Add parallel Print Page Options

La revelación de Jesucristo

La Revelación[a] de Jesucristo, que Dios(A) le dio, para mostrar a Sus siervos(B) las cosas que deben suceder pronto(C). Él la dio a conocer[b] enviándola por medio de Su ángel(D) a Su siervo Juan(E), quien dio testimonio de la palabra de Dios(F) y del testimonio de Jesucristo(G), y de todo lo que vio. Bienaventurado[c] el que lee y los que oyen las palabras de la profecía(H) y guardan las cosas que están escritas en ella, porque el tiempo está cerca(I).

Saludo a las siete iglesias

Juan(J), a las siete iglesias(K) que están en Asia[d](L): Gracia y paz a ustedes(M), de parte de Aquel(N) que es y que era y que ha de venir, y de parte de los siete Espíritus que están delante de Su trono(O), y de parte de Jesucristo, el testigo fiel(P), el primogénito de los muertos(Q) y el soberano de los reyes de la tierra(R). Al que nos ama(S) y nos libertó[e] de nuestros pecados con[f] Su sangre, e hizo de nosotros un reino(T), sacerdotes(U) para Dios, Su Padre[g](V), a Él sea la gloria y el dominio por los siglos de los siglos(W). Amén. Él viene con las nubes(X), y todo ojo lo verá(Y), aun los que lo traspasaron; y todas las tribus[h] de la tierra harán lamentación por Él(Z). Sí. Amén.

«Yo soy el Alfa y la Omega[i](AA)», dice el Señor Dios(AB), «el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso(AC)».

Visión de Cristo

Yo, Juan(AD), hermano de ustedes(AE) y compañero(AF) en la tribulación, en el reino(AG) y en la perseverancia(AH) en Jesús, me encontraba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y del testimonio de Jesús(AI). 10 Estaba yo en el Espíritu(AJ) en el día del Señor(AK), y oí detrás de mí una gran voz, como sonido de trompeta(AL), 11 que decía[j]: «Escribe en un libro[k](AM) lo que ves, y envíalo a las siete iglesias(AN): a Éfeso(AO), Esmirna(AP), Pérgamo(AQ), Tiatira(AR), Sardis(AS), Filadelfia(AT) y Laodicea(AU)».

12 Entonces me volví para ver de quién era la voz que hablaba conmigo, y al volverme, vi siete candelabros de oro(AV). 13 En medio de los candelabros(AW), vi a uno semejante al Hijo del Hombre[l](AX), vestido con una túnica que le llegaba hasta los pies(AY) y ceñido por el pecho con un cinto de oro(AZ). 14 Su cabeza y Sus cabellos eran blancos como la blanca lana(BA), como la nieve. Sus ojos eran como una llama de fuego(BB). 15 Sus pies se parecían al bronce bruñido(BC) cuando se le ha hecho refulgir en el horno, y Su voz como el ruido de muchas aguas(BD). 16 En Su mano derecha tenía siete estrellas(BE), y de Su boca salía una espada aguda de dos filos(BF). Su rostro(BG) era como el sol cuando brilla con toda su fuerza(BH).

17 Cuando lo vi, caí como muerto a Sus pies(BI). Y Él puso Su mano derecha sobre mí(BJ), diciendo: «No temas(BK), Yo soy el Primero y el Último(BL), 18 y el que vive(BM), y estuve muerto(BN). Pero ahora estoy vivo por los siglos de los siglos, y tengo las llaves de la muerte y del Hades[m](BO). 19 Escribe, pues(BP), las cosas que has visto, y las que son(BQ), y las que han de suceder después de estas(BR). 20 En cuanto al misterio(BS) de las siete estrellas(BT) que viste en Mi mano derecha y de los siete candelabros de oro(BU): las siete estrellas(BV) son los ángeles[n] de las siete iglesias(BW), y los siete candelabros(BX) son las siete iglesias.

Mensaje a la iglesia de Éfeso

»Escribe al ángel de la iglesia en Éfeso(BY):

“El que tiene las siete estrellas(BZ) en Su mano derecha, Aquel que anda entre[o] los siete candelabros(CA) de oro, dice esto: ‘Yo conozco tus obras, tu fatiga y tu perseverancia(CB), y que no puedes soportar a los malos, y has sometido a prueba(CC) a los que se dicen ser apóstoles(CD) y no lo son, y los has hallado mentirosos. Tienes perseverancia, y has sufrido por Mi nombre(CE) y no has desmayado.

’Pero tengo esto contra ti: que has dejado tu primer amor(CF). Recuerda, por tanto, de dónde has caído y arrepiéntete(CG), y haz las obras que hiciste al principio[p](CH). Si no, vendré[q] a ti y quitaré tu candelabro de su lugar(CI), si no te arrepientes. Sin embargo tienes esto: que aborreces las obras de los nicolaítas(CJ), las cuales Yo también aborrezco.

’El que tiene oído(CK), oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al vencedor[r](CL) le daré a comer del árbol de la vida(CM), que está en el paraíso de Dios(CN)’”».

Mensaje a la iglesia de Esmirna

«Escribe al ángel de la iglesia en Esmirna(CO):

“El Primero y el Último(CP), el que estuvo muerto y ha vuelto a la vida(CQ), dice esto: ‘Yo conozco[s] tu tribulación(CR) y tu pobreza(CS) (pero tú eres rico(CT)), y la blasfemia de los que se dicen ser judíos y no lo son(CU), sino que son sinagoga de Satanás(CV). 10 No temas lo que estás por sufrir. Yo te digo que el diablo echará a algunos de ustedes en la cárcel para que sean probados(CW), y tendrán tribulación por diez días(CX). Sé fiel hasta la muerte(CY), y Yo te daré la corona de la vida(CZ).

11 ’El que tiene oído(DA), oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El vencedor[t](DB) no sufrirá daño de la muerte segunda(DC)’”».

Mensaje a la iglesia de Pérgamo

12 «Escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo(DD):

“El que tiene la espada aguda de dos filos(DE), dice esto: 13 ‘Yo sé[u] dónde moras: donde está el trono de Satanás(DF). Guardas fielmente Mi nombre y no has negado Mi fe(DG), aun en los días de Antipas, Mi testigo(DH), Mi siervo fiel(DI), que fue muerto entre ustedes, donde mora Satanás(DJ).

14 ’Pero tengo unas pocas cosas contra ti(DK), porque tienes ahí a los que mantienen la doctrina de Balaam(DL), que enseñaba a Balac a poner tropiezo ante los israelitas, a comer cosas sacrificadas a los ídolos y a cometer actos de inmoralidad(DM). 15 Así tú también tienes algunos que de la misma manera mantienen la doctrina de los nicolaítas(DN). 16 Por tanto, arrepiéntete(DO); si no, vendré[v] a ti pronto(DP) y pelearé contra ellos con la espada de Mi boca(DQ).

