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Revised Common Lectionary (Semicontinuous)

Daily Bible readings that follow the church liturgical year, with sequential stories told across multiple weeks.
Duration: 1245 days
Biblia del Jubileo (JBS)
Version
2 Samuel 11:1-15

11 ¶ Y aconteció a la vuelta de un año, en el tiempo que salen los reyes a la guerra, que David envió a Joab, y a sus esclavos con él, y a todo Israel; y destruyeron a los amonitas, y pusieron cerco a Rabá; mas David se quedó en Jerusalén.

Y acaeció que levantándose David de su cama a la hora de la tarde, se paseaba por el terrado de la casa real, cuando vio desde el terrado una mujer que se estaba bañando, la cual era muy hermosa.

Y envió David a preguntar por aquella mujer, y le dijeron: Aquella es Betsabé hija de Eliam, mujer de Urías el heteo.

Y envió David mensajeros, y la tomó; y así que hubo entrado a él, él durmió con ella. Luego ella se purificó de su inmundicia, y se volvió a su casa.

Y concibió la mujer, y envió a hacerlo saber a David, diciendo: Yo estoy embarazada.

¶ Entonces David envió a decir a Joab: Envíame a Urías el heteo. Y Joab envió Urías a David.

Y cuando Urías vino a él, David le preguntó por la salud de Joab, y por la salud del pueblo, y asimismo de la guerra.

Después dijo David a Urías: Desciende a tu casa, y lava tus pies. Y saliendo Urías de casa del rey, le fue enviada comida real.

Mas Urías durmió a la puerta de la casa del rey con todos los esclavos de su señor, y no descendió a su casa.

10 E hicieron saber esto a David, diciendo: Urías no ha descendido a su casa. Y dijo David a Urías: ¿No has venido de camino? ¿Por qué, pues, no descendiste a tu casa?

11 Y Urías respondió a David: El arca, e Israel y Judá, están debajo de tiendas; y mi señor Joab, y los esclavos de mi señor sobre la faz del campo; ¿y había yo de entrar en mi casa para comer y beber, y dormir con mi mujer? Por vida tuya, y por vida de tu alma, que yo no haré tal cosa.

12 Y David dijo a Urías: Estáte aquí aún hoy, y mañana te despacharé. Y se quedó Urías en Jerusalén aquel día y el siguiente.

13 Y David lo convidó, y le hizo comer y beber delante de sí, hasta embriagarlo. Y él salió a la tarde a dormir en su cama con los esclavos de su señor; mas no descendió a su casa.

14 ¶ Venida la mañana, escribió David a Joab una carta, la cual envió por mano de Urías.

15 Y escribió en la carta, diciendo: Poned a Urías delante de la fuerza de la batalla, y desamparadle, para que sea herido y muera.

Salmos 14

Al Vencedor: Salmo de David.

Dijo el loco en su corazón: No hay Dios. Se corrompieron, hicieron obras abominables; no hay quien haga bien.

El SEÑOR miró desde los cielos sobre los hijos de los hombres, por ver si había algún entendido, que buscara a Dios.

Todos declinaron, juntamente, se han corrompido; no hay quien haga bien, no hay ni siquiera uno.

¶ Ciertamente conocieron esto todos los que obran iniquidad, que devoran a mi pueblo como si pan comieran; al SEÑOR no invocaron.

Allí temblaron de espanto; porque Dios está con la nación de los justos.

El consejo del pobre habéis escarnecido, por cuanto el SEÑOR es su esperanza.

¡Quién diera de Sion la salud de Israel tornando el SEÑOR la cautividad de su pueblo! Se gozará Jacob, y se alegrará Israel.

Efesios 3:14-21

14 ¶ Por esta causa doblo mis rodillas al Padre del Señor nuestro, Jesús el Cristo,

15 (del cual es nombrada toda la familia en los cielos y en la tierra),

16 que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser corroborados con potencia en el hombre interior por su Espíritu.

17 Que habite el Cristo por la fe en vuestros corazones; para que, arraigados y fundados en caridad,

18 podáis bien comprender con todos los santos cuál sea la anchura y la longitud y la profundidad y la altura,

19 y conocer la caridad del Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios.

20 Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, por la potencia que obra en nosotros,

21 a él sea gloria en la Iglesia por Cristo Jesús, por todas las generaciones por los siglos de los siglos. Amén.

Juan 6:1-21

¶ Pasadas estas cosas, se fue Jesús al otro lado del mar de Galilea, que es de Tiberias.

Y le seguía grande multitud, porque veían sus señales que hacía en los enfermos.

Subió pues Jesús a un monte, y se sentó allí con sus discípulos.

Y estaba cerca la Pascua, la Fiesta de los judíos.

Cuando alzó Jesús los ojos, y vio que había venido a él grande multitud, dice a Felipe: ¿De dónde compraremos pan para que coman éstos?

Mas esto decía para probarle; porque él sabía lo que había de hacer.

Le respondió Felipe: Doscientos denarios de pan no les bastarán, para que cada uno de ellos tome un poco.

Le dice uno de sus discípulos, Andrés, hermano de Simón Pedro:

Un muchacho está aquí que tiene cinco panes de cebada y dos peces pequeños; ¿mas qué es esto entre tantos?

10 Entonces Jesús dijo: Haced recostar los hombres. Y había mucha hierba en aquel lugar; y se recostaron como número de cinco mil varones.

11 Y tomó Jesús aquellos panes, y habiendo dado gracias, repartió a los discípulos, y los discípulos a los que estaban recostados; asimismo de los peces, cuanto querían.

12 Y cuando fueron saciados, dijo a sus discípulos: Recoged los pedazos que han quedado, para que no se pierda nada.

13 Recogieron pues, y llenaron doce cestas de pedazos de los cinco panes de cebada, que sobraron a los que habían comido.

14 Aquellos hombres entonces, como vieron la señal que Jesús había hecho, decían: Este verdaderamente es el profeta que había de venir al mundo.

15 ¶ Y sabiendo Jesús que habían de venir para arrebatarle, y hacerle rey, volvió a retirarse al monte, él solo.

16 Y como se hizo tarde, descendieron sus discípulos al mar;

17 y entrando en un navío, iban cruzando el mar hacia Capernaum. Y era ya oscuro, y Jesús no había venido a ellos.

18 Y el mar comenzó a levantarse con un gran viento.

19 Cuando hubieron navegado como veinticinco o treinta estadios, ven a Jesús que andaba sobre el mar, y se acercaba al navío; y tuvieron miedo.

20 Pero él les dijo: YO SOY; no tengáis miedo.

21 Y ellos le recibieron de buena gana en el navío; y luego el navío llegó a la tierra donde iban.

Biblia del Jubileo (JBS)

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