Todo el excedente de las contribuciones oficiales para el culto, que los funcionarios no estaban dando como al principio, será entregado de ahora en adelante para las obras del templo.
Además, les daré todo lo que ha sobrado de las contribuciones de los funcionarios, lo cual dejaron de pagarme en años anteriores, y así tendrán dinero para los trabajos del templo.