17 ’El que tiene oído(DR), oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al vencedor[w](DS) le daré del maná escondido(DT) y le daré una piedrecita blanca, y grabado en la piedrecita(DU) un nombre nuevo, el cual nadie conoce sino aquel que lo recibe(DV)’”».

Mensaje a la iglesia de Tiatira

18 «Escribe al ángel de la iglesia en Tiatira(DW):

“El Hijo de Dios(DX), que tiene ojos[x] como llama de fuego(DY), y Sus pies son semejantes al bronce bruñido, dice esto: 19 ‘Yo conozco tus obras(DZ), tu amor, tu fe, tu servicio y tu perseverancia(EA), y que tus obras recientes son mayores que las primeras.

20 ’Pero tengo esto contra ti(EB): que toleras a esa[y] mujer Jezabel(EC), que se dice ser profetisa, y enseña y seduce a Mis siervos a que cometan actos inmorales y coman cosas sacrificadas a los ídolos(ED). 21 Le he dado tiempo para arrepentirse(EE), y no quiere arrepentirse de su inmoralidad(EF). 22 Por eso, la postraré[z] en cama, y a los que cometen adulterio con ella(EG) los arrojaré en gran tribulación, si no se arrepienten de las obras de ella[aa]. 23 A sus hijos mataré con pestilencia[ab], y todas las iglesias sabrán que Yo soy el que escudriña las mentes[ac](EH) y los corazones, y les daré a cada uno según sus obras(EI).

24 ’Pero a ustedes, a los demás que están en Tiatira(EJ), a cuantos no tienen esta doctrina, que no han conocido las cosas profundas de Satanás(EK), como ellos las llaman, les digo, que no les impongo otra carga(EL). 25 No obstante, lo que tienen(EM), reténganlo hasta que Yo venga(EN). 26 Al vencedor[ad](EO), al que guarda Mis obras hasta el fin(EP), le daré autoridad sobre las naciones[ae](EQ); 27 y las regirá[af] con vara de hierro(ER), como los vasos del alfarero son hechos pedazos(ES), [ag]como Yo también he recibido autoridad de Mi Padre. 28 Y le daré el lucero de la mañana(ET).

29 ’El que tiene oído(EU), oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias’”».

Mensaje a la iglesia de Sardis

«Escribe al ángel de la iglesia en Sardis(EV):

“El que tiene los siete Espíritus de Dios(EW) y las siete estrellas(EX), dice esto: ‘Yo conozco tus obras(EY), que tienes nombre de que vives, pero estás muerto(EZ). Ponte en vela y afirma las cosas que quedan, que estaban a punto de morir, porque no he hallado completas tus obras delante de Mi Dios. Acuérdate(FA), pues, de lo que[ah] has recibido y oído; guárdalo y arrepiéntete(FB). Por tanto, si no velas, vendré(FC) como ladrón(FD), y no sabrás a qué hora vendré sobre ti(FE).

’Pero tienes unos pocos[ai](FF) en Sardis(FG) que no han manchado sus vestiduras(FH), y andarán conmigo vestidos de blanco(FI), porque son dignos. Así el vencedor[aj](FJ) será vestido de[ak] vestiduras(FK) blancas y no borraré su nombre del libro de la vida(FL), y reconoceré su nombre delante de Mi Padre(FM) y delante de Sus ángeles.

’El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias(FN)’”».

Mensaje a la iglesia de Filadelfia

«Escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia(FO):

“El Santo(FP), el Verdadero(FQ), el que tiene la llave de David(FR), el que abre y nadie cierra[al], y cierra y nadie abre, dice esto: ‘Yo conozco tus obras(FS). Por tanto he puesto delante de ti una puerta abierta que nadie puede cerrar(FT). Aunque tienes poco poder, has guardado Mi palabra y no has negado Mi nombre(FU). Por tanto, Yo entregaré[am] a aquellos de la sinagoga de Satanás(FV) que se dicen ser judíos y no lo son, sino que mienten; Yo haré que vengan y se postren a[an] tus pies(FW), y sepan que Yo te he amado(FX). 10 Porque has guardado la palabra(FY) de Mi perseverancia(FZ), Yo también te guardaré(GA) de la hora de la prueba[ao](GB), esa hora que está por venir sobre todo el mundo(GC) para poner a prueba[ap] a los que habitan sobre la tierra(GD).

11 ’Vengo pronto(GE). Retén firme lo que tienes(GF), para que nadie tome tu corona(GG). 12 Al vencedor[aq](GH) le haré una columna en el templo de Mi Dios(GI), y nunca más saldrá de allí[ar]. Escribiré sobre él el nombre de Mi Dios(GJ) y el nombre de la ciudad de Mi Dios(GK), la nueva Jerusalén(GL), que desciende del cielo de Mi Dios, y Mi nombre nuevo(GM).

13 ’El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias(GN)’”».

Mensaje a la iglesia de Laodicea

14 «Escribe al ángel de la iglesia en Laodicea(GO):

“El Amén(GP), el Testigo fiel y verdadero(GQ), el Principio[as] de la creación de Dios(GR), dice esto: 15 ‘Yo conozco tus obras(GS), que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueras frío o caliente(GT)! 16 Así, puesto que eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de Mi boca. 17 Porque dices: “Soy rico, me he enriquecido y de nada tengo necesidad”. No sabes que eres un miserable y digno de lástima, y pobre, ciego y desnudo(GU). 18 Te aconsejo que de Mí compres(GV) oro refinado por fuego(GW) para que te hagas rico, y vestiduras blancas(GX) para que te vistas y no se manifieste la vergüenza de tu desnudez(GY), y colirio para ungir tus ojos y que puedas ver.

19 ’Yo reprendo y disciplino a todos los que amo(GZ). Sé, pues, celoso y arrepiéntete(HA). 20 Yo estoy a la puerta(HB) y llamo(HC); si alguien oye Mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él y él conmigo(HD). 21 Al vencedor[at](HE), le concederé sentarse conmigo en Mi trono(HF), como yo también vencí y me senté con Mi Padre en Su trono(HG).

22 ’El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias(HH)’”».

