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Revised Common Lectionary (Semicontinuous)

Daily Bible readings that follow the church liturgical year, with sequential stories told across multiple weeks.
Duration: 1245 days
Nueva Traducción Viviente (NTV)
Version
1 Samuel 15:34-16:13

34 Después Samuel fue a su casa en Ramá, y Saúl regresó a su casa en Guibeá de Saúl. 35 Samuel nunca más volvió a ver a Saúl, pero lloraba por él constantemente. Y el Señor se lamentó de haber hecho a Saúl rey de Israel.

Samuel unge a David como rey

16 Ahora bien, el Señor le dijo a Samuel:

—Ya has hecho suficiente duelo por Saúl. Lo he rechazado como rey de Israel, así que llena tu frasco con aceite de oliva y ve a Belén. Busca a un hombre llamado Isaí que vive allí, porque he elegido a uno de sus hijos para que sea mi rey.

Pero Samuel le preguntó:

—¿Cómo puedo hacerlo? Si Saúl llega a enterarse, me matará.

—Lleva contigo una novilla—le contestó el Señor—y di que has venido para ofrecer un sacrificio al Señor. Invita a Isaí al sacrificio, y te mostraré a cuál de sus hijos ungirás para mí.

Así que Samuel hizo como el Señor le indicó. Cuando llegó a Belén, los ancianos del pueblo salieron a su encuentro temblando.

—¿Qué pasa?—le preguntaron—. ¿Vienes en son de paz?

—Sí—contestó Samuel—, vine para ofrecer un sacrificio al Señor. Purifíquense y vengan conmigo al sacrificio.

Luego Samuel realizó el rito de purificación para Isaí y sus hijos y también los invitó al sacrificio.

Cuando llegaron, Samuel se fijó en Eliab y pensó: «¡Seguramente este es el ungido del Señor!».

Pero el Señor le dijo a Samuel:

—No juzgues por su apariencia o por su estatura, porque yo lo he rechazado. El Señor no ve las cosas de la manera en que tú las ves. La gente juzga por las apariencias, pero el Señor mira el corazón.

Entonces Isaí le dijo a su hijo Abinadab que caminara delante de Samuel. Pero Samuel dijo:

—Este no es el que el Señor ha elegido.

Después Isaí llamó a Simea,[a] pero Samuel dijo:

—Tampoco es este a quien el Señor ha elegido.

10 De la misma manera, Isaí le presentó sus siete hijos a Samuel. Pero Samuel le dijo:

—El Señor no ha elegido a ninguno de ellos.

11 Después Samuel preguntó:

—¿Son estos todos los hijos que tienes?

—Queda todavía el más joven—contestó Isaí—. Pero está en el campo cuidando las ovejas y las cabras.

—Manda llamarlo de inmediato—dijo Samuel—. No nos sentaremos a comer hasta que él llegue.

12 Entonces Isaí mandó a buscarlo. El joven era trigueño y apuesto, y de hermosos ojos.

Y el Señor dijo:

—Este es, úngelo.

13 Al estar David de pie entre sus hermanos, Samuel tomó el frasco de aceite de oliva que había traído y ungió a David con el aceite. Y el Espíritu del Señor vino con gran poder sobre David a partir de ese día. Luego Samuel regresó a Ramá.

Salmos 20

Para el director del coro: salmo de David.

20 Que el Señor responda a tu clamor en tiempos de dificultad;
    que el nombre del Dios de Jacob te proteja de todo mal.
Que te envíe ayuda desde su santuario
    y te fortalezca desde Jerusalén.[a]
Que se acuerde de todas tus ofrendas
    y mire con agrado tus ofrendas quemadas. Interludio

Que él conceda los deseos de tu corazón
    y haga que todos tus planes tengan éxito.
Que gritemos de alegría cuando escuchemos de tu triunfo
    y levantemos una bandera de victoria en el nombre de nuestro Dios.
Que el Señor conteste a todas tus oraciones.

