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M’Cheyne Bible Reading Plan

The classic M'Cheyne plan--read the Old Testament, New Testament, and Psalms or Gospels every day.
Duration: 365 days
La Biblia de las Américas (LBLA)
Version
Números 22

Balac y Balaam

22 Después partieron los hijos de Israel y acamparon en las llanuras de Moab, al otro lado del Jordán, frente a Jericó(A).

Y Balac(B), hijo de Zipor, vio todo lo que Israel había hecho a los amorreos. Entonces Moab tuvo mucho temor(C) a causa del pueblo, porque eran muchos; y Moab tuvo miedo ante los hijos de Israel. Y Moab dijo a los ancianos de Madián(D): Esta multitud lamerá todo lo que hay a nuestro derredor, como el buey lame la hierba del campo. Y en aquel tiempo Balac, hijo de Zipor, era rey de Moab. Y envió mensajeros a Balaam, hijo de Beor(E), en Petor(F), que está cerca del río[a], en la tierra de los hijos de su pueblo, para llamarlo, diciendo: Mira, un pueblo salió de Egipto y he aquí, cubren la faz de la tierra y habitan frente a mí. Ven ahora, te ruego(G), y maldíceme a este pueblo(H) porque es demasiado poderoso[b] para mí; quizá pueda derrotarlos[c] y echarlos de la tierra. Porque yo sé que a quien tú bendices es bendecido, y a quien tú maldices es maldecido.

Y los ancianos de Moab y los ancianos de Madián fueron con el precio de la adivinación(I) en la mano; y llegaron a Balaam, y le repitieron[d] las palabras de Balac. Y él les dijo: Pasad la noche aquí y yo os traeré palabra según lo que el Señor me diga. Y los jefes de Moab se quedaron con Balaam. Entonces Dios(J) vino a Balaam y le dijo: ¿Quiénes son estos hombres que están contigo? 10 Y Balaam dijo a Dios: Balac, hijo de Zipor, rey de Moab, me ha enviado un mensaje: 11 «Mira, el pueblo que salió de Egipto cubre la faz de la tierra; ven ahora, maldícemelos; quizá yo pueda pelear contra ellos y expulsarlos». 12 Y Dios dijo a Balaam: No vayas con ellos; no maldecirás(K) al pueblo, porque es bendito(L). 13 Balaam se levantó de mañana y dijo a los jefes de Balac: Volved a vuestra tierra, porque el Señor ha rehusado dejarme ir con vosotros. 14 Y los jefes de Moab se levantaron y volvieron a Balac, y le dijeron: Balaam rehusó venir con nosotros.

15 Entonces Balac envió jefes otra vez, más numerosos y más distinguidos que los anteriores[e]. 16 Y fueron a Balaam, y le dijeron: Así dice Balac, hijo de Zipor: «Te ruego que no rehúses venir a mí; 17 porque en verdad te honraré en gran manera, y haré cualquier cosa que me digas. Ven, pues, te ruego, y maldíceme a este pueblo(M)». 18 Y Balaam respondió, y dijo a los siervos de Balac: Aunque Balac me diera su casa llena de plata y oro, yo no podría traspasar el mandamiento[f] del Señor mi Dios(N) para hacer ni poco ni mucho[g]. 19 Pero, os ruego que permanezcáis aquí también esta noche, y sabré qué más me dice el Señor. 20 Y Dios vino a Balaam de noche, y le dijo: Si los hombres han venido a llamarte, levántate y ve con ellos; pero solo dirás[h] la palabra que yo te hable(O).

21 Y Balaam se levantó muy de mañana, aparejó su asna y se fue con los jefes de Moab(P). 22 Pero Dios se airó porque él iba, y el ángel(Q) del Señor se puso en el camino como un adversario contra él. Y Balaam iba montado sobre su asna, y sus dos sirvientes con él. 23 Cuando el asna vio al ángel del Señor de pie en el camino con la espada desenvainada en la mano, el asna se salió del camino y se fue por medio del campo; pero Balaam golpeó el asna para hacerla volver al camino. 24 Entonces el ángel del Señor se puso en una senda estrecha de los viñedos, con una pared a un lado y otra pared al otro lado. 25 Al ver el asna al ángel del Señor, se pegó contra la pared y presionó el pie de Balaam contra la pared; entonces él la golpeó otra vez. 26 Y el ángel del Señor se fue más lejos, y se puso en un sitio estrecho donde no había manera de volverse ni a la derecha ni a la izquierda. 27 Y viendo el asna al ángel del Señor, se echó debajo de Balaam; y Balaam se enojó y golpeó al asna con su palo. 28 Entonces el Señor abrió la boca del asna(R), la cual dijo a Balaam: ¿Qué te he hecho yo que me has golpeado estas tres veces? 29 Y Balaam respondió al asna: Porque te has burlado de mí. Ojalá tuviera una espada en mi mano, que ahora mismo te mataba(S). 30 Y el asna dijo a Balaam: ¿No soy yo tu asna, y sobre mí has cabalgado toda tu vida hasta hoy? ¿He tenido la costumbre de portarme así contigo? Y él dijo: No.

