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Revised Common Lectionary (Semicontinuous)

Daily Bible readings that follow the church liturgical year, with sequential stories told across multiple weeks.
Duration: 1245 days
La Biblia de las Américas (LBLA)
Version
Salmos 112:1-9

Prosperidad del que teme al Señor

112 ¡Aleluya[a]!
Cuán bienaventurado es el hombre que teme[b] al Señor(A),
que mucho se deleita en sus mandamientos(B).
Poderosa en la tierra será su descendencia[c](C);
la generación de los rectos será bendita(D).
Bienes y riquezas hay en su casa(E),
y su justicia permanece para siempre.
Luz resplandece en las tinieblas para el que es recto(F);
Él es clemente, compasivo y justo(G).
Bien le va al hombre que se apiada y presta(H);
arreglará sus asuntos con juicio[d].
Porque nunca será sacudido(I);
para siempre será recordado[e] el justo(J).

No temerá recibir malas noticias(K);
su corazón está firme(L), confiado en el Señor(M).
Su corazón está seguro(N), no temerá(O),
hasta que vea vencidos a sus adversarios(P).
Con liberalidad[f] ha dado a los pobres(Q);
su justicia permanece para siempre;
su poder[g] será exaltado con honor[h](R).

Salmos 112:10

10 Lo verá el impío y se irritará(A);
rechinará los dientes(B) y se consumirá(C);
el deseo de los impíos perecerá(D).

Deuteronomio 4:1-14

Moisés exhorta al pueblo a la obediencia

Ahora pues, oh Israel, escucha los estatutos y los decretos que yo os enseño para que los ejecutéis(A), a fin de que viváis y entréis a tomar posesión de la tierra que el Señor, el Dios de vuestros padres, os da(B). No añadiréis nada a la palabra que yo os mando(C), ni quitaréis nada de ella(D), para que guardéis los mandamientos del Señor vuestro Dios que yo os mando. Vuestros ojos han visto lo que hizo el Señor en el caso de Baal-peor, pues a todo hombre que siguió a Baal-peor, el Señor tu Dios lo destruyó de en medio de ti(E). Mas vosotros, que permanecisteis fieles al Señor vuestro Dios, todos estáis vivos hoy. Mirad, yo os he enseñado estatutos y decretos tal como el Señor mi Dios me ordenó(F), para que los cumpláis en medio de la tierra en que vais a entrar para poseerla. Así que guardadlos y ponedlos por obra, porque esta será vuestra sabiduría y vuestra inteligencia ante los ojos de los pueblos que al escuchar todos estos estatutos, dirán: «Ciertamente esta gran nación es un pueblo sabio e inteligente(G)». Porque, ¿qué nación grande(H) hay que tenga un dios tan cerca de ella como está el Señor nuestro Dios(I) siempre que le invocamos(J)? ¿O qué nación grande hay que tenga estatutos y decretos(K) tan justos como toda esta ley que hoy pongo delante de vosotros?

Israel en Horeb

Por tanto, cuídate y guarda tu alma con diligencia, para que no te olvides(L) de las cosas que tus ojos han visto, y no se aparten de tu corazón todos los días de tu vida(M); sino que las hagas saber a tus hijos y a tus nietos(N). 10 Recuerda el día que estuviste delante del Señor tu Dios en Horeb, cuando el Señor me dijo: «Reúneme el pueblo para que yo les haga oír mis palabras, a fin de que aprendan a temerme[a] todos los días que vivan sobre la tierra(O) y las enseñen a sus hijos(P)». 11 Os acercasteis, pues, y permanecisteis al pie del monte, y el monte ardía en fuego(Q) hasta el mismo cielo[b]: oscuridad, nube y densas tinieblas. 12 Entonces el Señor os habló de en medio del fuego; oísteis su voz[c], solo la voz[d], pero no visteis figura alguna. 13 Y Él os declaró su pacto, el cual os mandó poner por obra: esto es, los diez mandamientos(R), y los[e] escribió en dos tablas de piedra(S). 14 Y el Señor me ordenó en aquella ocasión que os enseñara estatutos y decretos, a fin de que los cumpliérais en la tierra a la cual vais a entrar para poseerla.

1 Juan 5:1-5

La fe que vence al mundo

Todo aquel que cree que Jesús es el Cristo[a](A), es nacido[b](B) de Dios; y todo aquel que ama al Padre[c], ama al que ha nacido[d] de Él(C). En esto sabemos(D) que amamos a los hijos de Dios(E): cuando amamos a Dios y guardamos[e] sus mandamientos. Porque este es el amor de Dios(F): que guardemos sus mandamientos(G), y sus mandamientos no son gravosos(H). Porque todo lo que es nacido[f] de Dios(I) vence al mundo(J); y esta es la victoria que ha vencido al mundo: nuestra fe. ¿Y quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios(K)?

La Biblia de las Américas (LBLA)

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