Revised Common Lectionary (Semicontinuous)
El Señor libra de los enemigos
Canto para los peregrinos.
1 He tenido muchos enemigos desde mi juventud,
que lo diga Israel,
2 he tenido muchos enemigos desde mi juventud,
pero no han podido acabar conmigo.
3 Me pasaron el arado sobre la espalda,
abriéndome surcos profundos,
4 pero el SEÑOR que es justo,
cortó las cuerdas con que me ataban esos perversos.
5 Que todos los que odian a Sion sean humillados
y tengan que retroceder.
6 Que sean como la hierba en el tejado
que antes de crecer ya se ha secado;
7 hierba de la que el segador no recoge ni un manojo,
ni mucho menos le alcanza para llenar su regazo.
8 Nadie que pase le dirá a esa hierba:
«El SEÑOR los bendiga;
los bendecimos en el nombre del SEÑOR».
Mensaje para Babilonia
50 Este es el mensaje que el SEÑOR dio acerca de Babilonia y del pueblo babilonio, por medio del profeta Jeremías:
2 «Anuncien este mensaje a las naciones para que todos lo conozcan.
Levanten bandera para llamar la atención;
no oculten nada, sino digan:
“¡Babilonia será conquistada!
¡Bel será humillado!
¡Marduc quedará aterrado!
Las imágenes y los ídolos de Babilonia
quedarán en ridículo y aterrorizados”.
3 Porque una nación del norte
se ha levantado contra Babilonia
para dejarla convertida en un desierto.
Todos, seres humanos y animales, huirán
y nadie volverá a vivir allí.
4 »En esos días, por ese tiempo, dice el SEÑOR,
el pueblo de Israel junto con el pueblo de Judá
vendrán llorando buscando al SEÑOR su Dios.
5 Preguntarán por el camino de Sion
y se irán hacia allá, diciendo:
“Vengan y unámonos al SEÑOR
en un pacto eterno, que jamás se olvidará”.
6 »Mi pueblo ha sido como un rebaño extraviado;
sus pastores lo descarriaron
y lo dispersaron por las montañas.
Han ido de monte en monte
y se han olvidado de su corral.
7 Los que lo encontraban, lo devoraban;
sus enemigos decían: “No somos culpables,
porque ellos pecaron contra el SEÑOR, su lugar de descanso;
contra el SEÑOR, la esperanza de sus antepasados”.
17 »Israel es un rebaño descarriado,
dispersado por leones.
Primero se lo devoró el rey de Asiria,
y después Nabucodonosor, rey de Babilonia,
lo que hizo fue roerle todos los huesos».
18 Por eso, el SEÑOR Todopoderoso,
Dios de Israel, dice:
«Castigaré al rey de Babilonia y su tierra,
de la misma manera que castigué al rey de Asiria.
19 Haré regresar a Israel a su campo
y que coma pasto en el Carmelo y en Basán.
En los montes de Efraín y Galaad
tendrá comida en abundancia.
20 En esos días y en aquel tiempo,
dice el SEÑOR,
se buscará la maldad de Israel,
pero ya no aparecerá.
Buscarán la maldad de Judá,
pero tampoco la encontrarán,
porque yo perdonaré a los que dejé con vida.
Jesús ora solo
(Mt 26:36-46; Mr 14:32-42)
39 Como de costumbre, Jesús salió de la ciudad al monte de los Olivos, y sus seguidores fueron con él. 40 Al llegar ahí, les dijo:
—Oren para que no caigan en tentación.
41 Entonces Jesús se alejó un poco de ellos, se arrodilló y oró: 42 «Padre, líbrame de esta copa, pero que no se haga mi voluntad, sino la tuya». 43 Entonces apareció un ángel del cielo que fue enviado para darle fuerzas. 44 Él estaba sufriendo mucho y oraba con fervor. El sudor era como gotas de sangre que caían al suelo.[a] 45 Cuando Jesús terminó de orar, fue a donde estaban sus seguidores. Se quedaron dormidos vencidos de tristeza. 46 Jesús les dijo:
—¿Por qué están durmiendo? ¡Levántense y oren para que no caigan en tentación!
© 2005, 2008, 2012, 2015 Centro Mundial de Traducción de La Biblia © 2005, 2008, 2012, 2015 Bible League International