Revised Common Lectionary (Complementary)
Elogio de la Palabra de Dios[a]
א Álef
119 Bienaventurados los íntegros
de camino,
los que andan según la ley
del SEÑOR.
2 Bienaventurados los que guardan sus testimonios
y con todo el corazón le buscan.
3 Pues no hacen iniquidad
los que andan en sus caminos.
4 Tú mandaste que tus ordenanzas
fuesen muy guardadas.
5 ¡Ojalá fuesen estables mis caminos
para guardar tus leyes!
6 Entonces yo no sería avergonzado
al observar todos tus mandamientos.
7 Te alabaré con rectitud de corazón cuando aprenda tus justos juicios.
8 Tus leyes guardaré;
no me abandones por completo.
32 “‘Ante las canas te pondrás de pie. Darás honor al anciano y tendrás temor de tu Dios. Yo, el SEÑOR.
33 “‘Cuando un extranjero resida con ustedes[a] en la tierra de ustedes, no lo oprimirán. 34 Como a un natural de ustedes considerarán al extranjero que resida entre ustedes. Lo amarás como a ti mismo, porque extranjeros fueron ustedes en la tierra de Egipto. Yo, el SEÑOR, su Dios.
35 “‘No harán injusticia en el juicio, ni en la medida de longitud, ni en la de peso, ni en la de capacidad. 36 Tendrán balanzas justas[b], pesas justas y medidas justas. Yo, el SEÑOR, su Dios que los saqué de la tierra de Egipto.
37 “‘Guarden, pues, todos mis estatutos y todos mis decretos, y pónganlos por obra. Yo, el SEÑOR’ ”.
El hombre es justificado por la fe
21 Pero ahora, aparte de la ley, se ha manifestado la justicia de Dios atestiguada por la Ley y los Profetas. 22 Esta es la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo para todos los que creen. Pues no hay distinción 23 porque todos pecaron y no alcanzan la gloria de Dios, 24 siendo justificados gratuitamente por su gracia mediante la redención que es en Cristo Jesús. 25 Como demostración de su justicia, Dios lo ha puesto a él como expiación por la fe en su sangre, a causa del perdón de los pecados pasados, en la paciencia de Dios, 26 con el propósito de manifestar su justicia en el tiempo presente para que él sea justo y, a la vez, justificador del que tiene fe en Jesús.
27 ¿Dónde, pues, está la jactancia? Está excluida. ¿Por qué clase de ley? ¿Por la de las obras? ¡Jamás! Más bien, por la ley de la fe. 28 Así que consideramos que el hombre es justificado por la fe sin las obras de la ley. 29 ¿Es Dios solamente Dios de los judíos? ¿No lo es también de los gentiles? ¡Por supuesto! También lo es de los gentiles. 30 Porque hay un solo Dios, quien justificará por la fe a los de la circuncisión y, mediante la fe, a los de la incircuncisión. 31 Luego, ¿invalidamos la ley por la fe? ¡De ninguna manera! Más bien, confirmamos la ley.
Version Reina Valera Actualizada, Copyright © 2015 by Editorial Mundo Hispano