Revised Common Lectionary (Semicontinuous)
¡Haz que cambie nuestra suerte!
(1a) Cántico de las subidas.
126 (1b) Cuando el Señor cambió la suerte de Sión,
nos pareció que estábamos soñando.
2 Entonces nuestra boca y nuestros labios
se llenaron de risas y gritos de alegría;
entonces los paganos decían:
«¡El Señor ha hecho grandes cosas por ellos!»
3 Sí, el Señor había hecho grandes cosas por nosotros,
y estábamos alegres.
4 ¡Señor, haz que cambie de nuevo nuestra suerte,
como cambia el desierto con las lluvias!
5 Los que siembran con lágrimas,
cosecharán con gritos de alegría.
6 Aunque lloren mientras llevan el saco de semilla,
volverán cantando de alegría,
con manojos de trigo entre los brazos.
El Señor es el único Salvador
43 Pero ahora, Israel, pueblo de Jacob,
el Señor que te creó te dice:
«No temas, que yo te he libertado;
yo te llamé por tu nombre, tú eres mío.
2 Si tienes que pasar por el agua, yo estaré contigo,
si tienes que cruzar ríos, no te ahogarás;
si tienes que pasar por el fuego, no te quemarás,
las llamas no arderán en ti.
3 Pues yo soy tu Señor, tu salvador,
el Dios Santo de Israel.
Yo te he adquirido;
he dado como precio de rescate
a Egipto, a Etiopía y a Sabá,
4 porque te aprecio,
eres de gran valor y yo te amo.
Para tenerte a ti y para salvar tu vida
entrego hombres y naciones.
5 No tengas miedo, pues yo estoy contigo.
Desde oriente y occidente
haré volver a tu gente para reunirla.
6 Diré al norte: “Devuélvelos”,
y al sur: “No te quedes con ellos.
Trae a mis hijos y mis hijas
desde lejos, desde el extremo del mundo,
7 a todos los que llevan mi nombre,
a los que yo creé y formé,
a los que hice para gloria mía.”
Timoteo
19 Confiado en el Señor Jesús, espero mandarles pronto a Timoteo, para alegrarme al recibir noticias de ustedes. 20 Porque no tengo a ningún otro que comparta tanto mis propios sentimientos y que de veras se preocupe por el bien de ustedes; 21 todos buscan su propio interés, y no el interés de Jesucristo. 22 Pero ustedes ya saben del buen comportamiento de Timoteo y de cómo ha servido conmigo en el anuncio del evangelio, ayudándome como si fuera mi hijo. 23 Así que espero enviárselo en cuanto yo sepa qué va a pasar conmigo; 24 aunque confío en el Señor que también yo mismo iré pronto.
Dios habla hoy ®, © Sociedades Bíblicas Unidas, 1966, 1970, 1979, 1983, 1996.