Pero los soldados de Simón, codiciosos de riquezas, se dejaron sobornar y aceptaron dinero de algunos de los que estaban en las torres. Recibieron setenta mil monedas, y dejaron escapar a algunos.
Pero los soldados de Simón, por ganarse un dinero, se dejaron comprar por la suma de setenta mil monedas y dejaron escapar a algunos de los que estaban en las torres.