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Revised Common Lectionary (Semicontinuous)

Daily Bible readings that follow the church liturgical year, with sequential stories told across multiple weeks.
Duration: 1245 days
Reina Valera Actualizada (RVA-2015)
Version
Salmos 132:1-12

Sion, la morada elegida

132 Canto de ascenso gradual[a].

Acuérdate, oh SEÑOR,
de David y de toda su aflicción
de cómo juró al SEÑOR
y prometió al Fuerte de Jacob, diciendo:
“No entraré en mi morada
ni subiré a mi cama.
No daré sueño a mis ojos
ni a mis párpados sopor
hasta que halle un lugar[b] para el SEÑOR, una morada para el Fuerte de Jacob”.
He aquí, en Efrata oímos de ella,
y la encontramos en los campos de Yaar[c]:
“Entremos en su tabernáculo; postrémonos ante el estrado de sus pies”.
Levántate, oh SEÑOR;
ven al lugar de tu reposo;
tú y el arca de tu poder.
Tus sacerdotes sean revestidos de justicia, y tus fieles canten de júbilo.
10 Por causa de tu siervo David,
no rechaces el rostro de tu ungido.
11 Con verdad juró el SEÑOR a David,
y no se apartará de ello:
“Del fruto de tu cuerpo
pondré sobre tu trono.
12 Si tus hijos guardan mi pacto
y este testimonio que yo les enseño, sus hijos también se sentarán
en tu trono para siempre”.

Salmos 132:13-18

13 Porque el SEÑOR ha elegido a Sion
y la ha deseado como morada suya:
14 “Este es mi lugar de reposo para siempre. Aquí habitaré porque lo he deseado.
15 Lo bendeciré con abundante provisión; a sus necesitados saciaré de pan.
16 Asimismo, vestiré de salvación
a sus sacerdotes,
y sus fieles darán voces de júbilo.
17 Allí haré surgir el poderío de David;
he preparado una lámpara para mi ungido.
18 A sus enemigos vestiré de vergüenza pero sobre él resplandecerá su corona”.

2 Reyes 22:1-10

Josías y el hallazgo del libro de la Ley

22 Josías tenía ocho años cuando comenzó a reinar, y reinó treinta y un años en Jerusalén. El nombre de su madre era Yedida hija de Adaías, de Boscat.

Él hizo lo recto ante los ojos del SEÑOR, y anduvo en todo el camino de su padre David, sin apartarse ni a la derecha ni a la izquierda.

Sucedió que en el año dieciocho del rey Josías el rey envió a Safán hijo de Azalías, hijo del escriba Mesulam, a la casa del SEÑOR, diciendo:

—Ve al sumo sacerdote Hilquías y dile que vacíe el dinero que ha sido traído a la casa del SEÑOR y que los guardias de la puerta han recogido del pueblo. Que lo entreguen en manos de los que hacen la obra, los que están encargados de la casa del SEÑOR, para que lo entreguen a los que hacen la obra en la casa del SEÑOR, con el propósito de reparar las grietas de la casa (es decir, a los carpinteros, a los constructores y a los albañiles), a fin de comprar madera y piedra labrada para reparar la casa. Pero que no se les pida cuenta del dinero cuyo manejo se les confía, porque ellos proceden con fidelidad.

Entonces el sumo sacerdote Hilquías dijo al escriba Safán:

—He hallado el libro de la Ley en la casa del SEÑOR.

E Hilquías entregó el libro a Safán, y este lo leyó.

Entonces el escriba Safán fue al rey y le dio informes diciendo:

—Tus siervos han vaciado el dinero que se halló en el templo, y lo han entregado en manos de los que hacen la obra, los que están encargados de la casa del SEÑOR.

10 Asimismo, el escriba Safán declaró al rey diciendo:

—El sacerdote Hilquías me ha dado un libro.

Y Safán lo leyó en presencia del rey.

Hechos 7:54-8:1

Esteban es apedreado

54 Escuchando estas cosas, se enfurecían en sus corazones y crujían los dientes contra él. 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo y puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba de pie a la diestra de Dios. 56 Y dijo:

—¡He aquí, veo los cielos abiertos y al Hijo del Hombre de pie a la diestra de Dios!

57 Entonces gritaron a gran voz, se taparon los oídos y a una se precipitaron sobre él. 58 Le echaron fuera de la ciudad y le apedrearon. Los testigos dejaron sus vestidos a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba diciendo:

—¡Señor Jesús, recibe mi espíritu!

60 Y puesto de rodillas clamó a gran voz:

—¡Señor, no les tomes en cuenta este pecado!

Y habiendo dicho esto, durmió.

Y Saulo consentía en su muerte.

Saulo persigue a la iglesia

En aquel día se desató una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén, y todos fueron esparcidos por las regiones de Judea y de Samaria, con excepción de los apóstoles.

Reina Valera Actualizada (RVA-2015)

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