Los gastos para la reconstrucción de las murallas de Jerusalén y de las fortificaciones que hay alrededor, así como la reconstrucción de las murallas de otras ciudades de Judea, también correrán por cuenta del tesoro real.»
»Todo lo que necesiten para reconstruir el templo y las murallas de Jerusalén, así como las murallas de otras ciudades de Judea, será pagado de mi propio tesoro».