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Old/New Testament

Each day includes a passage from both the Old Testament and New Testament.
Duration: 365 days
Nueva Biblia de las Américas (NBLA)
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Éxodo 16-18

Descontento de los israelitas

16 Partieron de Elim, y toda la congregación de los israelitas llegó al desierto de Sin(A), que está entre Elim y Sinaí, el día 15 del segundo mes después de su salida de la tierra de Egipto(B). Y toda la congregación de los israelitas murmuró contra Moisés y contra Aarón en el desierto(C). Los israelitas les decían: «Ojalá hubiéramos muerto a manos del Señor en la tierra de Egipto(D) cuando nos sentábamos junto a las ollas de carne(E), cuando comíamos pan hasta saciarnos[a]. Pues nos han traído[b] a este desierto para matar de hambre a toda esta multitud».

Entonces el Señor dijo a Moisés: «Yo haré llover pan del cielo(F) para ustedes. El pueblo saldrá y recogerá diariamente la porción de cada día, para ponerlos a prueba si andan o no en Mi ley(G). Y en el sexto día, cuando preparen lo que traigan, la porción será el doble de lo que recogen diariamente(H)».

Entonces Moisés y Aarón dijeron a todos los israelitas: «A la tarde sabrán[c] que el Señor los ha sacado de la tierra de Egipto(I). Por la mañana verán[d] la gloria del Señor(J), pues Él ha oído sus murmuraciones contra el Señor(K). ¿Qué somos nosotros para que ustedes murmuren contra nosotros(L)?». Y Moisés dijo: «Esto sucederá cuando el Señor les dé carne para comer por la tarde, y pan hasta saciarse por la mañana; porque el Señor ha oído sus murmuraciones[e] contra Él. Pues ¿qué somos nosotros? Sus murmuraciones no son contra nosotros, sino contra el Señor(M)». Entonces Moisés dijo a Aarón: «Dile a toda la congregación de los israelitas: “Acérquense a la presencia del Señor, porque Él ha oído sus murmuraciones(N)”».

10 Mientras Aarón hablaba a toda la congregación de los israelitas, miraron[f] hacia el desierto y, vieron que la gloria del Señor se apareció en la nube(O). 11 Y el Señor habló a Moisés y le dijo: 12 «He oído las murmuraciones de los israelitas. Háblales, y diles: “Al caer la tarde[g] comerán carne, y por la mañana se saciarán de pan(P). Sabrán que Yo soy el Señor su Dios(Q)”».

Las codornices y el maná

13 Por la tarde subieron las codornices y cubrieron el campamento(R), y por la mañana había una capa de rocío(S) alrededor del campamento. 14 Cuando la capa de rocío se evaporó[h], había sobre la superficie[i] del desierto una cosa delgada, como copos[j], menuda, como la escarcha sobre la tierra(T).

15 Al verla, los israelitas se dijeron unos a otros: «¿Qué es esto?[k]», porque no sabían lo que era. «Es el pan que el Señor les da para comer(U)», les dijo Moisés. 16 «Esto es lo que el Señor ha mandado: “Cada uno recoja de él lo que vaya a comer[l]. Tomarán como dos litros por cabeza, conforme al número de personas que cada uno de ustedes tiene en su tienda(V)”». 17 Así lo hicieron los israelitas, y unos recogieron mucho y otros poco.

18 Cuando lo midieron por litros, al que había recogido mucho no le sobró, ni le faltó al que había recogido poco(W). Cada uno había recogido lo que iba a comer. 19 «Que nadie deje nada para[m] la mañana siguiente(X)», les dijo Moisés.

20 Pero no obedecieron[n] a Moisés, y algunos dejaron parte del maná[o] para la mañana siguiente, pero crió gusanos y se pudrió. Entonces Moisés se enojó con ellos. 21 Lo recogían cada mañana, cada uno lo que iba a comer, pero cuando el sol calentaba, se derretía.

22 En el sexto día recogieron doble porción(Y) de alimento, unos cuatro litros para cada uno. Y cuando todos los jefes de la congregación vinieron y se lo hicieron saber a Moisés(Z), 23 «Esto es lo que ha dicho el Señor», les respondió: «Mañana es día de reposo, día de reposo consagrado al Señor(AA). Cuezan lo que han de cocer y hiervan lo que han de hervir, y todo lo que sobre guárdenlo para[p] mañana(AB)». 24 Y lo guardaron hasta la mañana como Moisés había mandado, y no se pudrió ni hubo en él gusano alguno(AC).

