Revised Common Lectionary (Semicontinuous)
Esperanza en la salvación del Señor
Cántico gradual.
130 A ti clamo, Señor,
desde el fondo de mi angustia.
2 ¡Escucha, Señor, mi voz!
¡Que no se cierren tus oídos
al clamor de mi súplica!
3 Señor, si te fijaras en nuestros pecados,
¿quién podría sostenerse en tu presencia?
4 Pero en ti hallamos perdón,
para que seas reverenciado.
5 Señor, toda mi vida he esperado en ti,
y he confiado en tus promesas.
6 Yo te espero, Señor, con toda el alma,
como esperan los centinelas la mañana,
como esperan los vigilantes el nuevo día.
7 Israel, confía en el Señor,
porque el Señor es misericordioso;
¡en él hay abundante redención!
8 El Señor salvará a Israel
de todos sus pecados.(A)
Absalón se subleva contra David
15 Algún tiempo después, Absalón se hizo de carros de combate y de caballos, y de cincuenta hombres que marchaban al frente de él. 2 Todas las mañanas se levantaba y se ponía a un lado del camino, junto a la puerta de la ciudad, y a quien acudía al rey para resolver un pleito o para pedir justicia, lo llamaba y le preguntaba: «¿Tú, de qué ciudad vienes?» Si el interrogado respondía: «Tu siervo es de una de las tribus de Israel», 3 Absalón le decía: «Tus razones son buenas y justas, pero de parte del rey no tienes quién te oiga.» 4 Incluso añadía: «¡Cómo quisiera ser el juez de este país! ¡Así, los que tuvieran algún pleito o negocio vendrían a verme, y yo les haría justicia!» 5 Y si alguien se acercaba y se inclinaba ante él, Absalón le tendía los brazos y lo besaba. 6 Esto lo hacía con todos los israelitas que acudían al rey para que les hiciera justicia, y así se iba ganando la buena voluntad del pueblo de Israel.
7 Así pasaron cuatro años, y un día Absalón le dijo al rey:
«Ruego a Su Majestad me permita ir a Hebrón. Debo cumplir con mis votos al Señor. 8 Cuando este siervo de Su Majestad aún vivía en Gesur, en Siria, le hizo esta promesa al Señor: “Si tú, Señor, me permites volver a Jerusalén, yo te serviré.”»
9 El rey le dijo:
«Puedes irte en paz.»
Entonces Absalón se puso en camino hacia Hebrón, 10 pero envió mensajeros por todas las tribus de Israel para que dijeran: «Cuando escuchen el sonido de la trompeta, anuncien que Absalón reina en Hebrón.» 11 Además, Absalón invitó a doscientos hombres de Jerusalén para que lo acompañaran, los cuales fueron inocentemente, sin saber cuáles eran sus intenciones. 12 Y mientras Absalón presentaba sus ofrendas al Señor, mando llamar a Ajitofel, que era consejero del rey y vivía en la ciudad de Gilo. Con esto la conspiración ganó fuerza y los seguidores de Absalón aumentaron.
13 Entonces un mensajero fue a decirle a David que Absalón se estaba ganando la buena voluntad del pueblo de Israel y que muchos lo seguían,
La oración, y la regla de oro(A)
7 »Pidan, y se les dará, busquen, y encontrarán, llamen, y se les abrirá. 8 Porque todo aquel que pide, recibe, y el que busca, encuentra, y al que llama, se le abre. 9 ¿Quién de ustedes, si su hijo le pide pan, le da una piedra? 10 ¿O si le pide un pescado, le da una serpiente? 11 Pues si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más su Padre que está en los cielos dará buenas cosas a los que le pidan!
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