Revised Common Lectionary (Semicontinuous)
Exhortación a alabar a Dios con instrumentos de música
Aleluya.
150 Alabad a Dios en su santuario;
Alabadle en el firmamento de su poder.
2 Alabadle por sus proezas;
Alabadle conforme a la inmensidad de su grandeza.
3 Alabadle al son de trompeta;
Alabadle con salterio y arpa.
4 Alabadle con pandero y danza;
Alabadle con instrumentos de cuerda y con flautas.
5 Alabadle con címbalos retumbantes;
Alabadle con címbalos de júbilo.
6 Todo lo que respira alabe a JAH.
Aleluya.
19 Y Saúl y ellos y todos los de Israel estaban en el valle del Terebinto, peleando contra los filisteos.
20 Se levantó, pues, David de mañana, y dejando las ovejas al cuidado de un guarda, se fue con su carga como Isay le había mandado; y llegó al campamento cuando el ejército salía en orden de batalla, lanzando el grito de combate.
21 Y se pusieron en orden de batalla Israel y los filisteos, ejército frente a ejército.
22 Entonces David dejó su carga en manos del que guardaba el bagaje, y corrió al ejército; y cuando llegó, preguntó por sus hermanos, si estaban bien.
23 Mientras él hablaba con ellos, he aquí que aquel paladín que se ponía en medio de los dos campamentos, que se llamaba Goliat, el filisteo de Gat, salió de entre las filas de los filisteos y habló las mismas palabras, y las oyó David.
24 Y todos los varones de Israel que veían aquel hombre huían de su presencia, y tenían gran temor.
25 Y cada uno de los de Israel decía: ¿No habéis visto aquel hombre que ha salido? Él se adelanta para provocar a Israel. Al que le venza, el rey le enriquecerá con grandes riquezas, y le dará su hija, y eximirá de tributos a la casa de su padre en Israel.
26 Entonces habló David a los que estaban junto a él, diciendo: ¿Qué harán al hombre que venza a este filisteo, y quite el oprobio de Israel? Porque ¿quién es este filisteo incircunciso, para injuriar a las huestes del Dios viviente?
27 Y el pueblo le respondió las mismas palabras, diciendo: Así se hará al hombre que le venza.
28 Y oyéndole hablar Eliab su hermano mayor con aquellos hombres, se encendió en ira contra David y dijo: ¿Para qué has descendido acá?, ¿y a quién has dejado aquellas pocas ovejas en el desierto? Yo conozco tu soberbia y la malicia de tu corazón, que para ver la batalla has venido.
29 David respondió: ¿Qué he hecho yo ahora? ¿No es esto mero hablar?
30 Y apartándose de él hacia otros, preguntó de igual manera; y le dio el pueblo la misma respuesta de antes.
31 Fueron oídas las palabras que David había dicho, y las refirieron delante de Saúl; y él lo hizo venir.
David acepta el desafío
32 Y dijo David a Saúl: No desmaye el corazón de ninguno a causa de él; tu siervo irá y peleará contra este filisteo.
Arresto y liberación de Pedro y Juan
17 Entonces, levantándose el sumo sacerdote y todos los que estaban con él, esto es, la secta de los saduceos, se llenaron de celos;
18 y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.
19 Mas un ángel del Señor, abrió de noche las puertas de la cárcel y, sacándolos, dijo:
20 Id, y puestos en pie en el templo, hablad al pueblo todas las palabras de esta vida.
21 Habiendo oído esto, entraron al amanecer en el templo, y enseñaban. Entretanto, se presentaron el sumo sacerdote y los que estaban con él, y convocaron al sanedrín y a todos los ancianos de los hijos de Israel, y enviaron a la cárcel para que fuesen traídos.
22 Pero cuando llegaron los alguaciles, no los hallaron en la cárcel; entonces volvieron e informaron,
23 diciendo: Por cierto, hemos hallado la cárcel cerrada con toda seguridad, y los guardias afuera de pie ante las puertas; mas cuando abrimos, a nadie hallamos dentro.
24 Cuando oyeron estas palabras el sumo sacerdote y el jefe de la guardia del templo y los principales sacerdotes, se preguntaban perplejos en qué vendría a parar aquello.
25 Pero se presentó uno, que les dio esta noticia: He aquí, los varones que pusiste en la cárcel están en pie en el templo, y enseñan al pueblo.
26 Entonces fue el jefe de la guardia con los alguaciles, y los trajo sin violencia, porque temían ser apedreados por el pueblo.
Texto bíblico tomado de La Santa Biblia, Reina Valera Revisada® RVR® Copyright © 2017 por HarperCollins Christian Publishing® Usado con permiso. Reservados todos los derechos en todo el mundo.