31 Entonces el Señor abrió los ojos de Balaam, y él vio al ángel del Señor de pie en el camino, con la espada desenvainada en su mano, e inclinándose, se postró rostro en tierra(T); 32 y el ángel del Señor le dijo: ¿Por qué has golpeado a tu asna estas tres veces? Mira, yo he salido como adversario, porque tu camino me era contrario[i](U); 33 pero el asna me vio y se apartó de mí estas tres veces. Si no se hubiera apartado de mí, ciertamente yo te hubiera matado ahora mismo, y a ella la hubiera dejado vivir. 34 Y Balaam dijo al ángel del Señor: He pecado(V), pues no sabía que tú estabas en el camino para enfrentarte a mí. Pero ahora, si te desagrada, me volveré. 35 El ángel del Señor respondió a Balaam: Ve con los hombres, pero hablarás solo la palabra que yo te diga(W). Y Balaam se fue con los jefes de Balac.

36 Al oír Balac que Balaam se acercaba[j], salió a recibirlo en una ciudad de Moab, que está sobre la frontera del Arnón, al[k] extremo de la frontera. 37 Entonces Balac dijo a Balaam: ¿No envié a llamarte con urgencia? ¿Por qué no viniste a mí? ¿Acaso no soy capaz de honrarte? 38 Balaam respondió a Balac: Mira, ahora he venido a ti. ¿Hay algo, acaso, que pueda decir? La palabra que Dios ponga en mi boca, esa diré(X). 39 Balaam fue con Balac, y llegaron a Quiriat-huzot. 40 Y Balac sacrificó bueyes y ovejas, y envió algunos a Balaam y a los jefes que estaban con él.

41 Y sucedió que a la mañana siguiente, Balac tomó a Balaam y lo hizo subir a los lugares altos de Baal[l](Y), y desde allí vio un extremo del pueblo(Z).

Salmos 62-63

Dios, el único refugio

Para el director del coro; según Jedutún[a]. Salmo de David.

62 En Dios solamente espera en silencio mi alma(A);
de Él viene mi salvación(B).
Solo Él es mi roca y mi salvación(C),
mi baluarte(D), nunca seré sacudido[b].

¿Hasta cuándo atacaréis a un hombre,
vosotros todos, para derribarlo[c],
como pared inclinada(E), como cerca que se tambalea?
Solamente consultan para derribarlo de su eminencia;
en la falsedad se deleitan(F);
bendicen con la boca,
pero por dentro maldicen(G). (Selah[d])

Alma mía, espera en silencio[e] solamente en Dios(H),
pues de Él viene mi esperanza.
Solo Él es mi roca y mi salvación(I),
mi refugio, nunca seré sacudido.
En Dios descansan mi salvación y mi gloria(J);
la roca de mi fortaleza, mi refugio, está en Dios(K).
Confiad en Él en todo tiempo(L), oh pueblo;
derramad vuestro corazón delante de Él(M);
Dios es nuestro refugio. (Selah)

Los hombres de baja condición(N) solo son vanidad(O), y los de alto rango son mentira(P);
en la balanza suben(Q),
todos juntos pesan menos que un soplo.
10 No confiéis en la opresión(R),
ni en el robo pongáis vuestra esperanza[f](S);
si las riquezas aumentan, no pongáis el corazón en ellas(T).

11 Una vez[g] ha hablado Dios(U);
dos veces he oído esto[h]:
Que de Dios es el poder(V);
12 y tuya es, oh Señor, la misericordia(W),
pues tú pagas al hombre conforme a sus obras(X).

El alma sedienta se satisface en Dios

Salmo de David, cuando estaba en el desierto de Judá[i].

