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Revised Common Lectionary (Semicontinuous)

Daily Bible readings that follow the church liturgical year, with sequential stories told across multiple weeks.
Duration: 1245 days
Reina-Valera 1995 (RVR1995)
Version
Salmos 80

Súplica por la restauración

Al músico principal; sobre «Lirios». Testimonio. Salmo de Asaf

80 Pastor de Israel, escucha;
tú que pastoreas como a ovejas a José,
tú que estás entre querubines, resplandece.
¡Despierta tu poder
delante de Efraín, de Benjamín y de Manasés,
y ven a salvarnos!

    ¡Dios, restáuranos!
    ¡Haz resplandecer tu rostro y seremos salvos!

Jehová, Dios de los ejércitos,
¿hasta cuándo mostrarás tu indignación contra la oración de tu pueblo?
Les diste a comer pan de lágrimas
y a beber lágrimas en abundancia.
Nos pusiste por escarnio de nuestros vecinos
y nuestros enemigos se burlan de nosotros.

    ¡Dios de los ejércitos, restáuranos!
    ¡Haz resplandecer tu rostro y seremos salvos!

Hiciste venir una vid de Egipto;
echaste las naciones y la plantaste.
Limpiaste el terreno para ella,
hiciste arraigar sus raíces y llenó la tierra.
10 Los montes fueron cubiertos con su sombra
y con sus sarmientos los cedros de Dios.
11 Extendió sus vástagos hasta el mar
y hasta el río sus renuevos.
12 ¿Por qué rompiste sus cercas
y la vendimian todos los que pasan por el camino?
13 La destroza el puerco montés
y la bestia del campo la devora.

14 Dios de los ejércitos, vuelve ahora;
mira desde el cielo, considera y visita esta viña,
15 la planta que plantó tu diestra
y el renuevo que para ti afirmaste.
16 ¡Quemada a fuego está, asolada!
¡Perezcan por la reprensión de tu rostro!
17 Sea tu mano sobre el varón de tu diestra,
sobre el hijo de hombre que para ti afirmaste.
18 Así no nos apartaremos de ti;
vida nos darás e invocaremos tu nombre.

19     ¡Jehová, Dios de los ejércitos, restáuranos!
    ¡Haz resplandecer tu rostro y seremos salvos!

Isaías 32:9-20

Advertencia a las mujeres de Jerusalén

¡Mujeres indolentes, levantaos!
¡Oíd mi voz, hijas confiadas,
escuchad mi razón!
10 De aquí a algo más de un año
tendréis espanto, mujeres confiadas;
porque la vendimia faltará
y no llegará la cosecha.
11 ¡Temblad, indolentes;
turbaos, confiadas!
¡Despojaos, desnudaos,
ceñid las caderas con vestiduras ásperas!
12 Golpeándose el pecho
lamentarán por los campos deleitosos,
por las viñas fértiles.
13 Sobre la tierra de mi pueblo
subirán espinos y cardos,
y aun sobre todas las casas en que hay alegría
en la ciudad alegre.
14 Porque los palacios quedarán desiertos,
el bullicio de la ciudad cesará;
las torres y fortalezas
se volverán cuevas para siempre,
donde descansen asnos monteses
y los ganados hagan majada,
15 hasta que sobre nosotros sea derramado
el espíritu de lo alto.
Entonces el desierto se convertirá en campo fértil
y el campo fértil será como un bosque.
16 Habitará el juicio en el desierto
y en el campo fértil morará la justicia.
17 El efecto de la justicia será la paz
y la labor de la justicia,
reposo y seguridad para siempre.
18 Y mi pueblo habitará en morada de paz,
en habitaciones seguras
y en lugares de reposo.
19 Cuando caerá granizo en los montes
y la ciudad será del todo abatida.
20 ¡Dichosos vosotros, los que sembráis junto a todas las aguas
y dejáis sueltos al buey y al asno!

Santiago 3:17-18

17 Pero la sabiduría que es de lo alto es primeramente pura, después pacífica, amable, benigna, llena de misericordia y de buenos frutos, sin incertidumbre ni hipocresía. 18 Y el fruto de justicia se siembra en paz para aquellos que hacen la paz.

Reina-Valera 1995 (RVR1995)

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