25 Y Moisés dijo: «Cómanlo hoy, porque hoy es día de reposo para el Señor. Hoy no lo hallarán en el campo. 26 Seis días lo recogerán, pero el séptimo día, día de reposo, no habrá nada[q](AD)». 27 Y en el séptimo día, algunos del pueblo salieron a recoger, pero no encontraron nada. 28 Entonces el Señor dijo a Moisés: «¿Hasta cuándo se negarán ustedes a guardar Mis mandamientos y Mis leyes(AE)? 29 Miren que el Señor les ha dado el día de reposo. Por eso el sexto día les da pan para dos días. Quédese cada uno en su lugar, y que nadie salga de su lugar el séptimo día». 30 Y el pueblo reposó el séptimo día.

31 La casa de Israel le puso el nombre de maná[r](AF); y era como la semilla del cilantro(AG), blanco(AH), y su sabor era como de hojuelas con miel. 32 «Esto es lo[s] que el Señor ha mandado», dijo Moisés: «Que se guarden unos dos litros llenos de maná[t] para sus generaciones, para que vean el pan que Yo les di de comer en el desierto cuando los saqué de la tierra de Egipto». 33 Entonces Moisés dijo a Aarón: «Toma una vasija y pon en ella unos dos litros de maná(AI), y colócalo delante del Señor a fin de guardarlo para las generaciones de ustedes». 34 Tal como el Señor ordenó a Moisés, así lo colocó Aarón delante del Testimonio(AJ) para que fuera guardado.

35 Los israelitas comieron el maná cuarenta años, hasta que llegaron a tierra habitada. Comieron el maná hasta que llegaron a los límites de la tierra de Canaán(AK). 36 Un gomer(AL) (2.2 litros) es la décima parte de un efa (22 litros).

La peña de Horeb

17 (AM)Toda la congregación de los israelitas marchó por[u] jornadas desde el desierto de Sin(AN), conforme al mandamiento[v] del Señor. Acamparon en Refidim, y no había agua para que el pueblo bebiera(AO). Entonces el pueblo discutió con Moisés(AP), y le dijeron: «Danos agua para beber». «¿Por qué discuten conmigo?», les dijo Moisés. «¿Por qué tientan al Señor(AQ)?». Pero el pueblo tuvo sed allí[w], y murmuró el pueblo contra Moisés(AR), y dijo: «¿Por qué nos has hecho subir de Egipto para matarnos[x] de sed a nosotros, a nuestros[y] hijos y a nuestros[z] ganados(AS)?».

Y clamó Moisés al Señor y dijo: «¿Qué haré con este pueblo? Un poco más y me apedrearán(AT)». Entonces el Señor dijo a Moisés: «Pasa delante del pueblo y toma contigo a algunos de los ancianos de Israel(AU), y toma en tu mano la vara con la cual golpeaste el Nilo, y ve(AV). Yo estaré allí delante de ti sobre la peña en Horeb(AW). Golpearás la peña, y saldrá agua de ella para que beba el pueblo(AX)». Y así lo hizo Moisés en presencia de los ancianos de Israel.

Y puso a aquel lugar el nombre de Masah[aa](AY) y Meriba[ab](AZ), por la contienda de los israelitas, y porque tentaron al Señor(BA), diciendo: «¿Está el Señor entre nosotros o no?».

Guerra con Amalec

Entonces vino Amalec(BB) y peleó contra Israel en Refidim(BC). Y Moisés dijo a Josué(BD): «Escógenos hombres, y sal a pelear contra Amalec. Mañana yo estaré sobre la cumbre de la colina con la vara de Dios en mi mano(BE)». 10 Josué hizo como Moisés le dijo, y peleó[ac] contra Amalec. Moisés, Aarón y Hur(BF) subieron a la cumbre de la colina.

11 Y sucedía que mientras Moisés tenía en alto su mano, Israel prevalecía; y cuando dejaba caer[ad] la mano, prevalecía Amalec. 12 Pero las manos de Moisés se le cansaban[ae]. Entonces tomaron una piedra y la pusieron debajo de él, y se sentó en ella. Y Aarón y Hur le sostenían las manos(BG), uno de un lado y otro del otro. Así estuvieron sus manos firmes hasta que se puso el sol. 13 Josué deshizo[af] a Amalec y a su pueblo a filo de espada.