Visión del trono de Dios

Después de esto miré(HI), y vi una puerta abierta en el cielo(HJ). Y la primera voz que yo había oído, como sonido de trompeta(HK) que hablaba conmigo, decía: «Sube(HL) acá y te mostraré las cosas que deben suceder después de estas(HM)». Al instante estaba yo en el Espíritu(HN), y vi un trono colocado en el cielo(HO), y a Uno sentado en el trono(HP). El que estaba sentado era de aspecto semejante a una piedra de jaspe(HQ) y sardio[au](HR), y alrededor del trono había un arco iris[av](HS), de aspecto semejante a la esmeralda(HT). Y alrededor del trono(HU) había veinticuatro tronos(HV). Y sentados(HW) en los tronos, veinticuatro ancianos(HX) vestidos de ropas blancas(HY), con coronas de oro en la cabeza(HZ). Del trono salían relámpagos(IA), voces[aw], y truenos. Delante del trono había siete lámparas(IB) de fuego ardiendo, que son los siete Espíritus de Dios(IC).

Delante del trono había como un mar transparente semejante al cristal(ID); y en medio del trono y alrededor del trono(IE), cuatro seres vivientes(IF) llenos de ojos por delante y por detrás(IG). El primer ser viviente era semejante a un león; el segundo ser era semejante a un becerro; el tercer ser tenía el rostro como el de un hombre, y el cuarto ser era semejante a un águila volando(IH). Los cuatro seres vivientes(II), cada uno de ellos con[ax] seis alas(IJ), estaban llenos de ojos alrededor y por dentro(IK), y día y noche(IL) no cesaban de decir[ay]:

«Santo, Santo, Santo es el Señor(IM) Dios, el Todopoderoso(IN), el que era, el que es y el que ha de venir(IO)».

Y cada vez que[az] los seres vivientes dan gloria, honor, y acción de gracias a Aquel que está sentado en el trono(IP), al que vive por los siglos de los siglos(IQ), 10 los veinticuatro ancianos(IR) se postran[ba] delante de Aquel(IS) que está sentado en el trono(IT), y adoran[bb] a Aquel que vive por los siglos de los siglos(IU), y echan[bc] sus coronas delante del trono(IV), diciendo:

11 «Digno eres, Señor y Dios nuestro, de recibir la gloria y el honor y el poder(IW), porque Tú creaste todas las cosas(IX), y por Tu voluntad existen[bd] y fueron creadas».

El Cordero y el libro de los siete sellos

En la mano derecha de Aquel que estaba sentado en el trono(IY) vi un libro[be] escrito por dentro y por fuera[bf](IZ), sellado con siete sellos(JA). Vi también a un ángel poderoso[bg](JB) que anunciaba a gran voz: «¿Quién es digno de abrir el libro y de desatar sus sellos?». Y nadie, ni en el cielo ni en la tierra ni debajo de la tierra(JC), podía abrir el libro ni mirar su contenido[bh]. Yo lloraba mucho, porque nadie había sido hallado digno de abrir el libro ni de mirar su contenido[bi].

Entonces uno de los ancianos me dijo*: «No llores; mira, el León(JD) de la tribu de Judá(JE), la Raíz de David(JF), ha vencido para abrir el libro y sus siete sellos». Miré, y vi entre el trono (con los cuatro seres vivientes) y los ancianos(JG), a un Cordero(JH), de pie, como inmolado(JI), que tenía siete cuernos(JJ) y siete ojos(JK), que son los siete Espíritus de Dios(JL) enviados por toda la tierra. El vino y tomó el libro de la mano derecha(JM) de Aquel que estaba sentado en el trono(JN). Cuando tomó el libro, los cuatro seres vivientes(JO) y los veinticuatro ancianos(JP) se postraron(JQ) delante del Cordero(JR). Cada uno tenía un arpa(JS) y copas[bj] de oro(JT) llenas de incienso, que son las oraciones de los santos(JU). Y cantaban* un cántico nuevo(JV), diciendo:

«Digno eres de tomar el libro(JW) y de abrir sus sellos, porque Tú fuiste inmolado(JX), y con Tu sangre compraste[bk] para Dios(JY) a gente de toda tribu(JZ), lengua, pueblo y nación.

10 Y los has hecho un reino(KA) y sacerdotes(KB) para nuestro Dios; y reinarán sobre la tierra(KC)».

11 Y miré, y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono(KD) y de los seres vivientes(KE) y de los ancianos(KF). El número de ellos era miríadas de miríadas, y millares de millares(KG), 12 que decían a gran voz:

«El Cordero(KH) que fue inmolado(KI) es digno de recibir el poder, las riquezas, la sabiduría, la fortaleza, el honor, la gloria y la alabanza».

13 Y oí decir a toda cosa creada que está en el cielo, sobre la tierra, debajo de la tierra y en el mar, y a todas las cosas que en ellos hay(KJ):

«Al que está sentado en el trono(KK), y al Cordero(KL), sea la alabanza, la honra, la gloria y el dominio por los siglos de los siglos(KM)».

14 Los cuatro seres vivientes(KN) decían: «Amén(KO)», y los ancianos(KP) se postraron y adoraron[bl](KQ).

Los primeros cuatro sellos

Entonces vi cuando el Cordero(KR) abrió uno de los siete sellos(KS), y oí a uno de los cuatro seres vivientes(KT) que decía, como con voz de trueno(KU): «Ven[bm]». Miré, y había un caballo blanco(KV). El que estaba montado en él tenía un arco. Se le dio una corona(KW), y salió conquistando y para conquistar(KX).

Cuando el Cordero abrió el segundo sello, oí al segundo ser viviente(KY) que decía: «Ven». Entonces salió otro caballo, rojo(KZ). Al que estaba montado en él se le concedió quitar la paz de la tierra(LA) y que los hombres se mataran unos a otros; y se le dio una gran espada.

Cuando el Cordero abrió el tercer sello, oí al tercer ser viviente(LB) que decía: «Ven». Y miré, y había un caballo negro(LC). El que estaba montado en él tenía una balanza en la mano(LD). Y oí como una voz en medio de los cuatro seres vivientes(LE) que decía: «Un litro de trigo por un denario[bn], y tres litros de cebada por un denario, y no dañes el aceite y el vino(LF)».

Cuando el Cordero abrió el cuarto sello, oí la voz del cuarto ser viviente(LG) que decía: «Ven». Y miré, y había un caballo amarillento[bo](LH). El que estaba montado en él se llamaba Muerte(LI), y el Hades[bp](LJ) lo seguía. Y se les dio autoridad sobre la cuarta parte de la tierra(LK), para matar con espada, con hambre, con pestilencia[bq] y con las fieras de la tierra.

