mss. no incluyen: Señor
  66. Lucas 10:1 Algunos mss. antiguos dicen: setenta y dos
  67. Lucas 10:4 O, mochila, o, bolsa
  68. Lucas 10:7 O, en la casa misma
  69. Lucas 10:7 Lit., las cosas de ellos
  70. Lucas 10:13 Lit., las obras de poder
  71. Lucas 10:15 I.e., la región de los muertos
  72. Lucas 10:17 Algunos mss. antiguos dicen: setenta y dos
  73. Lucas 10:25 I.e., un experto en la ley de Moisés
  74. Lucas 10:25 Lit., poniéndole
  75. Lucas 10:26 Lit., ¿Cómo
  76. Lucas 10:35 Un denario valía aprox. 4 gramos de plata, o el equivalente al salario de un día
  77. Lucas 10:39 Lit., que también
  78. Lucas 10:40 Lit., el mucho servicio
  79. Lucas 10:42 Algunos mss. dicen: unas pocas cosas son necesarias
  80. Lucas 10:42 Lit., porque
  81. Lucas 11:1 Lit., El
  82. Lucas 11:2 Algunos mss. incluyen en los vers. 2, 3 y 4, frases que se encuentran en Mat. 6:9-13
  83. Lucas 11:3 O, diariamente
  84. Lucas 11:3 O, para el día venidero
  85. Lucas 11:5 Lit., ¿Quién de vosotros
  86. Lucas 11:6 Lit., ponerle delante
  87. Lucas 11:7 Lit., están conmigo en la cama
  88. Lucas 11:8 O, insistencia
  89. Lucas 11:11 Lit., Pero ¿a cuál de vosotros el hijo le pedirá al padre
  90. Lucas 11:11 Algunos mss. antiguos no incluyen: pan,...o si un
  91. Lucas 11:12 Lit., O también
  92. Lucas 11:13 Lit., Padre del cielo
  93. Lucas 11:16 Lit., poniéndole
  94. Lucas 11:16 O, un milagro
  95. Lucas 11:17 Lit., una casa contra una casa
  96. Lucas 11:21 Lit., el
  97. Lucas 11:21 Lit., en paz
  98. Lucas 11:27 O, el vientre
  99. Lucas 11:27 Lit., cargó
  100. Lucas 11:29 O, milagro
  101. Lucas 11:29 O, milagro
  102. Lucas 11:29 O, milagro
  103. Lucas 11:30 O, un milagro
  104. Lucas 11:34 O, claro
  105. Lucas 11:37 Lit., se recostó
  106. Lucas 11:38 Lit., bautizado
  107. Lucas 11:39 Lit., vuestro interior está lleno
  108. Lucas 11:41 O, de lo que tenéis
  109. Lucas 11:41 Lit., he aquí
  110. Lucas 11:45 I.e., expertos en la ley de Moisés
  111. Lucas 11:46 I.e., expertos en la ley de Moisés
  112. Lucas 11:47 O, monumentos a
  113. Lucas 11:49 O, echarán fuera
  114. Lucas 11:50 O, se le exija
  115. Lucas 11:51 O, se le exigirá
  116. Lucas 11:52 I.e., expertos en la ley de Moisés
  117. Lucas 11:54 Lit., algo de su boca
  118. Lucas 12:1 Gr., miríadas
  119. Lucas 12:1 Lit., pisoteaban
  120. Lucas 12:3 Lit., hablado al oído
  121. Lucas 12:5 Gr., guéenna
  122. Lucas 12:6 O, gorriones
  123. Lucas 12:6 Gr., assaria; un cuarto equivale aprox. a 1/16 denario
  124. Lucas 12:8 Lit., por mí
  125. Lucas 12:8 Lit., por él
  126. Lucas 12:9 O, en presencia
  127. Lucas 12:9 O, en presencia
  128. Lucas 12:22 O, alma
  129. Lucas 12:25 Lit., un codo
  130. Lucas 12:25 Lit., a su estatura
  131. Lucas 12:27 Algunos mss. no incluyen: crecen
  132. Lucas 12:32 Lit., se ha complacido
  133. Lucas 12:35 Lit., Estén ceñidos vuestros lomos
  134. Lucas 12:37 Lit., recostará
  135. Lucas 12:38 I.e., desde las nueve de la noche hasta la medianoche
  136. Lucas 12:38 I.e., desde la medianoche hasta las tres de la mañana
  137. Lucas 12:39 Lit., Y sabed esto
  138. Lucas 12:39 Lit., que horadara
  139. Lucas 12:40 Lit., penséis
