En el año ciento cincuenta del gobierno de los griegos, Judas Macabeo decidió reunir a todos sus soldados, para acabar con esos malvados, porque ya estaba cansado de esa situación. Los reunió alrededor del cuartel de Jerusalén, y para reconquistarlo usaron máquinas de guerra que arrojaban piedras, y construyeron una rampa para escalar la muralla.