El quinto sello

Cuando el Cordero abrió el quinto sello, vi debajo(LL) del altar(LM) las almas(LN) de los que habían sido muertos a causa de la palabra de Dios(LO) y del testimonio que habían mantenido(LP). 10 Clamaban a gran voz(LQ): «¿Hasta cuándo, oh Señor[br](LR) santo(LS) y verdadero, esperarás para juzgar(LT) y vengar[bs] nuestra sangre de los que moran en la tierra(LU)?». 11 Y se les dio a cada uno de ellos una vestidura blanca(LV), y se les dijo que descansaran un poco más de tiempo(LW), hasta que se completara(LX) también el número(LY) de sus consiervos y de sus hermanos que habrían de ser muertos como ellos lo habían sido.

El sexto sello

12 Vi cuando el Cordero abrió el sexto sello, y hubo un gran terremoto(LZ), y el sol se puso negro(MA) como cilicio(MB) hecho de cerda, y toda la luna se volvió como sangre, 13 y las estrellas del cielo cayeron a la tierra(MC), como la higuera(MD) deja caer sus higos verdes al ser sacudida por un fuerte viento. 14 El cielo desapareció[bt] como un pergamino[bu] que se enrolla(ME), y todo monte e isla fueron removidos de su lugar(MF).

15 Los reyes de la tierra(MG), y los grandes, los comandantes[bv], los ricos, los poderosos, y todo siervo y todo libre, se escondieron en las cuevas y entre las peñas de los montes, 16 y decían* a los montes y a las peñas(MH): «Caigan sobre nosotros y escóndannos de la presencia[bw] de Aquel que está sentado en el trono(MI) y de la ira del Cordero(MJ). 17 Porque ha llegado el gran día de la ira de ellos(MK), ¿y quién podrá[bx] sostenerse[by](ML)?».

Los 144,000 sellados

Después de esto, vi a cuatro ángeles(MM) de pie en los cuatro extremos[bz](MN) de la tierra, que detenían los cuatro vientos de la tierra(MO), para que no soplara viento alguno, ni sobre la tierra ni sobre el mar ni sobre ningún árbol(MP). También vi a otro ángel que subía de donde sale el sol(MQ) y que tenía el sello(MR) del Dios vivo(MS). Y gritó a gran voz a los cuatro ángeles(MT) a quienes se les había concedido hacer daño a la tierra y al mar: «No hagan daño, ni a la tierra ni al mar ni a los árboles(MU), hasta que hayamos puesto un sello(MV) en la frente a los siervos de nuestro Dios(MW)».

Oí el número de los que fueron sellados(MX): 144,000 sellados(MY) de todas las tribus de los israelitas. De la tribu de Judá fueron sellados 12,000; de la tribu de Rubén, 12,000; de la tribu de Gad, 12,000; de la tribu de Aser, 12,000; de la tribu de Neftalí, 12,000; de la tribu de Manasés, 12,000; de la tribu de Simeón, 12,000; de la tribu de Leví, 12,000; de la tribu de Isacar, 12,000; de la tribu de Zabulón, 12,000; de la tribu de José, 12,000 y de la tribu de Benjamín fueron sellados 12,000.

Los redimidos de todas las naciones

Después de esto miré, y vi una gran multitud, que nadie podía contar, de todas las naciones, tribus, pueblos, y lenguas(MZ), de pie delante del trono(NA) y delante del Cordero(NB), vestidos con vestiduras blancas(NC) y con palmas en las manos(ND). 10 Clamaban[ca] a gran voz:

«La salvación pertenece a nuestro Dios(NE) que está sentado en el trono(NF), y al Cordero».

11 Todos los ángeles estaban de pie alrededor del trono(NG) y alrededor de los ancianos(NH) y de los cuatro seres vivientes(NI). Estos cayeron sobre sus rostros(NJ) delante del trono y adoraron a Dios,

12 diciendo:

«¡Amén(NK)! La bendición(NL), la gloria, la sabiduría, la acción de gracias, el honor, el poder y la fortaleza, sean a nuestro Dios por los siglos de los siglos. Amén(NM)».

13 Uno de los ancianos habló[cb](NN) diciéndome: «Estos que están vestidos con vestiduras blancas(NO), ¿quiénes son y de dónde han venido?». 14 Y le respondí[cc]: «Señor mío, usted lo sabe». Y él me dijo: «Estos son los que vienen de la gran tribulación(NP), y han lavado sus vestiduras(NQ) y las han emblanquecido(NR) en la sangre del Cordero(NS). 15 Por eso están delante del trono de Dios(NT), y le sirven(NU) día y noche en Su templo[cd](NV); y Aquel que está sentado en el trono(NW) extenderá Su tabernáculo sobre ellos(NX). 16 Ya no tendrán hambre ni sed, ni el sol les hará daño[ce], ni ningún calor abrasador(NY), 17 pues el Cordero que está en medio del trono los pastoreará(NZ) y los guiará a manantiales de aguas de vida(OA), y Dios enjugará toda lágrima de sus ojos(OB)».

El séptimo sello

Cuando el Cordero abrió el séptimo sello(OC), hubo silencio en el cielo como por media hora. Vi a los siete ángeles(OD) que están de pie delante de Dios, y se les dieron siete trompetas(OE).

Otro ángel(OF) vino y se paró ante el altar(OG) con[cf] un incensario de oro(OH), y se le dio mucho incienso(OI) para que lo añadiera[cg] a las oraciones de todos los santos(OJ) sobre el altar de oro(OK) que estaba delante del trono. De la mano del ángel subió ante Dios el humo del incienso con[ch] las oraciones de los santos(OL). Después el ángel tomó el incensario, lo llenó con el fuego del altar(OM) y lo arrojó a la tierra(ON), y hubo truenos(OO), ruidos[ci], relámpagos, y un terremoto(OP).

Las primeras cuatro trompetas

Entonces los siete ángeles que tenían las siete trompetas(OQ) se prepararon para tocarlas.

El primero tocó la trompeta, y vino granizo y fuego(OR) mezclados con sangre, y fueron arrojados a la tierra. Se quemó la tercera parte de la tierra(OS), la tercera parte(OT) de los árboles(OU) y toda hierba verde(OV).

El segundo ángel tocó la trompeta, y algo como una gran montaña ardiendo en llamas(OW) fue arrojado al mar, y la tercera parte(OX) del mar se convirtió en sangre(OY). Y murió la tercera parte de los seres(OZ) que estaban en el mar y que[cj] tenían vida. Y la tercera parte de los barcos fue destruida(PA).

10 El tercer ángel tocó la trompeta, y cayó del cielo(PB) una gran estrella, ardiendo como una antorcha, y cayó sobre la tercera parte(PC) de los ríos y sobre los manantiales de las aguas(PD). 11 El nombre de la estrella es Ajenjo. La tercera parte(PE) de las aguas se convirtió en ajenjo(PF), y muchos hombres murieron por causa de las aguas, porque se habían vuelto amargas.

