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Revised Common Lectionary (Semicontinuous)

Daily Bible readings that follow the church liturgical year, with sequential stories told across multiple weeks.
Duration: 1245 days
Reina-Valera 1995 (RVR1995)
Version
Salmos 137

Lamento de los cautivos en Babilonia

137 Junto a los ríos de Babilonia,
allí nos sentábamos y llorábamos
acordándonos de Sión.
Sobre los sauces, en medio de ella,
colgamos nuestras arpas.
Y los que nos habían llevado cautivos nos pedían cánticos,
los que nos habían desolado nos pedían alegría, diciendo:
«Cantadnos algunos de los cánticos de Sión.»

¿Cómo cantaremos un cántico de Jehová
en tierra de extraños?
Si me olvido de ti, Jerusalén,
pierda mi diestra su destreza.
Mi lengua se pegue a mi paladar,
si de ti no me acuerdo;
si no enaltezco a Jerusalén
como preferente asunto de mi alegría.

Jehová, recuerda a los hijos de Edom
cuando el día de Jerusalén decían:
«¡Arrasadla, arrasadla
hasta los cimientos!»

Hija de Babilonia, la desolada,
bienaventurado el que te dé el pago
de lo que tú nos hiciste.
¡Dichoso el que tome tus niños
y los estrelle contra la peña!

Lamentaciones 5

Oración del pueblo afligido

Acuérdate, Jehová, de lo que nos ha sucedido;
mira, y ve nuestro oprobio.
Nuestra heredad ha pasado a extraños,
nuestras casas a forasteros.
Huérfanos somos, sin padre;
nuestras madres son como viudas.
Por dinero bebemos el agua;
por la leña pagamos un precio.
Padecemos persecución, caen sobre nosotros,
nos fatigamos y no hay para nosotros reposo.
Al egipcio y al asirio extendimos la mano para saciarnos de pan.
Nuestros padres pecaron y han muerto,
pero nosotros llevamos su castigo.
Los siervos dominan sobre nosotros,
y nadie nos libra de sus manos.
Traemos nuestro pan haciendo peligrar nuestra vida
ante la espada del desierto.
10 Nuestra piel se ha ennegrecido como un horno
a causa del ardor del hambre.
11 Violaron a las mujeres en Sión,
a las vírgenes en las ciudades de Judá.
12 A los príncipes colgaron de las manos;
no respetaron el rostro de los viejos.
13 Llevaron a los jóvenes a mover el molino,
y los muchachos desfallecían bajo el peso de la leña.
14 Ya no se ven los ancianos en la puerta,
y los jóvenes han dejado sus canciones.
15 Cesó el gozo de nuestro corazón,
y nuestra danza se cambió en luto.
16 La corona ha caído de nuestra cabeza.
¡Ay ahora de nosotros, porque hemos pecado!
17 Por esto tenemos entristecido el corazón
y nos han entenebrecido nuestros ojos:
18 por el monte Sión, que está asolado
y las zorras andan por él.
19 Mas tú, Jehová, permanecerás para siempre;
tu trono, de generación en generación.
20 ¿Por qué te olvidas completamente de nosotros
y nos abandonas por tan largo tiempo?
21 Haznos volver a ti, Jehová, y nos volveremos;
renueva nuestros días como al principio.
22 ¿O acaso es que ya nos has desechado
y estás airado del todo contra nosotros?

Marcos 11:12-14

Jesús maldice la higuera estéril(A)

12 Al día siguiente, cuando salieron de Betania, tuvo hambre. 13 Viendo a lo lejos una higuera que tenía hojas, fue a ver si tal vez hallaba en ella algo; pero cuando llegó a ella, nada halló sino hojas, pues no era tiempo de higos. 14 Entonces Jesús dijo a la higuera:

—¡Nunca jamás coma nadie fruto de ti!

Y lo oyeron sus discípulos.

Marcos 11:20-24

La higuera maldecida se seca(A)

20 Por la mañana, al pasar junto a la higuera, vieron que se había secado desde las raíces. 21 Entonces Pedro, acordándose, le dijo:

—Maestro, mira, la higuera que maldijiste se ha secado.

22 Respondiendo Jesús, les dijo:

—Tened fe en Dios. 23 De cierto os digo que cualquiera que diga a este monte: “Quítate y arrójate en el mar”, y no duda en su corazón, sino que cree que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho. 24 Por tanto, os digo que todo lo que pidáis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá.

Reina-Valera 1995 (RVR1995)

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