14 Entonces dijo el Señor a Moisés: «Escribe esto en un[ag] libro(BH) para que sirva de memorial, y haz saber a[ah] Josué que Yo borraré por completo la memoria de Amalec de debajo del cielo(BI)». 15 Y edificó Moisés un altar(BJ), y le puso por nombre El Señor es mi Estandarte(BK), 16 y dijo: «El Señor lo ha jurado[ai](BL). El Señor hará guerra contra Amalec de generación en generación».

Visita de Jetro a Moisés

18 Jetro(BM), sacerdote de Madián, suegro de Moisés, oyó de todo lo que Dios había hecho por Moisés y por Su pueblo Israel, cómo el Señor había sacado a Israel de Egipto. Entonces Jetro, suegro de Moisés, tomó a Séfora(BN), mujer de Moisés, después que este la había enviado a su casa, y a sus dos hijos, uno de los cuales se llamaba Gersón[aj], pues Moisés había dicho: «He sido peregrino en tierra extranjera(BO)». El nombre del otro era Eliezer[ak](BP), pues había dicho: «El Dios de mi padre fue mi ayuda(BQ) y me libró de la espada de Faraón».

Y vino Jetro, suegro de Moisés, con los hijos y la mujer de Moisés al desierto, donde este estaba acampado junto al monte de Dios(BR). Y mandó decir[al] a Moisés: «Yo, tu suegro Jetro, vengo a ti con tu mujer y sus dos hijos con ella». Salió Moisés a recibir a su suegro, se inclinó(BS) y lo besó(BT). Se preguntaron uno a otro cómo estaban[am](BU), y entraron en la tienda.

Moisés contó a su suegro todo lo que el Señor había hecho a Faraón y a los egipcios por amor a Israel(BV), todas las dificultades que les habían sobrevenido en el camino(BW) y cómo los había librado el Señor(BX). Y Jetro se alegró de todo el bien que el Señor había hecho a Israel(BY), al librarlo de la mano de los egipcios.

10 Entonces Jetro dijo: «Bendito sea el Señor que los libró de la mano de los egipcios y de la mano de Faraón, y que libró al pueblo del poder[an] de los egipcios(BZ). 11 Ahora sé que el Señor es más grande que todos los dioses(CA). Ciertamente, esto se probó cuando ellos trataron al pueblo[ao] con arrogancia(CB)».

12 Y Jetro, suegro de Moisés, tomó un holocausto y sacrificios para Dios, y Aarón vino con todos los ancianos de Israel a comer[ap](CC) con el suegro de Moisés delante de Dios.

Nombramiento de jueces

13 Al día siguiente Moisés se sentó a juzgar al pueblo(CD). El pueblo estuvo delante de Moisés desde la mañana hasta el atardecer. 14 Cuando el suegro de Moisés vio todo lo que él hacía por el pueblo, dijo: «¿Qué es esto que haces por el pueblo? ¿Por qué juzgas[aq] tú solo, y todo el pueblo está delante de ti desde la mañana hasta el atardecer?». 15 Y Moisés respondió a su suegro: «Porque el pueblo viene a mí para consultar a Dios(CE). 16 Cuando tienen un pleito[ar](CF), vienen a mí, y yo juzgo entre uno y otro[as], dándoles a conocer los estatutos de Dios y Sus leyes».

17 El suegro de Moisés le dijo: «No está bien lo que haces. 18 Con seguridad desfallecerás tú, y también este pueblo que está contigo, porque el trabajo[at] es demasiado pesado para ti. No puedes hacerlo tú solo(CG). 19 Ahora, escúchame[au]. Yo te aconsejaré, y Dios estará contigo. Sé tú el representante del[av] pueblo delante de Dios, y somete los asuntos a Dios(CH). 20 Entonces enséñales los estatutos y las leyes, y hazles saber el camino en que deben andar(CI) y la obra que han de realizar(CJ). 21 Además, escogerás[aw] de entre todo el pueblo hombres capaces, temerosos de Dios(CK), hombres veraces que aborrezcan las ganancias deshonestas(CL), y los pondrás sobre el pueblo[ax] como jefes de mil, de[ay] cien, de[az] cincuenta y de[ba] diez(CM). 22 Que sean ellos los que juzguen al pueblo en todo tiempo. Que traigan a ti todo pleito grave[bb], pero que ellos juzguen todo pleito sencillo[bc](CN). Así será más fácil para ti, y ellos llevarán la carga contigo(CO). 23 Si haces esto y Dios te lo manda, tú podrás resistir[bd] y todo este pueblo por su parte irá en paz a su lugar».