12 El cuarto ángel tocó la trompeta, y fue herida la tercera parte(PG) del sol(PH), la tercera parte de la luna(PI), y la tercera parte(PJ) de las estrellas(PK), para que la tercera parte(PL) de ellos se oscureciera y el día no resplandeciera en su tercera parte(PM), y asimismo en la noche.

13 Entonces miré, y oí volar un águila[ck] en medio del cielo(PN), que decía a gran voz: «¡Ay, ay, ay(PO), de los que habitan en la tierra(PP), a causa de los toques de trompeta que faltan, que los otros tres ángeles están para tocar(PQ)!».

La quinta trompeta

El quinto ángel tocó la trompeta(PR), y vi una estrella que había caído del cielo(PS) a la tierra, y se le dio la llave(PT) del pozo del abismo(PU). Cuando abrió el pozo del abismo, subió humo(PV) del pozo como el humo de un gran horno, y el sol y el aire(PW) se oscurecieron por el humo del pozo. Del humo salieron langostas sobre[cl] la tierra(PX), y se les dio poder como tienen poder[cm] los escorpiones de la tierra(PY).

Se les dijo que no dañaran(PZ) la hierba de la tierra(QA), ni ninguna cosa verde, ni ningún árbol, sino solo a los hombres que no tienen el sello de Dios en la frente(QB). No se les permitió matar a nadie[cn], sino atormentarlos por cinco meses(QC). Su tormento era como el tormento de un escorpión cuando pica[co] al hombre(QD). En aquellos días los hombres buscarán la muerte y no la hallarán(QE); y ansiarán morir, y la muerte huirá[cp] de ellos.

El aspecto[cq] de las langostas era semejante al de caballos dispuestos para la batalla(QF), y sobre sus cabezas tenían como coronas que parecían de oro, y sus caras eran como rostros humanos. Tenían cabellos como cabellos de mujer, y sus dientes eran como de leones(QG). También tenían corazas como corazas de hierro. El ruido de sus alas era como el estruendo de carros, de muchos caballos que se lanzan a la batalla(QH). 10 Tienen colas parecidas a escorpiones(QI), y aguijones. En sus colas está su poder para hacer daño a los hombres(QJ) por cinco meses(QK). 11 Tienen sobre ellos por rey al ángel del abismo(QL), cuyo nombre en hebreo(QM) es Abadón[cr](QN), y en griego se llama Apolión[cs].

12 El primer ¡ay(QO)! ha pasado; pero aún vienen dos ayes después de estas cosas.

La sexta trompeta

13 El sexto ángel tocó la trompeta, y oí una voz que salía de los cuatro[ct] cuernos(QP) del altar de oro(QQ) que está delante de Dios, 14 y decía al sexto ángel que tenía la trompeta: «Suelta a los cuatro ángeles(QR) que están atados junto al gran río Éufrates(QS)». 15 Y fueron desatados los cuatro ángeles que habían sido preparados para la hora, el día, el mes, y el año(QT), para matar a la tercera parte de la humanidad[cu](QU).

16 El número de los ejércitos de los jinetes era doscientos millones(QV); yo escuché su número(QW). 17 Así es como vi[cv] en la visión(QX) los caballos y a los que los montaban: los jinetes tenían corazas color de fuego, de jacinto[cw] y de azufre(QY). Las cabezas de los caballos eran como cabezas de leones, y de sus bocas salía fuego(QZ), humo, y azufre(RA).

18 La tercera parte(RB) de la humanidad[cx] fue muerta por estas tres plagas: por el fuego(RC), el humo, y el azufre que salían de sus bocas. 19 Porque el poder de los caballos está en su boca y en sus colas; pues sus colas son semejantes a serpientes, tienen cabezas y con ellas hacen daño.

20 El resto de la humanidad[cy], los que no fueron muertos por estas plagas, no se arrepintieron(RD) de las obras de sus manos(RE) ni dejaron de[cz] adorar a los demonios(RF) y a los ídolos de oro, de plata, de bronce, de piedra, y de madera, que no pueden ver ni oír ni andar(RG). 21 Tampoco se arrepintieron de sus homicidios(RH) ni de sus hechicerías(RI) ni de su inmoralidad[da](RJ) ni de sus robos.

El ángel y el librito

10 Vi a otro ángel poderoso[db](RK) que descendía del cielo(RL), envuelto en una nube. El arco iris estaba sobre su cabeza(RM), su rostro era como el sol(RN) y sus pies como columnas de fuego(RO). Tenía en su mano un librito(RP) abierto. Puso el pie derecho sobre el mar y el izquierdo sobre la tierra(RQ), y gritó a gran voz, como ruge un león(RR). Y cuando gritó, los siete truenos emitieron[dc] sus voces(RS). Después que los siete truenos hablaron, iba yo a escribir(RT), cuando[dd] oí una voz del cielo(RU) que decía: «Sella las cosas que los siete truenos han dicho y no las escribas(RV)».

Entonces el ángel que yo había visto de pie sobre el mar y sobre la tierra, levantó su mano derecha al cielo(RW), y juró por Aquel que vive por los siglos de los siglos(RX), quien creó el cielo y las cosas que en Él hay, y la tierra y las cosas que en ella hay, y el mar y las cosas que en Él hay(RY), que ya no habrá más demora[de](RZ). Porque en los días de la voz del séptimo ángel(SA), cuando esté para tocar la trompeta, entonces el misterio de Dios será[df] consumado(SB), como Él lo anunció[dg] a Sus siervos los profetas.

La voz que yo había oído del cielo(SC), la de nuevo hablando conmigo: «Ve, toma el libro que está abierto en la mano del ángel que está de pie sobre el mar y sobre la tierra(SD)». Entonces fui al ángel y le dije que me diera el librito. Y él me dijo*: «Tómalo y devóralo(SE). Te amargará las entrañas, pero en tu boca será dulce como la miel». 10 Tomé el librito de la mano del ángel y lo devoré, y en mi boca fue dulce como la miel; pero cuando lo comí, me amargó las entrañas.

11 Y me dijeron*[dh](SF): «Debes profetizar otra vez(SG) acerca de muchos pueblos, naciones, lenguas(SH) y reyes(SI)».

Los dos testigos

11 Me fue dada una caña de medir (unos 3 metros) semejante a una vara(SJ), y alguien dijo(SK): «Levántate y mide el templo[di] de Dios y el altar, y a los que en él adoran. Pero excluye[dj] el patio[dk](SL) que está fuera del templo[dl], no lo midas, porque ha sido entregado a las naciones(SM), y estas pisotearán(SN) la ciudad santa(SO) por cuarenta y dos meses(SP).