Ahora sé que el Señor rescata a su rey ungido.
    Le responderá desde su santo cielo
    y lo rescatará con su gran poder.
Algunas naciones se jactan de sus caballos y sus carros de guerra,
    pero nosotros nos jactamos en el nombre del Señor nuestro Dios.
Esas naciones se derrumbarán y caerán,
    pero nosotros nos levantaremos y estaremos firmes.

¡Da la victoria a nuestro rey, oh Señor!
    Responde a nuestro grito de auxilio.

2 Corintios 5:6-10

Así que siempre vivimos en plena confianza, aunque sabemos que mientras vivamos en este cuerpo no estamos en el hogar celestial con el Señor. Pues vivimos por lo que creemos y no por lo que vemos. Sí, estamos plenamente confiados, y preferiríamos estar fuera de este cuerpo terrenal porque entonces estaríamos en el hogar celestial con el Señor. Así que, ya sea que estemos aquí en este cuerpo o ausentes de este cuerpo, nuestro objetivo es agradarlo a él. 10 Pues todos tendremos que estar delante de Cristo para ser juzgados. Cada uno de nosotros recibirá lo que merezca por lo bueno o lo malo que haya hecho mientras estaba en este cuerpo terrenal.

2 Corintios 5:11-13

Somos embajadores de Dios

11 Dado que entendemos nuestra temible responsabilidad ante el Señor, trabajamos con esmero para persuadir a otros. Dios sabe que somos sinceros, y espero que ustedes también lo sepan. 12 ¿Estamos de nuevo recomendándonos a ustedes? No, estamos dándoles un motivo para que estén orgullosos de nosotros,[a] para que puedan responder a los que se jactan de tener ministerios espectaculares en vez de tener un corazón sincero. 13 Si parecemos estar locos es para darle gloria a Dios, y si estamos en nuestro sano juicio, es para beneficio de ustedes.

2 Corintios 5:14-17

14 Sea de una forma u otra, el amor de Cristo nos controla.[a] Ya que creemos que Cristo murió por todos, también creemos que todos hemos muerto a nuestra vida antigua.[b] 15 Él murió por todos para que los que reciben la nueva vida de Cristo ya no vivan más para sí mismos. Más bien, vivirán para Cristo, quien murió y resucitó por ellos.

16 Así que hemos dejado de evaluar a otros desde el punto de vista humano. En un tiempo, pensábamos de Cristo solo desde un punto de vista humano. ¡Qué tan diferente lo conocemos ahora! 17 Esto significa que todo el que pertenece a Cristo se ha convertido en una persona nueva. La vida antigua ha pasado; ¡una nueva vida ha comenzado!

Marcos 4:26-34

Parábola de la semilla que crece

26 Jesús también dijo: «El reino de Dios es como un agricultor que esparce semilla en la tierra. 27 Día y noche, sea que él esté dormido o despierto, la semilla brota y crece, pero él no entiende cómo sucede. 28 La tierra produce las cosechas por sí sola. Primero aparece una hoja, luego se forma la espiga y finalmente el grano madura. 29 Tan pronto como el grano está listo, el agricultor lo corta con la hoz porque ha llegado el tiempo de la cosecha».

Parábola de la semilla de mostaza

30 Jesús dijo: «¿Cómo puedo describir el reino de Dios? ¿Qué relato emplearé para ilustrarlo? 31 Es como una semilla de mostaza sembrada en la tierra. Es la más pequeña de todas las semillas, 32 pero se convierte en la planta más grande del huerto; sus ramas llegan a ser tan grandes que los pájaros hacen nidos bajo su sombra».

33 Jesús empleó muchas historias e ilustraciones similares para enseñar a la gente, tanto como pudieran entender. 34 De hecho, durante su ministerio público nunca enseñó sin usar parábolas; pero después, cuando estaba a solas con sus discípulos, les explicaba todo a ellos.

Nueva Traducción Viviente (NTV)

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