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Revised Common Lectionary (Semicontinuous)

Daily Bible readings that follow the church liturgical year, with sequential stories told across multiple weeks.
Duration: 1245 days
Nueva Biblia de las Américas (NBLA)
Version
Salmos 138

Salmo 138

Acción de gracias por el favor del Señor

Salmo de David.

138 Con todo mi corazón te daré gracias(A);
En presencia de los dioses(B) te cantaré alabanzas.
Me postraré hacia Tu santo templo(C),
Y daré gracias a Tu nombre por Tu misericordia y Tu fidelidad[a](D);
Porque has engrandecido Tu palabra(E) conforme a todo Tu nombre.
En el día que invoqué, me respondiste(F);
Me hiciste valiente con fortaleza en mi alma(G).
¶Todos los reyes de la tierra te alabarán(H), Señor,
Cuando hayan oído los dichos de Tu boca.
Y cantarán de los caminos del Señor(I),
Porque grande(J) es la gloria del Señor.
Porque el Señor es excelso(K),
Y atiende al humilde(L),
Pero al altivo conoce de lejos(M).
¶Aunque yo ande en medio de la angustia(N), Tú me vivificarás(O);
Extenderás Tu mano(P) contra la ira de mis enemigos,
Y Tu diestra me salvará(Q).
El Señor cumplirá Su propósito en mí(R);
Eterna, oh Señor, es Tu misericordia(S);
No abandones(T) las obras de Tus manos(U).

1 Samuel 6:1-18

Los filisteos devuelven el arca

El arca del Señor había estado siete meses en la tierra[a] de los filisteos. Entonces los filisteos llamaron a los sacerdotes y a los adivinos(A) y les preguntaron: «¿Qué haremos con el arca del Señor? Dígannos cómo[b] la hemos de enviar a su lugar». Y ellos contestaron: «Si envían el arca del Dios de Israel, no la envíen vacía(B); sino que ciertamente devolverán a Dios una ofrenda por la culpa(C). Entonces serán sanados y sabrán por qué Su mano no se ha apartado de ustedes».

Y los filisteos preguntaron: «¿Cuál será la ofrenda por la culpa que le hemos de devolver?». Y ellos dijeron: «Cinco tumores de oro(D) y cinco ratones de oro conforme al número de los príncipes de los filisteos(E), porque la misma plaga estuvo sobre todos ustedes y sobre sus príncipes. Harán, pues, semejanzas de sus tumores, y semejanzas de sus ratones que asolan la tierra, y darán gloria al Dios de Israel(F). Tal vez Él alivie Su mano de sobre ustedes(G), de sobre sus dioses y de sobre su tierra(H). ¿Por qué entonces endurecen sus corazones, como endurecieron sus corazones los egipcios y Faraón(I)? Cuando Él los trató severamente, ¿no dejaron ir al pueblo[c], y ellos se fueron(J)?

»Ahora pues, tomen y preparen un carro nuevo(K) y dos vacas con crías sobre las cuales no se haya puesto ningún yugo(L). Aten las vacas al carro y lleven sus becerros a casa, lejos de ellas. Tomen el arca del Señor y colóquenla en el carro; y pongan en una caja a su lado los objetos de oro(M) que le entregarán como ofrenda por la culpa(N). Luego, déjenla ir, y que se vaya. Y observen bien: si sube por el camino de su territorio[d] a Bet Semes(O), entonces Él nos ha hecho este gran mal. Pero si no, entonces sabremos que no fue Su mano la que nos hirió(P); nos sucedió por casualidad».

10 Entonces los hombres lo hicieron así. Tomaron dos vacas con crías, las ataron al carro y encerraron sus becerros en casa. 11 Colocaron el arca del Señor en el carro, y la caja con los ratones de oro y las semejanzas de sus tumores. 12 Y las vacas tomaron el camino recto en dirección[e] a Bet Semes(Q). Iban por el camino(R), mugiendo mientras iban, y no se desviaron ni a la derecha ni a la izquierda. Los príncipes de los filisteos las siguieron hasta el límite de Bet Semes. 13 El pueblo de Bet Semes estaba segando el[f] trigo en el valle, y alzaron sus ojos y, al ver el arca, se alegraron al verla.

14 El carro llegó al campo de Josué el betsemita y se detuvo allí donde había una gran piedra; y ellos partieron la madera del carro y ofrecieron las vacas en holocausto al Señor(S). 15 Los levitas bajaron el arca del Señor y la caja que estaba con ella, en la cual estaban los objetos de oro, y las colocaron sobre la piedra grande(T). Entonces los hombres de Bet Semes ofrecieron holocaustos e hicieron sacrificios aquel día al Señor. 16 Cuando los cinco príncipes de los filisteos vieron esto, regresaron a Ecrón(U) el mismo día.

17 Estos son los tumores de oro que los filisteos entregaron como ofrenda por la culpa al Señor(V): uno por Asdod, uno por Gaza, uno por Ascalón, uno por Gat y uno por Ecrón; 18 y ratones de oro conforme al número de todas las ciudades de los filisteos que pertenecían a los cinco príncipes, tanto de ciudades fortificadas como de aldeas sin murallas(W). La piedra grande[g] sobre la cual colocaron el arca del Señor es testigo hasta el día de hoy en el campo de Josué el betsemita(X).

Lucas 8:4-15

Parábola del sembrador

(A)Habiéndose congregado una gran multitud y los que de varias ciudades acudían a Jesús, entonces les habló por medio de una parábola: «El sembrador salió a sembrar su semilla. Al sembrarla, una parte cayó junto al camino, y fue pisoteada y las aves del cielo se la comieron. Otra parte cayó sobre la roca, y tan pronto como creció, se secó, porque no tenía humedad. Otra parte cayó en medio de los espinos; y los espinos, al crecer con ella, la ahogaron. Y otra parte cayó en tierra buena, y creció y produjo una cosecha a ciento por uno». Al hablar estas cosas, Jesús exclamaba: «El que tiene oídos para oír, que oiga(B)».

Explicación de la parábola

(C)Sus discípulos le preguntaban qué quería decir esta parábola, 10 y Él respondió: «A ustedes se les ha concedido conocer los misterios del reino de Dios(D), pero a los demás les hablo en parábolas, para que viendo, no vean; y oyendo, no entiendan(E).

11 La parábola es esta: la semilla es la palabra de Dios(F) . 12 Aquellos a lo largo del camino son los que han oído, pero después viene el diablo y arrebata la palabra de sus corazones, para que no crean y se salven. 13 Aquellos sobre la roca son los que, cuando oyen, reciben la palabra con gozo; pero[a]no tienen raíz profunda; creen[b]por algún tiempo, y en el momento de la tentación sucumben. 14 La semilla que cayó entre los espinos, son los que han oído, y al continuar su camino son ahogados por las preocupaciones, las riquezas y los placeres de la vida, y su fruto no madura. 15 Pero la semilla en la tierra buena, son los que han oído la palabra con corazón recto y bueno, y la retienen, y dan fruto con su perseverancia.

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