»Otorgaré autoridad a mis dos testigos(SQ), y ellos profetizarán por 1,260 días(SR), vestidos de cilicio[dm](SS)». Estos son los dos olivos(ST) y los dos candelabros que están delante del Señor de la tierra. Si alguien quiere hacerles daño, de su boca sale fuego(SU) y devora a sus enemigos. Así debe morir(SV) cualquiera que quisiera hacerles daño. Ellos tienen poder para cerrar el cielo(SW) a fin de que no llueva durante los días en que ellos profeticen[dn](SX); y tienen poder sobre las aguas para convertirlas en sangre(SY), y para herir la tierra con toda suerte de plagas todas las veces que quieran(SZ).

Cuando hayan terminado de dar su testimonio, la bestia(TA) que sube(TB) del abismo(TC) hará guerra contra ellos(TD), los vencerá y los matará. Sus cadáveres estarán[do] en la calle de la gran ciudad(TE), que simbólicamente[dp] se llama Sodoma(TF) y Egipto(TG), donde también su Señor fue crucificado. Gente de todos los pueblos, tribus, lenguas, y naciones(TH), contemplarán[dq] sus cadáveres[dr] por tres días y medio, y no permitirán[ds] que sus cadáveres sean sepultados(TI). 10 Los que moran en la tierra(TJ) se regocijarán[dt] por[du] ellos y se alegrarán[dv], y se enviarán regalos unos a otros(TK), porque estos dos profetas habían atormentado a los que moran en la tierra(TL).

11 Pero después de los tres días y medio, el aliento de vida de parte de Dios vino a ellos(TM) y se pusieron en pie, y gran temor cayó sobre quienes los contemplaban. 12 Entonces ellos oyeron una gran voz del cielo que les decía: «Suban acá(TN)». Y subieron al cielo en la nube(TO), y sus enemigos los vieron.

13 En aquella misma hora hubo un gran terremoto(TP) y la décima parte de la ciudad se derrumbó, y siete mil personas[dw] murieron en el terremoto, y los demás, aterrorizados, dieron gloria(TQ) al Dios del cielo(TR).

14 El segundo ¡ay! ha pasado(TS); pero el tercer ¡ay! viene pronto.

La séptima trompeta

15 El séptimo ángel tocó la trompeta(TT), y hubo[dx] grandes voces en el cielo(TU), que decían:

«El reino del mundo ha venido a ser el reino de nuestro Señor(TV) y de Su Cristo[dy](TW). Él reinará por los siglos de los siglos(TX)». 16 Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados delante de Dios en sus tronos(TY), se postraron sobre sus rostros y adoraron a Dios(TZ), 17 diciendo:

«Te damos gracias, oh Señor Dios Todopoderoso(UA), el que eres y el que eras[dz], porque has tomado Tu gran poder y has comenzado a reinar[ea](UB). 18 Las naciones(UC) se enfurecieron, y vino Tu ira y llegó el tiempo de juzgar a los muertos(UD) y de dar la recompensa a Tus siervos los profetas(UE), a los santos y a los que temen Tu nombre, a los pequeños y a los grandes(UF), y de destruir a los que destruyen la tierra».

19 El templo[eb] de Dios(UG) que está en el cielo fue abierto; y el arca de Su pacto(UH) se veía[ec] en Su templo[ed], y hubo relámpagos(UI), voces[ee] y truenos, y un terremoto y una fuerte granizada[ef](UJ).

La mujer, el dragón y el niño

12 Una gran señal(UK) apareció en el cielo(UL): una mujer(UM) vestida del sol(UN), con[eg] la luna debajo de sus pies, y una corona de doce estrellas sobre su cabeza. Estaba encinta, y gritaba*(UO) por los dolores del parto y el sufrimiento de dar a luz.

Entonces apareció otra señal en el cielo(UP): Un gran dragón rojo(UQ) que tenía siete cabezas(UR) y diez cuernos(US), y sobre sus cabezas había siete diademas(UT). Su cola arrastró* la tercera parte de las estrellas del cielo(UU) y las arrojó sobre la tierra(UV). Y el dragón(UW) se paró delante de la mujer que estaba para dar a luz, a fin de devorar a su hijo(UX) cuando ella diera a luz. Y ella dio a luz un Hijo varón, que ha de regir[eh] a todas las naciones[ei] con vara de hierro(UY). Su Hijo fue arrebatado hasta Dios y hasta Su trono(UZ). La mujer huyó al desierto, donde tenía* un lugar preparado por Dios, para ser sustentada[ej] allí por 1,260 días(VA).

Entonces hubo guerra en el cielo: Miguel(VB) y sus ángeles combatieron contra el dragón(VC). Y el dragón y sus ángeles lucharon(VD), pero no pudieron vencer[ek], ni se halló ya lugar para ellos en el cielo. Y fue arrojado el gran dragón(VE), la serpiente antigua(VF) que se llama Diablo y Satanás(VG), el cual engaña al mundo entero(VH). Fue arrojado a la tierra(VI) y sus ángeles fueron arrojados con él.

10 Entonces oí una gran voz en el cielo(VJ), que decía:

«Ahora ha venido la salvación(VK), el poder y el reino de nuestro Dios(VL) y la autoridad de Su Cristo[el], porque el acusador(VM) de nuestros hermanos, el que los acusa delante de nuestro Dios día y noche, ha sido arrojado. 11 Ellos lo vencieron(VN) por medio de la sangre del Cordero(VO) y por la palabra del testimonio de ellos(VP), y no amaron sus vidas, llegando hasta sufrir la muerte(VQ). 12 Por lo cual regocíjense, cielos(VR) y los que moran en ellos(VS). ¡Ay de la tierra y del mar(VT)!, porque el diablo ha descendido a ustedes(VU) con[em] gran furor, sabiendo que tiene poco tiempo(VV)».

13 Cuando el dragón(VW) vio que había sido arrojado a la tierra, persiguió a la mujer que había dado a luz al Hijo varón(VX). 14 Y se le dieron a la mujer las dos alas de la gran águila(VY) a fin de que volara de la presencia[en] de la serpiente al desierto(VZ), a su lugar, donde fue* sustentada por un tiempo, tiempos y medio tiempo(WA). 15 La serpiente(WB) arrojó de su boca, tras la mujer, agua como un río, para que ella fuera arrastrada por la corriente[eo].

16 Pero la tierra ayudó a la mujer, y la tierra abrió su boca y tragó el río que el dragón había arrojado de su boca. 17 Entonces el dragón se enfureció contra la mujer, y salió para hacer guerra(WC) contra el resto de la descendencia de ella(WD), los que guardan los mandamientos de Dios(WE) y tienen el testimonio de Jesús(WF).

