Print Page Options
Previous Prev Day Next DayNext

Revised Common Lectionary (Complementary)

Daily Bible readings that follow the church liturgical year, with thematically matched Old and New Testament readings.
Duration: 1245 days
Traducción en lenguaje actual (TLA)
Version
Salmos 16

Tus enseñanzas son mi guía

SALMO 16 (15)

Poema de David.

16 Cuídame, Dios mío,
porque en ti busco protección.
Yo te he dicho:
«Tú eres mi Dios;
todo lo bueno que tengo,
lo he recibido de ti.
Sin ti, no tengo nada».
La gente de mi pueblo,
que sólo a ti te adora,
me hace sentir feliz.
Pero quienes adoran ídolos
sufrirán en gran manera.

¡Jamás rendiré culto a los ídolos!
¡Jamás les presentaré ofrendas!

Tú eres mi Dios,
eres todo lo que tengo;
tú llenas mi vida
y me das seguridad.
Gracias a ti,
la herencia que me tocó
es una tierra muy bella.
Yo te bendigo
por los consejos que me das;
tus enseñanzas me guían
en las noches más oscuras.
Yo siempre te tengo presente;
si tú estás a mi lado,
nada me hará caer.

Por eso estoy muy contento,
por eso me siento feliz,
por eso vivo confiado.
10 ¡Tú no me dejarás morir
ni me abandonarás en el sepulcro,
pues soy tu fiel servidor!
11 Tú me enseñaste a vivir
como a ti te gusta.
¡En tu presencia soy muy feliz!
¡A tu lado soy siempre dichoso!

2 Reyes 1:1-16

Elías anuncia la muerte del rey Ocozías

1-2 Cuando el rey Ahab murió, y su hijo Ocozías llegó a ser rey de Israel, los moabitas se rebelaron contra los israelitas.

Un día, Ocozías se cayó por una ventana del segundo piso de su palacio en Samaria. Como quedó malherido, envió mensajeros hasta Ecrón para que le preguntaran a Baal-zebub, que era el dios de ese país, si se iba a recuperar. Pero el ángel de Dios le dijo al profeta Elías:

«Busca a los mensajeros de Ocozías y pregúntales por qué no consultan al Dios de Israel en vez de consultar a Baal-zebub. Avísale a Ocozías que yo, el Dios de Israel, le advierto que no se va a sanar, ¡se va a morir!»

Elías obedeció, y cuando los mensajeros regresaron, Ocozías les preguntó:

—¿Por qué regresaron?

Ellos le contestaron:

—Un hombre fue a buscarnos y nos pidió darte este mensaje de parte de Dios: “¿No te acuerdas, Ocozías, que todavía hay Dios en Israel? ¿Por qué consultas con Baal-zebub? Por eso no te vas a sanar sino que vas a morir”.

El rey les preguntó a los mensajeros:

—¿Cómo era ese hombre que fue a buscarlos?

Ellos le contestaron:

—Era un tipo todo velludo, que llevaba puesto un taparrabos de cuero.

El rey dijo:

—¡No hay duda, es Elías!

Entonces envió a un capitán con cincuenta soldados para que buscaran a Elías. Cuando el capitán encontró a Elías sentado en lo alto de un cerro, le dijo:

—Profeta, el rey ordena que bajes a verlo.

10 Pero Elías le contestó:

—Ya que soy profeta, pido que caiga fuego del cielo y te queme a ti y a tus cincuenta soldados.

Enseguida cayó fuego del cielo y mató al capitán y a los cincuenta soldados. 11 Luego el rey mandó a otro capitán con cincuenta soldados más. Cuando el capitán encontró a Elías le dijo:

—Profeta, el rey te ordena que bajes rápidamente.

12 Pero Elías le contestó:

—Ya que soy profeta, pido que caiga fuego del cielo y te queme a ti y a tus cincuenta soldados.

Y volvió a caer fuego del cielo, y mató al capitán y a los cincuenta soldados.

13-14 El rey mandó por tercera vez a otro capitán con cincuenta soldados. Pero este capitán subió a donde estaba Elías, se arrodilló delante de él y le rogó:

—Profeta, ya sé que los soldados que vinieron antes de mí murieron consumidos por el fuego que cayó del cielo. Te suplico que no nos mates, ¡somos tus esclavos! ¡Por favor, perdónanos la vida!

15 El ángel de Dios le dijo a Elías: «Puedes ir con él. No le tengas miedo». Entonces Elías bajó y fue con el capitán a ver al rey. 16 Al llegar, Elías le dijo al rey: «Dios no te va a sanar, sino que morirás, pues has consultado con Baal-zebub, el dios de Ecrón, como si en Israel no hubiera Dios».

Gálatas 4:8-20

Pablo se preocupa por los gálatas

Antes, cuando ustedes todavía no conocían a Dios, vivían como esclavos de los dioses falsos. Pero ahora conocen a Dios. Mejor dicho, Dios los conoce a ustedes. Por eso, no puedo entender por qué se dejan dominar de nuevo por esos espíritus que controlan el universo. ¡Si ellos no tienen poder, ni valen nada! 10 Ustedes todavía les dan importancia a ciertos días, meses, épocas y años. 11 ¡Me asusta el pensar que de nada haya servido todo lo que he hecho por ustedes!

12 Hermanos míos, yo les ruego que se amolden a mí, como yo me he amoldado a ustedes. Ustedes no me causaron ningún daño, 13 sino que me enfermé y, por eso, tuve que pasar un tiempo en Galacia anunciándoles las buenas noticias. 14 Aunque mi enfermedad les causó muchos problemas, ustedes no me despreciaron ni me rechazaron. Al contrario, me recibieron en sus hogares como si yo fuera un ángel de Dios, ¡o Jesucristo mismo! 15 Yo sé muy bien que, de haberles sido posible, hasta se habrían sacado los ojos para dármelos. ¿Qué pasó con toda esa alegría? 16 ¡Ahora resulta que, por decirles la verdad, me he hecho enemigo de ustedes!

17 Los que quieren obligarlos a obedecer la ley judía se muestran ahora muy interesados en ustedes. Pero lo que en verdad quieren es hacerles daño, pues desean que se olviden de mí y que se interesen por ellos. 18 Está bien interesarse por otras personas, si lo que se desea es hacerles el bien. Pero si ustedes realmente se interesan por mí, háganlo siempre y no sólo cuando estoy con ustedes. 19 Yo los quiero como a hijos, pero mientras no lleguen a ser como Cristo, me harán sufrir mucho, como sufre una madre con los dolores de parto. 20 ¡Cómo quisiera estar con ustedes en este momento, para hablarles de otra manera! ¡Estoy muy confundido, y no sé cómo tratarlos!