  140. Lucas 12:42 Lit., su servicio
  141. Lucas 12:45 Lit., tarda
  142. Lucas 12:46 Lit., lo cortará en dos
  143. Lucas 12:46 Lit., su parte
  144. Lucas 12:48 Lit., golpes
  145. Lucas 12:49 O, Vine
  146. Lucas 12:49 Lit., ¿qué quiero si ya está
  147. Lucas 12:56 Lit., cómo
  148. Lucas 12:58 Lit., ser absuelto por él
  149. Lucas 12:59 O, la última blanca; gr., lepton, la moneda de menos valor (1/128 de un denario)
  150. Lucas 13:1 O, derramado junto
  151. Lucas 13:4 O, culpables
  152. Lucas 13:11 Lit., y he aquí
  153. Lucas 13:14 Lit., respondiendo, decía
  154. Lucas 13:21 Gr., sata; un sato equivale aprox. a 13 litros
  155. Lucas 13:25 Lit., y Él
  156. Lucas 13:29 Lit., recostarán
  157. Lucas 13:32 Lit., He aquí, yo
  158. Lucas 13:32 O, completo mi obra
  159. Lucas 13:35 Muchos mss. antiguos no incluyen: desierta
  160. Lucas 14:1 Lit., El
  161. Lucas 14:1 I.e., miembro del Sanedrín
  162. Lucas 14:2 Lit., he aquí
  163. Lucas 14:3 Lit., respondiendo
  164. Lucas 14:3 I.e., expertos en la ley de Moisés
  165. Lucas 14:5 Algunos mss. antiguos dicen: asno
  166. Lucas 14:8 Lit., no te recuestes en
  167. Lucas 14:9 O, comiences a ocupar el
  168. Lucas 14:10 Lit., recuéstate
  169. Lucas 14:10 Lit., sube más arriba
  170. Lucas 14:10 Lit., se reclinan
  171. Lucas 14:12 Lit., y te sea hecha
  172. Lucas 14:13 O, lisiados
  173. Lucas 14:14 O, dichoso
  174. Lucas 14:15 Lit., reclinados
  175. Lucas 14:15 O, Dichoso
  176. Lucas 14:18 O, campo
  177. Lucas 14:21 O, lisiados
  178. Lucas 14:26 I.e., en comparación a su amor por Él
  179. Lucas 14:32 O, embajada
  180. Lucas 15:1 O, publicanos; i.e., los que explotaban la recaudación de los impuestos romanos
  181. Lucas 15:1 Lit., El
  182. Lucas 15:4 Lit., desierto
  183. Lucas 15:8 Gr., dracmas; una dracma equivalía al salario de un día
  184. Lucas 15:12 Lit., los medios de vida
  185. Lucas 15:15 Lit., se unió
  186. Lucas 15:16 Lit., vientre
  187. Lucas 15:16 Muchos mss. antiguos dicen: deseaba saciarse de
  188. Lucas 15:20 Lit., lo besó una y otra vez
  189. Lucas 15:21 Algunos mss. antiguos agregan: Hazme como uno de tus trabajadores
  190. Lucas 15:30 Lit., tus medios de vida
  191. Lucas 15:31 Lit., estás
  192. Lucas 16:4 Lit., He llegado al conocimiento de
  193. Lucas 16:6 Gr., batos; medida de 37 litros
  194. Lucas 16:7 Gr., coros; medida de 370 litros
  195. Lucas 16:8 Lit., su generación
  196. Lucas 16:9 Gr., mamonás
  197. Lucas 16:11 Gr., mamonás
  198. Lucas 16:12 Algunos mss. dicen: nuestro
  199. Lucas 16:13 O, criado
  200. Lucas 16:13 Gr., mamonás
  201. Lucas 16:17 O, una tilde
  202. Lucas 16:17 Lit., caiga
  203. Lucas 16:18 O, repudia a
  204. Lucas 16:18 O, la repudiada por el
  205. Lucas 16:23 I.e., la región de los muertos
  206. Lucas 16:23 Lit., habiendo alzado
  207. Lucas 16:26 Lit., Y en
  208. Lucas 16:26 Lit., ni puedan
  209. Lucas 16:28 O, les testifique
  210. Lucas 17:1 O, escándalos
  211. Lucas 17:2 O, escandalizar
  212. Lucas 17:3 Lit., Cuidaos de vosotros mismos
  213. Lucas 17:4 Lit., lo perdonarás
  214. Lucas 17:6 O, hubiera obedecido
  215. Lucas 17:7 Lit., recuéstate
  216. Lucas 17:8 Lit., cíñete