La bestia que sube del mar

13 El dragón se paró[ep] sobre la arena del mar[eq].

Y vi que subía del mar una bestia(WG) que tenía diez cuernos(WH) y siete cabezas(WI). En sus cuernos había diez diademas(WJ), y en sus cabezas había nombres blasfemos(WK). La bestia que vi era semejante a un leopardo(WL), sus pies eran como los de un oso(WM) y su boca como la boca de un león(WN). El dragón(WO) le dio su poder, su trono(WP), y gran autoridad. Vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal(WQ) fue sanada. Y la tierra entera se maravilló(WR) y seguía tras la bestia. Adoraron al dragón, porque había dado autoridad(WS) a la bestia. Adoraron a la bestia, diciendo: «¿Quién es semejante a la bestia(WT), y quién puede luchar contra ella?».

A la bestia se le dio una boca que hablaba palabras arrogantes[er](WU) y blasfemias, y se le dio autoridad para actuar[es] durante cuarenta y dos meses(WV). Y abrió su boca con blasfemias contra Dios, para blasfemar Su nombre y Su tabernáculo, es decir, contra los que moran en el cielo(WW). Se le concedió hacer guerra contra los santos(WX) y vencerlos. Y se le dio autoridad sobre toda tribu, pueblo, lengua y nación(WY). Adorarán a la bestia todos los que moran en la tierra(WZ), cuyos nombres no han sido escritos(XA) desde la fundación del mundo(XB) en el libro de la vida del Cordero que fue inmolado(XC).

Si alguno tiene oído, que oiga(XD). 10 Si alguien es destinado a la cautividad, a la cautividad va(XE); si alguien ha de morir a espada(XF), a espada ha de morir. Aquí está la perseverancia(XG) y la fe de los santos.

La bestia que sube de la tierra

11 Vi otra bestia(XH) que subía de la tierra. Tenía dos cuernos semejantes a los de un cordero(XI) y hablaba como un dragón(XJ). 12 Ejerce toda la autoridad de la primera bestia(XK) en su presencia[et](XL), y hace que la tierra y los que moran en ella(XM) adoren a la primera bestia(XN), cuya herida mortal fue sanada(XO). 13 También hace grandes señales(XP), de tal manera que aun hace descender fuego del cielo(XQ) a la tierra en presencia de los hombres. 14 Además engaña(XR) a los que moran en la tierra(XS) a causa de las señales que se le concedió hacer(XT) en presencia de[eu] la bestia(XU), diciendo a los moradores de la tierra que hagan una imagen de la bestia que tenía* la herida de la espada(XV) y que ha vuelto a vivir.

15 Se le concedió dar aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen de la bestia también hablara y diera muerte a todos(XW) los que no adoran la imagen(XX) de la bestia. 16 Y hace que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos(XY), se les dé[ev] una marca(XZ) en la mano derecha o en la frente, 17 para que nadie pueda comprar ni vender, sino el que tenga la marca(YA), la cual es el nombre de la bestia(YB) o el número de su nombre(YC).

18 Aquí hay sabiduría(YD). El que tiene entendimiento, que calcule el número de la bestia, porque el número es el de un hombre(YE), y su número[ew] es 666.

