Revised Common Lectionary (Semicontinuous)
5 En Dios solamente reposa mi alma,
porque de él viene mi esperanza.
6 Solamente él es mi roca y mi salvación.
Es mi refugio, no resbalaré.
7 En Dios está mi salvación y mi gloria;
en Dios está mi roca fuerte y mi refugio.
8 Pueblos, ¡esperad en él en todo tiempo!
¡Derramad delante de él vuestro corazón!
¡Dios es nuestro refugio! Selah
9 Por cierto, sólo un soplo son los hijos de los hombres,
una mentira son los hijos de los poderosos;
pesándolos a todos por igual en la balanza,
serán menos que nada.
10 No confiéis en la violencia
ni en la rapiña os envanezcáis.
Si se aumentan las riquezas,
no pongáis el corazón en ellas.
11 Una vez habló Dios;
dos veces he oído esto:
que de Dios es el poder,
12 y tuya, Señor, es la misericordia,
pues tú pagas a cada uno
conforme a su obra.
14 ¡Maldito el día en que nací!
¡Que no sea bendecido el día en que mi madre me dio a luz!
15 ¡Maldito el hombre que dio la noticia a mi padre, diciendo:
«Un hijo varón te ha nacido»,
causándole gran alegría!
16 Sea tal hombre como las ciudades
que asoló Jehová sin volverse atrás de ello;
que oiga gritos por la mañana
y voces a mediodía,
17 porque no me mató en el vientre.
Mi madre entonces hubiera sido mi sepulcro,
pues su vientre habría quedado embarazado para siempre.
18 ¿Para qué salí del vientre?
¿Para ver trabajo y dolor,
y que mis días se gastaran en afrenta?
Ayes sobre las ciudades impenitentes(A)
13 »¡Ay de ti, Corazín! ¡Ay de ti, Betsaida! que si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que se han hecho en vosotras, tiempo ha que, sentadas en ceniza y con vestidos ásperos, se habrían arrepentido. 14 Por tanto, en el juicio será más tolerable el castigo para Tiro y Sidón que para vosotras. 15 Y tú, Capernaúm, que hasta los cielos eres levantada, hasta el Hades serás abatida.
16 »El que a vosotros oye, a mí me oye; y el que a vosotros desecha, a mí me desecha; y el que me desecha a mí, desecha al que me envió».
Copyright © 1995 by United Bible Societies