Revised Common Lectionary (Semicontinuous)
Alabanza a Dios por sus hechos
66 Al músico principal. Cántico y salmo.
¡Aclamen a Dios con alegría
habitantes de[a] toda la tierra!
2 Canten a la gloria de su nombre; denle la gloria en la alabanza.
3 Digan a Dios:
“¡Cuán admirables son tus obras! Por tu gran poder se someterán a ti tus enemigos.
4 ¡Toda la tierra te adorará y cantará a ti! ¡Cantarán a tu nombre!”. Selah[b]
5 Vengan y vean los actos de Dios, admirable en sus hechos
para con los hijos del hombre.
6 Él convirtió el mar en tierra seca,
y por el río pasaron a pie[c].
¡Regocijémonos en él!
7 Se enseñorea con su poder
para siempre;
sus ojos observan a las naciones para que los rebeldes no se enaltezcan contra él.
Selah[d]
8 ¡Bendigan, oh pueblos, a nuestro Dios! Hagan que se escuche la voz
de su alabanza.
9 Él es quien preservó la vida
a nuestra alma
y no permitió que resbalasen nuestros pies.
10 Tú nos has probado, oh Dios; nos has purificado como se prueba
la plata.
11 Nos metiste en la red
y pusiste apretura sobre nuestros lomos.
12 Hiciste que los hombres cabalgaran encima de nuestra cabeza.
Pasamos por el fuego y por el agua pero luego nos sacaste a abundancia.
Judá castigado mediante Babilonia
25 La palabra que vino a Jeremías acerca de todo el pueblo de Judá, en el cuarto año de Joacim hijo de Josías, rey de Judá, el cual era el primer año de Nabucodonosor, rey de Babilonia, 2 la cual habló el profeta Jeremías a todo el pueblo de Judá y a todos los habitantes de Jerusalén, diciendo: 3 “Desde el año décimo tercero de Josías hijo de Amón, rey de Judá, hasta este día, durante veintitrés años ha venido a mí la palabra del SEÑOR. Les he hablado persistentemente, pero no han escuchado. 4 El SEÑOR les envió persistentemente todos sus siervos los profetas, pero no escucharon ni inclinaron su oído para escuchar. 5 Les decían: ‘Vuélvanse, pues, cada uno de su mal camino y de la maldad de sus obras, y habiten en la tierra que el SEÑOR les ha dado a ustedes y a sus padres, para siempre jamás. 6 No vayan en pos de otros dioses, para rendirles culto y para postrarse ante ellos. No me provoquen a ira con la obra de sus manos, y no les haré mal’. 7 Sin embargo, dice el SEÑOR, no me escucharon, de modo que me han provocado a ira con la obra de sus manos, para su propio mal.
8 “Por tanto, así ha dicho el SEÑOR de los Ejércitos: ‘Por cuanto no han escuchado mis palabras, 9 he aquí yo enviaré a tomar a todas las gentes del norte y a Nabucodonosor rey de Babilonia, mi siervo, y los traeré contra esta tierra y contra sus habitantes, y contra todas las naciones de alrededor, dice el SEÑOR. Los destruiré por completo y los convertiré en escarnio, rechifla y ruinas perpetuas. 10 Haré perecer entre ellos la voz del gozo y la voz de la alegría, la voz del novio y la voz de la novia, el ruido de las piedras del molino y la luz de la lámpara. 11 Toda esta tierra será convertida en desolación y espanto. Y estas naciones servirán al rey de Babilonia durante setenta años’.
Juicio y destrucción de Babilonia
12 “Pero sucederá que cuando se hayan cumplido los setenta años, castigaré al rey de Babilonia, a aquella nación y a la tierra de los caldeos, por su maldad. Yo la convertiré en perpetua desolación. 13 Traeré contra aquella tierra todas mis palabras que he hablado acerca de ella, todo lo que está escrito en este libro que ha profetizado Jeremías contra todas las naciones. 14 Porque también de ellos se servirán muchas naciones y grandes reyes. Yo les retribuiré conforme a sus hechos y conforme a la obra de sus manos”.
13 Ten presente el modelo de las sanas palabras que has oído de mí, en la fe y el amor en Cristo Jesús. 14 Guarda el buen depósito por medio del Espíritu Santo que habita en nosotros.
15 Ya sabes que se apartaron de mí todos los de Asia, entre ellos Figelo y Hermógenes. 16 El Señor conceda misericordia a la casa de Onesíforo porque muchas veces me reanimó y no se avergonzó de mis cadenas. 17 Más bien, cuando estuvo en Roma, me buscó solícitamente y me halló. 18 El Señor le conceda que halle misericordia de parte del Señor en aquel día. Cuánto nos ayudó en Éfeso tú lo sabes muy bien.
Version Reina Valera Actualizada, Copyright © 2015 by Editorial Mundo Hispano