El séptimo día del banquete, el rey estaba muy alegre, y ordenó a Amam, Bazán, Tarra, Boraze, Zatolta, Abataza y Taraba, los siete hombres de confianza que estaban a su servicio personal,
[10] Al séptimo día de la fiesta, el rey estaba muy alegre, pues había bebido vino. Entonces llamó a siete hombres de su confianza: Mehumán, Biztá, Harboná, Bigtá, Abagtá, Zetar y Carcás,