Print Page Options
Previous Prev Day Next DayNext

Revised Common Lectionary (Semicontinuous)

Daily Bible readings that follow the church liturgical year, with sequential stories told across multiple weeks.
Duration: 1245 days
Nueva Traducción Viviente (NTV)
Version
Salmos 150

150 ¡Alabado sea el Señor!

Alaben a Dios en su santuario;
    ¡alábenlo en su poderoso cielo!
Alábenlo por sus obras poderosas;
    ¡alaben su grandeza sin igual!
Alábenlo con un fuerte toque del cuerno de carnero;
    ¡alábenlo con la lira y el arpa!
Alábenlo con panderetas y danzas;
    ¡alábenlo con instrumentos de cuerda y con flautas!
Alábenlo con el sonido de los címbalos;
    alábenlo con címbalos fuertes y resonantes.
¡Que todo lo que respira cante alabanzas al Señor!

¡Alabado sea el Señor!

1 Samuel 17:32-51

David mata a Goliat

32 —No se preocupe por este filisteo—le dijo David a Saúl—. ¡Yo iré a pelear contra él!

33 —¡No seas ridículo!—respondió Saúl—. ¡No hay forma de que tú puedas pelear contra ese filisteo y ganarle! Eres tan solo un muchacho, y él ha sido un hombre de guerra desde su juventud.

34 Pero David insistió:

—He estado cuidando las ovejas y las cabras de mi padre. Cuando un león o un oso viene para robar un cordero del rebaño, 35 yo lo persigo con un palo y rescato el cordero de su boca. Si el animal me ataca, lo tomo de la quijada y lo golpeo hasta matarlo. 36 Lo he hecho con leones y con osos, y lo haré también con este filisteo pagano, ¡porque ha desafiado a los ejércitos del Dios viviente! 37 ¡El mismo Señor que me rescató de las garras del león y del oso me rescatará de este filisteo!

Así que Saúl por fin accedió:

—Está bien, adelante. ¡Y que el Señor esté contigo!

38 Después Saúl le dio a David su propia armadura: un casco de bronce y una cota de malla. 39 David se los puso, se ciñó la espada y probó dar unos pasos porque nunca antes se había vestido con algo semejante.

—No puedo andar con todo esto—le dijo a Saúl—. No estoy acostumbrado a usarlo.

Así que David se lo quitó. 40 Tomó cinco piedras lisas de un arroyo y las metió en su bolsa de pastor. Luego, armado únicamente con su vara de pastor y su honda, comenzó a cruzar el valle para luchar contra el filisteo.

41 Goliat caminaba hacia David con su escudero delante de él, 42 mirando con desdén al muchacho de mejillas sonrosadas.

43 —¿Soy acaso un perro—le rugió a David—para que vengas contra mí con un palo?

Y maldijo a David en nombre de sus dioses.

44 —¡Ven aquí, y les daré tu carne a las aves y a los animales salvajes!—gritó Goliat.

45 David le respondió al filisteo:

—Tú vienes contra mí con espada, lanza y jabalina, pero yo vengo contra ti en nombre del Señor de los Ejércitos Celestiales, el Dios de los ejércitos de Israel, a quien tú has desafiado. 46 Hoy el Señor te conquistará, y yo te mataré y te cortaré la cabeza. Y luego daré los cadáveres de tus hombres a las aves y a los animales salvajes, ¡y todo el mundo sabrá que hay un Dios en Israel! 47 Todos los que están aquí reunidos sabrán que el Señor rescata a su pueblo, pero no con espada ni con lanza. ¡Esta es la batalla del Señor, y los entregará a ustedes en nuestras manos!

48 Cuando Goliat se acercó para atacarlo, David fue corriendo para enfrentarse con él. 49 Metió la mano en su bolsa de pastor, sacó una piedra, la lanzó con su honda y golpeó al filisteo en la frente. La piedra se le incrustó allí y Goliat se tambaleó y cayó de cara al suelo.

50 Así David triunfó sobre el filisteo con solo una honda y una piedra, porque no tenía espada. 51 Después David corrió y sacó de su vaina la espada de Goliat y la usó para matarlo y cortarle la cabeza.

Israel derrota a los filisteos

Cuando los filisteos vieron que su campeón estaba muerto, se dieron la vuelta y huyeron.

Lucas 24:36-40

36 Entonces, justo mientras contaban la historia, de pronto Jesús mismo apareció de pie en medio de ellos. «La paz sea con ustedes», les dijo. 37 Pero todos quedaron asustados y temerosos; ¡pensaban que veían un fantasma!

38 «¿Por qué están asustados?—les preguntó—. ¿Por qué tienen el corazón lleno de dudas? 39 Miren mis manos. Miren mis pies. Pueden ver que de veras soy yo. Tóquenme y asegúrense de que no soy un fantasma, pues los fantasmas no tienen cuerpo, como ven que yo tengo». 40 Mientras hablaba, él les mostró sus manos y sus pies.

Nueva Traducción Viviente (NTV)

La Santa Biblia, Nueva Traducción Viviente, © Tyndale House Foundation, 2010. Todos los derechos reservados.