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Revised Common Lectionary (Complementary)

Daily Bible readings that follow the church liturgical year, with thematically matched Old and New Testament readings.
Duration: 1245 days
Biblia del Jubileo (JBS)
Version
Ezequiel 18:1-4

18 Y vino Palabra del SEÑOR a mí, diciendo:

¿Qué pensáis vosotros, vosotros que usáis este refrán sobre la tierra de Israel, diciendo: Los padres comieron el agraz, y los dientes de los hijos tienen la dentera?

Vivo yo, dijo el Señor DIOS, que nunca más tendréis por qué usar este refrán en Israel.

He aquí que todas las almas son mías; como el alma del padre, así el alma del hijo es mía; el alma que pecare, esa morirá.

Ezequiel 18:25-32

25 Y si dijereis: No es derecho el camino del Señor, oíd ahora, Casa de Israel: ¿No es derecho mi camino? ¿No son vuestros caminos torcidos?

26 Apartándose el justo de su justicia, y haciendo iniquidad, él morirá en ello; por su iniquidad que hizo, morirá.

27 Y apartándose el impío de su impiedad que hizo, y haciendo juicio y justicia, hará vivir su alma.

28 Porque miró, y se apartó de todas sus rebeliones que hizo, de cierto vivirá; no morirá.

29 Si aún dijere la Casa de Israel: No es derecho el camino del Señor; ¿no son derechos mis caminos, Casa de Israel? Cierto, vuestros caminos no son derechos.

30 Por tanto, yo os juzgaré a cada uno según sus caminos, oh Casa de Israel, dijo el Señor DIOS. Convertíos, y haced convertir de todas vuestras iniquidades; y no os será la iniquidad causa de ruina.

31 Echad de vosotros todas vuestras iniquidades con que te habéis rebelado, y haceos corazón nuevo y espíritu nuevo. ¿Y por qué moriréis, Casa de Israel?

32 Que no quiero la muerte del que muere, dijo el Señor DIOS, convertíos pues, y viviréis.

Salmos 25:1-9

Salmo de David.

Alef

A ti, oh SEÑOR, levantaré mi alma.

Bet

Dios mío, en ti confío; no sea yo avergonzado, no se alegren de mí mis enemigos.

Guímel

Ciertamente ninguno de cuantos en ti esperan será avergonzado; serán avergonzados los que se rebelan sin causa.

Dálet

Tus caminos, oh SEÑOR, me haces saber; tus sendas me enseñas.

He

Encamíname en tu verdad, y enséñame; porque tú eres el Dios de mi salud; a ti he esperado todo el día.

Vau

Acuérdate, oh SEÑOR, de tus conmiseraciones y de tus misericordias, que son perpetuas.

Zain

De los pecados de mi juventud, y de mis rebeliones, no te acuerdes; conforme a tu misericordia acuérdate de mí, por tu bondad, oh SEÑOR.

Chet Bueno y recto es el SEÑOR; por tanto él enseñará a los pecadores el camino.

Tet

Encaminará a los humildes por el juicio, y enseñará a los mansos su carrera.

Filipenses 2:1-13

¶ Por tanto, si hay en vosotros alguna consolación en el Cristo; si algún refrigerio de caridad; si alguna comunión del Espíritu; si algunas entrañas y misericordias,

cumplid mi gozo; que sintáis lo mismo, teniendo una misma caridad, unánimes, sintiendo una misma cosa.

Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien en humildad, estimándoos inferiores los unos a los otros;

no mirando cada uno a lo que es suyo, mas a lo que es de los otros.

Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en el Cristo Jesús;

que siendo en forma de Dios, no tuvo por usurpación ser igual a Dios;

sin embargo, se anonadó a sí mismo, tomando forma de esclavo, hecho semejante a los hombres;

y hallado en la condición como hombre, se humilló a sí mismo, hecho obediente hasta la muerte, y muerte del madero.

Por lo cual Dios también le ensalzó a lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre;

10 que al Nombre de Jesús toda rodilla de lo celestial, de lo terrenal, y de lo infernal se doble.

11 Y todo lenguaje confiese que el Señor Jesús el Cristo está en la gloria de Dios, el Padre.

12 ¶ Por tanto, amados míos, como siempre habéis oído, no como en mi presencia solamente, sino mucho más ahora en mi ausencia, obrad vuestra salud con temor y temblor;

13 porque Dios es el que en vosotros obra así el querer como el hacer, por su buena voluntad.

Mateo 21:23-32

23 ¶ Y como vino al Templo, se acercaron a él cuando estaba enseñando, los príncipes de los sacerdotes y los ancianos del pueblo, diciendo: ¿Con qué autoridad haces esto? ¿Y quién te dio esta autoridad?

24 Y respondiendo Jesús, les dijo: Yo también os preguntaré una palabra, la cual si me dijereis, también yo os diré con qué autoridad hago esto.

25 El bautismo de Juan, ¿de dónde era? ¿Del cielo, o de los hombres? Ellos entonces pensaron entre sí, diciendo: Si decimos, del cielo, nos dirá: ¿Por qué pues no le creisteis?

26 Y si decimos, de los hombres, tememos al pueblo; porque todos tienen a Juan por profeta.

27 Y respondiendo a Jesús, dijeron: No sabemos. Y él también les dijo: Ni yo os digo con qué autoridad hago esto.

28 ¶ Pero, ¿qué os parece? Un hombre tenía dos hijos, y llegando al primero, le dijo: Hijo, ve hoy a trabajar en mi viña.

29 Y respondiendo él, dijo: No quiero; mas después, arrepentido, fue.

30 Y llegando al otro, le dijo de la misma manera; y respondiendo él, dijo: Yo voy señor. Y no fue.

31 ¿Cuál de los dos hizo la voluntad del padre? Dicen ellos: El primero. Les dijo Jesús: De cierto os digo, que los publicanos y las rameras os van delante al Reino de Dios.

32 Porque vino a vosotros Juan en camino de justicia (rectitud), y no le creisteis; y los publicanos y las rameras le creyeron; y vosotros, viendo esto, nunca os arrepentisteis después para creerle.

Biblia del Jubileo (JBS)

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