63 Oh Dios, tú eres mi Dios(Y); te buscaré con afán[j].
Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela[k](Z)
cual[l] tierra seca y árida donde no hay agua(AA).
Así te contemplaba en el santuario,
para ver tu poder y tu gloria(AB).
Porque tu misericordia es mejor que la vida(AC),
mis labios te alabarán.
Así te bendeciré mientras viva(AD),
en tu nombre alzaré mis manos[m](AE).
Como con médula[n] y grosura está saciada(AF) mi alma;
y con labios jubilosos te alaba mi boca(AG).

Cuando en mi lecho me acuerdo de ti(AH),
en ti medito durante las vigilias de la noche(AI).
Porque tú has sido mi socorro(AJ),
y a la sombra de tus alas(AK) canto gozoso.
A[o] ti se aferra mi alma(AL);
tu diestra me sostiene(AM).

Pero los que buscan mi vida[p] para destruirla(AN),
caerán[q] a las profundidades de la tierra(AO).
10 Serán entregados al[r] poder de la espada(AP);
presa[s] serán de las zorras(AQ).
11 Mas el rey se regocijará en Dios(AR);
y todo el que por Él jura se gloriará(AS),
porque la boca de los que dicen mentiras será cerrada(AT).

Isaías 11-12

Reinado justo del Mesías

11 Y brotará un retoño(A) del tronco de Isaí(B),

y un vástago(C) de sus raíces dará fruto(D).
Y reposará sobre Él el Espíritu del Señor(E),
espíritu de sabiduría y de inteligencia(F),
espíritu de consejo y de poder(G),
espíritu de conocimiento y de temor del Señor.
Se deleitará en el temor del Señor,
y no juzgará por lo que vean sus ojos,
ni sentenciará por lo que oigan sus oídos(H);
sino que juzgará al pobre(I) con justicia(J),
y fallará con equidad por los afligidos de la tierra(K);
herirá la tierra con la vara de su boca(L),
y con el soplo de sus labios matará al impío(M).
La justicia será ceñidor de sus lomos(N),
y la fidelidad ceñidor de su cintura(O).

El lobo morará con el cordero,
y el leopardo se echará con el cabrito;
el becerro, el leoncillo y el animal doméstico[a] andarán juntos[b](P),
y un niño los conducirá.
La vaca y la osa pacerán,
sus crías se echarán juntas,
y el león, como el buey, comerá paja(Q).
El niño de pecho jugará junto a la cueva de la cobra,
y el niño destetado extenderá su mano sobre la guarida de la víbora.
No dañarán ni destruirán en todo mi santo monte(R),
porque la tierra estará llena del conocimiento del Señor
como las aguas cubren el mar(S).

10 Acontecerá en aquel día
que las naciones(T) acudirán a la raíz de Isaí(U),
que estará puesta como señal[c] para los pueblos(V),
y será gloriosa[d] su morada[e](W).

11 Entonces acontecerá en aquel día que el Señor
ha de recobrar de nuevo con su mano, por segunda vez,
al remanente de su pueblo(X) que haya quedado
de Asiria(Y), de Egipto(Z), de Patros, de Cus[f], de Elam(AA), de Sinar, de Hamat
y de las islas[g] del mar(AB).
12 Alzará un estandarte ante las naciones(AC),
reunirá a los desterrados de Israel,
y juntará a los dispersos de Judá(AD)
de los cuatro confines de la tierra.
13 Entonces se disipará la envidia de Efraín,
y los que hostigan a Judá serán exterminados;
Efraín no envidiará a Judá,
y Judá no hostigará a Efraín(AE).
14 Y ellos se lanzarán[h](AF) sobre el costado de los filisteos al occidente(AG),
juntos despojarán a los hijos del oriente(AH);
Edom(AI) y Moab(AJ) estarán bajo su dominio[i],
y los hijos de Amón les estarán sujetos[j].
15 Y el Señor destruirá[k](AK)
la lengua del mar de Egipto[l];
agitará su mano sobre el río[m](AL)
con su viento abrasador,
lo partirá en siete arroyos
y hará que se pueda pasar en sandalias.
16 Y habrá una calzada desde Asiria(AM)
para el remanente que quede de su pueblo(AN),
así como la hubo para Israel
el día que subieron de la tierra de Egipto(AO).