  217. Lucas 17:8 Lit., después de esto
  218. Lucas 17:11 Lit., por en medio de, o, a lo largo de las fronteras de
  219. Lucas 17:16 Lit., El
  220. Lucas 17:18 Lit., ¿No se hallaron los que regresaron
  221. Lucas 17:19 Lit., salvado
  222. Lucas 17:20 Lit., con observación
  223. Lucas 17:21 O, dentro de
  224. Lucas 17:24 Lit., debajo
  225. Lucas 17:24 Lit., debajo
  226. Lucas 17:28 Lit., De la misma manera como
  227. Lucas 17:30 Lit., Según las mismas cosas
  228. Lucas 17:33 O, alma
  229. Lucas 17:36 Muchos mss. no incluyen este vers.
  230. Lucas 17:37 O, las águilas
  231. Lucas 18:5 Lit., me abofetee
  232. Lucas 18:7 O, noche, y no obstante es muy paciente en cuanto a ellos?
  233. Lucas 18:8 Lit., la fe
  234. Lucas 18:10 O, publicano; i.e., uno que explotaba la recaudación de los impuestos romanos, y así en los vers. 11 y 13
  235. Lucas 18:13 O, sé propicio a
  236. Lucas 18:16 O, de los tales
  237. Lucas 18:18 O, principal
  238. Lucas 18:25 Lit., entre
  239. Lucas 18:28 Lit., lo nuestro
  240. Lucas 18:40 Lit., puesto en pie
  241. Lucas 18:42 O, Recobra
  242. Lucas 18:42 Lit., salvado
  243. Lucas 19:2 Lit., Y he aquí
  244. Lucas 19:2 Lit., de nombre llamado
  245. Lucas 19:2 O, publicanos; i.e., los que explotaban la recaudación de los impuestos romanos
  246. Lucas 19:6 Lit., regocijándose
  247. Lucas 19:7 O, a ser huésped de
  248. Lucas 19:13 Una mina equivalía al salario de unos cien días, y así en el resto del cap.
  249. Lucas 19:13 Lit., en lo que vengo
  250. Lucas 19:15 Lit., lo que habían negociado; algunos mss. dicen: qué había negociado cada uno
  251. Lucas 19:19 Lit.,
  252. Lucas 19:22 Lit., malo
  253. Lucas 19:22 Lit., de tu boca
  254. Lucas 19:29 O, huerto de los Olivos
  255. Lucas 19:30 Lit., hombre
  256. Lucas 19:33 Lit., señores
  257. Lucas 19:37 U, obras de poder
  258. Lucas 19:43 Lit., y
  259. Lucas 19:48 Lit., lo que harían
  260. Lucas 20:3 Lit., preguntaré una palabra
  261. Lucas 20:8 Lit., os digo
  262. Lucas 20:13 Lit., señor
  263. Lucas 20:15 Lit., señor
  264. Lucas 20:17 Lit., ¿qué es
  265. Lucas 20:17 Lit., cabeza del ángulo
  266. Lucas 20:20 Lit., tomarle en su palabra
  267. Lucas 20:21 Lit., no recibes apariencia
  268. Lucas 20:22 Lit., dar
  269. Lucas 20:24 Un denario valía aprox. 4 gramos de plata, o el equivalente al salario de un día
  270. Lucas 20:26 Lit., tomarle en su palabra
  271. Lucas 20:30 Algunos mss. agregan: tomó la mujer, el cual también murió sin hijos
  272. Lucas 20:41 I.e., el Mesías
  273. Lucas 21:1 O, donativos
  274. Lucas 21:2 O, blancas; gr., lepta, las monedas de menos valor (1/128 de un denario)
  275. Lucas 21:4 O, el donativo
  276. Lucas 21:4 O, de su abundancia
  277. Lucas 21:4 Lit., toda la subsistencia que tenía
  278. Lucas 21:5 Lit., que
  279. Lucas 21:7 Lit., será
  280. Lucas 21:7 O, milagro
  281. Lucas 21:8 I.e., el Mesías
  282. Lucas 21:11 O, milagros
  283. Lucas 21:13 Lit., Esto os llevará a un testimonio
  284. Lucas 21:15 Lit., una boca
  285. Lucas 21:19 O, conservaréis vuestras vidas
  286. Lucas 21:21 Lit., ella
  287. Lucas 21:25 O, milagros
  288. Lucas 21:26 Lit., la tierra habitada