24 Moisés escuchó a[be] su suegro, e hizo todo lo que él había dicho. 25 Y escogió Moisés hombres capaces de entre todo Israel, y los puso por cabezas del pueblo, como jefes de mil, de[bf] cien, de[bg] cincuenta y de[bh] diez(CP). 26 Ellos juzgaban al pueblo en todo tiempo. El pleito[bi] difícil lo traían a Moisés, pero todo pleito[bj] sencillo[bk] lo juzgaban ellos(CQ). 27 Moisés despidió a su suegro, y este se fue a su tierra(CR).

Mateo 18:1-20

El mayor en el reino de los cielos

18 (A)En aquel momento[a] se acercaron los discípulos a Jesús, diciendo: «¿Quién es el mayor en el reino de los cielos?». Él, llamando a un niño, lo puso en medio de ellos, y dijo: «En verdad les digo que si no se convierten[b]y se hacen como niños(B), no entrarán en el reino de los cielos. Así pues, cualquiera que se humille como este niño, ese es el mayor en el reino de los cielos. Y el que reciba a un niño como este[c]en Mi nombre, me recibe a Mí.

»Pero al que(C) haga pecar[d] a uno de estos pequeñitos que creen en Mí(D) , mejor le sería que le colgaran al cuello una piedra de molino de las que mueve un asno, y que se ahogara en lo profundo del mar.

¡Ay de los que son piedras de tropiezo!

»¡Ay del mundo por sus piedras de tropiezo! Porque es inevitable que vengan piedras de tropiezo(E) ; pero ¡ay de aquel hombre por quien viene el tropiezo!

»Si tu mano o tu pie te hace pecar, córtalo y tíralo. Es mejor que entres en la vida manco o cojo, que teniendo dos manos y dos pies, ser echado en el fuego eterno(F) . Y si tu ojo te hace pecar, arráncalo y tíralo. Es mejor que entres en la vida con un solo ojo, que teniendo dos ojos, ser echado en el infierno[e]de fuego(G).

10 »Miren que no desprecien a uno de estos pequeñitos, porque les digo que sus ángeles en los cielos contemplan siempre el rostro de Mi Padre(H) que está en los cielos. 11 [f]Porque el Hijo del Hombre ha venido a salvar lo que se había perdido(I).

Parábola de la oveja perdida

12 »¿Qué les parece? (J) Si un hombre tiene cien ovejas y una de ellas se ha descarriado, ¿no deja las noventa y nueve en los montes, y va en busca de la descarriada? 13 Y si sucede que la halla, en verdad les digo que se regocija más por esta que por las noventa y nueve que no se han descarriado. 14 Así, no es la voluntad del[g]Padre[h]que está en los cielos que se pierda uno de estos pequeñitos.

Sobre la exhortación y la oración

15 »Si tu hermano peca[i](K) , ve y repréndelo a solas[j] ; si te escucha, has ganado a tu hermano. 16 Pero si no te escucha, lleva contigo a uno o a dos más, para que toda palabra sea confirmada por boca de dos o tres testigos(L). 17 Y si rehúsa escucharlos, dilo a la iglesia(M); y si también rehúsa escuchar a la iglesia, sea para ti como el gentil(N)y el recaudador de impuestos[k]. 18 En verdad les digo, que todo lo que ustedes aten[l]en la tierra, será[m]atado en el cielo; y todo lo que desaten[n]en la tierra, será[o]desatado en el cielo(O).

19 »Además les digo, que si dos de ustedes se ponen de acuerdo sobre cualquier cosa que pidan aquí en la tierra, les será hecho por[p] Mi Padre(P) que está en los cielos. 20 Porque donde están dos o tres reunidos en Mi nombre, allí estoy Yo en medio de ellos(Q)».

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