Cántico de acción de gracias

12 Y en aquel día dirás:

Te doy gracias, oh Señor(AP),
porque aunque estabas airado conmigo,
se ha apartado tu ira
y me has consolado(AQ).
He aquí, Dios es mi salvador(AR),
confiaré y no temeré(AS);
porque mi fortaleza y mi canción es el Señor[n] Dios[o],
Él ha sido mi salvación(AT).
Con gozo sacarás agua(AU)
de los manantiales de la salvación(AV).
Y aquel día dirás(AW):
Dad gracias al Señor, invocad su nombre,
haced conocer entre los pueblos sus obras(AX),
haced recordar[p] que su nombre es enaltecido(AY).
Cantad alabanzas al Señor, porque ha hecho cosas maravillosas[q];
sea conocido esto por toda la tierra(AZ).
Clama y grita de júbilo, habitante de Sión(BA),
porque grande es en medio de ti el Santo de Israel(BB).

Santiago 5

Advertencias a los ricos

¡Oíd [a] ahora(A), ricos(B)! Llorad y aullad por las miserias que vienen sobre vosotros(C). Vuestras riquezas se han podrido(D) y vuestras ropas están comidas de polilla. Vuestro oro y vuestra plata se han oxidado, su herrumbre será un testigo contra vosotros y consumirá vuestra carne como fuego. Es en[b] los últimos días que habéis acumulado tesoros(E). Mirad, el jornal de los obreros que han segado vuestros campos(F) y que ha sido retenido por vosotros, clama contra vosotros; y el clamor de los segadores(G) ha llegado a los oídos del Señor de los ejércitos[c](H). Habéis vivido lujosamente sobre la tierra(I), y habéis llevado una vida de placer desenfrenado; habéis engordado[d] vuestros corazones en el día de la matanza(J). Habéis condenado y dado muerte[e](K) al justo(L); él no os hace resistencia.

Exhortación a la paciencia

Por tanto, hermanos(M), sed pacientes hasta la venida del Señor(N). Mirad cómo el labrador espera el fruto precioso de la tierra(O), siendo paciente en ello hasta que recibe la lluvia temprana y la tardía(P). Sed también vosotros pacientes(Q); fortaleced vuestros corazones(R), porque la venida del Señor(S) está cerca(T). Hermanos(U), no os quejéis unos contra otros(V), para que no seáis juzgados; mirad, el Juez(W) está a[f] las puertas(X). 10 Hermanos(Y), tomad como ejemplo de paciencia y aflicción a los profetas(Z) que hablaron en el nombre del Señor. 11 Mirad que tenemos por bienaventurados(AA) a los que sufrieron[g]. Habéis oído de la paciencia[h](AB) de Job, y habéis visto el resultado del proceder[i] del Señor(AC), que el Señor es muy compasivo, y misericordioso(AD).

Exhortaciones varias

12 Y sobre todo, hermanos míos(AE), no juréis, ni por el cielo, ni por la tierra, ni con ningún otro juramento; antes bien, sea vuestro sí[j], sí, y vuestro no[k], no(AF), para que no caigáis bajo juicio.

13 ¿Sufre alguno entre vosotros(AG)? Que haga oración(AH). ¿Está alguno alegre? Que cante alabanzas(AI). 14 ¿Está alguno entre vosotros enfermo? Que llame a los ancianos de la iglesia(AJ) y que ellos oren por él, ungiéndolo[l] con aceite en el nombre del Señor(AK); 15 y la oración de fe(AL) restaurará[m] al enfermo(AM), y el Señor lo levantará(AN), y si ha cometido pecados le serán perdonados[n]. 16 Por tanto, confesaos vuestros pecados unos a otros(AO), y orad unos por otros para que seáis sanados(AP). La oración[o] eficaz(AQ) del justo puede lograr mucho. 17 Elías era un hombre de pasiones semejantes a las nuestras[p](AR), y oró fervientemente[q] para que no lloviera(AS), y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses(AT). 18 Y otra vez oró(AU), y el cielo dio lluvia(AV) y la tierra produjo su fruto.

19 Hermanos míos, si alguno de entre vosotros(AW) se extravía de la verdad(AX) y alguno le hace volver, 20 sepa[r] que el que hace volver a un pecador del error de su camino salvará su alma de muerte(AY), y cubrirá multitud de pecados(AZ).

La Biblia de las Américas (LBLA)

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