Revised Common Lectionary (Semicontinuous)
Llamado a la alabanza
117 ¡Alaben al SEÑOR, naciones todas!
¡Pueblos todos, alábenle!
2 Porque ha engrandecido sobre nosotros su misericordia,
y la verdad del SEÑOR es para siempre. ¡Aleluya!
18 Así ha dicho el SEÑOR: “He aquí, yo restauraré de la cautividad las tiendas de Jacob; de sus moradas tendré misericordia. La ciudad será reedificada sobre su montículo de escombros, y el palacio quedará en su lugar. 19 Acciones de gracias saldrán de ellos, y la voz de los que se regocijan. Los multiplicaré, y no serán disminuidos. Los honraré, y no serán insignificantes. 20 Sus hijos serán como en el pasado, y su congregación tendrá estabilidad delante de mí. Y castigaré a todos sus opresores.
21 “Uno de ellos será su soberano, y de en medio de ellos saldrá su gobernante. Yo lo haré acercarse, y él se acercará a mí. Porque, ¿quién es aquel que arriesga su corazón para acercarse a mí?, dice el SEÑOR. 22 Ustedes serán mi pueblo, y yo seré su Dios.
23 “He aquí que el huracán del SEÑOR sale con furor. Es un huracán que gira e irrumpe sobre la cabeza de los impíos. 24 No se apartará el ardor de la ira del SEÑOR hasta que haya hecho y cumplido los propósitos de su corazón. Al final de los días lo entenderán.
8 Yo, Juan, soy el que he oído y visto estas cosas. Cuando las oí y las vi, me postré para adorar ante los pies del ángel que me las mostraba. 9 Y él me dijo: “¡Mira, no lo hagas! Pues yo soy consiervo tuyo y de tus hermanos los profetas y de los que guardan las palabras de este libro. ¡Adora a Dios!”. 10 Y me dijo: “No selles las palabras de la profecía de este libro, porque el tiempo está cerca. 11 El que es injusto, haga injusticia todavía. El que es impuro, sea impuro todavía. El que es justo, haga justicia todavía, y el que es santo, santifíquese todavía”.
12 “He aquí vengo pronto, y mi recompensa conmigo, para pagar a cada uno según sean sus obras. 13 Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último, el principio y el fin”.
14 Bienaventurados los que lavan sus vestiduras[a], para que tengan derecho al árbol de la vida y para que entren en la ciudad por las puertas. 15 Pero afuera quedarán los perros, los hechiceros, los que cometen inmoralidades sexuales, los homicidas, los idólatras y todo el que ama y practica la mentira.
Conclusión
16 “Yo, Jesús, he enviado a mi ángel para darles a ustedes testimonio de estas cosas para las iglesias. Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella resplandeciente de la mañana”.
17 El Espíritu y la esposa dicen: “¡Ven!”. El que oye diga: “¡Ven!”. El que tiene sed, venga. El que quiera, tome del agua de vida gratuitamente.
18 Yo advierto a todo el que oye las palabras de la profecía de este libro: Si alguno añade a estas cosas, Dios le añadirá las plagas que están escritas en este libro; 19 y si alguno quita de las palabras del libro de esta profecía, Dios le quitará su parte del árbol[b] de la vida y de la santa ciudad, de los cuales se ha escrito en este libro.
20 El que da testimonio de estas cosas dice: “¡Sí, vengo pronto!”.
¡Amén! ¡Ven, Señor Jesús!
21 La gracia de nuestro Señor Jesús sea con todos[c].
Version Reina Valera Actualizada, Copyright © 2015 by Editorial Mundo Hispano