El rey Demetrio llamó a los judíos para que lo ayudaran. Ellos se reunieron inmediatamente a su lado; luego se dispersaron por la ciudad, y ese día mataron a unas cien mil personas.
y les pidió a los soldados israelitas que lo ayudaran. Los soldados salieron a las calles y atacaron a los rebeldes. Ese día mataron a unas cien mil personas.