²¹ sino que se despidió de ellos^(A), diciendo^[a]: Volveré a vosotros otra vez, si Dios quiere^(B). Y zarpó de Efeso^(C).

Apolos en Efeso

²⁴ Llegó entonces a Efeso^(A) un judío que se llamaba Apolos^(B), natural de Alejandría^(C), hombre elocuente^[a], y que era poderoso en las Escrituras.

¹⁷ Y supieron esto todos los habitantes de Efeso^(A), tanto judíos como griegos; y el temor se apoderó de^[a] todos ellos, y el nombre del Señor Jesús era exaltado.

²⁶ Y veis y oís que no solo en Efeso^(A), sino en casi toda Asia^(B), este Pablo ha persuadido a una gran cantidad de gente, y la ha apartado, diciendo que los dioses hechos con las manos no son dioses verdaderos^(C).

²⁸ Cuando oyeron esto, se llenaron de ira, y gritaban, diciendo: ¡Grande es Diana^[a] de los efesios^(A)!

³⁴ Mas cuando se dieron cuenta de que era judío, un clamor se levantó de todos ellos, gritando como por dos horas: ¡Grande es Diana^[a] de los efesios!

³⁵ Entonces el secretario^[a], después de calmar a la multitud, dijo*: Ciudadanos^[b] de Efeso^(A), ¿hay acaso algún hombre que no sepa que la ciudad de los efesios es guardiana del templo de la gran Diana^[c] y de la imagen que descendió del cielo^[d]?

¹⁶ Porque Pablo había decidido dejar a un lado a Efeso^(A) para no detenerse en Asia^[a](B), pues se apresuraba para estar, si le era posible, el día de Pentecostés^(C) en Jerusalén^(D).

¹⁷ Y desde Mileto mandó mensaje a Efeso^(A) y llamó a los ancianos^(B) de la iglesia.