Footnotes

  1. Apocalipsis 1:1 Gr. Apocalipsis.
  2. Apocalipsis 1:1 O la manifestó.
  3. Apocalipsis 1:3 O Feliz.
  4. Apocalipsis 1:4 I.e. provincia occidental romana de Asia Menor.
  5. Apocalipsis 1:5 Algunos mss. dicen: lavó.
  6. Apocalipsis 1:5 O en.
  7. Apocalipsis 1:6 O Dios y su Padre.
  8. Apocalipsis 1:7 I.e. linajes, razas.
  9. Apocalipsis 1:8 Algunos mss. agregan: el principio y el fin.
  10. Apocalipsis 1:11 Algunos mss. agregan: Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último.
  11. Apocalipsis 1:11 O rollo.
  12. Apocalipsis 1:13 O a un hijo de hombre.
  13. Apocalipsis 1:18 I.e. región de los muertos.
  14. Apocalipsis 1:20 O mensajeros.
  15. Apocalipsis 2:1 Lit. en medio de.
  16. Apocalipsis 2:5 Lit. las primeras obras.
  17. Apocalipsis 2:5 Lit. vengo.
  18. Apocalipsis 2:7 O Al que venza.
  19. Apocalipsis 2:9 Algunos mss. agregan: tus obras y.
  20. Apocalipsis 2:11 O El que venza.
  21. Apocalipsis 2:13 Algunos mss. agregan: tus obras y.
  22. Apocalipsis 2:16 Lit. vengo.
  23. Apocalipsis 2:17 O Al que venza.
  24. Apocalipsis 2:18 Lit. sus ojos.
  25. Apocalipsis 2:20 Lit. la.
  26. Apocalipsis 2:22 Lit. arrojo.
  27. Apocalipsis 2:22 Algunos mss. dicen: de ellos.
  28. Apocalipsis 2:23 Lit. muerte.
  29. Apocalipsis 2:23 Lit. los riñones; i.e. el hombre interior.
  30. Apocalipsis 2:26 O al que venza.
  31. Apocalipsis 2:26 O los gentiles.
  32. Apocalipsis 2:27 O pastoreará.
  33. Apocalipsis 2:27 En el gr. aquí comienza el vers. 28.
  34. Apocalipsis 3:3 Lit. cómo.
  35. Apocalipsis 3:4 Lit. unos pocos nombres.
  36. Apocalipsis 3:5 O el que venza.
  37. Apocalipsis 3:5 Lit. envuelto en.
  38. Apocalipsis 3:7 O cerrará.
  39. Apocalipsis 3:9 Lit. doy.
  40. Apocalipsis 3:9 Lit. delante de.
  41. Apocalipsis 3:10 O tentación.
  42. Apocalipsis 3:10 O tentar.
  43. Apocalipsis 3:12 O Al que venza.
  44. Apocalipsis 3:12 Lit. fuera.
  45. Apocalipsis 3:14 I.e. el Origen o la Fuente.
  46. Apocalipsis 3:21 O Al que venza.
  47. Apocalipsis 4:3 O cornalina.
  48. Apocalipsis 4:3 O una aureola.
  49. Apocalipsis 4:5 O ruidos.
  50. Apocalipsis 4:8 Lit. teniendo.
  51. Apocalipsis 4:8 Lit. no tienen descanso, diciendo:
  52. Apocalipsis 4:9 Lit. Y cuando.
  53. Apocalipsis 4:10 Lit. se postrarán.
  54. Apocalipsis 4:10 Lit. adorarán.
  55. Apocalipsis 4:10 Lit. echarán.
  56. Apocalipsis 4:11 O eran.
  57. Apocalipsis 5:1 O rollo y así en el resto del cap.
  58. Apocalipsis 5:1 O el anverso y el reverso.
  59. Apocalipsis 5:2 O fuerte.
  60. Apocalipsis 5:3 Lit. ni mirarlo.
  61. Apocalipsis 5:4 Lit. ni mirarlo.
  62. Apocalipsis 5:8 O tazones.
  63. Apocalipsis 5:9 O redimiste.
  64. Apocalipsis 5:14 Algunas versiones agregan: al que vive por los siglos de los siglos.
  65. Apocalipsis 6:1 Algunos mss. agregan: y ve; también en los vers. 3, 5 y 7.
  66. Apocalipsis 6:6 I.e. salario de un día.
  67. Apocalipsis 6:8 O de color muy pálido.
  68. Apocalipsis 6:8 I.e. región de los muertos.
  69. Apocalipsis 6:8 O muerte.
  70. Apocalipsis 6:10 O Dueño.
  71. Apocalipsis 6:10 Lit. no juzgas y vengas.
  72. Apocalipsis 6:14 Lit. se separó.
  73. Apocalipsis 6:14 Lit. rollo o libro.
  74. Apocalipsis 6:15 Gr. quiliarcas; i.e. oficiales militares romanos al mando de mil soldados.
  75. Apocalipsis 6:16 Lit. del rostro.
  76. Apocalipsis 6:17 Lit. puede.
  77. Apocalipsis 6:17 O mantenerse en pie.
  78. Apocalipsis 7:1 Lit. las cuatro esquinas; i.e. puntos cardinales.
  79. Apocalipsis 7:10 Lit. claman.
  80. Apocalipsis 7:13 Lit. respondió.
  81. Apocalipsis 7:14 Lit. yo le he dicho.
  82. Apocalipsis 7:15 O santuario.
  83. Apocalipsis 7:16 Lit. no caerá sobre ellos.
  84. Apocalipsis 8:3 Lit. teniendo.
  85. Apocalipsis 8:3 Lit. diera.
  86. Apocalipsis 8:4 O para.
  87. Apocalipsis 8:5 O voces.
  88. Apocalipsis 8:9 Lit. los que.
  89. Apocalipsis 8:13 Algunos mss. posteriores dicen: ángel.
  90. Apocalipsis 9:3 Lit. hacia.
  91. Apocalipsis 9:3 O como el poder que tienen.
  92. Apocalipsis 9:5 Lit. Y se les concedió no matarlos.
  93. Apocalipsis 9:5 Lit. hiere.
  94. Apocalipsis 9:6 Lit. huye.
  95. Apocalipsis 9:7 Lit. las apariencias.
  96. Apocalipsis 9:11 I.e. Destrucción.
  97. Apocalipsis 9:11 I.e. Destructor.
  98. Apocalipsis 9:13 Algunos mss. antiguos no incluyen: cuatro.
  99. Apocalipsis 9:15 Lit. los hombres.
  100. Apocalipsis 9:17 Lit. así vi.
  101. Apocalipsis 9:17 O zafiro.
  102. Apocalipsis 9:18 Lit. los hombres.
  103. Apocalipsis 9:20 Lit. los hombres.
  104. Apocalipsis 9:20 Lit. para no.
  105. Apocalipsis 9:21 O fornicación.
  106. Apocalipsis 10:1 O fuerte.
  107. Apocalipsis 10:3 O hablaron.
  108. Apocalipsis 10:4 Lit. y.
  109. Apocalipsis 10:6 Lit. el tiempo no será más.
  110. Apocalipsis 10:7 Lit. es.
  111. Apocalipsis 10:7 Lit. anunció el evangelio.
  112. Apocalipsis 10:11 Lit. dicen.
  113. Apocalipsis 11:1 O santuario.
  114. Apocalipsis 11:2 Lit. echa fuera.
  115. Apocalipsis 11:2 O el atrio.
  116. Apocalipsis 11:2 O santuario.
  117. Apocalipsis 11:3 I.e. vestidura áspera usada para penitencia.
  118. Apocalipsis 11:6 Lit. los días de su profecía.
  119. Apocalipsis 11:8 Algunos mss. antiguos dicen: Y su cadáver yacerá.
  120. Apocalipsis 11:8 Lit. espiritualmente.
  121. Apocalipsis 11:9 Lit. contemplan.
  122. Apocalipsis 11:9 Lit. su cadáver.
  123. Apocalipsis 11:9 Lit. no permiten.
  124. Apocalipsis 11:10 Lit. regocijan.
  125. Apocalipsis 11:10 Lit. sobre.
  126. Apocalipsis 11:10 Lit. se alegran.
  127. Apocalipsis 11:13 Lit. nombres de hombres, siete mil.
  128. Apocalipsis 11:15 Lit. y sucedieron.
  129. Apocalipsis 11:15 I.e. el Mesías.
  130. Apocalipsis 11:17 Algunos mss. posteriores agregan: y el que has de venir.
  131. Apocalipsis 11:17 Lit. reinaste.
  132. Apocalipsis 11:19 O santuario.
  133. Apocalipsis 11:19 O apareció.
  134. Apocalipsis 11:19 O santuario.
  135. Apocalipsis 11:19 O ruidos.
  136. Apocalipsis 11:19 Lit. gran granizo.
  137. Apocalipsis 12:1 Lit. y.
  138. Apocalipsis 12:5 O pastorear.
  139. Apocalipsis 12:5 O todos los gentiles.
  140. Apocalipsis 12:6 Lit. para que la sustentaran.
  141. Apocalipsis 12:8 O no fueron lo suficientemente fuertes.
  142. Apocalipsis 12:10 I.e. el Mesías.
  143. Apocalipsis 12:12 Lit. teniendo.
  144. Apocalipsis 12:14 Lit. del rostro.
  145. Apocalipsis 12:15 Lit. el río.
  146. Apocalipsis 13:1 Algunos mss. posteriores dicen: Y yo me paré.
  147. Apocalipsis 13:1 En el texto gr. esta frase es el vers. 18 del cap. 12.
  148. Apocalipsis 13:5 Lit. grandes cosas.
  149. Apocalipsis 13:5 Lit. hacer.
  150. Apocalipsis 13:12 O por su autoridad.
  151. Apocalipsis 13:14 O por la autoridad de.
  152. Apocalipsis 13:16 Lit. les den.
  153. Apocalipsis 13:18 Algunos mss. dicen: seiscientos dieciséis.