Revised Common Lectionary (Semicontinuous)
23 Yo proclamaré tu nombre a mis hermanos,
te alabaré en medio de la asamblea.
24 Los que veneran al Señor, alábenlo,
ustedes, estirpe de Jacob, hónrenlo,
ustedes, estirpe de Israel, respétenlo.
25 Porque no despreció ni rechazó
el dolor del afligido; no le ocultó su rostro,
sino que lo escuchó cuando clamaba.
26 De ti nace mi alabanza en la gran asamblea;
delante de sus fieles cumpliré mis votos.
27 Los necesitados comerán hasta saciarse,
alabarán al Señor los que lo buscan.
¡Que todos ustedes vivan por siempre!
28 Recordarán al Señor y volverán hacia él
desde todos los confines de la tierra;
se postrarán ante ti todas las naciones.
29 Porque del Señor es la realeza,
él domina a las naciones.
30 Ante el Señor se postrarán
los que descansan en la tierra,
se arrodillarán los que bajan al polvo,
los que no pueden preservar su vida.
31 La posteridad ha de servirlo,
por siempre será proclamado el Señor.
7 El ángel del Señor la encontró en el desierto, junto a un manantial de agua —la fuente que hay en el camino de Sur— 8 y le preguntó:
— Agar, esclava de Saray, ¿de dónde vienes y a dónde vas?
Ella respondió:
— Vengo huyendo de mi señora Saray.
9 Y el ángel del Señor le dijo:
— Vuelve con tu señora y sométete a su autoridad.
10 Luego añadió:
— Multiplicaré tu descendencia de suerte que nadie será capaz de contarla.
11 Y siguió diciendo:
— Estás embarazada y darás a luz un hijo a quien pondrás el nombre de Ismael, porque el Señor escuchó tu aflicción. 12 Indómito como un potro salvaje, luchará contra todos y todos lucharán contra él; y vivirá enfrentado a todos sus hermanos.
13 Agar entonces se dijo: ¿Será verdad que yo he visto aquí a aquel que me ve? Por lo que Agar invocó al Señor, que le había hablado, con el nombre de El-Roí. 14 Por eso al pozo aquel, el que se encuentra entre Cadés y Bared, lo llamó Lajay Roí —es decir, Pozo del Viviente que me ve—.
15 Agar dio un hijo a Abrán, y Abrán le puso el nombre de Ismael.
Declaración de Pedro acerca de Jesús (Mt 16,13-20; Lc 9,18-21)
27 Jesús y sus discípulos se fueron a las aldeas de Cesarea de Filipo. Por el camino les preguntó:
— ¿Quién dice la gente que soy yo?
28 Ellos contestaron:
— Unos dicen que eres Juan el Bautista; otros, que Elías, y otros, que alguno de los profetas.
29 Jesús volvió a preguntarles:
— Y ustedes, ¿quién dicen que soy?
Entonces Pedro declaró:
— ¡Tú eres el Mesías!
30 Pero Jesús les mandó que no hablaran a nadie sobre él.
La Palabra, (versión hispanoamericana) © 2010 Texto y Edición, Sociedad Bíblica de España