La fuerza militar de los romanos era bien conocida. Judas Macabeo oyó hablar de ellos. Supo que trataban bien a quienes los apoyaban, y que se mostraban amistosos con quienes les pedían ayuda. Judas supo también que los romanos habían dado grandes batallas contra los habitantes de la región de las Galias, y que los habían conquistado, obligándolos a pagarles impuestos.