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Revised Common Lectionary (Semicontinuous)

Daily Bible readings that follow the church liturgical year, with sequential stories told across multiple weeks.
Duration: 1245 days
Nueva Traducción Viviente (NTV)
Version
2 Samuel 18:5-9

Entonces el rey les dio esta orden a Joab, a Abisai y a Itai:

—Por consideración a mí, traten con bondad al joven Absalón.

Y todas las tropas escucharon que el rey daba esta orden a sus comandantes.

Así que comenzó la batalla en el bosque de Efraín, y los hombres de David rechazaron los ataques de las tropas israelitas. Aquel día hubo una gran matanza, y veinte mil hombres perdieron la vida. La batalla se extendió con furor por todo el campo, y perecieron en el bosque más hombres que los que murieron a espada.

Durante la batalla, Absalón se cruzó con algunos hombres de David. Trató de escapar en su mula, pero al pasar cabalgando debajo de un gran árbol, su cabello[a] se enredó en las gruesas ramas. La mula siguió y dejó a Absalón suspendido en el aire.

2 Samuel 18:15

15 Luego diez jóvenes escuderos de Joab rodearon a Absalón y lo remataron.

2 Samuel 18:31-33

31 Enseguida el etíope llegó y le dijo:

—Tengo buenas noticias para mi señor el rey. Hoy el Señor lo ha librado de todos los que se rebelaron en su contra.

32 —¿Qué me dices del joven Absalón?—preguntó el rey—. ¿Se encuentra bien?

Y el etíope contestó:

—¡Que todos sus enemigos, mi señor el rey, ahora y en el futuro, corran con la misma suerte de ese joven!

33 [a]Entonces el rey se sintió abrumado por la emoción. Subió a la habitación que estaba sobre la entrada y se echó a llorar. Y mientras subía, clamaba: «¡Oh, mi hijo Absalón! ¡Hijo mío, hijo mío Absalón! ¡Si tan solo yo hubiera muerto en tu lugar! ¡Oh Absalón, mi hijo, mi hijo!».

Salmos 130

Cántico para los peregrinos que suben a Jerusalén.

130 Desde lo profundo de mi desesperación, oh Señor,
    clamo por tu ayuda.
Escucha mi clamor, oh Señor.
    Presta atención a mi oración.

Señor, si llevaras un registro de nuestros pecados,
    ¿quién, oh Señor, podría sobrevivir?
Pero tú ofreces perdón,
    para que aprendamos a temerte.

Yo cuento con el Señor;
    sí, cuento con él.
    En su palabra he puesto mi esperanza.
Anhelo al Señor
    más que los centinelas el amanecer,
    sí, más de lo que los centinelas anhelan el amanecer.

Oh Israel, espera en el Señor,
    porque en el Señor hay amor inagotable;
    su redención sobreabunda.
Él mismo redimirá a Israel
    de toda clase de pecado.

Efesios 4:25-5:2

25 Así que dejen de decir mentiras. Digamos siempre la verdad a todos porque nosotros somos miembros de un mismo cuerpo. 26 Además, «no pequen al dejar que el enojo los controle»[a]. No permitan que el sol se ponga mientras siguen enojados, 27 porque el enojo da lugar al diablo.

28 Si eres ladrón, deja de robar. En cambio, usa tus manos en un buen trabajo digno y luego comparte generosamente con los que tienen necesidad. 29 No empleen un lenguaje grosero ni ofensivo. Que todo lo que digan sea bueno y útil, a fin de que sus palabras resulten de estímulo para quienes las oigan.

30 No entristezcan al Espíritu Santo de Dios con la forma en que viven. Recuerden que él los identificó como suyos,[b] y así les ha garantizado que serán salvos el día de la redención.

31 Líbrense de toda amargura, furia, enojo, palabras ásperas, calumnias y toda clase de mala conducta. 32 Por el contrario, sean amables unos con otros, sean de buen corazón, y perdónense unos a otros, tal como Dios los ha perdonado a ustedes por medio de Cristo.

Vivir en la luz

Por lo tanto, imiten a Dios en todo lo que hagan porque ustedes son sus hijos queridos. Vivan una vida llena de amor, siguiendo el ejemplo de Cristo. Él nos amó[c] y se ofreció a sí mismo como sacrificio por nosotros, como aroma agradable a Dios.

Juan 6:35

35 Jesús les respondió:

—Yo soy el pan de vida. El que viene a mí nunca volverá a tener hambre; el que cree en mí no tendrá sed jamás.

Juan 6:41-51

41 Entonces la gente comenzó[a] a murmurar en desacuerdo, porque él había dicho: «Yo soy el pan que descendió del cielo». 42 Ellos se decían: «¿Acaso no es este Jesús, el hijo de José? Conocemos a su padre y a su madre. ¿Y ahora cómo puede decir: “Yo descendí del cielo”?».

43 Jesús les contestó: «Dejen de quejarse por lo que dije. 44 Pues nadie puede venir a mí a menos que me lo traiga el Padre, que me envió, y yo lo resucitaré en el día final. 45 Como dicen las Escrituras:[b] “A todos les enseñará Dios”. Todos los que escuchan al Padre y aprenden de él, vienen a mí. 46 (No es que alguien haya visto al Padre; solamente yo lo he visto, el que Dios envió).

47 »Les digo la verdad, todo el que cree, tiene vida eterna. 48 ¡Sí, yo soy el pan de vida! 49 Sus antepasados comieron maná en el desierto, pero todos murieron, 50 sin embargo, el que coma el pan del cielo nunca morirá. 51 Yo soy el pan vivo que descendió del cielo. Todo el que coma de este pan vivirá para siempre; y este pan, que ofreceré para que el mundo viva, es mi carne».

Nueva Traducción Viviente (NTV)

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