  289. Lucas 21:28 O, cobrad ánimo
  290. Lucas 21:37 Lit., los días
  291. Lucas 21:37 Lit., por las noches
  292. Lucas 21:38 Lit., a Él en el templo
  293. Lucas 22:1 O, de los ázimos
  294. Lucas 22:2 Lit., El
  295. Lucas 22:3 O, que era del
  296. Lucas 22:6 O, sin que la gente lo advirtiera
  297. Lucas 22:7 O, de los ázimos
  298. Lucas 22:14 Lit., se recostó
  299. Lucas 22:26 O, el más joven
  300. Lucas 22:27 Lit., se reclina
  301. Lucas 22:27 Lit., se reclina
  302. Lucas 22:43 Algunos mss. antiguos no incluyen los vers. 43 y 44
  303. Lucas 22:49 Lit., El
  304. Lucas 22:50 Lit., quitó
  305. Lucas 22:51 O, Dejadme cuando menos hacer esto, y
  306. Lucas 22:53 Lit., esta es vuestra hora y el poder de las tinieblas
  307. Lucas 22:58 Lit., yo no soy
  308. Lucas 22:63 Lit., El
  309. Lucas 22:64 O, Profetiza
  310. Lucas 22:66 I.e., el Sanedrín
  311. Lucas 22:66 Lit., El
  312. Lucas 22:66 O, Sanedrín
  313. Lucas 22:67 I.e., el Mesías
  314. Lucas 23:1 Lit., El
  315. Lucas 23:2 Lit., dar
  316. Lucas 23:2 I.e., el Mesías
  317. Lucas 23:7 Lit., estos
  318. Lucas 23:8 O, milagro
  319. Lucas 23:9 Lit., con muchas palabras
  320. Lucas 23:9 Lit., El
  321. Lucas 23:14 Lit., y he aquí
  322. Lucas 23:15 Lit., nada ha sido hecho por Él
  323. Lucas 23:17 Algunos mss. antiguos no incluyen este vers.
  324. Lucas 23:19 Lit., El cual
  325. Lucas 23:24 Lit., sentenció
  326. Lucas 23:27 Lit., se golpeaban el pecho
  327. Lucas 23:29 O, Bienaventuradas
  328. Lucas 23:33 En latín, Calvarius; i.e., Calvario
  329. Lucas 23:33 Lit., El
  330. Lucas 23:34 Algunos mss. antiguos no incluyen: Y Jesús decía:...hacen.
  331. Lucas 23:35 I.e., el Mesías
  332. Lucas 23:38 Algunos mss. agregan: escrita en caracteres griegos, latinos y hebreos
  333. Lucas 23:39 O, blasfemias
  334. Lucas 23:39 I.e., el Mesías
  335. Lucas 23:41 Lit., cosas dignas de lo que hemos hecho
  336. Lucas 23:42 Algunos mss. dicen: a
  337. Lucas 23:44 I.e., las doce del día
  338. Lucas 23:44 O, hubo
  339. Lucas 23:44 I.e., las tres de la tarde
  340. Lucas 23:45 Lit., por el medio
  341. Lucas 23:47 Lit., justo
  342. Lucas 23:50 Lit., Y he aquí
  343. Lucas 23:51 Lit., de ellos
  344. Lucas 23:54 Lit., y amanecía
  345. Lucas 23:55 Lit., su
  346. Lucas 24:4 Lit., y he aquí
  347. Lucas 24:10 O, Santiago
  348. Lucas 24:11 Lit., Y ante
  349. Lucas 24:12 O, por sí solos
  350. Lucas 24:13 Lit., 60 estadios
  351. Lucas 24:16 Lit., impedidos
  352. Lucas 24:17 Lit., palabras
  353. Lucas 24:18 O, ¿Estás visitando a Jerusalén tú solo, y no sabes
  354. Lucas 24:19 Lit., varón profeta
  355. Lucas 24:22 Lit., Pero
  356. Lucas 24:25 Lit., El
  357. Lucas 24:26 I.e., el Mesías
  358. Lucas 24:27 Lit., desde
  359. Lucas 24:27 Lit., desde
  360. Lucas 24:30 Lit., recostarse
  361. Lucas 24:32 O, explicaba
  362. Lucas 24:35 Lit., las cosas
  363. Lucas 24:36 Lit., El
  364. Lucas 24:42 Algunos mss. agregan: y un panal de miel
  365. Lucas 24:44 Lit., Estas son mis palabras que os hablé
  366. Lucas 24:46 I.e., el Mesías
  367. Lucas 24:47 Algunos mss. dicen: y el perdón
  368. Lucas 24:53 Lit., bendiciendo

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