Revised Common Lectionary (Complementary)
7 Aunque nuestras iniquidades testifican contra nosotros(A),
oh Señor, obra por amor de tu nombre(B).
En verdad han sido muchas nuestras apostasías(C),
contra ti hemos pecado(D).
8 Tú, esperanza de Israel(E),
Salvador suyo(F) en tiempo de angustia(G),
¿por qué has de ser como forastero en la tierra,
o como caminante que ha plantado su tienda para pasar la noche?
9 ¿Por qué has de ser como hombre desalentado,
como guerrero incapaz de salvar(H)?
Sin embargo tú estás en medio nuestro(I), oh Señor,
y por tu nombre somos llamados(J);
¡no nos abandones!
10 Así dice el Señor de este pueblo: ¡Cómo les ha gustado vagar(K)! No han refrenado sus pies(L). El Señor, pues, no los acepta[a](M); ahora se acordará Él de su iniquidad y castigará sus pecados(N).
19 ¿Has desechado(A) por completo a Judá,
o ha aborrecido tu alma a Sión?
¿Por qué nos has herido sin que haya curación para nosotros(B)?
Esperábamos[a] paz, y no hubo bien alguno;
tiempo de curación, y he aquí, terror(C).
20 Reconocemos, oh Señor, nuestra impiedad,
la iniquidad de nuestros padres, pues hemos pecado contra ti(D).
21 No nos desprecies, por amor a tu nombre(E),
no deshonres el trono de tu gloria(F);
acuérdate, no anules tu pacto con nosotros.
22 ¿Hay entre los ídolos[b](G) de las naciones alguno que haga llover?
¿O pueden los cielos solos dar lluvia?
¿No eres tú, oh Señor, nuestro Dios(H)?
En ti, pues, esperamos(I),
porque tú has hecho todas estas cosas.
Anhelo por la adoración en el templo
Para el director del coro; sobre[a] Gitit. Salmo de los hijos de Coré.
84 ¡Cuán preciosas[b] son tus moradas(A),
oh Señor de los ejércitos!
2 Anhela mi alma(B), y aun desea con ansias los atrios del Señor;
mi corazón y mi carne cantan con gozo al Dios vivo(C).
3 Aun el ave[c] ha hallado casa,
y la golondrina nido para sí donde poner sus polluelos:
¡tus altares(D), oh Señor de los ejércitos,
Rey mío y Dios mío(E)!
4 ¡Cuán bienaventurados son los que moran en tu casa(F)!
Continuamente te alaban(G). (Selah[d])
5 ¡Cuán bienaventurado es el hombre cuyo poder está en ti(H),
en cuyo corazón están los caminos a Sión(I)!
6 Pasando por el valle de Baca[e] lo convierten en manantial[f],
también las lluvias tempranas(J) lo cubren de bendiciones.
7 Van de poder en poder(K),
cada uno de ellos comparece ante Dios en Sión[g](L).
6 Porque yo ya estoy para ser derramado como una ofrenda de libación(A), y el tiempo de mi partida ha llegado(B). 7 He peleado la buena batalla(C), he terminado la carrera(D), he guardado la fe(E). 8 En el futuro me está reservada(F) la corona de justicia(G) que el Señor, el Juez justo, me entregará en aquel día(H); y no solo a mí, sino también a todos los que aman(I) su venida[a](J).
16 En mi primera defensa nadie estuvo a mi lado, sino que todos me abandonaron; que no se les tenga en cuenta(A). 17 Pero el Señor estuvo conmigo y me fortaleció(B), a fin de que por mí se cumpliera cabalmente(C) la proclamación del mensaje(D) y que todos los gentiles oyeran(E). Y fui librado(F) de la boca del león(G). 18 El Señor me librará de toda obra mala y me traerá a salvo(H) a[a] su reino celestial(I). A Él[b] sea la gloria por los siglos de los siglos(J). Amén.
Parábola del fariseo y el publicano
9 Refirió también esta parábola a unos que confiaban en sí mismos(A) como justos, y despreciaban a los demás(B): 10 Dos hombres subieron al templo a orar(C); uno era fariseo y el otro recaudador de impuestos[a]. 11 El fariseo puesto en pie, oraba(D) para sí de esta manera: «Dios, te doy gracias porque no soy como los demás hombres: estafadores, injustos, adúlteros; ni aun como este recaudador de impuestos. 12 Yo ayuno(E) dos veces por semana; doy el diezmo de todo lo que gano(F)». 13 Pero el recaudador de impuestos, de pie(G) y a cierta distancia, no quería ni siquiera alzar los ojos al cielo(H), sino que se golpeaba el pecho(I), diciendo: «Dios, ten piedad de[b] mí, pecador». 14 Os digo que este descendió a su casa justificado pero aquel no; porque todo el que se ensalza será humillado, pero el que se humilla será ensalzado(J).
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