Revised Common Lectionary (Complementary)
2 Y toda la congregación de los israelitas murmuró contra Moisés y contra Aarón en el desierto(A). 3 Los israelitas les decían: «Ojalá hubiéramos muerto a manos del Señor en la tierra de Egipto(B) cuando nos sentábamos junto a las ollas de carne(C), cuando comíamos pan hasta saciarnos[a]. Pues nos han traído[b] a este desierto para matar de hambre a toda esta multitud».
4 Entonces el Señor dijo a Moisés: «Yo haré llover pan del cielo(D) para ustedes. El pueblo saldrá y recogerá diariamente la porción de cada día, para ponerlos a prueba si andan o no en Mi ley(E).
9 Entonces Moisés dijo a Aarón: «Dile a toda la congregación de los israelitas: “Acérquense a la presencia del Señor, porque Él ha oído sus murmuraciones(A)”».
10 Mientras Aarón hablaba a toda la congregación de los israelitas, miraron[a] hacia el desierto y, vieron que la gloria del Señor se apareció en la nube(B). 11 Y el Señor habló a Moisés y le dijo: 12 «He oído las murmuraciones de los israelitas. Háblales, y diles: “Al caer la tarde[b] comerán carne, y por la mañana se saciarán de pan(C). Sabrán que Yo soy el Señor su Dios(D)”».
Las codornices y el maná
13 Por la tarde subieron las codornices y cubrieron el campamento(E), y por la mañana había una capa de rocío(F) alrededor del campamento. 14 Cuando la capa de rocío se evaporó[c], había sobre la superficie[d] del desierto una cosa delgada, como copos[e], menuda, como la escarcha sobre la tierra(G).
15 Al verla, los israelitas se dijeron unos a otros: «¿Qué es esto?[f]», porque no sabían lo que era. «Es el pan que el Señor les da para comer(H)», les dijo Moisés.
23 Sin embargo, dio órdenes a las nubes arriba,
Y abrió las puertas de los cielos(A);
24 Hizo llover sobre ellos maná(B) para comer,
Y les dio comida del cielo(C).
25 Pan de ángeles[a] comió el hombre;
Dios les mandó comida hasta saciarlos(D).
26 Hizo soplar en el cielo el viento del este(E),
Y con Su poder dirigió el viento del este,
27 Él hizo llover sobre ellos carne como polvo,
Aladas aves(F) como arena de los mares,
28 Y las hizo caer en medio del campamento,
Alrededor de sus viviendas.
29 Comieron y quedaron bien saciados(G),
Y les concedió su deseo.
La vida en Cristo
4 Yo, pues, prisionero del[a] Señor(A), les ruego(B) que ustedes vivan[b] de una manera digna(C) de la vocación(D) con que han sido llamados(E). 2 Que vivan con toda humildad y mansedumbre, con paciencia(F), soportándose unos a otros en amor(G), 3 esforzándose por preservar la unidad del Espíritu en[c] el vínculo de la paz(H).
4 Hay un solo cuerpo y un solo Espíritu(I), así como también ustedes fueron llamados en una misma esperanza de su vocación(J); 5 un solo Señor(K), una sola fe, un solo bautismo, 6 un solo Dios y Padre de todos, que está sobre todos, por todos y en todos(L).
7 Pero a cada uno(M) de nosotros se nos ha concedido la gracia(N) conforme a la medida del don de Cristo(O). 8 Por tanto, dice:
«Cuando ascendió a lo alto,
Llevó cautivo un gran número de cautivos(P),
Y dio dones a los hombres(Q)».
9 Esta expresión: «Ascendió», ¿qué significa[d], sino que Él también había descendido(R) a las profundidades de la tierra(S)? 10 El que descendió es también el mismo que ascendió mucho más arriba de todos los cielos(T), para poder llenarlo todo(U).
11 Y Él dio a algunos el ser apóstoles, a otros profetas(V), a otros evangelistas(W), a otros pastores y maestros(X), 12 a fin de capacitar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación(Y) del cuerpo de Cristo(Z); 13 hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe(AA) y del pleno conocimiento del Hijo de Dios(AB), a la condición de un hombre maduro(AC), a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo(AD).
14 Entonces ya no seremos niños(AE), sacudidos por las olas y llevados de aquí para allá por todo viento(AF) de doctrina, por la astucia(AG) de los hombres, por las artimañas engañosas del error[e](AH). 15 Más bien, al hablar la verdad en amor(AI), creceremos(AJ) en todos los aspectos en Aquel que es la cabeza(AK), es decir, Cristo, 16 de quien todo el cuerpo, estando bien ajustado y unido por la cohesión que las coyunturas proveen[f], conforme al funcionamiento adecuado de cada miembro[g], produce el crecimiento del cuerpo(AL) para su propia edificación en amor(AM).
24 Por tanto, cuando la gente vio que Jesús no estaba allí, ni tampoco Sus discípulos, subieron a las barcas y se fueron a Capernaúm(A) buscando a Jesús. 25 Cuando lo hallaron al otro lado del mar, le dijeron: «Rabí[a](B), ¿cuándo llegaste acá?».
26 Jesús les respondió: «En verdad les digo, que me buscan(C), no porque hayan visto señales[b](D), sino porque han comido de los panes y se han saciado. 27 Trabajen, no por el alimento que perece, sino por el alimento que permanece(E)para vida eterna(F), el cual el Hijo del Hombre(G)les dará, porque a Él es a quien el Padre, Dios, ha marcado con Su sello(H)».
28 Entonces le preguntaron: «¿Qué debemos hacer[c] para poner en práctica las obras de Dios?». 29 Jesús les respondió: «Esta es la obra de Dios: que crean(I)en el que Él ha enviado(J)».
30 Le dijeron entonces: «¿Qué, pues, haces Tú como señal[d](K) para que veamos y te creamos? ¿Qué obra haces? 31 Nuestros padres comieron el maná en el desierto(L), como está escrito: “Les dio a comer pan del cielo(M)”». 32 Entonces Jesús les dijo: «En verdad les digo, que no es Moisés el que les ha dado el pan del cielo, sino que es Mi Padre el que les da el verdadero pan del cielo. 33 Porque el pan de Dios es el[e]que baja del cielo(N), y da vida al mundo». 34 «Señor, danos siempre este pan(O)», le dijeron.
35 Jesús les dijo: «Yo soy el pan de la vida(P); el que viene a Mí no tendrá hambre, y el que cree en Mí nunca tendrá sed(Q).
Nueva Biblia de las Américas™ NBLA™ Copyright © 2005 por The Lockman Foundation