Revised Common Lectionary (Semicontinuous)
Exhortación a alabar a Dios con instrumentos de música
Aleluya.
150 Alabad a Dios en su santuario;
Alabadle en el firmamento de su poder.
2 Alabadle por sus proezas;
Alabadle conforme a la inmensidad de su grandeza.
3 Alabadle al son de trompeta;
Alabadle con salterio y arpa.
4 Alabadle con pandero y danza;
Alabadle con instrumentos de cuerda y con flautas.
5 Alabadle con címbalos retumbantes;
Alabadle con címbalos de júbilo.
6 Todo lo que respira alabe a JAH.
Aleluya.
Dios promete que los deportados volverán
30 La palabra de Jehová que vino a Jeremías, diciendo:
2 Así habla Jehová, Dios de Israel, diciendo: Escríbete en un libro todas las palabras que te he hablado.
3 Porque he aquí que vienen días, dice Jehová, en que haré volver a los cautivos de mi pueblo Israel y Judá, dice Jehová, y los haré retornar a la tierra que di a sus padres, y la disfrutarán.
4 Y estas son las palabras que habló Jehová acerca de Israel y de Judá.
5 Porque así dice Jehová: Hemos oído voz de temblor; de espanto, y no de paz.
6 Inquirid ahora, y mirad si el varón da a luz; porque he visto que todo hombre tenía las manos sobre sus lomos, como mujer que está de parto, y se han vuelto pálidos todos los rostros.
7 ¡Ah, cuán grande es aquel día!, tanto, que no hay otro semejante a él; tiempo de angustia para Jacob; pero de ella será salvado.
8 En aquel día, dice Jehová de los ejércitos, yo quebraré su yugo de tu cuello, y romperé tus coyundas, y extranjeros no lo volverán más a poner en servidumbre,
9 sino que servirán a Jehová su Dios y a David su rey, a quien yo les levantaré.
10 Por tanto, tú, siervo mío Jacob, no temas, dice Jehová, ni desmayes, Israel; porque he aquí que yo soy el que acudo a salvarte desde lejos a ti y a tu descendencia de la tierra de su cautividad; y Jacob volverá, descansará y vivirá tranquilo, y no habrá quien le espante.
11 Porque yo estoy contigo para salvarte, dice Jehová, y destruiré a todas las naciones entre las cuales te esparcí; pero a ti no te destruiré del todo, sino que te castigaré con medida; ya que no te dejaré sin castigo.
10 En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no practica justicia, no es de Dios, y tampoco el que no ama a su hermano.
11 Porque este es el mensaje que habéis oído desde el principio: Que nos amemos unos a otros.
12 No como Caín, que era del maligno y mató a su hermano. ¿Y por qué causa le mató? Porque sus obras eran malas, y las de su hermano justas.
13 Hermanos míos, no os extrañéis si el mundo os aborrece.
14 Nosotros sabemos que hemos pasado de la muerte a la vida, en que amamos a los hermanos. El que no ama a su hermano, permanece en la muerte.
15 Todo aquel que aborrece a su hermano es homicida; y sabéis que ningún homicida tiene vida eterna permanente en él.
16 En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos.
Texto bíblico tomado de La Santa Biblia, Reina Valera Revisada® RVR® Copyright © 2017 por HarperCollins Christian Publishing® Usado con permiso. Reservados todos los derechos en todo el mundo.